Cap. 9: Dos hokages
-¿Qué le pasa a ese baka de Boruto? ¿a qué se refería con "tus ojos"?
Al despertar la azabache pasó las primeras horas de su día forzándose a descifrar lo que había querido decir su compañero con "Sarada, tus ojos..."
-Mph. Seguro estaba buscando algo para fastidiarme...
No muy lejos de allí, aunque unas horas más tarde, un rubio tonto que acababa de despertar también se cuestionaba cosas del día anterior
-"Y no es el hijo del Hokage. Se llama Boruto, mph"
El ninja pudo haberlo golpeado, pero lo que más le dolió fue el orgullo.
Aunque ahí estuvo Sarada para arreglar las cosas.
La azabache había entendido todo.
Y eso desconcertaba a Boruto.
A caso ¿tanto le preocupaba a ella?
-Ahhhh teme...
...
La pelea del nuevo Trío Ino-Shika-Cho se mostraba algo intensa.
Estaban acorralando al sujeto con una serie de ataques.
Mientras tanto Moegi se encontraba en problemas. Debía lidiar con dos enemigos.
-¿quién eres tú? ¿y como es que saliste de ese agujero en la tierra?
El hombre de pelo gris hacía caso omiso a sus preguntas y mientras la miraba cuestionaba al sujeto de la túnica que lo había "liberado"
-¿quién eres? ¿quién es ella? y ¿cómo me sacaste de ahí?
-Señor. Tanto yo como mis hermanos somos seguidores de Lord Jashin y usted es el guía que nos conecta con él.
-Ya veo...
-Ella es una ninja de Konohagakure que intenta detenernos junto con un grupo de 3 mocosos.
-Me recuerda a esos tontos con los que peleamos...
-Y lo saqué con un jutsu prohibido del grupo de siervos de Lord Jashin. Sacrificando muchos animales utilizamos su sangre para...
-Silencio. Ya no me interesa...
-Sí señor. Tome esto. Le pertenece...
De su túnica, el sujeto sacó otra guadaña. Pero distinta a las que usaron el y sus hermanos para pelear.
¡esta tenía 3 hojas y era roja!
-Mhhh. Aún así, debo agradecerte por sacarme de ahí y devolverme mi arma.
-Es un placer servirle a usted y Jashin señor.
-¡Silencio! Desaparece de mi vista antes de que te ofrezca como sacrificio...
-¡Sí señor! Iré en ayuda de mi hermano restante
-No maten a los mocosos de Konoha. Quiero mi venganza. Y voy a empezar matando a esta chica...
Mientras la joven sensei se estaba alarmando.
¿venganza? ¿a caso ya había luchado antes contra alguien de Konoha?
-¿¡quién eres y a qué te refieres con venganza!?
-Mi nombre es Hidan. Y enseguida te demostraré a qué me refiero...
...
-Ahhhh. Esa misión fue fácil ¿verdad chicos?
-¡Pues, claro que fue fácil! Eran bajar cajas de un camión...
Boruto expresaba siempre su disconformidad con respecto a las misiones de rango D.
-Ya baka. Cuando seamos chunnin podremos hacer misiones de rango C y quizá B.
-Sarada tiene razón Boruto. Ya vendrán misiones más entretenidas.
-Si ustedes dicen...
...
Inojin, Shikadai y Chocho se enfrentaban a una verdadera misión de rango B o incluso A.
La pelea se emparejó luego de que se sumara a la lucha el hombre de la túnica que había liberado a Hidan.
-¡Shikadai!-gritaba Inojin- ¿a caso la sensei fue vencida?
-No lo sé ¡Sólo pon tú atención en la batalla!
Los sujetos atacaban a los gennin a diestra y siniestra, pudiendo éstos, a penas esquivar los ataques y recomponerse.
-Shikadai, piensa algo por favor- Chocho comenzaba a cansarse...
-Lo sé, lo sé. Denme algo de tiempo
Mientras la sensei se entrelazaba en un choque de armas contra el ex-Akatsuki.
-Dime niña ¿cuánto tiempo estuve ahí?
-¿a qué te refieres? ¿cómo voy a saberlo?- mientras esquivaba milimétricamente los ataques de ninja renegado.
-¿Akatsuki cumplió su objetivo de capturar a los bijuu o se desplomó?
Al oír ese nombre, cada músculo de Moegi se tensó.
Esto pasaba de ser una misión de rango C a una de rango A o incluso S.
Estaba luchando contra un ex-Akatsuki.
Quienes asesinaron a Gaara, Asuma, casi todos los Jinchurikis e incluso al legendario Sannin Jiraiya.
Era una batalla de vida o muerte.
Pero no por ella. También por sus alumnos.
-Akatsuki fue desmantelado hace tiempo por el Nanadaime Hokage y sus compañeros.
-¿Nanadaime? Ya veo, mientras estuve ahí pasaron dos hokages. Cómo sea, llegó la hora de que mueras en honor a Jashin-sama
La pelea estaba a favor de Hidan. La ninja a duras penas podía esquivar la hoz y recomponerse.
Luego de esquivar otro de los tantos ataques que le disponía, recibió una patada en el estómago que la mandó contra unos árboles.
-El dolor es una hermosa sensación ¿verdad...?
-¿qué rayos dices? psicópata...
