Había pasado exactamente una semana desde que comencé a trabajar en esta rara casa, con ese raro chico y su rara hija, todos me ponían los pelos de punta. Aunque bueno, me he ganado un poco a Mina y espero seguir así, aun me da un tanto de miedo pero trato de que no se note frente a ella, en cuando a SeokJin siempre es lo mismo, se va a trabajar todas las mañanas, regresa en el almuerzo y se va de nuevo para regresar en la noche, desde aquel encuentro super vergonzoso para mi no he echo o dicho nada estúpido, aprendí que hacerlo me cuesta mi dignidad en esas paredes.

-¿No has hablado con él?--preguntó Taylor a mi lado

-No--dije--y no quiero

-Pensé que lo vería en alguna fiesta por ahí pero tampoco lo he visto--dijo y metió la paleta que había comprado a su boca

-Tal vez este drogado en alguna parte--dije

-A lo mejor, Dong siempre ha sido así--dijo

-¿Piensas acompañarme hasta la entrada?--pregunté riendo

-Si--dijo--quiero ver que tal viven los ricos

-Como ricos--dije y ella colocó sus ojos en blanco

-Por lo que me has contado, siento que tu jefecito te tiene ganas--dijo riendo

-No hables basura--dije--solo es un arrogante que le gusta molestarme

-Shhh te podría escuchar de nuevo--dijo Taylor

-Aún me debes eso estúpida--dije y le pegué

Taylor me acompañaba hacía la casa de Jin, habíamos tomado un bus y caminábamos hasta llegar a la casa pues los buses no llegan hasta acá. Ella había comenzado a trabajar en un restaurante cercano así que nos servía la caminata a ambas.

-Vaya--dijo una vez llegamos--podría ser mi sugar daddy si quiere

-Largo de aquí--dije riendo

-Nos vemos--dijo y palmeo mi hombro--diviértete

Entré a la casa y subí las escaleras hacía el cuarto de Mina, abrí levemente la puerta y la observé con sus auriculares mientras miraba al computador, coloco el dedo indice sobre sus labios indicándome que haga silencio, estaba en la escuela así que asentí. Decidí dejarla tranquila, iba retrocediendo y cerré la puerta levemente, me iba a girar pero choqué con el pecho de alguien.

-¿No sabes lo que es el espacio personal?--preguntó bastante cerca de mi

-¿Que haces aquí?!--pregunté alterada y me separé lo más rápido de él

-Pensé que era mi casa--dijo mientras escondía sus manos en sus bolsillos

-Si bueno..--dije--olvídalo

-¿Quien era la chica con la que llegaste?--preguntó y lo miré sorprendida

-¿Es parte del contrato espiar?--pregunté cruzándome de brazos

-Estaba en mi propiedad, tengo derecho a preguntar--dijo--así que ¿quien es?

-Es mi mejor amiga--dije rendida

-Interesante--dijo--me voy, y mira bien por dónde caminas--dijo pasando a mi lado y rozó su hombro con el mío

Durante esta semana ademas de centrar mis ojos en la niña que es mi prioridad, no puedo dejar de pensar en la actitud de Jin, es tan raro y misterioso, ademas porqué no se puede hablar de la madre de Mina, o porqué el único retrato que hay esta en el sótano, todo es tan confuso y me mata por dentro la curiosidad.

Horas después de que Mina acabara su sesión de la escuela, nos encontrábamos haciendo origami, primera vez en la vida que hacía esto.

-¿Qué tal?--pregunté enseñándole lo que había echo

-Te dije un conejo--dijo mirando mi origami--eso parece una rata

-No soy buena en esto--dije riendo

-Me doy cuenta--dijo--me agrada

-¿Qué? ¿te agrada que no sea buena en el origami?--pregunté y ella asintió

-¿Por qué?--pregunté

-Porque me dejas enseñarte--dijo y la miré confundida--las anteriores niñeras eran muy preparadas, sabían todo y me aburría--dijo--ahora es cuando me pregunto ¿por qué mi padre te escogió?

-Créeme que me lo pregunto también--dije

-Arriba--dije levantándome del suelo--vamos a la piscina--dije

-Podré ahogarte!!--dijo y corrió a buscar algo en su armario

-O no...--susurré para mi misma

Hoy me había colocado mi traje de baño debajo de la ropa, pasar un tiempo con Mina en la piscina sería bueno a menos de que me ahogue y me mate pero no hay que pensar en eso por ahora. El agua estaba agradable, mientras pasaba mi tiempo de niñera también disfrutaba de mis propias vacaciones, uno de los chefs nos había traído algo que comer.

