Cada año era lo mismo para mi, llegaba mi cumpleaños y era algo que no quería celebrar así que la mejor opción era trabajar como todos los días, trabajaba en una librería que era bastante tranquila, habían días en los que no quería ir pero debía aunque sea a dormir como cierta persona.

-Hey Cami - saludó él cuando entré, una sonrisa se formó en mi rostro al escuchar su voz

-Hola Yoongi - dije tímidamente dirigiéndome al mostrador donde estaba él -¿Ha estado tranquilo?

-Sí, ya sabes, lo de siempre - contestó sin mirarme, tenía varios diccionarios a su alrededor mientras escribía algo en su libreta que siempre llevaba a todos lados, había en su tono voz cierta molestia cuando hablaba como si el mundo le fastidiara

Desde que empecé a trabajar aquí me llamó bastante la atención y no sólo por lo atractivo que era sino por su actitud distante a todo lo que le rodeaba, solía dormirse de repente cuando estaba trabajando, noté que escribía canciones en su libreta, leía libros raros que sólo él se atrevía a leer y varias cosas más conocí de él con tan sólo observarle, casi no me hablaba y mantenía bastante distancia de mi.

Varias veces intenté conversar con él pero parecía siempre ser tan...gruñón.

-Acomoda estos libros - dijo señalándome una caja que acaba de llegar

-Claro jefe - solté irritada por su tono tan autoritario, él frunció el ceño, creo que me escuchó

-Lo soy Camila - mis mejillas se sentían calientes así que salí huyendo con la pesada caja

Hacía lo que me pidió cuando alguien entró a la librería, dejé eso y fui a ver quién era, aquella persona miraba de un lado a otro los libros en busca de algo, tenía el cabello negro, cuando volteó a verme me encontré con unos lindos ojos rasgados y sonrisa adorable.

-Buenos días, busco a mi amigo Suga - fruncí el ceño al no entender a quien buscaba

-Aquí no trabaja ningún Suga - contesté confusa

-Hey Jimin, ¿qué haces aquí? - Yoongi salió de su pequeña oficina saludando al chico que ahora tenía nombre para mi

-¿Suga? - pregunté al verlos saludarse con un abrazo, él me miró y asintió

-Así me dicen mis amigos cercanos - contestó mientras se llevaba a Jimin a su oficina

-Gracias - me dijo antes de irse con Yoongi - Oye es muy guapa - le dijo mientras entraba a la oficina, me puse nerviosa porque se giró a verme antes de cerrar la puerta

-No creo - me mostró una sonrisa ladina mientras cerraba la puerta

****

El enojo de hace rato se me había pasado, seguí arreglando las estanterías y atendiendo uno que otro cliente que llegaba, las risas se escuchaban del otro lado, nunca había escuchado reír a Yoongi así que me sorprendí al hacerlo, luego de algunas horas salieron ambos de la oficina.

-Vendré otro día - Jimin sonrió ante mi dirección y Yoongi se dio cuenta, frunció su ceño

-Sí, lo que digas - lo empujó a la salida y cerró la puerta, entró algo molesto viéndome - Vamos trabaja, no te pago para que ligues con mis amigos - empezó a decir

-¿Qué? Yo no estoy ligando con nadie - dije en mi defensa, otra vez aparecía el Yoongi gruñón

-Sí claro - entrecerró sus ojos para luego ir por una caja - Te faltan estos, apúrate si quieres salir temprano hoy

-No quiero salir temprano - agarré la caja bruscamente para irme a acomodar lo que faltaba

No entendía el porqué le decían Suga, de dulce no tenía nada. Unas manos tocaron mi cintura de repente espantándome.

-Siempre tienes prisa por salir ¿por qué hoy no? - su voz llegó hasta mi oído tensando mi cuerpo

-¿Qué haces? - pregunté tratando de girar mi cabeza pero me acorraló contra la estantería del fondo pegándome contra los libros

-Responde mi pregunta - besó mi cuello tan repentinamente que mi piel se erizó

-Pues...no quiero irme temprano - mi voz sonaba temblorosa, ¿qué intentaba hacer?

-Pero porqué - mordió mi oreja haciendo que soltara un ligero quejido

-Porque es mi cumpleaños y no quiero festejarlo en casa, ¿ya? - traté de salir de su agarre pero no me dejó, pegó más su cuerpo a mi frotando su miembro en mi parte trasera

-¿Debería hacerte un regalo entonces? - abrí mis ojos impresionada sin poder creerme lo que susurraba a mi oído

-Estás diciendo tonterías, suéltame - me empecé a remover pero me giró para tenerme enfrente de él, tomó mi mejilla acercándose más a mi, sus peculiares ojos me veían bastante serio, su cabello rubio cubría buena parte de su frente

-¿Crees que estoy bromeando? - preguntó con el ceño fruncido, ¿hasta se ponía gruñón en momentos así? - No Camila, no bromeo - se acercó más a mi girando su cabeza para que nuestros labios se encontraran sentía su respiración chocando con la mía, estaba tan cerca de probar sus labios hasta que la puerta se abrió haciendo sonar la campanilla, se separó rápidamente de mi y se fue a ver quién había sido

Me quedé contra la estantería un buen rato sin creerme lo que casi ocurrió, mi corazón y respiración estaban agitadas así como un calor atravesaba todo mi cuerpo, sobre todo en mis mejillas.