-Cada fibra muscular desgarrada, cada nervio destruido... es increíblemente complejo sentir dolor. Hay que aprovechar lo que Jashin nos otorgó...
Estaba decidido. Este tipo estaba loco de remate. Y era un peligro hacia los gennin. Sumado a su nivel de pelea sólo quedaba luchar con todas las fuerzas.
Moegi se reincorporó y haciendo una serie de sellos demostró que iba en serio.
-Mokuton: Somoku Kekkai
Levantando unas barreras de vegetación rodeando por completo a Hidan.
-Estas lechugas no te van a salvar mocosa
Parándose sobre una de las cuatro paredes de vegetación que rodeaban al peliplata dejó caer muchísimos sellos explosivos.
-¡Activar!
Generando una explosión a gran escala dentro de la barrera.
Mientras ella daba un salto de espaldas y caía de pies al suelo. La hoz del ex-Akatsuki por la explosión salió volando y se clavó en el suelo junto a la kunoichi.
-Bueno. Dudo que haya sobrevivido a eso. Y si lo hizo debe estar malherido.
Cuando estaba por acercarse a lo que había quedado de su barrera, la guadaña clavada en el suelo se transformó en Hidan quien le dio una patada por la espalda haciendo que se estrelle con los restos de la barrera.
-JAJAJAJAJAJAJAJA ¿creíste que algo tan estúpido me iba a detener?
-Ok. Tomaré medidas más serias...
Mientras se levantaba y limpiaba un hilo de sangre que salía de su comisura labial izquierda, la joven sensei hizo una serie de sellos similares a los anteriores.
-Mokuton: Ryokushoku no Jutsu
Haciendo que unos árboles crezcan a los al rededores de su oponente y lo inmovilizen. Se acercó a él hasta estar cara a cara
-Voy a finalizar lo que mis compañeros ninja iniciaron...
Se encargó de ubicar sellos explosivos por todo el cuerpo de Hidan mientras este maldecía en gritos.
-Ahora, prepárate para morir de una buen...
Mientras Moegi hablaba, Hidan con un movimiento de su muñeca izquierda generó el retroceso de su hoz la cual se hubiera clavado en la espalda de la sensei de no ser por el hábil salto hacia atrás que ejecutó.
El retroceso de la hoz rompió las ramas de los árboles, liberando al peliplata que se disponía a pelear nuevamente.
-Te dije que no me ibas a vencer con estas estupideces de arbolitos
-Kanchi no Jutsu
Moegi utilizó un jutsu para sensar la localización de sus alumnos y la llegada de refuerzos.
*los niños están vivos aún y puedo sentir 6 chakras que se acercan, pero aún lejos. No tengo otra opción*
Juntando las palmas de sus manos, Moegi se preparaba para usar su Jutsu definitivo
-Prepárate miserable. Te mandaré con tu Dios en este instante. Mokuton: Ryokushoku kekkai
Acto seguido unos árboles nacieron a sus alrededores y la rodearon por completo, generando una armadura que sólo dejaba ver su rostro.
-Prepárate para la verdadera pelea...
-Lo mismo digo niña...
...
Los gennin del equipo siete se encontraban en un parque bajo los árboles de cerezo mientras tomaban una malteada.
Mientras Mitsuki y Sarada hablaban a cerca de ser chunnin, el rubio miraba a sus alrededores.
Francamente, no le importaba toda esa historia. Sólo quería disfrutar del bello paisaje.
Y siguiendo con esto último se detuvo a ver a sus compañeros hablar. Más que nada a su compañera.
Esa azabache mandona, que ahora se encontraba bebiendo de su malteada mientras Mitsuki hablaba.
Se veía tranquila, como siempre, aunque su voz siempre soñaba con autoridad. Pero otra cosa le llamó la atención al Uzumaki.
Un pequeño pétalo de una de las flores de cerezo quedó atrapado en el cabello de la azabache, por lo que procedió a sacarlo.
Sarada notó el acercamiento de la mano de su compañero pero nada pudo hacer. Sólo observar de reojo mientras el albino hablaba.
Su corazón latía con fuerza, ¿qué estaba queriendo hacer ese tonto? ¿por qué no hacía nada para evitarlo?
Luego de que el rubio retirara el pétalo. Ambos quedaron atrapados en un silencio atroz.
Con sus caras aún más rojas que las nubes de las capas de Akatsuki, no atinaban a pronunciar palabras.
-L-lo... lo siento... te-tenías un pétalo y-y quise sacartelo... Y...
-S-sí. Entiendo...
Situación comprometedora. Boruto estaba actuando muy tímidamente, mientras Sarada sólo asentía.
-Creo que los dejo solos...
Y girando sobre sus talones el albino desapareció sin terminar de decir lo que quería.
-Oye ¡no te vayas! ¡ven para acá!- decían al unísono.
...
-Shikadai ¿pensaste en algo?
-No puedo. Ahora los acorralados somos nosotros. Estén atentos a esquivar bien
El tiempo de los gennin se agotaba. Ya se encontraban cansados y en desventaja contra esos dos sujetos.
Era cuestión de tiempo que uno de ellos muriera.
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Lamento de antemano el poco BoruSara del capítulo y el relleno. El próximo es mucho mejor. Saludos!
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