-Gracias--dije una vez salí de la piscina y el se retiro sonriente

-¿Quieres?--pregunté a Mina quien estaba en el agua y ella asintió

Tome un bocadillo y me acerqué a ella para dárselo en la boca, la niña me lo recibió y noté que su mirada había cambiado de repente, parecía tener sus ojos un poco llorosos. Salio de la piscina y se sentó a mi lado. La vi levantarse un segundo para tomar un bocadillo y pude notar en su pierna una marca, parecía de un cinturón.

-Mina ¿que te sucedió ahí?--pregunté preocupada

-Nada nada--dijo ella rápidamente y se volvió a sentar

-¿Fue...tu papá?--pregunté levemente y ella negó

-Mi padre no me presta la atención suficiente para hacer algo como esto--dijo

-¿Entonces quien...--me interrumpió

-No importa quien sea--dijo--prométeme que no le dirás a mi papá

-Mina yo no--volvió a interrumpirme

-Por favor--dijo--prometelo

Observé ahora su mirada, no expresaba odio ni amargura, solo expresaba ojos de suplica. Me sentía fatal, era solo una niña.

-Lo prometo--dije

(...)

Mina se había quedado dormida antes de las ocho, de seguro jugar tanto en la piscina la dejó sin energías. Aún no podía dejar de pensar en su marca de la pierna, cómo alguien puede ser tan despiadado para pegarle a una niña de esa forma. Me encontraba en la cocina picando alguna fruta por si Mina despertaba y tenía hambre, todos se habían ido y no planeaba dejarla sola. De repente escuché la puerta principal cerrarse y unos pasos se dirigieron hacia la cocina, observé la silueta de Jin aparecer por la puerta y mirarme algo confuso.

-¿Que no deberías haberte ido ya?--preguntó y se acercó a la nevera

-Bueno, todos se fueron y no podía dejar a Mina sola--dije

-Cierto--comentó y se hizo a mi lado

Yo seguía cortando alguna fruta hasta que me vino de nuevo esa imagen, sin querer no me fije bien y corte levemente mi dedo.

-Agh--dije mientras presionaba un poco

Jin me observó y buscó algo dentro de los cajones a su lado.

-Dame--dijo y tomó mi mano

-Auch--dije quejándome

Veía como Jin curaba mi dedo con tanta agilidad, como si ya le hubiera pasado esto mil y una vez.

-Gracias--dije levemente y aparte mi mano de la suya

-Te vi con Mina en la piscina--dijo--parecía que se estaba divirtiendo y por cierto...lindo cuerpo--dijo y sentí la sangre subir a mis mejillas

-¿Siempre eres así de directo?--pregunté

-Si--dijo

-¿No has considerado en tratar mejor a Mina?--pregunté de repente

-¿Qué?--preguntó--vive bien, come bien , tiene lujos, va a la escuela

-Eso no significa mucho--dije

-Llevas una semana aquí y ¿crees que puedes enseñarme sobre como tratar a mi propia hija?--preguntó

-Si--dije--tal vez alguien más no te lo haya dicho antes pero Mina sigue siendo una niña, quien se emociona por verte y tu le hablas de la manera más cortante posible, puedes tener una actitud arrogante con todos pero ella es tu hija--dije

-No entenderías--dijo apoyando ambas manos en el mesón

-Claramente no entiendo--dije--¿por qué esconder una foto de su madre en el sótano?

-Eso no te incumbe--dijo

-He estado pensando y si te soy sincera por tu aspecto misterioso diría que eres un loco asesino y la mataste--dije--¿su cuerpo esta en el sótano no?

-No seas ridícula--dijo

-Entonces dónde..--me interrumpió

-Su madre murió esta bien?--dijo alterado--cuando tenía 19 mi novia quedó embarazada, ella no quería el bebé, ni nuestras familias tampoco, iba a abortar sin embargo la convencí de que la tuviera--dijo--su madre siempre la odio, tanto que...semanas después de su nacimiento murió en un accidente de auto causado por ella misma

-Oh..--dije sin poder creer lo que me estaba diciendo--lo siento--dije

-Si como sea--dijo--se qué soy muy duro con Mina pero no se de que forma mirarla sin que sepa la verdad, cree que su madre murió por una enfermedad

-Ok ahora sé la razón--dije--pero Jin, Mina creció sin su madre, al menos debería tener tú amor--dije--mas que nadie se que es crecer sin un padre, mis hermanos lo saben--dije

-Creo que...me iré a dormir--dijo--ahora que sabes lo que sucedió, por favor no hables de esto con ella--dijo--si alguien debe decirle la verdad...soy yo

-Lo sé--dije

-Me voy--dijo y se fue de la cocina dejándome sola

A penas llevaba una semana aquí y ya guardo dos grandes secretos.