• 003 |🌷




Había llegado el día. Después de largas semanas de preparación, finalmente el mes del cortejo hacia los omegas había comenzado. Abril era un mes que ponía muy ansioso a Jungkook, porque si tuviesen que preguntarle a él, se lo saltaría por completo, ya que a diferencia de otros omegas, Jungkook detestaba con su vida ser cortejado, lo hacía sentir inferior, como si él necesitara de la atención que cualquier alfa de cuarta podría brindarle, por esa misma razón, a Jimin (uno de los mejores amigos del menor, que venía coqueteándole desde que se presentó como omega) se le hacía algo difícil poder llegar hasta él, el peliazul no era el tipo de omega que se lanzaría a sus brazos tan fácilmente, y de hecho (él jamás había actuado de esa forma) pero cabía destacar, que Jimin conocía los puntos débiles de Jungkook, como el hecho de que le gustaran los detalles simples y los mimos; y fue después de una sesión de mimos que logró convencerlo de que lo acompañara a visitar a una manada del sur que estaba ofreciendo una fiesta para los omegas de todas las clases.

Por lo que al final -según el menor, "más por pena y lástima que por cualquier otra cosa"- terminó aceptando y....allí estaba, contemplándose en el espejo mientras observaba como le quedaba el traje.

Su mamá, la señora Jeon, se había emocionado tanto cuando Jungkook le mencionó que lo habían invitado que no dudó en confeccionarle ella misma rápidamente un traje que lo haría deslumbrar ante todos, o bueno, esas fueron las palabras que ella utilizó en el momento en que el peliazul se dirigió a ella con algo de vergüenza por no haberle avisado antes, pero grata fue su sorpresa cuando su madre le dedicó una sonrisa suave y con aires despreocupados le dijo: "Vuelve a tiempo para la celebración del martes cariño", besó sus mejillas y como la madre sobreprotectora que era, lo marcó levemente con su aroma, porque después de todo, Jeon Jungkook sólo era un muchacho de diecinueve años y para ella siempre sería su bebé, le deseó un buen viaje y bajó las escaleras, pero no se marchó sin antes advertirle a Jimin (que todo ese tiempo había estado esperando en la sala de estar) que se comportara con su hijo o ella misma iría a tirarle de las orejas y acusarlo con los señores Park; el alfa sólo pudo asentir desde su lugar en el sofá individual, muy nervioso, y la escuchó murmurar algo acerca de tener una cita con un alfa después de mucho tiempo, se atrevió a sonreír y a animarla, ella le dio un último asentimiento receloso y se fue.

La situación entre los padres de Jungkook fue algo por lo que Jimin siempre sintió curiosidad, nunca pasó por su mente el preguntar acerca del tema porque claramente no era de su incumbencia, al principio, tontamente pensó que se trataba del rompimiento de un lazo y que por eso la señora Jeon era tan...dura consigo misma, también pensó en la posibilidad de que el padre de Jungkook hubiese fallecido y que su omega quedara devastada, pero no fue hasta una tarde soleada de Julio, durante el año anterior, que conoció la verdadera historia.

"Hyung" Jungkook lo llamó desde dos metros más allá, con los ojos cerrados, acostado sobre una sábana a cuadros que cubría el césped verde, él estaba igual, ese día hacía muchísimo calor y cuando su menor lo sugirió no dudaron en tomar una canasta para ir de picnic junto a un río que quedaba cerca de sus hogares.

Murmuró un "mmh" para que supiera que lo estaba escuchando.

Jungkook se alzó levemente para observarlo, quitándose los lentes de sol y revolviéndose el cabello rojo brillante, su torso estaba al descubierto y suaves gotas de sudor se deslizaban por su pecho. Jimin apoyó su mentón en una de sus palmas, sosteniéndose con los codos anclados al suelo para mirarle también, tratando de que sus ojos no volaran a otros lugares y se mantuvieran en el rostro de Jungkook.

