BaekHyun sabía el tiempo exacto que necesitaba una hermosa hoja rojo granate en llegar al suelo de piedra. Primero, el viento soplaba suavemente despegándola de las ramas; luego, la hacía flotar suavemente para seguidamente sacudirla un poco, hasta que, sin prisa y delicadamente, la hacía descender al suelo, donde hojas amarillas, anaranjadas y rojas se arremolinaban en un espacio vacío hasta decorar profundamente toda la callecilla sin vida.

El precioso otoño. Miles y miles de hojas sueltas por doquier decoraban la época más rica del año; los manzanos estaban en su punto, el dulce olor de las naranjas se extendía por el aire, las uvas más dulces eran cosechadas y las peras más verdes eran comidas; era la época de las frutas maduras, era la época donde todo florecía para caer, era el tiempo de sanar.

Era el tiempo en el que BaekHyun comenzó a sanar. Sin darse cuenta floreció en primavera, se fortaleció en verano y en otoño maduro y todo por una simple persona.

Oh SeHun.

SeHun era todo, BaekHyun quería que SeHun se llegara a convertir en su todo y él ser el todo del pelinegro. Solo bastaron ocho meses para que su vida cambiara del blanco y negro al color, como un brote de margaritas que salen cuando aún hay nieve alrededor y esperan pacientemente a que se haga el deshielo para florecer abundante sobre el pasto verde y fresco.

BaekHyun fue el pasto congelado sobre el que SeHun planto una margarita y cuido y protegió todos los días para quitar el hielo que había sobre él. Fue él quien esperó pacientemente a que muchas margaritas nacieran en BaekHyun y cuando las tuvo, las cuido aun más, como si BaekHyun fuera su precioso jardín.

Un Jaguar gris se introdujo en la entrada de la nueva casa de BaekHyun; varias hojas volaron por el automóvil que ingresaba, dándole una gran entrada al auto de SeHun; BaekHyun sonrió y rápidamente fue a la entrada de su casa.

–Baek ¿Por qué no barres las hojas de tu casa? No haces nada, al menos podrías hacer eso.

–Cállate, me gusta así. Solo una vez al año se puede apreciar esta hermosura, así que estoy en todo mi derecho. Además, es mi casa, puedo tenerla como quiera.

SeHun rodó los ojos y murmuró un "sí, como sea"

–¿Estás listo? –BaekHyun asintió. –Bueno vamos, ya va a empezar.

BaekHyun tomó sus llaves, cartera y móvil para salir. Una vez en el vehículo SeHun le comentó

–Interesante suéter Baek.

–Era de mi mamá, lo usaba en estas épocas del año.

–Te queda bien.

BaekHyun sonrió; su suéter era blanco con corazones rojos y tenía unas manitas con el pulgar hacia arriba, lo acompañó con una camiseta blanca, pantalones negros y zapatillas deportivas blanco con negro, se sentía cómodo así y nadie lo iba a reconocer.

SeHun lo había invitado al festival de otoño que hacían en Incheon, BaekHyun había oído hablar mucho de ese festival y siempre quiso asistir, pero su agenda era muy estricta, así que cuando el pelinegro se lo propuso no lo pensó dos veces y le dijo que sí.

Así que ahí estaban ellos dos, rodeados de Debussy camino al festival.

N/A

Holiis terroncitos de azúcar

Ayer debía actualizar peeero se me olvido o mejor dicho me dormí 😂😂
Pero bueno aquí estamos en la segunda parte de la historia, yo espero que les guste tanto como a mi me gusta escribirla para ustedes ^•^
Es importante de verdad cada canción que dejó al iniciar las partes porque en eso se basa maso menos la historia y en lo personal amo esas canciones, de verdad que hay mucha música maravillosa allá afuera esperando ser descubierta ^•^

Y bueno sin más nos leemos el Viernes!

PD1: Los amo ❤
PD2: Gracias por su amor a la historia

#kxcpdb