****

Miré hacia la ventana, la noche ya estaba sobre nosotros lo que significaba que pronto cerraríamos, comencé a guardar algunas cosas para poder irme, la puerta de la oficina de Yoongi estaba cerrada, seguramente lo que sucedió fue un error, tomé mi mochila lista para irme pero la puerta se abrió.

-¿A dónde vas? - preguntó de repente, me giré para verlo, estaba recargado contra el marco de la puerta, no pude evitar emocionarme al verlo así con la mirada seria, esos jeans que le quedaban muy bien y la playera negra que resaltaba por el tono de su piel pálida

-A mi casa - respondí mirando al suelo evitando seguir viéndole, escuché que sus pasos se dirigían hacia mi pero pasó de largo cerrando la puerta de la librería y poniendo el letrero de 'Cerrado' - Espera, todavía saldré yo - me miró con una sonrisa que jamás le había visto, sus ojos se veían más profundos que nunca, por dentro solté un grito

-No te dejaré volver a casa hoy - se fue acercando más a mi haciéndome retroceder lentamente hasta entrar a su oficina, me detuve cuando me topé con su escritorio, cerró la puerta con seguro y rápidamente se puso enfrente de mi

-No entiendo - murmuré, él me miraba con interés esperando a que siguiera hablando - siempre me tratas fríamente y eres un grosero conmigo - lo empujé haciéndole retroceder sin embargo parecía sorprendido por mi actitud y no enojado

-¿Eso crees? - tomó mi mano y la apretó - ¿Crees que no he notado la forma en que siempre te muerdes los labios? ¿Crees que no escucho cuando cantas feliz? ¿Crees que no me gusta ese cabello rojizo que brilla con el sol? ¿Crees que no sé lo mucho que te gusta el anime y videojuegos? - me miró serio y acercó más sus labios - Lo sé Camila, siempre te estoy observando y sé que tú me ves a mi - sin más que esperar junté nuestro labios

Se sorprendió de mi acto aunque me correspondió, movía sus labios junto a los míos, movíamos nuestras cabezas buscando un ángulo que nos satisficiera, me subió al escritorio tirando varias cosas a nuestro paso, abrió mis piernas para abrirse paso hacia mi, tomó mi cintura acercándome más a él y a su erección que estaba ya rozando con mi parte baja.

-Nunca usas faldas, ahorita sería perfecto una - mordió mi labio ligeramente, algo tenía Yoongi con las mordidas aunque no me molestaban

-Oh cállate - rodeé su cuello con mis brazos y seguimos besándonos

Pronto sólo los besos fueron insuficientes, nuestras manos buscaban tocar más del otro, metió su mano en mi blusa acariciando mi espalda pero no le fue suficiente porque intentó quitar mi playera, la deslizó fuera de cuerpo poniéndome nerviosa, parte de mi cuerpo estaba expuesto frente a sus ojos que me comían con la mirada, busqué también quitarle la playera pero alejaba mi mano.

-No es justo, yo ya estoy medio desnuda - le dije mientras intentaba quitarle la playera, él rió sorprendiéndome, no había escucha su risa en persona

-Te mostraré lo que es estar medio desnuda Cami - rápidamente desabotonó mis jeans y los deslizó fuera de mis piernas, ¿dónde había aprendido a quitar la ropa tan fácil y rápidamente?

El frío golpeó a mi cuerpo al estar expuesta completamente, traté de tapar mi cuerpo con mi brazos pero no me dejó, se acercó a besar mi cuello mordiéndolo y chupándolo.

-Me dejarás un moretón - él sonrió divertido ante tal idea

-Eso haré, así todos sabrán que eres mía - regresó a hacer lo que hacía pero de manera más gentil succionando un poco de mi piel

Todo mi cuerpo estaba reaccionando ante él, bajé mis manos buscando quitarle la playera, esta vez sí se dejó, deslicé la prende hasta que pude verlo al fin mostrando su abdomen desnudo, no tenía un abdomen bien formado pero su piel pálida brillaba para mi, sus hombros eran algo anchos y su cintura bastante pequeña, sé que probablemente su cuerpo no era lo más sexy del mundo pero me hacía suspirar.

-¿Te gusta lo que ves? - preguntó mientras se desabotonaba sus jeans enfrente de mi, me mordí el labio esperando ansiosamente por al fin verlo desnudo

Su bulto se hacia notar debajo de sus boxers negros, su piel pálida hacia sobresalir todo lo que estaba en ella, regresó a besarme y acariciar mis piernas, no me di cuenta en el momento que desabrochó mi brassier y se encontraba chupando mi pezón derecho, mi respiración se descompasaba, sentía que debía hacer algún ruido, mordí mi labio intentando no gemir.