El pelirrojo se aclaró la garganta.

"¿Alguna vez te has preguntado...por qué nunca hablo de mi padre?" Preguntó, el pequeño interrogatorio tomó por sorpresa al castaño, sus ojos se abrieron de más y no pudo ocultar su expresión.

Se encogió de hombros, apretando los labios.

"Si me lo he preguntado o no, realmente no interesa, jamás te pediría que me contaras algo que no me compete...más aún si el tema te lastima, no me gustaría verte triste por eso" Susurró, el menor asintió, aún mirándolo. Jimin se volvió a recostar sobre su sábana, apartando la mirada de Jungkook con nerviosismo, el pelirrojo seguía observándolo con una intensidad impropia de él, sus ojos oscuros decían tantas cosas, y cuando el castaño volteó de nuevo, vió un atisbo de valentía en ellos.

Jungkook se levantó de su lugar y rodó sus pertenencias, junto a su sábana, para estar más cerca de Jimin. Se recostó a un lado del castaño, y cuando el mayor creyó que todo ya estaba olvidado, fue cuando Jungkook decidió comenzar a hablar.

"Nunca conocí a mi padre" Soltó de repente en un hilo de voz, Jimin giró su cabeza tan rápido al escucharle que creyó oír el hueso de su nuca emitir un "crack" por el brusco movimiento.

"¿Qué?"

"Pues eso, nunca conocí a mi padre, mamá se acostó con él una noche y él anudó en ella, ninguno de los dos se dio cuenta..."

"Pero...¿Cómo?...¿Qué?...no entiendo..."

Jungkook hizo una mueca, cuando él supo la verdad también estaba igual de confundido que su amigo e incluso peor.

"Las amigas de mi mamá se lo presentaron durante el mes del cortejo" Contó, sacó un par de sándwiches y jugos de la canasta y le pasó un par al mayor, desenvolvió el plástico que cubría al pan y comenzó a masticar. "Todo iba bien, él la visitaba casi todos los días, conoció a mis abuelos, le llevaba regalos y bueno...mamá decía que ella estaba enamorada" Subió y bajó las cejas, apretando los labios.

Jimin frunció el entrecejo.

"No me está gustando por donde va esto" Dijo, tomó un sorbo de su jugo y observó a Jungkook atento.

"Salieron por cinco meses, él no vivía en el pueblo, pero mamá nunca se atrevió a preguntar de dónde era exactamente y lo dejó pasar...y entonces llegó un día en el que-" Jimin lo interrumpió.

"Aguarda un segundo, ¿Dijiste que no vivía en el pueblo?" Jungkook sonrió al ver a su mejor amigo tan interesado, rodó los ojos divertido.

"Ajam" Hizo un sonido afirmativo, masticando su comida.

"¿Y entonces por qué salía con él? Pensé que quedó claro que no podemos confiar en nadie si no es de los nuestros" Bufó, el menor le dio la razón señalándolo brevemente.

"A mi abuelo nunca le agradó mi padre, decía que no se veía como una persona de fiar" Jimin abrió la boca otra vez para interrumpirlo y decir algo pero Jungkook lo miró amenazante, arqueando una ceja en su dirección. "En el mes que sería el número seis desde que empezaron a salir, él vino a visitar a mamá a la casa de sus padres, tenían semanas sin verse y cuando ella lo vió, de inmediato notó que estaba en celo"

"Ay, pero-"

"Ella estaba muy nerviosa, porque el aura que él desprendía era tan amenazante en comparación a otras ocasiones en las cuales se habían visto..."

"No me digas que él..." Jimin soltó lo primero que se le vino a la mente, no pudiendo terminar la frase porque frunció el entrecejo y soltó un bajo gruñido, su alfa se había puesto a la defensiva gracias a las conclusiones que había sacado.

