Solo una pequeña aclaratoria:
Este capítulo tendrá contenido +18
Leelo bajo tu propio riesgo
Igual, no es tan explícito
Pero en fin.

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El silencio en la oficina se prolongó más de lo que J hubiera deseado, sentía la mirada de Tessa sobre ella y J solo miraba un punto fijo en el suelo.

-¿Entonces?—Cuestionó Tessa con ligera severidad.

-Yo... No se que decirte hermana—Respondió J sin siquiera mirarla—Pero no se por qué te molesta tanto.

-¿Por qué? J ¿Todavía lo preguntas?

-Bueno, yo no sé porqué tendría que darte una explicación, ni siquiera aceptaste mi disculpa—Habló mientras se agachaba a recoger la camisa amarilla.

-¡J me mentiste!—Gritó aún más molesta por la indiferencia de su hermana menor.

-¿Y que si lo hice?, no es como si fuera la primera vez que lo hago, esto no es gran cosa—Continuó, abotonandose cada botón uno a uno.

-¡J! ¡¿Que acaso no ves lo que te ha hecho?! ¡Casi mueres dos veces por ella J! ¡Dos malditas veces! ¡Y yo...—Su voz comenzó a quebrarse, está vez J la miró, podía verlo, Tessa estaba asustada y con razón, ella estuvo a su lado mientras J pasaba por los peores momentos de su vida, al pensar en ello su expresión se suavizó un poco y se acercó a ella.

-Tessa, se que no quieres que pase por lo mismo otra vez pero soy una adulta y V, ella no tuvo la culpa, yo solo no quería aceptar que ella no sentía nada por mí, en ese entonces, si no crees que estoy madurando piensa en aquella vez, en la boda—Explicó con un tono de voz más suave y colocando la mano en el hombro de su hermana.

-P..Pero es la esposa de tú hermano y, y lo de la boda solo fue un tropiezo

-Te aseguro Tessa que la boda fue más que un tropiezo, además, V se va a divorciar, el inútil de Nicolás se acostó con su cuñada.

Tessa la miró con los ojos abiertos por la impresión ante las últimas palabras de J.

-Eso... N..No lo sabía, p.. pero J...

-No Tessa, ya es suficiente, se que estás preocupada por mi pero puedo manejarlo.

-Ouh lo lamento mucho J, yo no quise gritarte yo... E..El embarazo me pone de los nervios—Admitió un poco más calmada y le dedico una sonrisa a su hermana, hasta que notó la mano de J en su hombro y la apartó bruscamente.

-¡Que te..!

-No me toques hasta que te laves las manos, no se que parte de V tocaste con ellas—Espetó con molestia fingida y J se sonrojo al recordar el pequeño encuentro que tuvo con V.

-Yo no toque nada, no pude porque nos interrumpiste—Habló irritada cruzandose de brazos.

-Si, lo siento por eso, en fin, voy a suspenderte por un par de meses, rompiste un par de reglas aquí—Explicó, señalando el escritorio desordenado—Y definitivamente romper reglas no es algo de ti ¿Que te sucede?

-No lo sé, igual no se que decirte.

-Como sea, para la próxima has tus sucierias en casa, no aquí.

-Claro, no prometo nada.

-Bien, ordena la oficina y vete a casa.

J asintió y así como Tessa se lo pidió ordenó la oficina, se ató la corbata, tomó su abrigo y salió del lugar, cuando se cerró la puerta Tessa se apoyo en el escritorio y suspiro.

-Uf que complicada es la gente enamorada.

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Las horas pasaron hasta llegar el anochecer y J aún no llega, V caminaba de un lado a otro frente a la puerta del departamento, ni siquiera tenía llaves para entrar, su cabeza daba vueltas llenándose de preguntas que comenzaban a abrumarla.

"¿Que se supone que deba hacer ahora?"

"¿J estará enojada conmigo después de ésto?"

"¿J se irá otra vez?"

"¿Me va a dejar sola?"

V se detuvo ante esa última pregunta, con solo pensarlo es aterrador, no quiere estar sola de nuevo, trata de convencerse a si misma de que J no se va a ir pero aún recuerda la culpa que sintió al ver a J a merced de su hermana ¿Que clase de hermana somete a sus hermanos menores de esa manera?, es triste pero en el fondo de verdad espera que J tenga voz propia.

-V...—La voz de la mujer llamó su atención dandose la vuelta inmediatamente, allí estaba J, la dueña de sus pensamientos, con un enorme ramo de girasoles y unas cuantas rosas rojas, en su mirada no había nada más que amor, amor por, quien al verla no pudo evitar avanzar y abrazarla.

-J, lo siento mucho, esto... Esto fue mi culpa—Murmuró en su pecho, J solo la miró y apoyo su cabeza sobre la de V, acercandola por la espalda con su mano libre.

-No V, no fue tu culpa—Hablo J, acariciando la espalda de la chica—Solo nos amamos y ya.

-Pero Tessa...

-Tessa ya no va a entrometerse entré nosotras, ella solo está siendo dramática, está embarazada y eso la pone hormonal.

-Ouh bueno—Dijo V tomando el ramo de flores.

-Bien mejor entremos, ya no tengo que ir a trabajar hoy.

-Que ¿Por qué?

-Bueno, me despidieron—Confesó cerrando la puerta tras ella.

