Todo el mundo rogaba de rodillas para que nos dejarán ir

Se acababa de terminar el primer juego, estaba recargada en la base de una de las literas mientras abrazaba mis piernas

Los demás jugadores comenzaron a amenazar a los hombres de rosa provocando que uno de ellos diera un disparo al aire, rápidamente me cubrí los oídos y escondi mi cabeza en mis rodillas

— Artículo dos: el jugador que se niegue a jugar será eliminado.— hablo el cuadrado

Me destape los oidos y regrese mi vista hacia ellos

— Artículo tres: los juegos pueden terminar si la mayoría acepta, ¿Es correcto? — Sang-Woo salió de un pasillo de literas mientras hablaba

— Así es.

— Entonces, votaremos. Si la mayoría desea irse entonces.. deben dejarnos ir.

— Cómo deseen, votaremos para decidir la finalización del juego.

Solté un gran suspiro aliviada al igual que todos en la habitación

— Antes de votar, anunciaré el dinero del premio acumulado en el primer juego.

Las luces se apagaron dejando ver aquella alcancía gigante que sale del techo, montones de billetes empezaron a caer en ella haciendo que todos nos levantaramos viendo aquella escena

— Un total de 255 jugadores fueron eliminados en el primer juego, cada jugador se juega cien millones de wones, por lo tanto, el dinero acumulado en la primera ronda es de 25 500 millones de wones. Si quieren rendirse ahora. Se enviaran los 25 500 millones a las familias en duelo de los jugadores eliminados y ustedes se irán con las manos vacías.

Me pase las manos por el cabello, era demasiado dinero, demasiado

— Empezará la votación.

Las instrucciones eran fáciles, pasamos de numero mayor a menor, si queríamos seguir jugando presionamos el botón con el círculo verde y si nos queríamos ir presionamos el botón con la equis roja

Yo era la número 234, y considerando toda la gente que murió no me tardaría mucho en pasar

Para cuándo fue mi turno iba 49-50 ganando círculo

— Jugador 234.

Camine hasta los botones y me quedé viéndolos — Vaya que el dinero habla — suspiré y presione la equis quedando 50-50

— Jugador 218.

Ese era Sang-Woo y apesar de que tuviéramos números con diferencia los de en medio habían sido eliminados

Sang-Woo paso a la votación y después de unos segundos presionó el círculo

Vi como cuando se regresaba a su lugar me dió una pequeña mirada de reojo y yo simplemente lo mire confundida por su decisión

Íbamos 100-100 empatados y solo quedaba un voto, me di cuenta que era aquel viejito que se veía contento en el primer juego

Al votar se estaba tomando su tiempo por lo que pensé que votaría pero quedarse pero no fue así, presionó la equis haciendo que algunos empezarán a celebrar y otros a quejarse

Comencé a caminar hacia las literas ignorando las discusiones que habían cuando sentí como alguien me tomo del hombro y me detuvo

— ¿Se puede saber que haces aquí? — Sang-Woo me giro hacia el quedando frente a frente, se notaba molesto

Casi un año que no lo veo y se ve exactamente igual, quitando sus ojeras

Lo mire unos segundos y le volví a dar la espalda para alejarme pero me volvió a tomar el hombro y simplemente le quite la mano mientras caminaba de nuevo

Se puso frente a mi evitandome el paso y soltó una pequeña risa burlona — ¿Me estás ignorando?. — bufo irónico

— No, simplemente no creo que quieras hablar con "niñitas", ¿No?.

— Min-ji.. sabes a qué me refería — dijo pasándose una mano por el cabello

— No realmente no. — intente pasarle por un lado pero se puso frente mío

— Sabes muy bien que las cosas no podían pasar..

— Pero pasaron — lo interrumpí molesta — y vaya cosas fueron las que pasaron.

Me tomo del brazo y me pegó unos centímetros a el — Ambos habíamos bebido — susurro entre dientes inclinándose hacia abajo para quedar cara a cara y que lo escuchará

Justo cuando le iba a contestar la habitación se llenó de gas haciendo que poco a poco cayeran todos

— ¿Que caraj- — no pude terminar mi oración pues ya estaba colapsada en el piso

[...]

