— ¡Esto está muy fuerte! ― dijo TaeHyung quejándose después de beber su shot de tequila.

— No es para tanto, Hyungie.

— No creo aguantar otro de estos. ¿No hay bebidas con sin alcohol?

— ¡No! ― JungKook miró mal a su amigo― ¿Acaso crees que estamos en un restaurante? ¡Dos shots más! ― pidió JungKook.

— Eres un caso perdido, ¿Cómo piensas pagar? Apuesto que un solo shot cuesta un riñón.

— No seas exagerado, sabes bien que en la editorial donde trabajo me pagan bien y además tenía algo guardado por ahí.

— Cierto... hablando de tu trabajo, ¿el viejo te sigue fastidiando?

— Sí... quiere pasar una noche conmigo, De seguro es de esos viejitos que les da la curiosidad de experimentar que se siente estar con un hombre. Incluso el viejo me tocó sin mi permiso.― JungKook bufó.

— ¿Por qué diablos no me dijiste antes? Debes salirte de esa empresa, por más buena que sea la paga, no mereces ese trato. Deja que le cuente a SeokJin le dirá a NamJoon que golpeé al viejo verde.

— Créeme que ya pensé en salirme... pero luego buscar trabajo será un problema.

— De haber sabido antes te hubiera recomendado...

— Dejemos a un lado nuestros problemas— JungKook sonrió —Estamos aquí para quitarnos el estrés y tal vez consigamos algún chico apuesto— JungKook sonrió picarón.

Después de unos minutos charlando con JungKook, sintieron como dos personas se sentaban a un lado de ellos, TaeHyung no quiso ser chismoso así que no miro. Pero le dio curiosidad en cuando JungKook le miró con una sonrisa coqueta y eso significa que son chicos guapos... La curiosidad le ganó y se dio media vuelta abriendo los ojos con sorpresa al percatarse de quién se trataba ¿Que hacía Min YoonGi aquí? Bueno... Este lugar era exclusivo y jodidamente caro. Y YoonGi era millonario no habría problema alguno para el venir aquí.

— Kim TaeHyung, pero que sorpresa encontrarte aquí ― JungKook observaba la escena confundido, al parecer TaeHyung conocía al chico. Miró a su acompañante el cual era jodidamente guapo así que con una sonrisa coqueta se acercó al él.

— Lo mismo digo, Min.

— ¿Ya no me llamaras señor Min? ― dijo mientras se servía un vaso de tequila.

— Bueno, no estoy en horas laborales, y solo viene aquí para divertirme y quitarme el estrés ― no sabía por qué diablos le daba explicaciones.

— Sí quieres quitarte todo el estrés aquí estoy yo— le guiño el ojo.

— Pero que coqueteos más estúpidos, Min ― dijo TaeHyung riendo ― ¿Así es como consigues citas?

— Bueno a mis "citas" no les coqueteo, con tan sólo decirles unas cuantas palabras al oído ya las tengo en mi cama.

— Vaya que poca dignidad tienen. -dijo TaeHyung algo sorprendido.

— ¿Por qué eres tan difícil, TaeHyung? A simple vista parece que padeces de falta de sexo.

— ¿Falta de sexo? Créeme yo no padezco de falta de sexo. Además, yo no haría nada contigo, eres mi jefe.

— Muchos asistentes se acuestan con sus jefes.

— Bien, me acabas de confirmar que quieres tener sexo conmigo. Déjame decirte Min, que para llegar a eso conmigo necesitas mucho. Yo no soy fácil. Y no me acuesto con cualquiera.

— Pero yo no soy cualquiera... Vamos TaeHyung solo pasa una noche conmigo. ― ofreció.

TaeHyung pestañeo varias veces.

— ¿Estás loco?― tomo un trago― ¿Con todos tus asistentes eres así?

— No. A ninguna le propuse lo que a ti sí.

— Vaya... me halagas.... Mhm bien... déjame pensarlo ― simuló pensar ― Ya lo pensé y no.

— Vaya, TaeHyung, eres difícil. ― YoonGi sonrió ― y eso lo hace aún más tentador. Mientras más te niegues, más me dan ganas de tenerte.

— Bien te hare esperar entonces ― le guiño el ojo ― cambiemos de tema...

— La madre de tu hijo... ¿Qué paso con ella? ― si bueno, YoonGi tenía dudas sobre ello.

— Padre ― le corrigió ―. Y la verdad no sé nada sobre el idiota que presto su esperma para que mi hijo existiera.

— ¿Eres de esos chicos especiales?

— Si con "chicos especiales" te refieres a los que pueden procrear vida, sí, soy un chico especial.