-¡¿Que?!

-Si, no fue un despido como tal, simplemente me suspendieron.

-Ugh Tienes algunos problemas para explicar las cosas, en fin, buscaré un jarrón con agua para las flores—Dijo V, caminando a la cocina y J la seguía con la mirada.

-Esta bien yo iré a la habitación.

Después de unos cuantos minutos V dejo el jarrón con flores en la sala principal y subió a la habitación, J estaba parada a un lado de la cama mientras observaba su teléfono, aparentemente leyendo un mensaje, cuando escuchó los pasos de V dejo rápidamente dicho aparato en la mesita de noche, al verla V le sonrió y ella le devolvió la sonrisa.

V comenzó a acercarse, J trago saliva, la imagen de V semidesnuda aún yacía en su cabeza y de verdad deseaba sentir más de lo que vivió esa mañana, probablemente V quiera continuar y de hecho, así era, V la abrazo nuevamente pero está vez sello la distancia entre ella con un beso, un beso que duró unos minutos, J empuja la lengua de V mientras acaricia su espalda, pasando por sus caderas y detenerse en su trasero, V rompió el jadeando en su hombro y J la apretó suavemente mientras escuchaba su respiración agitada.

Ambas volvieron a besarse y empezaron a moverse hacia la cama hasta que las dos cayeron sobre ella, V no se quejó al respecto así que J asumió que si quería continuar con lo de esa mañana, la mujer comenzó a besar su cuello, mordida y lamía como un animal hambriento, V jadeó más rápido e intentaba torpemente reprimir cualquier sonido vergonzoso.

Esto es algo que J había estado deseando desde hace mucho tiempo, se prometió a si misma que no se contendría al respecto así que, tomó el cuello de la camisa blanca de la chica y tiró, arrancado los botones exponiendo su piel, V se lo reprochó pero J le prometió comprarle otra igual.

La mujer siguió con lo suyo y fue más intenso, al deshacerse del brasier de V, cuando bajo un poco la falda negra de su novia la braga también lo hizo, la bajo lo suficiente para exponer su vientre pero no tanto para dejar ver su intimidad.

J la miró, V respira rápido y su rostro está rojo, con los ojos entre cerrados observa a la mujer que se mete entre sus piernas, J se acercó a su vientre y le plantó un beso experimental, la chica se estremeció ante la sensación, apretando ligeramente las sábanas, J beso nuevamente, pero está vez, succionó la piel dejando una marca y V apretó las sábanas con más fuerza.

Jane se apartó, otra vez tomó la falda y la jaló fuera de sus piernas  arrojandola al suelo, V finalmente estaba desnuda por completo ante ella y solo para ella.

-Finalmente, eres perfecta—Susurró acercándose a su rostro—Esto es mucho mejor de lo que soñé alguna vez.

J volvió a besarla, suavemente, con amor, como tanto había querido, desde la secundaria y se alejo comenzó a quitarse su propia ropa.

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La noche no parece avanzar, para ellas no hay nada más allá de aquella habitación, V gime y suspira mientras los dedos de J reclaman su interior de forma tan salvaje y descuidada, al principio fue uno, luego otro y ahora son tres, entrando y saliendo sin piedad, J mordía su cuello y besa su boca, ni siquiera dandole le oportunidad de intentar ponérselo difícil ya que, sujetaba sus manos con la suya propia, por encima de su cabeza.

V está a punto de venirse, J lo nota al sentir como la chica se aprieta alrededor de sus dedos así que detiene las embestidas, V la mirada a los ojos confundida y J le sonríe.

J comienza a bajar dejando besos en su trayecto, hasta finalmente parar entre las piernas de la chica, V no deja de mirar y J da una primera lamida, V tiembla ante la sensación, a J se le escapa una pequeña risa por la reacción y continúo con lo suyo, sujetando sus muslos con fuerza marcandolos en el proceso mientras su lengua toca cada vez más profundo, V comienza a gritar, incapaz de controlar su cuerpo cediendo al placer.

-¡J..!~

Gritó la chica al sentir que de nuevo se acercaba y J lo sabe, comenzó a hacerlo más rápido, V apretó la cabeza de J con sus piernas evitando que se fuera, de todos modos, J no iba a hacerlo, después de unos cuantos segundos V finalmente se libero.

J se apartó observando a su novia orgullosa de su trabajo mientras limpiaba los fluidos que llegaron a resbalar por su barbilla, V comenzó a tranquilizarse, relajando su respiración, sus ojos brillan a través de las lágrimas que derramó por el placer abrumador, J se acercó a su rostro y acaricio su mejilla suavemente mientras V movía su cabeza hacia las caricias de J, quien final le dió un tierno beso.

V comenzó a dormir poco a poco, J al notarlo se levantó con cuidado de la cama y camino hasta un armario cercano, sacó una manta y cubrió a V con ella, acto seguido, se acercó nuevamente a la cama y se acostó al lado de la chica abrazandola por la espalda al estilo cucharita.

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V dormía plácidamente, su respiración era lenta indicándole a J su estado de absoluta relajación pero J no estaba del todo igual debido a que ella recibió un mensaje de alguien que definitivamente elegirá complicar las cosas, solo espera que V confíe en ella.

Después de todo ¿Por qué no lo haría?