C a p 2 7


Gía ya se encontraba lista para regresar al colegio, después de unas largas vacaciones que había tenido era momento de regresar. Se encontraba en particular feliz, pues sería la primera vez que Lisa y Jeonsang irían con ella a llevarla.

Llevaba su uniforme ya puesto, y su cabello iba trenzado.

— Princesa vamos que se hace tarde — gritó Jungkook desde abajo, él por su parte regresaría a su trabajo, necesitaba ver como habían manejado su empresa después de un mes de ausencia — ¿Estas segura que estarán bien solos? — Lisa se encontraba dándole de comer a Jeonsang, el pequeño traía en su mano un trozo de manzana y lo llevaba a su boca tratando de dar algunas mordidas.

— Si, terminaré de guardar la ropa que tu madre le compró a Jeonsang — y vaya que era un trabajo algo largo, la señora Jeon les había entregado al menos unas ocho bolsas con ropa de bebé dentro.

— Bueno supongo que estarás ocupada hasta que Gía salga — Lisa asintió y le dio un trozo más a Jeonsang, pues el anterior el pequeño lo había tirado al piso.

— ¿Gía aún no baja? — preguntó Lisa. Jungkook se asomó hacía las escaleras, y después negó.

— ¡Gía! — volvió a gritar Jungkook.

— ¡Un minuto! — se escuchó a la pequeña, y después de eso se escuchó un sonido fuerte — ¡Lo siento! — Lisa sonrió.

— Vamos Jeonsang, al menos come uno — le rogó Lisa al bebé quien solo daba una pequeña mordida y desechaba la manzana al piso.
Jungkook se acercó y se colocó al lado de la silla especial para Jeonsang.

— ¿Así que no quieres comer? — preguntó. Jeonsang ya comenzaba a entender lo que los demás decían y negó con su cabeza — Bueno, vámonos — Lisa se quedó con la boca abierta, creía que Jungkook le rogaría porque terminara su comida.

— ¿Es en serio? — le preguntó en el momento que él sacaba al pequeño de la silla.

— Si, si no quiere no podemos obligarlo — Jeonsang mantenía una sonrisa en su rostro, había conseguido lo que quería.

— ¡No puedes estarlo complaciendo en cualquier momento! — le dijo Lisa irritada por la actitud del más grande.

— Oh vamos, sólo será por hoy, lo prometo — ella rodó los ojos y comenzó a recoger la mesa. Jungkook rio cuando ella ya no estaba a la vista y beso la cabeza de su hijo.

— Listo, ya estoy lista — habló Gía cuando bajó las escaleras, con su mochila en la espalda, mientras se dirigía a tomar su lonchera, donde su madre había guardado su almuerzo.

— Muy bien, vámonos — habló Lisa saliendo de la cocina. Tomó su bolso y el de Jeonsang y salieron de la casa junto a Gía y Jungkook.

(...)

Gía estaba sola sentada en un banco cuando un pequeño se acercó. Le cubrió los ojos provocando así que Gía diera un pequeño brinco por el susto, y que el niño riera, dando así su identidad.

— Adrián — dijo la pequeña. Él quitó sus manos y se sentó a la par de la niña. Colocó la pequeña mochila que tenia colgada en su espalda a un lado y la abrió sacando una caja de ella.

— Mi mamá preparó galletas, y te traje algunas — abrió aquella caja dejando a la vista unas deliciosas galletas de chispas de chocolate.

— Se ven deliciosas — habló la pequeña.

— Toma — acercó la caja a Gía y esta tomó una. Un silencio se hizo presente mientras la pequeña comía aquel postre — Gía... — dijo el niño para captar la atención de la niña — ¿Quisieras ir conmigo al parque?

Los nervios del pequeño estaban a flote, no sabía lo que la pequeña Gía le respondería, pero su tía Jisoo le había dicho que la invitara, que no perdía nada con hacerlo.

— Si — una sonrisa estaba en el rostro de Gía, ella estaba feliz por la invitación que le habían hecho, mas aún de quien se la había propuesto.

— Entonces iré por ti a tu casa esta tarde.

(...)

Faltaban solo unos minutos para que Adrián llegara a la casa de los Jeon. Lisa se encontraba mirando como Gía trataba de cepillar su cabello, parecía como si le preocupara como verse y eso le causaba gracia a su madre.

