- Veterinario -
Y entonces, me tocó llevar a Kotatsu al veterinario. Se podrían imaginar la cara del pobre veterinario cuando llegué con un jodido gato gigante - Shanks recordaba con un poco de pena al pobre veterinario.
Si te atrevías a dejar a Kotatsu, te iba a cortar las bolas - Ace le decía con una sonrisa bastante satánica.
¿Entonces así fue como conociste a Kotatsu, yoi? - Aunque Marco se sentía realmente celoso porque el pelirrojo se llevara bien con Ace, realmente le convenía en este momento para descubrir más del chico.
Sí, bueno, de cualquier manera, él era como yo - Marco no tenía idea a qué se refería Ace, pero Shanks sí. Después de todo, Ace tenía razón; Kotatsu no tenía ni madre ni padre, había sido rechazado completamente por toda la manada y no confiaba en nadie, hasta que Ace llegó.
Entonces, tienes un hermano menor y un hermano de tu edad - Oyaji rio, pero algo lo tomó desprevenido, la sonrisa de Ace ante la mención de sus hermanos.
Bueno, está Luffy. Él es realmente un llorón, siempre lloraba por todo - Ace, por primera vez, habló sin veneno en dirección a Barba Blanca. Tal vez la presencia del pelirrojo no sea tan mala esta vez.
Cuando Ace floreció, el capitán no pudo dejar de reír por semanas. No dejaba de repetir que era el pago del capitán - Benn le contó a Marco, esperando que él supiera a qué tanto se refería.
¿Eso qué diablos significa, Shanks, yoi? - Marco se irritó por eso. Shanks dijo eso como si fuera algo malo.
No te enojes conmigo, pajarito, pero en realidad todo era verdad. Ese fue el pago del capitán por quitarles a Oden. Roger les quitó un navegante, y el destino les pagó con otro navegante - Barba Blanca tenía que estar de acuerdo con el mocoso por esta vez.
GURARARA. No lo había pensado de esa manera, mocoso - Barba Blanca rió mientras le daba un sorbo a su sake.
No bebas tanto, papá, yoi - Marco bufó, le preocupaba la salud de su padre.
Sí, no bebas tanto, te vamos a tener que llevar al veterinario - Thatch no podía dejar de reír. De repente, se dio cuenta de que los hombros de Ace temblaban. Levantó la cabeza estallando en una risa explosiva, un montoncito de bolitas que parecían ser luciérnagas empezaron a estallar cerca de él como fuegos artificiales. Maldita sea, Ace brillaba cuando reía, literalmente.
Oh Dios, no creo que le hayas dicho eso al que llamas tu padre - Barba Blanca iba a regañar a su hijo, pero simplemente la risa de su hijo menor era realmente espléndida. No había tenido la oportunidad de escucharla.
Yoi - Marco quedó embobado. El pájaro idiota ni siquiera se dio cuenta de que no había dicho ni una sola palabra y aún así lanzó su tick al aire.
Bueno, eso realmente es fabuloso - Haruta lo anotó en su lista de cosas que no sabía sobre Ace. Después de todo, él era el comandante de la división de la información; ese era su trabajo. No había información que se pudiera escapar de su red mundial.
Así que te queda solo un mes y tanto por aquí o algo así, que cuando termines puedes venir con mi tripulación. Nos encanta viajar contigo, y pronto vamos a ir a ver a Uta - el pelirrojo le dio una sonrisa al pecoso, su hermana. No la había visto desde hace mucho tiempo.
¿Uta, yoi? -
Es mi hija, y se crió como la hermana de Ace - Ace aceptó el abrazo que Shanks le estaba dando con el brazo que le quedaba. No podía negarle nada al hombre después de haber salvado a su hermano.
No es la cantante ??? - Haruta estaba realmente confundido con este árbol genealógico.
Sí, ella es simplemente especial - Ace sonrió, recuerdos de su infancia nublaban todos los problemas que había tenido los últimos meses.
Tal vez necesitamos un poco de paz - Barba Blanca decidió que iba a programar algo en la siguiente isla. Tal vez poner a Ace en su ámbito natural lo ayudaría a conectarse más con la familia. Tal vez una acampada con una fogata.
¿Vamos a usar la misma táctica que usaste con Namur? - Haruta le preguntó entre susurros a su padre, que asintió.
Tuvieron que estar meses en la playa. Namur vivía cerca de la orilla, habían visto su marca solo por casualidad. Cuando tenías la marca de papá, simplemente no había forma de que te escaparas.
Namur no quería ir con ellos, por toda la enemistad que había entre su especie y la especie humana. Pero aunque papá no podía entrar al mar, no dejaba de insistirle al chico. Ni siquiera se le pasaba por la cabeza dejar al pobre tiburón solo por unos segundos cuando llegaba a tierra. Namur llegaba a correr de él. Simplemente, el hombre no lo entendía.
Hasta que pasó el accidente. Unos cazadores de gyojins trataron de atacar al tiburón, Namur con la habilidad que tenía de un comandante pudo disipar a varios. El capitán de ellos lo atacó por la espalda, una jugada muy sucia en el mundo de la piratería.
Y papá lo defendió, puso su mano entre Namur y el arpón, recibió la herida, pero en ese momento, Namur se dio cuenta de que podía depositarle toda su confianza por el resto de su vida al hombre.
Durante esa semana, se apegó completamente al hombre y no dejaba de cuidar su herida. Simplemente, lo cuidaba. Ni una sola palabra se escapaba de su boca. Luego, cuando papá le preguntó de nuevo si se iría con ellos, Namur simplemente no le pudo decir que no, y poco a poco terminó uniéndose a la familia.
Ahora es feliz. Esperaban no tener que llegar a una situación como la del arpón de nuevo, pero sí esperaban que poniendo a Ace en su área, se acostumbraría mucho más rápido a todos y verían que no era tan malo pertenecer a la familia. Tenía que dejarse fluir con todos los demás.
No era necesario ir contra la corriente, aunque en realidad todos habían pasado por una etapa de rebeldía, así que no deberían opinar mucho.
GURARARA - la risa de Barba Blanca resonó por todo el barco.
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