"Entonces, él le pidió permiso para pasar, mis abuelos no estaban en casa, y cuando la puerta se cerró pasó lo inevitable, estuvieron juntos y terminaron en la cama. A la mañana siguiente, él no estaba, sólo le dejó una nota a mamá y se fue"

Los envolvió un silencio intraquilo y más ruidoso de lo que parecía.

Jimin se sentó en posición de mariposa sobre su manta, con los brazos cruzados, analizando todo, ya estaban ahí, no iba a perder nada preguntando el resto de lo que faltaba por saber.

"¿Qué decía la nota?" Jungkook lo miró por un segundo y después centró su atención en un punto fijo del pasto cercano a sus pies.

"Te amo, nos veremos pronto" Contestó, sus labios se curvaron hacia abajo en un puchero, su labio inferior empezó a temblar en un tic nervioso.

Jimin soltó un bufido y se le escapó una risa sarcástica, negó con la cabeza.

"Mamá se enteró de que estaba embarazada de mí dos días después de que él se fue, me dijo que los latidos de su corazón se escuchaban dos veces por segundo en vez de una y que toda su ropa olía a miel y ella no sabía porqué" Soltó una risita al imaginarse a su madre más joven y confundida, pero su sonrisa desapareció tan rápido como llegó. "Él nunca volvió y mamá tampoco hizo ningún esfuerzo por encontrar dónde buscarle, después de todo, sólo se habían visto allí. Es una suerte que no hayan estado enlazados ni nada parecido...supongo" Tras decir esas últimas palabras, se tumbó de nuevo sobre la sábana, el sol había comenzado a descender y el crepúsculo hacía su aparición pintando el cielo de colores cálidos.

Jimin seguía en su misma posición y no pudo contener sus siguientes palabras.

"Ese alfa era un hijo de puta, Jungkook" Alegó, visiblemente alterado, el pelirrojo soltó una risa cantarina, con el rostro risueño, Jimin le sonrió también pero le dio un sutil empujón con su hombro.
"¡Yah!~ lo digo en serio, jugó con los sentimientos de tu mamá como un cabrón, como si tuviera el derecho de aprovecharse de cualquier omega que se le cruzara" Jimin siguió soltando improperios a diestra y siniestra, Jungkook sólo lo miraba sonriendo.

Cuando el castaño se percató de la expresión en el rostro de su menor se ruborizó un poco por hablar de más.

"¿Cómo es que estás tan tranquilo el día de hoy? ¿Cómo fue que pudiste sobrellevarlo tan bien?" Estaba realmente intrigado, Jungkook se veía como un omega adolescente normal, sin traumas ni ningún tipo de trastorno psicológico.

El menor hizo una mueca empática, dándole una sonrisita pequeña.

"Mamá es fuerte, es la persona más valiente que he conocido, ha tenido que criarme ella sola todos estos años sin ayuda de nadie, y...al principio no podía entender lo que pasaba, con tan sólo cinco años tuve que asimilar que yo no tenía papá...por supuesto que lloré por ello en muchas ocasiones y pregunté por él otras miles, pero con el tiempo, me olvidé del dolor y pensé en que era mejor no tener un padre a tener uno que esté ausente y que no me quiera como su hijo" Jimin acercó su mano a la suya para darle un apretón, brindándole apoyo.

Desde allí supo que Jungkook y su mamá, eran los omegas más valiosos que conocía, y por esa razón, ya no juzgaría el recelo del menor en cuanto a enamorarse -tenía una larga anécdota en base a ello- que bien o mal lo incluía como la parte sobrante, y a su vez como la mejor parte de ese viejo cuento.










__________________________

Hola corazones, ¿Cómo están?, éste capítulo es un pequeño relleno ajsjs, pero era necesario conocer el pasado de Jungkook para que puedan entender el cómo se relacionará con la clase a la que pertenece y con Hoseok, muy pronto se encontrarán, espérenlo. Nos leemos pronto, cuídense mucho♡





Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top