-¡¿Que?!—Grito la chica, levantandose del asiento y llamando la atención de las personas en el bar.

-Cálmate, déjame explicarte—Dijo con mucha tranquilidad, una tranquilidad que le irrita a V—No nos casaremos por amor, solo es un pequeño negocio, uno que nos beneficiará a ambas.

V frunció el seño dando a entender su molestia pero se intereso más por la situación y tomó asiento nuevamente.

-Mi abuelo falleció hace unas semanas, en su testamento indica que todas sus nietas debe estar casadas y eso me incluye a mi, así que, si nos casamos yo recibo mi parte de la herencia, nos divorciamos y tú haces tu carrera de modelo con mi ayuda, más una compensación capital de mi parte—Explicó finalmente dandole otro sorbo al whisky.

-Entonces... ¿Es solo eso? ¿Solo tenemos que fingir?.

-Ajam.

-Pero, yo no me he separado de N ¿Eso no sería infidelidad?.

-Lo que es igual no es pecado, querida—Espetó mirándola por el rabillo del ojo.

-Supongo.

-Mira V, no tienes que hacer esto si no quieres, yo pago los tragos y fingimos que no tuvimos está conversación—Hablo J reclinandose sobre el espaldar de la silla.

V comenzó a meditar un poco sobre la propuesta, por un lado era tentador pero por el otro, era una completa locura ¿Que le dirá a los demás?, ella simplemente desapareció, sería muy extraño que de repente aparezca casada con alguien más, y suponiendo que nadie sabe lo de N y su hermana a V la tacharan de perra interesada pero ¿Realmente lo tenían que saber?, bueno es hora de pasar la página y arriesgarse un poco.

-Esta bien, acepto tu propuesta, pero no vuelvas a hacer preguntas tan precipitadas, me asusta.

-De acuerdo.

J pago las bebidas y llevo a V a su casa, la acompaño hasta la entrada del edificio y J habló.

-Mañana voy a venir, tenemos que fijar las condiciones de nuestro matrimonio.

-¿Condiciones?—Preguntó V, ladeando un poco la cabeza.

-Si bueno ¿No crees que es lo mejor para que esto funcione?, así nuestro matrimonio será contractual y no tendremos problemas al terminar.

-Tal vez.

-Bien, ya que una parte está clara, mejor voy a casa, necesito descansar—J se despidió y camino hasta su auto, miró brevemente a V que entró al edificio, suspiro y finalmente se subió al auto.

————

V estaba tan perdida en lo que ocurrió hoy que olvidó lo que Lizzy le había dicho, aunque ahora tenía algo más interesante que contarle.

Subió a su departamento, dejo su bolso a un lado y se tiró en la cama, ni siquiera se molestó en cambiarse de ropa, estaba agotada y estas semanas que vendrían serán bastante confusas.

Estaba a punto de quedarse dormida cuando su teléfono comenzó a sonar, lo tomó y acomodó sus anteojos para ver mejor, para su desgracia era N, su rostro refleja fastidio, ahora se pregunta por qué no lo había bloqueado, tal vez malicia o simplemente lo olvido.

-¿Hola?—Contestó la llamada dandose una bofetada mental recordándose nunca volverlo a hacer.

-Por el amor de Dios, al fin contestas ¿Dónde estás?.

-De viaje—Respondió a secas.

-¿Y por qué no me avisaste?, todos estamos preocupados por ti.

-Ah ¿Si?, no me digas.

-Si ¿Cuando planeas regresar?, necesito que hablemos.

-No lo sé.

-¿Por qué contestas así? ¿Estás molesta? ¿Es por eso que te fuiste?.

-Tal vez ¿Acaso te importa?.

-Si me importa, eres mi esposa, no seas infantil.

V estaba empezando a enojarse pero se calmo rápidamente, no dejará que algo así la afecte mucho, ella amaba a N pero después de esa noche lo encuentra desagradable y con esa conversación solo le demuestra lo sínico que puede ser, ella no lo conocía así y eso le duele un poco, al final era un matrimonio arreglado y era de esperarse que terminara así.

-V no tengo tiempo para ésto, dime dónde estás e iré a bus...—V colgó la llamada y lanzo su teléfono a un lado, no sin antes bloquear a N.