Jungkook llegó a la habitación con su hijo en brazos, aunque no estaba muy de acuerdo en aquella salida, después de que Lisa insistiera había terminado aceptando.

— Como me gustaría que crecieras para que fueras a cuidar a tu hermana — habló Jungkook con Jeonsang. El pequeño lo miró por unos segundos y después miró a su hermana.

— Nadie irá con nadie — habló Lisa quitando a Jeonsang de los brazos de Jungkook y llevándolo con ella hacía su habitación.

— ¿En serio quieres ir? — le preguntó Jungkook a Gía, quien trataba de encontrar ahora un suéter que combinara con su ropa.

— Si papá — Jungkook suspiró y observó a su pequeña.

El timbre sonó y decidió ir abrir. No quería dejarla ir, pero al ver lo feliz que su hija se encontraba no podía negarle la salida. Abrió la puerta encontrándose con el pequeño que se llevaría a su hija, traía con él una rosa en su mano y sujetaba la mano de Jisoo.

— ¿Y Gía? — preguntó Jisoo entrando a la casa.

— Ya viene. Necesito hablar contigo — Jisoo asintió y se alejaron unos metros para que Adrián no pudiera escuchar su conversación.

— ¿Qué sucede?

— Tres cosas; Número uno, no los dejaras solos ni un momento. Número dos, cuida que no haya ningún tipo de contacto entre ambos, ni siquiera de la mano. Número tres, Gía debe de estar antes de las ocho — cada una de sus reglas las había enumerado con sus dedos y había mantenido la mirada firme para que Jisoo no lo tomara en broma.

— Escucha. Número uno, voy a cuidarlos, es obvio que no los dejaré solos. Número dos, no me pidas eso porque de todas maneras dejaré que lo hagan, están permitidos conmigo hasta los besos en la mejilla — dijo aquello solo para ver a Jungkook celoso, le causaba gracia el ver como protegía a su hija — Y número tres, Lisa nos dio permiso hasta las nueve.

— ¿Por qué hasta las nueve? — preguntó Jungkook a su novia quien se había acercado a escuchar lo que sucedía.

— No van hacer nada malo, deja de ser tan inseguro — ambas chicas rieron ante el gesto que Jungkook había hecho.

— Esta bien, esta bien, pero la próxima salida iré yo.

— Ni en tus sueños — intervino Jisoo.

Gía bajó las escaleras y se acercó a su amigo para saludarlo, el pequeño le entregó la rosa y Gía sonrió, causando que su padre se pusiera aún más celoso de lo que ya estaba.

— ¿Nos vamos? — preguntó Gía a Jisoo. La castaña mayor asintió, pero antes de retirarse Jungkook se agachó a la altura de su hija.

— Recuerda, si se te acerca, solo grita — las mejillas de Gía se tornaron carmesí, estaba apenada por lo que su padre le decía, y aún mas porque Adrián se encontraba detrás de ella.

— Papá... — habló avergonzada.

— Mejor nos vamos — dijo Jisoo antes de que Jungkook pudiera dejar o decir algo que pusiera en ridículo a Gía.

— Diviertanse — habló Lisa cuando estaban por salir.

— Pero no mucho — agregó Jungkook ganándose la risa de Lisa.

— Me causas demasiada ternura — habló Lisa después de unos segundos. Se acercó a Jungkook para poder rodear con sus manos el cuello de él.

— No quiero que crezca — admitió.

— Lo hará — Lisa le dio un tierno beso en los labios, logrando que el chico sonriera.

— El próximo será otro niño, no más niñas — habló haciendo notar sus celos de padre, nuevamente Lisa rio, pero esta vez también lo hizo él.

— Lamento decirte que es niña — Lisa se puso seria y tocó su vientre, causando que Jungkook viera la acción con asombro.

— ¿Qué? — preguntó sorprendido.

— Es una broma — Lisa volvió a reír, no imaginaba que realmente lo hubiera creído.

— ¿Y por qué no aprovechamos? — una sonrisa pervertida apareció en los labios de Jungkook, se acercó a él mas a Lisa y la tomó de la cintura. La beso con lujuria y pasión.

Fue el llanto de Jeonsang quien logró separarlos. Algo agitados y tratando de recuperar el aliento rieron.

— Creo que no hay solo un celoso en esta casa — dijo Jungkook refiriéndose a su hijo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top