Canción que he escuchado para poder escribir y tener el mood que este capítulo se merece en multimedia.

Aviso: mención de violencia (esta historia tiene marcada la opción de contenido adulto).

Sábado, 17:34 P.m.

Jungkook caminaba por la calle, concretamente se dirigía a su descampado para ver a su banda después de haber recibido un mensaje de Namjoon.

El mensaje decía: "Lo tenemos."

Lo que quería decir que su pandilla callejera había conseguido encontrar al cabrón que que se había atrevido a traicionarles y cambiarse sin previo acuerdo a la banda de Min.

Había traicionado a la pandilla Busan Stray de la que él era líder, y eso solamente significaba una cosa: ese chico recibiría un castigo por haber sido un traidor de mierda.

El pelinegro pronto prendió un cigarro y lo llevó a sus labios pensando cuidadosamente a qué tortura someterían al traicionero.

Tras unos minutos llegó al descampado y dió una última a la vez que profunda calada al pitillo consumiéndolo por completo. Expiró el espeso humo grisáceo y tiró la colilla al suelo de arena pisándola en seguida con su bota negra.

En el mismo momento que los pandilleros vieron a su líder entrar al lugar se reverenciaron e inclinaron sus cabezas hacia abajo en forma de total respeto y con algo... de temor, porque actualmente Jeon tenía una maquiavélica mueca en su rostro tras haber visto al traidor.

-Buen trabajo. -Mencionó el pelinegro a sus subordinados cuando vio al chico atado en una silla justo en medio del descampado.

Primero se acercó a Namjoon y éste en seguida le explicó cómo habían podido encontrar al chico.

—Se encontraba con otros pandilleros de Min. —Namjoon comenzó a hablar concisamente y siguió.—Pudimos atraparle porque fuimos varios de nosotros y los otros pandilleros que le estaban acompañando no le defendieron, porque supieron al instante que nosotros íbamos por venganza por haber traicionado a nuestra banda, por lo que le dejaron solo como los cobardes que son.

Jeon asintió a las palabras y sin esperar más se dirigió hacia Rowoon.

—¿Te creías que te podías esconder para siempre? —Jungkook habló cortante a la vez que esbozó una pequeña y tenebrosa sonrisa ladeada.

Rowoon intentó hablar pero no podía porque tenía una mordaza en su boca.

Pronto el pelinegro se la quitó bruscamente haciéndole daño. Quería oír lo que el otro tenía que decir porque estaba seguro de que le iba a dar información importante para que no le hiciera nada.

Así era cómo funcionaban las cosas: todos en la calle temían muchísimo a Jungkook y ese inepto a lo mejor creía que si hablaba él le perdonaría.

Lo que no sabía es que Jeon no perdona ni mucho menos tiene compasión con los que no le guardan lealtad.

—N-No, perdóname líder, yo no quise- —Dejó de hablar cuando Jungkook enredó su mano en su cabello de forma repentina.

El pelinegro subió la cabeza al que ahora estaba sentado para que le mirara a la cara.

—Yo ya no soy tu líder, ahora lo es Min, ¿no? Traicionero de mierda. —Escupió entre dientes totalmente cabreado.

—Lo siento. -—Rowoon dijo.—Min me a-amenazó y me hizo unirme a su pandilla. —Contestó tembloroso y ya algo dolorido por el fuerte agarre en su pelo.

—Y también te hizo soplar información mía y de mi pandilla. —Jeon habló mordaz a la vez que con asco soltó los cabellos del otro girándole en el mismo movimiento la cabeza hacia un lado.

Pronto Rowoon movió su cabeza de manera que volvió a ver de frente y con ojos suplicantes a Jungook.

—Discúlpame por favor, no volveré a decir nada sobre ti. —Dijo totalmente agobiado de tener a Jeon mirándole como si quisiera hacerle añicos.

—Por supuesto que no vas a volver a decir nada. —Jungkook hizo una pausa y pronto siguió hablando.—Sin lengua no se puede hablar después de todo, ¿verdad? —Dijo irónico.

El rostro del traidor se descompuso en terror por lo que Jeon podría llegarle a hacer.

—Perdóname, por favor, por favor Jeon. —Lágrimas se agolparon en sus ojos, no quería que le cortaran la lengua.

—¿Que te perdone? —El pelinegro rió careciente de gracia.—Si lo hiciera eso no borraría el hecho de que le soplaras a Min el instituto donde yo estudio.