Está cansada y no quiere lidiar con eso ahora y espera que cuando lo llame sea para firmar el divorcio.

—————

A la mañana siguiente J llegó al edificio muy temprano, entro y encontró a Doll quien se levantó rápidamente de su sitio al ver a la mujer.

-Doll.

-¡¿Señorita Elliot?! Eh ¿Qué la trae por aquí tan temprano?—Comenzó a preguntar con nerviosismo, no significa que le tuviera miedo a J pero ella es dueña de una buena parte de su negocio y cualquier razón por la que ella estuviera allí era preocupante.

-Tranquilizate, no estoy aquí por tu alma, solo vine a ver a alguien—Afirmó con una sonrisa tranquila, la postura de Doll se calmó y asintió aún un poco nerviosa.

-Claro ¿A quien buscabas?.

-Busco a Violet Doorman, me dijeron que vive aquí.

-Oh entiendo, Violet, vive en el cuarto piso, apartamento 048—Indicó a la mujer, quien le agradeció y subió hasta el departamento.

Tocó la puerta y escuchó "¡Voy!", V abrió la puerta encontrándose con la mirada de J, quien la miró de arriba abajo, notando que no trae pantalones, se sonrojo y apartó la mirada rápidamente.

-... V, no traes pantalones—Señaló sin siquiera mirarla.

V bajo la vista y se sonrojo, cerró rápidamente la puerta, J lo encontró de alguna forma adorable, V abrió nuevamente la puerta con unos pantalones deportivos puestos.

-Puedes pasar je.

J asintió y entro al departamento, inspeccionó el lugar notando lo deteriorado de algunos sitios como las paredes, esto es algo de lo que deba hablar con Doll.

-Bueno, bienvenida.

-...

-...

-Bueno, mejor empezemos ya—Habló J tratando de ignorar la nueva incomodidad creciente entre ellas.

-De acuerdo.

Ambas se sentaron en el suelo, una frente a otra, separadas por una mesita de té, J saco dos hojas de papel y dos lápices.

-Muy bien, haremos lo siguiente, vamos a escribir tres condiciones cada una y de las seis elegiremos tres que nos funcione a ambas.

-De acuerdo.

V comenzo a escribir, al igual que J quien terminó más rápido, mientras V escribía J la miraba detenidamente, pensaba, pensaba profundamente en todo lo que pasó entre ellas, tal vez si hubiera dicho lo que sentía desde un principio sería diferente, o tal vez no pero al menos sabría lo que V sienta y no habría sido tan doloroso, para ninguna, solo fue infantil y está muy arrepentida, espera que V lo vea y que puedan ser amigas nuevamente aunque solo sea eso, estará en paz.

-¡Listo!—La voz de V saco a J de su reflexión.

-Oh ¿De verdad?, bueno leamos en voz alta y votamos.

Después de leer las seis condiciones, estuvieron un buen rato decidiendo cual se quedaría y cuál no, al final fueron:

"1- No fumar en casa"

Al principio era no fumar pero ambas discutieron un poco al respecto ya que J simplemente no podía dejar de fumar y V no tolera el olor a cigarro, al llegar a un acuerdo J prometió no fumar cerca de ella o cuando ambas estuvieran en casa.

"2- Habla de cualquier cosa que afecte a cada una"

La honestidad es primordial en un matrimonio y hablar sobre las inquietudes de cada una les ayudará a llegar a un acuerdo justo.

"3- No interponerse en la vida sentimental de la otra"

La última pero no menos importante, está condición hizo un poco de ruido en la cabeza de J pero si V decide tener una relación no puede interponerse, de todos modos y para su mala suerte, mientras conversaban al respecto V le dejo en claro que no le atraen las mujeres como a ella y que esto lo hace porque quiere ayudarla, nada más.

Le dolía, pero no puede hacer nada, debe respetar lo que ella siente, no está molesta solo un poco decepcionada pero al menos podrá pasar tiempo con ella aunque nunca corresponda a sus sentimientos.

Bueno, las emociones cambian constantemente pero no debe aferrarse a un futuro incierto solo el tiempo lo dirá.