Desperté a las dos de la madrugada gracias a una llamada a mi celular.

- ¿Qué? - Dije con pereza y enfado.

- Eduardo... - Lo escuché llorar y casi se me salía el corazón.

- ¿Qué pasa José? - Pregunto con apuro.

- La niña no deja de llorar, no se que tiene, yo... Yo simplemente no puedo hacer que pare su llanto, estoy desesperado y no quiero despertar a la madre de Jux... - Siguió sollozando y yo no pude contenerme.

- Estoy ahí en diez minutos, tú dale biberón o revisa el pañal. - Le di las instrucciones mientras tomaba una chaqueta, al fin y al cabo no tendría problemas en largarme en pijama a su casa.

~Yayo

P.D. GRACIAS, NETA, GRACIAS por el apoyo, ya me siento mejor <3 Mañana les doy su Yaoi :)

P.D.2. Tipa, te seguiría tirando piedras peeeeeero... Pues que puta hueva me das ya.