Nos habían dejado en una carretera, sentía el aire fresco y la poca ropa que llevaba, traía los ojos vendados y las manos y pies atados

— Las manos — escuché que me dijo Sang-Woo — déjame desatarte

Me arrastre un poco para quedar cerca de el y que alcanzará la soga de mis manos

Empezó a morderla para romper la soga, sentí como su nariz rozó con mi espalda, su respiración en mis caderas y nada de eso estaba ayudando a mi concentración

Logro quitarme la soga y rápidamente me quite la venda de los ojos y me desate los pies

Me levanté a alcanzar mi ropa y comencé a ponerme mi camiseta la cual era blanca y me llegaba justamente a las caderas

— Desatame — hablo harto pues ya me lo había pedido tres veces

Solté un quejido y me acerque a el para desatarle las manos y volver a terminar de cambiarme

Vi como se quito la venda y se desato los pies para pararse y venir al lado mío donde se encontraba la caja con sus cosas

Ignore lo más que pude el hecho de tenerlo semidesnudo al lado mío y me puse mis pantalones y la sudadera que traía, guarde mi teléfono y billetera en los bolsillos de mi sudadera y mis audífonos los puse alrededor de mi cuello

No sabía ni donde estaba pero me quería alejar de ahí por lo que iba a empezar a caminar si no hubiera sido por que se volvió a poner frente mío bloqueandome el paso de nuevo mientras se abrochaba su camisa blanca

— Tenemos que hablar.

— Te falta un botón — dije señalando el lugar para evitar el tema e intente rodearlo otra vez sin resultado

— No te puedes ir sin que hablemos.

— Pero eso fue exactamente lo que tú me pediste que hiciéramos, que rompieramos todo contacto que teníamos entre nosotros — respondí enojada poniéndole un dedo en el pecho pues hasta ahí le llegaba yo ya que era bastante alto

Vi como su cara paso a a una de irritación y antes de que me contestara alguien lo interrumpio

— Disculpen, ¿Me podrían ayudar? Por favor.

Voltee y note a un hombre que no era de por aquí, estaba sentado con las manos atadas al igual que los pies y seguía vendado de los ojos

— De verdad lo lamento — dije acercándome a el para desatarle las manos y desvendarle los ojos

Mientras el se desataba las piernas fui por su caja de pertenencias y se la dejé a un lado para que no pasara más frío

Si lo admito, me dió pena haberlo dejado ahí sin darme cuenta de su presencia y que estuviera pasando frío mientras nos escuchaba discutir

Cuando se terminó de vestir nos preguntó si le podíamos prestar algún celular para hacer una llamada pero para su mala suerte ninguno de los dos tenía batería por lo que empezamos a caminar a una estación de servicio

Me compré una botella de agua que me termine en un segundo, Sang-Woo me ofreció comida pero simplemente lo ignore y le dejé mi teléfono a el otro hombre para que hiciera su llamada mientras los esperaba afuera

Unos minutos después Sang-Woo salió de la estación de servicio con una caja cigarros y prendió uno

— ¿Dónde esta tu hermano? — me preguntó mientras tiraba el humo

— Al otro lado del mundo según lo último que supe de el. — metí mis manos en la bolsa de mi sudadera

Se quedó callado unos segundos — ¿Tu hermana?

— En casa — conteste tajante sin saber porque seguía con la conversación

— ¿Ya dió a luz? — me volteo a ver haciendo que yo clavara mi mirada en el piso

Trague saliva pues era cierto que antes de dejarlo de ver Yeon seguía embarazada

Después de un minuto de silencio donde el se quedó esperando una respuesta por fin hablé

— Tuvo un abortó no deseado a los 6 meses.

El ambiente se torno en un completo silencio incómodo que unos minutos después fue interrumpido por aquel hombre saliendo de la estación

— Gracias, señorita — hablo inclinándose hacia adelante mientras estiraba sus manos con mi celular en ellas

Lo tome con una sonrisa — ¿Si pudiste hacer tu llamada? — pregunté mientras guardaba mi celular

— Si, muchas gracias señorita — volvió a hacer la reverencia

Simplemente repetí su acción con una sonrisa en la cara, por alguna razón cuando lo veía a el me transmitía una tranquilidad poco común

Se despidió de ambos y comenzó a caminar

— Espera — lo freno Sang-Woo — ¿Tienes dinero para el autobús?

— ¿Cómo?

— Dijiste que vivías en Ansan — acomplete yo

— Ni siquiera pudiste pagar el ramyeon, ¿Tienes dinero para el viaje? — termino de decir Sang-Woo

— No tengo dinero, caminaré. — respondió sin muchos preámbulos

— ¿Caminaras hasta Ansan desde aquí?— pregunté a lo que el chico asintió lentamente

Vi como Sang-Woo saco su billetera de su bolsillo y le dió un billete — Camina un poco y después sube a un autobús.

Era cierto que el dinero que le daba no era suficiente para todo el trayecto pero si para la mitad y que no caminara tanto.

