C a p 2 7
Gía traía ya puesto su vestido para aquella noche. Era 24 de Diciembre y solo esperaba la mañana del 25, esperando que su regalo fuera realidad. Tal vez la cigüeña llegaría un día tarde por haber pedido a su hermano unos días antes de que santa repartiera los regalos.
Fue hasta la habitación de su padre, solo faltaba que le cepillarán el cabello y la peinara.
- ¿Lisa aún no llega? – preguntó mientras entraba en la habitación.
- Creo que no tarda. ¿Aun no te has cepillado el cabello?.
- No, estoy esperando a Lisa.
- Esta bien. Necesito hablar contigo – Jungkook se acercó a la pequeña y se inclinó para quedar a su altura. Tomó las manos de la pequeña dio un suspiro y la miró directamente a los ojos.
- ¿Qué pasa?
- Princesa, leí la carta que le hicisteis a santa – volvió a suspirar y miró a sus pies – No es algo que Santa pueda cumplir… Es solo cuestión de tiempo – los ojos de Gía poco a poco perdieron su brillo – No te sientas mal pequeña. Sabes que Lisa te quiere mucho – Jungkook la abrazo odiaba verla triste.
- No importa, sólo espero que no tarde mucho – una pequeña sonrisa salió de los labios de la pequeña.
- Yo también – Jungkook también sonrió.
(…)
Lisa estaba arreglando su vestido y su peinado. Ya solo faltaba preparar los dos regalos que tenia para Gía, aunque se sentía nerviosa por el regalo que le daría a Jungkook, aun de pensarlo le causaba nerviosismo.
Una llamada de Jungkook la sacó de sus pensamientos y contestó.
- Gía te está esperando – habló la voz de Jungkook
- Ya voy, solo necesito preparar algunas cosas
- Sabes que no es necesario traer nada
- Lo sé, es solo que quiero darle algo a ambos después de que hicieron tanto por mí – una sonrisa se puso en el rostro de Jungkook
- ¿Por qué eres tan perfecta?.
- Claro que no lo soy – Lisa pensó unos segundos en pensar si decirle lo que quería preguntarle – Jungkook... ¿crees que podría quedarme en tu casa esta noche?.
- Sabes que si
- Esta bien. Ya voy para allá.
- Te esperamos – Lisa cortó la llamada y ahora marcó a un taxi.
(…)
Varios amigos, familiares y socios de Jungkook estaban ya en su casa, mientras Jungkook los Recibía, Gía seguía arriba esperando a que Lisa llegara. Lisa se había bajado del taxi y el señor la había ayudado a bajar el regalo de Gía, vaya que pesaba.
- Muchas gracias – se despidió del taxista y caminó hasta la casa de Jungkook.
Jungkook, quien estaba en la puerto, vio como una hermosa chica de vestido rojo se acercaba. Miró la camisa que llevaba debajo de su saco, casualmente ambos estaban de rojo. Se acerco hasta ella y miró el regalo que traía.
- ¿Es en serio? ¿Una bicicleta? – preguntó Jungkook. Un millón de formas en las que la pequeña se podían lastimar pasaron por su mente.
- ¿Es un mal regalo? – preguntó preocupada Lisa
- No, es sólo que no sé si sea seguro – Lisa comenzó a reír.
- Claro que lo es cariño – Lisa se acercó a Jungkook para darle un beso.
- Yo sabía que terminarían juntos – una voz ocasionó que ambos se separaran y ambos voltearon.
- Hey amigo, pensé que no venías – Jungkook se acercó para saludar a Jin y su acompañante, Jisoo.
- Hola – saludó Jin a Lisa, quien aun le tenía un poco de odio - ¿Por ser navidad no quisieras darme ti perdón? Era solo un plan para que acá el señor “ ella no es no tipo” se diera cuenta de que estaba enamorado de ti – Lisa río por el comentario de Jin y solo asintió para después saludarlo con un abrazo.
- Hola, sabia que eras una excelente mamá para Gía – habló ahora la acompañante de Jin aquella chica de no tan baja estatura que se había encontrado Lisa en el baño en aquella fiesta.
- Yo… - Lisa decidió solo callar. Jisoo la abrazó para después darle un beso en la mejilla.
- Nos vemos adentro – habló Jin, tomando de la cintura a Jisoo y entrando a la casa.
- Yo dejo esto adentro mientras tu vas arriba con Gía, ¿estas bien? – Lisa solo asintió y caminó lo mas rápido que pudo, por los zapatos altos que llevaba le costaba un poco hacerlo.
Jungkook cargó la bicicleta para poder dejarla debajo del árbol que había decorado con Lisa y Gía días antes.
- Contigo quería hablar – Jungkook se detuvo. Su madre había llegado.
- ¿Pasa algo malo? – se volteó para saludarla.
- ¿Cómo es eso que Gía quiere que una tal Lisa sea su madre? – Jungkook río por lo histérica que estaba actuando su madre, ella había sido muy sobre protectora con él de se que la madre de Gía lo había dejado solo con la bebé.
- Eso espero, no quiero otra sorpresa. Ahora, ¿Dónde esta mi nieta favorita?
- Está arriba. Lisa la esta peinando – la señora Jeon solo rodó los ojos y con una expresión no tan agradable se adentro en la casa de su hijo.
(…)
Las horas habían pasado. Los invitados poco a poco comenzaban a irse. La madre de Jungkook había quedado encantada con la chica, tal y como su hijo le había dicho, era cierto, ella era diferente, y antes de que se fuera le había dicho a su hijo que la cuidara.
Gía se había dormido horas después de que Lisa llegara. Jungkook y Lisa habían pasado la noche entera juntos y él le había presentado a todos sus invitados.
- Tengo otro regalo para Gía – habló ella un tanto nerviosa.
- ¿Por qué no lo dejas debajo del árbol? – pregunto burlón Jungkook.
- Es sobre su carta – Jungkook se quedo estático. Vaya que no esperaba eso – Pensé acerca del tema de que me llamara mamá. Realmente me gusta que me diga así, es algo muy lindo pero no quiero usurpar el lugar de su madre; pero creo que no me molestaría que me dijera así, así que tu si me lo permites, puedo ser su madre.
Jungkook sonrió, una de esas sonrisas de oreja a oreja, para después besarla – Claro que sí – Lisa río.
Lisa se quedó callada un momento pensando en si decir o no lo que tenia que decir.
- ¿Pasa algo mas? – preguntó preocupado Jungkook
- Es sobre lo otro que pidió – dijo en un susurro. Jungkook había escuchado bien, pero seguramente estaba escuchando mal.
- ¿Qué? – Lisa estaba roja. Ahora se arrepentía de lo que decía.
- Tu… - realmente estaba nerviosa - ¿quieres tener mas hijos? No me refiero ahorita, tal vez en unos tres o cinco años mas.
- Sería increíble volver a cargar un bebé, escuchar sus primeras palabras y verlo caminar… - Lisa comenzó a imaginar aquella escena - ¿A ti?. ¿Te gustaría ser mamá?
Lisa se acerco a Jungkook, ambos estaban sentados en un sofá y ella se recargó en su hombro – Seria una linda experiencia – hablo Lisa con una sonrisa en los labios.
- ¿Quisieras intentarlo?
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