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Advertencia: Secuestro, abuso sexual, menciones de heridas y sangre, John Walker ya es una muy alta advertencia.
winter_soldier1941

Ya había pasado bastante tiempo desde la última vez que supieron algo de Walker. Bucky se aseguró de que tuviera su merecido, y después le ordenó a Sam acompañarte donde quiera que fueras. No importaba sí salías con tu amigos y amigas, si ibas a la escuela, si ibas al jardín de la mansión, etc. Él siempre iba a estar contigo. Suerte por ti que ambos se llevaban bien.

Un día, Sam llegó a la escuela a recogerte como de costumbre y se quedó esperando fuera, apoyado en el auto mientras veía a los niños y niñas salir. Pero no había rastro de ti.

Le preguntó a tus amigas cuando las vio, pero ninguna de ellas sabía dónde estabas.

Entró a la escuela, no sin antes haber llamado a Steve y Bucky. Ni si quiera escuchó al maestro que estaba en la entrada gritarle de que saliera.

Entre los tres buscaron por toda la escuela hasta que encontraron al conserje desmayado en un aula de clases.

Cuando despertó, les dijo que un hombre entró y se estaba llevando una niña por la fuerza. Él intentó detenerle pero no tenía tanta fuerza como el otro, y terminó golpeándolo en la cabeza.

Bucky se aseguró de que en el hospital atendieran bien a aquel hombre y que su esposa pudiera quedarse con él en todo momento, además de darles una gran recompensa por su ayuda. Mientras que él y sus hombres buscaban por toda la ciudad, e incluso fuera de ésta. Cuando la noticia llegó a oídos de Tony, también envió a su gente a buscarte.

Esa pesadilla duró una semana entera hasta que Wanda y su hermano Pietro te encontraron en una bodega abandonada.

Cuando entraron, Walker estaba a punto de quitarte la ropa mientras estabas inconsciente, y mientras Wanda le daba la paliza de su vida, pero asegurándose de dejarlo vivo para que Bucky se encargara de él, Pietro te tomó en sus brazos y te llevó hasta su auto para partir lo más rápido que podían al hospital.

Los doctores le dijeron a Bucky que Walker había abusado de ti en múltiples ocasiones, tenías unas cuantas fracturas y múltiples fisuras, sangrado interno, e indicios bastante evidentes de tortura.

Mientras estabas en cirugía, Bucky le ordenó a Wanda y Pietro torturar a Walker, cosa en la que los hermanos eran expertos y disfrutarían bastante.

Apenas le permitieron entrar a verte, Bucky fue y lo bueno es que ya estabas despierta.

-Muñeca...-Susurró al verte y caminó rápidamente para sentarse a tu lado en la cama.-¿Puedo tomar tú mano?

-Claro que puedes, pá...-Le dijiste con voz ronca, tomando su mano.

Bucky la trajo hacia sus labios y dejó un largo beso en ella.

-Estaba muy preocupado por ti, mi niña... de verdad creí que te había perdido...-Su voz se quebró mientras acariciaba tu mano, observando tu rostro lleno de cortes y moretones.

-Estoy bien, te lo aseguro.

-No es necesario que me mientas, muñeca... los doctores me dijeron lo que ese... ese mal nacido te hizo.-Te dijo con la tristeza y rabia mezcladas en el rostro.

Soltaste un pequeño suspiro a la vez que las lágrimas caían libres por tus mejillas.

-¿Puedes abrazarme? Extrañé sentirme segura contigo...-Le susurraste con voz temblorosa.

-Por supuesto, hija. Sólo déjame recostarme junto a ti.-Se acomodó a tu lado con mucho cuidado de no hacerte daño ni tocarte de una forma en la que te sintieras incómoda.

Tu sola te acercaste a él y lo abrazaste ya que Bucky no quería hacerte sentir mal ni incomodarte, así que una vez supo que estabas bien, envolvió sus brazos alrededor tuyo y te abrazó con fuerza, cuidando de no apretarte tanto.

-¿Qué le vas a hacer?-Le preguntaste después de unos minutos en silencio, sin moverte de donde estabas.

-No debes preocuparte por eso, muñeca.

-Sí lo matas, está bien. Sería mucho mejor. Así no le hace lo mismo a nadie nunca más.-Escondiste tu rostro en su pecho, abrazándolo aún más fuerte.

-Está bien, hija...-Besó tu cabeza, también dejando que las lágrimas corrieran libres.-No te imaginas cuánto te amo, mi pequeña muñeca.

-Yo también, papá... no sabes cuánto te extrañé...

-Lo sé... pero ya estás a salvo. Nadie va a volver a tocarte nunca más. Yo me voy a asegurar de eso. Vas a estar a salvo conmigo. Te lo prometo...