Nueve

TaeHyung había despertado mucho antes de la hora que comúnmente él despierta. Quería por lo menos desayunar con su pequeño hijo. Lamentaba mucho el hecho de no poder dejarlo en el preescolar, al menos prepararle el desayuno y desayunar con él.

Era algo, ¿No es así?

Una vez listo el desayuno, se dirigió a la habitación de su hijo, el cual se encontraba hecho bolita entre sus sábanas de Pororo. Buscó su uniforme escolar y procedió a plancharlo para luego dejarlo a un lado de la cama de Jimin.

— Jimin ― le habló bajito ― bebé despierta...― TaeHyung observó como su pequeño abría de poco a poco sus ojitos, TaeHyung le sonrió dejando un pequeño beso en su frente. ― Buenos días, bebé.

— Buenos días, papi ― TaeHyung sonrió al escuchar la tierna, dulce y algo ronca vocecita mañanera de Jimin.

— Vamos, bebé, te preparé el desayuno.

— ¿Desayunaras conmigo, papi? ― los ojitos de Jimin brillaron, TaeHyung sonrió asintiendo.

— Si bebé, anda vamos, que el tío SeokJin no tarda en llegar también.

TaeHyung tomo la manita de su pequeño y así ambos se dirigieron a la cocina para ir asentarse al comedor.

— ¿Te divertiste en la pijamada con tus tíos? ― Preguntó TaeHyung, entregándole un vasito con leche chocolatada.

— ¡Si! Fue muy divertido, papi. Mis tíos aceptaron ver Pororo conmigo.

— ¿Sí? Me alegra mucho, bebé.― el timbre de la puerta de la casa sonó.― debe ser tu tío SeokJin.― TaeHyung se dirigió a la puerta y si como lo dijo era SeokJin. Se saludaron y así ambos se dirigieron a la cocina.

— ¡Tío Jinie! ¡Buenos días!

— Buenos días, osito.― saludó SeokJin con una linda sonrisa.

— Ya terminé mi desayuno, papi. ― anunció el pequeño.

— Bien cariño, anda y ve alabarte los dientes, si necesitas ayuda me hablas.

— Sí, papi.― el niño bajó de su silla y salió corriendo hacia el baño.

— ¡Bebé, no corras! ― escuchó un "Está bien, papi" y sonrió.

— A provechando que JiMinie se fue, anda dime ¿Qué tal la pasaste?

— Pues verás ¿Bien? Mi jefe estuvo en el mismo lugar... En un principio nuestra charla fue ¿rara?... Por cierto, Jeon JungKook me las pagará ¡Me abandonó! y por el amigo escritor de mi jefe. ― SeokJin rio negando ― En fin... al final mi jefe me invitó la cena y la charla fue agradable...

— Al menos te divertiste, Hyungie.― le sonrió ― JiMinie se portó excelente. Y logró que NamJoon aceptará ver Pororo ― SeokJin rio al recordar el tierno puchero que tenía su esposo al estar viendo Pororo por petición de Jimin, NamJoon odiaba ver esa caricatura animada, pero con un tierno puchero y unos cuantos pestañeos por parte de Jimin, NamJoon termino aceptando.

— Eso me comentó ― Sonrió ―, además mi pequeño siempre se porta bien.

∘◦❁◦∘

TaeHyung se encontraba ya en la entrada del enorme y lujoso edificio donde él trabajaba, tomo un respiro y se adentró, dio unos cuantos pasos más cuando alguien chocó con el tirándole café en cima (que por suerte estaba frío), YoonGi y Kihyun también iban entrando detrás de él.

— ¡Dios mío! Y-yo ¡Lo siento mucho! ― dijo un chico de baja estatura, el otro rubio no paraba de dar reverencias y mirándole como un cachorrito asustado―. ¡Le pagaré la tintorería!

— Oye, tranquilo ― le sonrió amable ― no te preocupes, de todos modos, está era una de mis camisas viejas ― dijo bromeando para tranquilizar al chico.

