El resto de la universidad fue muy pesada para Katia, su tiempo se pasó entre el servicio para su beca, los proyectos, exámenes, más concursos falsos inventados, su servicio social y prácticas profesionales.

Después de un año y medio de trabajo muy duro, Katia por fin pudo salir de la escuela con honores. El director Joaquín, que aún no la perdonaba, le retrasó sus documentos lo más que pudo, le hizo dar unas tres vueltas a su oficina y, cuando ya no tuvo opción, le entregó sus certificados y el título correspondiente.

Tal y como predijo Álvaro, Katia terminó estando tan capacitada que no le costó colocarse en una excelente empresa. A diferencia de algunos compañeros, por ejemplo Gina, ella no tuvo palanca ni se metió a la empresa de algún familiar rico, sino tuvo que prepararse y pasar varias pruebas para conseguir un buen puesto.

Su primera semana de trabajo fue un poco ajetreada porque andaba en capacitación, pero aún así pudo hacerse un espacio para ir a su antigua universidad y hacerle una pequeña visita a su adorado director Joaquín Gil.

Cuando entró a la dirección saludó con amabilidad a Mildred, que la felicitó con ímpetu por sus logros; después de tanto tiempo trabajando juntas, lograron hacerse buenas amigas.

Una vez que estuvo frente a la puerta del despacho correspondiente, tocó la puerta.

—Adelante. —Escuchó la voz del otro lado.

No se hizo del rogar, pasó con rapidez y puso un gesto altanero. Joaquín dejó de ver unos documentos para enfocarla con la ceja alzada.

—¿Qué haces aquí?

—Solo vengo a informarle que el estudio inhumano, el trabajo duro y la presión que ejerció sobre mí rindieron frutos. Gracias a usted pude colocarme en Contazaf en un puerto administrativo —mencionó con cierta altanería, logrando que Joaquín apretara los puños.

—¿Nada más viniste a decirme eso?

—Sí. —Le mostró una sonrisita maliciosa—. Al final su castigo fue un premio. Le agradezco de corazón. —Hizo una reverencia.

—¡Largo! —Exclamó.

Katia salió de ahí con las comisuras de los labios levantadas, era algo que no podía evitar, se sentía muy dichosa de echarle en cara sus errores a Joaquín. Salió de la universidad con paso firme y vio su celular, ¡se le hacía tarde para la reunión con sus amigos!

Era viernes y esa tarde ella y su grupo de amigos quedaron de reunirse en la pizzería donde pasaron muy buenos momentos. Como estaba cerca de la escuela, caminó hasta ahí con velocidad y sonrió al entrar y ver a todos reunidos, ¡no faltaba ninguno! Estaban Sebastián, Raymundo, Ciara, Olga, Nieves, Higinio, Timoteo, Erika, Edwin y Bertha.

—¡Chicos! —Corrió hacia ellos. Como no estaba acostumbrada a usar zapatillas de tacón, se resbaló y casi se torció el pie pero al final pudo recuperar el equilibrio. Sus amigos, que no la perdieron de vista ni un momento, comenzaron a carcajearse—. ¡No se burlen que casi me quedo lisiada!

—Perdón —se excusó Ciara sin dejar de reír. Álvaro insistió en cuidar de Eduardito para que ella pudiera divertirse con sus amigos y, aunque al principio no estaba muy segura, terminó aceptando, pues confiaba mucho en su esposo. Meses después del bautizo de Eduardito, pudo regresar a la escuela y terminar en línea, y cuando obtuvo su título, se casó con el doctor Villegas; fue una boda sencilla donde solo asistieron familiares y amistades muy cercanas pero a ellos les pareció perfecta. Después de anhelarlo por mucho tiempo, por fin se convirtió en la esposa de Álvaro y se sentía más dichosa y realizada que nunca.

En cuanto a los demás, si bien les costó incluir a Ciara en el grupo por lo que pasó con Sebastián —en especial a Olga, que era la más enojada— al final el chico decidió contarles toda la verdad, indicando que Ciara no era una villana sino una víctima de las circunstancias. Aunque al principio se sorprendieron al enterarse de la relación entre él y Ray, pues no era algo que se imaginaron, la terminaron aceptando sin mayor problema.

Para Sebastián fue un poco triste darse cuenta que contaba más con el apoyo de sus amigos que de sus propios padres, que ellos lo aceptaban sin ningún inconveniente pero así era la vida. Al menos estaba feliz al lado de la persona que más amaba.

Todos se pusieron al corriente con sus vidas y Katia les comentó que logró entrar a Contazaf, una de las mejores empresas de contaduría privada. Todos la felicitaron de corazón.

—¡Qué genial! —Exclamó Ciara—. Yo estoy en busca de trabajo pero mientras sigo vendiendo productos de catálogo.

—Eso es muy bueno, las ventas dejan mucho —comentó Nieves.

—Tienes razón.

—¿Y cómo está mi amiguita? — Ray preguntó por Madison.

—Bien, ¡anda insoportable!, ya entró en la etapa de adolescente rebelde, no la aguantamos.

—Me imagino. —Rio un poco—. Dile que le mando saludos.

—Gracias, yo le digo.

Mientras sus amigos intercambiaban palabras entre ellos, Katia los miró con atención. Muchas cosas cambiaron desde que se enteró de algunos secretos que no debía saber; tal vez no todo fue bueno, pues se perdió la amistad de años de sus padres con los señores Leal e Hilda se divorció de su esposo, aunque más bien se liberó de una relación que no le dejaba nada bueno, y ella consiguió unos excelentes amigos.

Si hacía algunos años alguien le hubiera dicho que sus amistades incondicionales serían el novio y la mejor amiga de Gina Leal, lo habría tirado a loco. Pero ahí estaba, compartiendo bellos momentos con ellos, siendo su incondicional y queriéndolos mucho.

No cabía duda, a veces el destino jugaba unas bromas muy entretenidas.

FIN

Muchas gracias a todos por haber llegado hasta acá. No tengo palabras para agradecerles los votos, comentarios, dibujitos, que me han dejado.

En especial agradezco a mi hermana GabyCoutino por ayudarme siempre con mis historias, por darme ideas, corregir y siempre comentar todo. Gracias Robertdowneyjr234 por comentar cada capítulo. 

Gracias Yoselin239808 llegaste casi al final pero tus comentarios me hicieron muy feliz. También agradezco a Pamela2344 por hacerme saber que has llegado hasta acá y que la historia te ha gustado,  a BertiRodrguez por el dibujito de Ciara, a Adriansteban por poner referencias de la historia, a Majo_Granado por ser siempre la primera en votar en cada capítulo. ¡A todos y cada una de las personas que me han apoyado con esto!

Sé que BDD es una historia en tercera persona y que enfoca varios personajes, por lo que entiendo que no todos se queden, pero a todos los que leyeron, votaron, comentaron la historia, tienen un pedacito de mi corazón.

Espero verlos por aquí en otros proyectos, tengo varias obras terminadas y una en actualización, es probable que encuentren en mi perfil algo de su agrado. Si no, agradezco que me hayan acompañado por este camino.

Deseo que su destino esté lleno de bendiciones y fortuna para ustedes y sus seres queridos, y que si les juega una broma, sea para que conozcan gente que vale la pena.

¡Les mando un abrazo!