— No puedo aceptarlo, no tengo dinero, no puedo pagarle — se negó rotundamente

Metí mi mano en el bolsillo trasero de mi pantalón esperando que el dinero que le había ganado al hombre del metro siguiera ahí, para mí sorpresa aún estaba por lo que saque uno de los billetes que gane, tomé el billete de Sang-Woo y lo junte con el mío para después extenderselo a el chico

— Nadie te pedira que nos pagues, solo tómalo — le ofrecí con una sonrisa

El hombre los tomo lentamente en sus manos y los doblo con delicadeza

— Muchas gracias señorita — dijo en voz muy alta haciendo una reverencia — Muchas gracias señor.

— No soy tu señor, así que deja de llamarme así.

— Lo siento — hizo otra reverencia — gracias, gracias, gracias.

Seguía agradeciendo y haciendo reverencias lo cual me daba algo de ternura y risa pero al mismo tiempo respeto, pues tenía muchos modales

— Suerte — le dije con una sonrisa para después comenzar a caminar al lado opuesto

Escuché como Sang-Woo me siguió el paso y como aquel chico nos agradeció una vez mas a lo lejos

— ¿De dónde sacaste dinero? Vi que en tu billetera nada más tenías el billete con el que pagaste tu agua. — me cuestionó caminando detrás de mi

Suspiré — Digamos que al señor del ddakji no le fue muy bien.

— ¿Cuántas veces perdiste?.

— Ninguna.

Se quedó callado, supongo que por sorpresa

— Te preguntaría lo mismo pero ví el vídeo en la habitación.

No me contestó en lo absoluto y el silencio reino todo el camino hasta que me tuve que separar no sin antes decirle una última cosa

— No se en que tanto estés metido pero tienes que saber que ya te fueron a buscar al local de tu mamá y se que no es de mi incumbencia pero..  No le hagas esto, no lo merece.

Volvió a quedarse callado y cuando pensé que no me respondería nada lo hizo

— ¿La haz visto?.

— Me pediste que me alejara de ti, no de ella — le di la espalda para empezar a caminar — un domingo cada dos semanas voy a su local.

Me aleje sin esperar respuesta alguna y camine hacia aquel estúpido departamento en el que estaría mi hermana

[...]

Mi hermana no estaba en casa, revise mi teléfono y ninguna llamada perdida y me di cuenta que la nota que deje estaba en el mismo lugar nada más que había otra a su lado

"Fui a visitar a Hyuk, supongo que volverás antes que yo, me voy por dos semanas, te iba a pedir que fueras conmigo pero te fuiste antes, ojalá te haya ido bien en el otro turno. Con amor, Yeon."

Suspiré pesadamente para después dirigirme al baño a bañarme, no podía creer que incluso ahora tuviera que ir ella a visitar a nuestro hermano y no pudiera venir el

Mientras me quitaba el shampoo de la cara escuché como tocaron la puerta, ya era tarde así que rápidamente la idea de quién pudiera ser a estas horas me corrió por la cabeza, antes de poder encontrar una posible persona empezaron a tocar repetidamente la puerta y con mucha fuerza como si estuvieran apunto de tumbarla

Sin pensarlo dos veces salí de bañarme para cambiarme rápidamente pues prefería morir con ropa a que alguien que yo no quería me viera sin ella

Me quedé encerrada en el baño hasta que dejaron de tocar, sali con precaución y me acerque a la puerta para ver por el hoyo de esta pero no había nadie, sentí como pise algo delgado y voltee al piso

Abajo de mi pie se encontraba aquella tarjeta con los símbolos extraños, al verla me volví a asomar por la puerta, ¿quien carajos había sido?

Tome la tarjeta y la dejé sobre la mesa

— Ni loca vuelvo a entrar ahí — me dije a mi misma

[...]

Por alguna razón que yo todavía no entendía había decidido marcar al número en la tarjeta, me habían dado las mismas instrucciones de la vez pasada

Pero ahora ahí estaba, en la misma calle esperando aquella camioneta, con el estómago apunto de reventar pues había gastado todo el dinero que tenía en comida para llenarme antes de regresar a aquel lugar

La camioneta llegó y solamente abrió la puerta trasera por lo que me subí ya sabiendo el proceso

Se cerró la puerta y el gas empezó a salir, apoye mi cabeza contra el vidrio antes de quedar inconsciente.

2290 palabras

Nota de la autora:

[🕹️] Tercer capítulo, me gusta esto de estar actualizando seguido

Les gustan los capítulos largos o no? Díganme que opinan

Se que va a ser mucho pedir pero, si pueden apoyar los vídeos que subo a tiktok pues están en flop al igual que está historia 😭 cualquier comentario, compartir, like, lo que sea sirve, tanto aquí como allá

Gracias por leer, no olviden votar y comentar 🫰🏻