— De verdad, lo siento mucho... ― le dijo apenado, TaeHyung sonrió enternecido, el chico por alguna extraña razón le recordaba a su hijo.

— Ya, no te preocupes. ― Nadie había notado el ceño fruncido de YoonGi ― ¿Cómo te llamas?

— JiHoon... Park JiHoon.― el chico le sonrió tímido.

— ¿¡Eres el nuevo escritor!? ― TaeHyung le restó importancia a su camisa manchada de café.― De verdad quedé encantado con lo que enviaste. ¿Cuántos años tienes?

— Veinte... ― le sonrió.

— Oh... Yo tengo veintitrés. De verdad eres más joven que yo y escribes maravilloso ― le alabó.

— ¡Muchas gracias! ― el chico se sonrojó.

— Awww, ¡eres muy tierno! ― TaeHyung chilló y abrazo al chico, quien tímido correspondió al abrazo.― me recuerdas mucho a mi hijo.

— ¿Tiene un hijo, Hyung? ― TaeHyung solo asintió y se separó del abrazo.

— Si, veras...

— TaeHyung ― YoonGi habló ya harto de ver cómo TaeHyung se comportaba meloso con el niño ese ― Toma. ― todos los presentes se miraron asombrados por la escena que estaban mirando con sus propios ojos, YoonGi se había quitado su saco para dárselo a TaeHyung.

— Gracias... ― TaeHyung lo acepto sonrojado, YoonGi hizo un ademán restándole importancia y miró al otro rubio.

— Tú ¿Eres el nuevo? ― este asintió intimidado ― acompáñame.

TaeHyung le deseo suerte a JiHoon y este le agradeció.

∘◦❁◦∘

TaeHyung se encontraba afuera de la oficina de su jefe esperando que terminara su entrevista con JiHoon.

Kim observo como la puerta de la oficina se abría y de ahí salía JiHoon, quien al verlo le sonrió enormemente.

— ¡Hyung! ― sus ojos se achinaron al sonreír.

— Hoonie ¿Cómo te fue?

— ¡Muy bien, Hyung!, Ya me asignó una oficina y dijo que muy pronto me enviaría un editor.

 — Me alegro mucho por ti. ― TaeHyung le sonrió.

— Gracias, Hyung. ― JiHoon desprendía un aura de inocencia y amabilidad, en cuanto lo vio algo le dijo que tenía que cuidar de él.

— Bien, ya mero es hora del almuerzo, te veo en la cafetería ― el menor asintió frenéticamente―. Bien nos vemos ― TaeHyung se despidió de él y entro a la oficina de su jefe.― Buenos días señor, Min.

— Ahora solo soy el señor Min, ¿dónde quedo el "Min"? ¿O simplemente el "YoonGi"?

— Bueno, ayer no estaba en horas laborales. ― Sonrió ― ¿Necesita algo, señor Min?

— No, solo toma asiento, necesito hablarte de algo.― dijo YoonGi colocando una silla al lado de él.― En una semana necesito ir a la casa de mis padres y tú vas acompañarme.

— ¿Qué? ¿Yo? ¿Por qué?

— Eres mi asistente, tu trabajo es asistirme— sonrió de lado—. Si necesito algo tu debes estar para mí— TaeHyung rodó los ojos y exhaló.

— Entiendo... ¿Por cuánto tiempo nos iremos? Como ya sabe tengo un hijo.

— Serán solo dos o tres días, además no saldremos del país, iremos a Seul.

— Está bien. Gracias por avisarme con tiempo, creo que mi cuñado podrá cuidar a mi hijo.

— De acuerdo. ¿Cómo pasaste la noche? ¿hubo resaca?

— No, realmente no bebí demás. Sólo que nuestra plática fue sumamente rara...

— ¿Rara? ― YoonGi posó su mano como pudo en la delgada cintura de TaeHyung.