Rowoon se sorprendió, mierda, Jungkook sabía que él había sido el que había chivado esa información al otro líder de pandilla.

—¿Qué más le has dicho? —Jungkook presionó.

—Nada más. —Contestó seguro de sí mismo.

Sin embargo Jungkook en seguida se dio cuenta de que estaba mintiendo, debido a que estaba más que acostumbrado a descubrir mentiras estudiando a las personas.

—Vale, así que la cosa va de mentir, está bien. —Jungkook asintió con su cabeza sarcástico.

A lo que Rowoon abrió sus ojos asustado, se había olvidado de que a Jungkook absolutamente nadie puede mentirle porque en seguida se da cuenta de ello.

Al chico no le dio tiempo ni a pestañear cuando una fuerte patada del pelinegro con su bota dio de pleno en su estómago haciendo que la silla cayera con virulencia hacia atrás.

—¡Ah! —Rowoon pronto se quejó de dolor una vez estuvo en el suelo, ya que sus brazos que estaban amarrados tras su espalda quedaron atrapados bajo su cuerpo y la silla al que aún estaba atado.

—Espera, esto no está bien. —Jungkook murmuró algo divertido.—Si has sido tan valiente como para traicionarme, eso significa que estás muy confiado en ti mismo y que crees que eres más fuerte que yo. —El pelinegro habló en alto esta vez.

Sus pandilleros le miraron expectantes por alguna orden.

—Desatadle. Quiero ver si es capaz de derrotarme, quiero jodidamente saber si es tan fuerte como para traicionarme como una puta rata callejera. —Masculló cabreado.

En seguida entre tres pandilleros desataron a Rowoon y éste intentó correr lejos de allí, pero fue interceptado por Namjoon.

—Ni se te ocurra huir. —Kim habló serio.

Tras ello Jeon volvió a hablar.—Venga, ya que te crees más fuerte que yo como para irte a la banda de Min y traicionarnos, ven por mí. —Dijo con seguridad abriendo sus brazos en forma de invitación.

Rowoon al principio titubeó sin saber muy bien qué hacer porque realmente ir contra Jungkook era un acto demasiado temerario.

Sin embargo se vio tan presionado por ver a sus antiguos compañeros de banda mirándole con atención, que en seguida sintió la necesidad de mostrar que no era un debilucho.

Así que se acercó al líder e intentó darle una patada, pero su pierna fue tomada por él en menos de un segundo y tras ello éste dobló dolorosamente su rodilla hacia arriba, justo en la dirección contraria hacia donde la rodilla se flexiona de forma natural.

Un alarido de dolor salió de su boca, ese puto animal estaba apunto de romperle la rodilla sin miramiento alguno.

Entonces ante el dolor intentó propinarle un puñetazo al pelinegro, pero éste lo esquivó con agilidad.

Tras ello el otro soltó su pierna y esperó a que él se volviera a acercar para atacarle, pero no pudo, porque tenía miedo. Joder, Jungkook no era broma, era el pandillero más temido de todo Busan.

—Venga ven, demuestra que puedes ser un traicionero digno. —Se mofó.

Cosa que hizo que Rowoon se cabreara y volviera a ir a por él, sin embargo no le dio tiempo ni a pestañear cuando Jeon le propinó un buen puñetazo en su estómago que hizo que se doblara en el sitio.

Entonces Rowoon comenzó a toser sangre por lo fuerte que le había golpeado su antiguo líder.

—Eres... un d-demonio. —Le dijo a Jungkook a la vez que escupió la sangre en su boca.

—Por supuesto que lo soy y más si me provocan. —Jungkook habló careciente de sentimientos, le daba igual la sangre que se escurría de la boca del otro.

De hecho en seguida acortó la distancia con el golpeado y de una potente patada le tiró al suelo.

Pronto puso su pie enfudado en sus características botas militares en la cabeza del traidor.

—Dime qué mierda más le has chivado a Min. —Habló careciente de compasión.

El chico no quería hablar, sin embargo cuando sintió a Jeon apretar más su cabeza con la bota se vio obligado a sincerarse.

—Me preguntó sobre un tal Jimin. -Jungkook sintió su corazón acelerarse y su boca secarse cuando escuchó ese nombre.—P-Pero le dije que yo no sabía nada de un chico con ese nombre.