— Vaya... Y dime, ¿Tienes algún fetiche? ― la conversación cambio drásticamente.

— ¿Es en serio? ¿No puede hablar de otra cosa que no sea sexo?

— Bueno, quiero saber tus fetiches... tengo el presentimiento que te gusta el sexo dulce...

— ¿De verdad? No hablaré de mis fetiches.

— Entonces si tienes.― sonrió burlesco ― a mí me gusta el sexo rudo y el...

— Bien, esta conversación no va para ningún lado ― bufó ― eres fastidioso ¿Lo sabías?

— Bueno me han dicho cosas peores como; cretino, engreído, soberbio ― rio.

TaeHyung iba a responder, pero cerró su boca en cuando observo como JungKook se levantaba de su asiento y el escritor que acompañaba a YoonGi tomaba su mano. TaeHyung levantó una ceja y le miró.

— JungKook ¿A dónde vas?

— Hyungie, me iré con Hoseok ― le sonrió inocente ― Pero YoonGi te llevará a casa ― JungKook no lo dejo responder por qué ya se había despedido de él no sin antes haberle susurrado un "suerte" y "divierte" con una sonrisa pícara a lo que TaeHyung le respondió rodando sus ojos.

— Genial, quien se supone que es uno de mis mejores amigos me abandono...― TaeHyung bufó.

— Este lugar se puso aburrido ― TaeHyung asintio de acuerdo ― ¿Tienes hambre?, Si quieres vamos a comer algo... Yo invitó.― YoonGi le sonrió y por primera vez no había segundas intenciones en él.

TaeHyung asintió con una pequeña sonrisa y se fueron aún restaurante de comida rápida. Se fueron en el automóvil de YoonGi. Se decidieron por pizza y esperaron su pedido.

— Y tu hijo... ¿Cuántos años tiene?

— Tiene cinco.― TaeHyung sonrió al recordar a su pequeño.

— Que bien, por lo que note él ya está en preescolar ¿En qué año va? ― si algo había descubierto YoonGi era el hecho de que TaeHyung amaba hablar de su hijo. Así tal vez podría ganarse la confianza de TaeHyung.

— Ya está en su último año.

— Cierto y dime ¿Qué paso aquella vez que te acompañe al preescolar? Saliste echando humo por las orejas incluso te desquitaste con la puerta.

— Si, bueno... El director del preescolar dijo que mi hijo golpeó a su compañero "sin razón alguna", cuando la verdad es otra. El compañero de mi hijo, Jiho, comenzó a molestarlo y otro compañerito de mi hijo, TaeMin, defendió a mi hijo, consta que Jiho empujó a mi hijo y ahí empezaron los golpes entre Jiho y TaeMin, pero mi hijo al ver qué Jiho golpeó a TaeMin se metió a defenderlo... La maestra no vio nada y termino por creerle a Jiho, ya sabes que padres millonarios con un estatus social elevado. El director y la maestra solo son lame botas de los padres de Jiho.

YoonGi mantenía su ceño fruncido ― Eso es injusto ― le dijo ― deberían despedir a ese director y maestra.

— Lo sé... Quise hacer algo, incluso mi cuñado me acompaño, pero el director casi me saca a patadas de su oficina.― TaeHyung rio al recordar cómo su cuñado de baja estatura, maldecía de mil maneras al director.

— ¿Ese bastardo se atrevió a tocarte? ― YoonGi frunció el ceño y había notable molestia en su voz.

— Bueno no. Pero si me dijo que no volviera a amenazarlo... que si volvía a "amenazarle" él se encargaría de sacar a Jimin de la escuela.

— Que hijo de puta ― YoonGi dijo.

— En fin... ¿Te gustan los niños?

— Si, bueno... La verdad se me hace muy tiernos, pero no mantengo contacto con niños. Solo tengo una hermana, es la mayor, pero no tiene hijos.

— Entiendo ― TaeHyung sonrió.

Ambos empezaron a charlar, hasta que se hizo muy tarde y TaeHyung le pido amablemente a YoonGi que lo llevará a su casa. La verdad YoonGi disfruto mucho de la compañía y la charla de TaeHyung. Nunca antes había tenido una charla tan profunda como cuando TaeHyung empezó hablarle de su hijo. YoonGi en secreto admiro el hecho de ver cómo los bonitos ojos de TaeHyung se iluminaban con el simple hecho decir el nombre de su hijo. Él de verdad quería ver a TaeHyung de nuevo. YoonGi insistiría de poco a poco para que TaeHyung comenzará a caer ante él. Ante sus encantos.

O quien sabe si sería al revés.