— YoonGi, ¿Qué diablos haces? ― dijo TaeHyung con el ceño fruncido, viendo como YoonGi se acercaba lentamente a él. Los dos estaban demasiado cerca y TaeHyung podía sentir la respiración de YoonGi. TaeHyung relamió sus labios observando como YoonGi se acercaba y posaba su mano desocupada a su nuca, TaeHyung se estremeció al sentir el roce de sus labios con los de YoonGi.

¿Realmente se iba a besar con su jefe?

— No sabes lo mucho que deseé besarte...― susurro sobre sus labios, TaeHyung cerró sus ojos rendidos esperando ser besado ¿Para qué negarlo? El sí quería ser besado por su jefe―. Y no niegues que no quieres esto... ― YoonGi rozó sus labios de nuevo ― anda TaeHyung acepta una noche conmigo, nos vamos a divertir mucho...

TaeHyung se separó un poco y frunció el ceño nuevamente y quitó bruscamente la mano YoonGi la cual anteriormente se encontraba en su cintura.

— Entonces, yo solo soy un polvo más— TaeHyung bufó y se alejó completamente de YoonGi ―. Yo no seré una de tus putas YoonGi. No aceptaré tu estúpida idea de un solo polvo. Eso no va conmigo, las personas se conocen, se gustan, se aman y terminan en una relación. No en un simple acostón.

— Yo no... Yo nunca tuve que rogarle a nadie para un simple polvo siempre he tenido a quien yo quiera sin esfuerzo alguno. No sé lo que es pasar por un estúpido proceso para tener sexo con alguien...

— Si quieres algo conmigo no conseguirás nada así.

— Entonces ¿Qué debo hacer, TaeHyung? ― preguntó ― ¿No te gusto? Dime TaeHyung ¿Qué tengo que hacer?

— YoonGi... Tú solo buscas un polvo conmigo, solo eso. para que después olvides todo y hacer como que no paso nada... Pero yo no, no quiero un simple polvo. Yo no soy así. Yo no estoy buscando lo que tú buscas, YoonGi.

— ¿Qué es lo que buscas, TaeHyung?

— Yo... Quiero a alguien que me ame, quiero a alguien que esté dispuesto a escucharme y respetarme. YoonGi yo no estoy para estas cosas de tener sexo sin compromiso. tengo un hijo y ese no es un ejemplo que quisiera darle a mi pequeño. Yo busco un compañero de vida, no busco a alguien que sólo dure una noche y luego me olvide— TaeHyung agacho su mirada —Y tú, YoonGi, eres exactamente lo que no quiero, eres lo contrario a lo que yo estoy buscando. Tal vez yo te tome en serio cuando estes dispuesto a cumplir lo que yo quiero. Por el momento no estoy dispuesto a tener un solo polvo contigo.

Luego de eso TaeHyung se dio media vuelta para salir de la oficina con el corazón acelerado y con un nudo en la garganta. Se siente un completo idiota ¡Estuvo a punto de aceptar un beso de su jefe! Pero claro el solo era un simple polvo y definitivamente no iba aceptar eso. El merecía mucho.

Aún con los nervios a flor de piel se dirigió a la cafetería, tal vez Jihyo y ese tierno chico, JiHoon logren distraerlo.

YoonGi se sentó en su silla bruscamente y bufando, odiaba rogarle a alguien, pero algo le decía que TaeHyung valía la pena. TaeHyung era muy complicado, le parecía alguien inalcanzable.

Sabía que si continuaba podría lastimar a TaeHyung, no quería que TaeHyung se enamorara de él. Él jamás podría enamorase de TaeHyung, ¿O sí? No se enamoraría.

No de nuevo.

TaeHyung lo había dejado con miles de dudas en su cabeza ¿Realmente él no se ajustaba a lo que el buscaba? Realmente no sabía por qué aquellas palabras le habían dolido. ¿Cómo haría para volverse lo que TaeHyung buscaba?

No lo sabía, pero definitivamente lo conseguiría.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top