Jungkook estaba tan ido que ahora solamente tenía su cabeza en Jimin, porque jodidamente Yoongi ya sabía su nombre incluso antes de haber ido al instituto.

Pronto Jungkook sacó otro cigarro del bolsillo trasero de su pantalón negro y lo prendió con un mechero que Namjoon le ofreció al segundo.

Dio una larga calada para intentar tranquilizarse y entrecerró sus ojos pensando en que el hijo de puta frente a él se había atrevido a casi vender información de Jimin.

Claramente no sabía ni dónde mierda se había metido por siquiera haber dicho ese nombre... su nombre.

—Bórrate ese nombre de tu cabeza y ni se te ocurra volver a decirlo con tu sucia boca, porque como lo vuelvas a mencionar sí que te voy a cortar la lengua de verdad. —Jeon amenazó con voz fría y totalmente amenazante.—Y como digas algo sobre Jimin te voy a matar, y te lo digo en serio cabrón. —Escupió entre dientes totalmente careciente de emociones, dándole a saber que sus palabras eran absolutamente veraces.

El otro pronto asintió como pudo totalmente agobiado y sincero, porque sabía perfectamente que Jeon siempre cumplía sus amenazas si estas eran desobedecidas.

Pronto Jungkook quitó su bota de la cabeza del otro y se acuclilló sobre él para darle otro brutal puñetazo que causó que sangre se salpicara sobre su propio rostro.

Seguidamente flexionó su fuerte brazo y dió otra calada a su cigarro de una forma tan intensa, que incluso sintió el humo escaparse por su nariz.

Agarró sin previo aviso el mentón al traidor obligándole a mirarle.

Y sin titubear acercó el candente a su rostro.

—¿Qué tal si lo apago en tu cara? —Preguntó sarcástico Jungkook.

Y tras ello acercó el cigarro a una de las mejillas del traidor para apagarlo ahí.

—¡Ahhhh-! —Gritó con dolor Rowoon al sentir su mejilla ser quemada en una zona, sin embargo fue acallado por la gran mano de Jeon siendo ceñida en su boca para obligarle a callar.

—Shhh. —Jungkook abultó sus labios y soltó el pelo del otro para llevar un dedo a su propia boca para indicarle que guardara silencio.—Dá las gracias que estoy siendo tan benevolente, esto no es nada. -Farfulló.

Tras haber apagado el cigarro de esa forma, por fin se puso en pie de nuevo.

Pronto volvió a hablar.

—De rodillas y tus manos en la espalda. —Ordenó y tras ello, un leve dolor de cabeza se hizo con él.

Y cuando vio a Rowoon obedecerle sin chistar y poniéndose en la posición mencionada, supo el por qué le había dolido levemente la cabeza: la razón era porque una vez ya vio a Jimin hacer esa pose y jodidamente le afligió.

La pose que significaba que él había traicionado a su banda y debía ponerse así para dejarse hacer por los demás integrantes de la misma.

—Haced lo que queráis con él. —Habló simple a sus subordinados y salió del descampado.

Y una vez salió de su campado sabía perfectamente que estaba jodido.

Porque había pensado en torturar a ese hijo de puta hasta la saciedad pero algo no se lo había permitido.

Y lo que no se lo permitió fue el pensar en Jimin y en el miedo que sentiría si supiera lo sanguinario que a veces podía llegar a ser.

Porque no quería ser alguien al que Jimin temiera.

.

¿Qué os ha parecido? Os leo.

Aclaración: Jungkook ha sido así de violento porque estaba tratando con un traicionero, y eso es lo peor que alguien puede hacer a su pandilla.

Él jamás dañaría de esa forma a Jimin o a una persona que no le haya hecho nada.

Cuando se entra en una pandilla en este fanfic la persona sabe a lo que se está exponiendo y sabe perfectamente lo que ocurre si falla. De todas maneras decir que esto ficción así que tampoco me hagan mucho caso porque no tengo ni idea si realmente ese mundo es así, simplemente esto es ficción y una historia inventada.

Bueno, eso es todo, quería dejar muy claro esas cosas para que no veáis a Jungkook como alguien sanguinario o que imparte violencia injustificada (cuando eso no es así; de hecho se ha mencionado muchas veces que él odia la violencia injustificada).

Eso es todo 🤗☺✨💕 ¡Muchísimas gracias por leer!

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