-Vamos, quiero oírte gemir - succionó más mi pezón logrando su cometido, gemí ligeramente y él rió, era un malvado conmigo, tomó mi mano y la llevó hacia su erección, lo miré esperando que dijera algo más pero no lo hizo

Bajé mi vista intentando ver su pene,metí mi mano y sentí mojada la punta de este cuando la toqué con mi pulgar, él se estremeció ante aquel tacto, era mi momento de vengarme, empecé a masajearlo como creí que se debía hacer, Yoongi empezó a gemir haciéndome sonreír por la victoria.

-Suerte de principiante - me dijo, su mano intentó quitarme las bragas pero cerré mis piernas

-No, espera, eso no - sentía que mis mejillas ardían y ¿cómo no estarlo?

-Tranquila - besó mi mejilla y bajó de nuevo mi ropa interior, mis piernas temblaban por él

Sin piedad empezó a tocar mi parte intima, me estremecí ante su toque pero seguí con lo mío, quería hacerle venir y no dejarme vencer por él.

-Alguien se está mojando bastante - susurró tocando uno de mis pechos, Yoongi miraba como masajeaba su miembro

-Cállate - le contesté y él metió un dedo dentro de mi, una oleada de placer cubrió mi vientre, mi espalda se arqueó provocando una sonrisa en él, metió otro sacándolo y metiéndomelo

Moví más mi mano provocando que también su espalda se arqueara, nuestros gemidos se escuchaban en toda la oficina y cada uno intentaba desesperadamente hacer venir al otro, teníamos que ser tercos los dos. Sin avisarme un líquido cubrió mi mano, se había venido, lo miré con una sonrisa enorme.

-He ganado - dije victoriosa pero él tenía el ceño fruncido, conocía esa expresión, estaba molesto

Me agarró de la cintura y me giró dejando mi torso recostado contra el escritorio, tomó mis manos y las puso sobre mi espalda para impedirme que me moviera.

-Veremos quien gana - me susurró en mi oído, bajó por mi espalda dándome besos, mis piernas temblaban apenas siendo capaz de estar en aquella posición, sus dedos volvieron a entrar en mi - Te haré mía hasta el punto de que no querrás ser cogida por otro - y entonces metió su miembro sin avisarme

Solté un ligero grito, empezó a moverse dentro de mi dándome embestidas contra el escritorio, mis pechos estaban pegados contra la fría madera y mis piernas tensas, lo hacía tan duro y rápido que sentía como tocaba un punto dentro de mi, algo estaba a punto de salir de mi, intenté resistir pero era imposible con él dentro además de escuchar sus gemidos que sólo hacían excitarme más.

-Todavía no acabo - me dijo cuando vio que me vine, sacó su miembro y me giró para verle de nuevo, volvió a meterlo pero esta vez aferré mis piernas a su cadera

Tenía agarrado uno de mis pechos con su mano y con la otra tomaba mi cabello, movía su pene hacia adentro y afuera de mi, mis manos se aferraban a su espalda.

-Ya me cansé - soltó de repente, sacó su miembro, me bajó del escritorio y se sentó él en mi lugar - siéntate aquí - señaló su pene erecto - es tu turno de moverte

Sin pensarlo me subí encima de él y rodeé su cuerpo con mis piernas quedando justo encima de él, con su mano guió su miembro para ponerlo dentro de mi, gemí al sentirlo entrar lentamente, esa posición me hacia sentir más que antes.

-Muévete - me dijo al oído besando mi cuello, empecé a moverme pero se me dificultaba, tomó mis manos juntándolas con las suyas, con el apoyo de sus manos pude moverme más fácilmente

Pronto el ritmo fue acelerando, sentí que otra vez me vendría, lo miré y él estaba igual que yo.

-¿Puedo venirme dentro de ti? - asentí, me preocuparía de esas cosas luego, tomó mi cintura y me movió más rápido, algo cálido se esparcía dentro de mi y yo llegaba gloriosamente al orgasmo nuevamente

Terminé encima de él con la respiración agitada, el escritorio era muy pequeño aun así estábamos los dos usándolo de una cama improvisada.

-Creo que debo conseguir una cama para este lugar - murmuró con la respiración agitada, lo miré

-¿A caso esto se repetirá? - pregunté curiosa, él sonrió ligeramente

-No te dejaré escapar Camila, feliz cumpleaños - sus ojos se comenzaron a cerrar, miré como caía dormido

-Sólo tú te duermes así luego de hacerlo Suga - sonreí divertida para mi, las cosas se pondrían interesantes entre nosotros

Hola Chicas! :3 espero les haya gustado, comenten mucho y voten. Este capítulo va especialmente para mi amiga Cami, ¡Saludos hasta Argentina y Feliz cumpleaños! :3/
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