Una Inauguración Fuera De Lo Usual

Bajando la vista de su teléfono, un cabizbajo oji-azul dio unos pasos hacia adelante dejando ver una nueva instalación para el entrenamiento de los quirks. 

Muchas personas yacían reunidas en varias filas para pasar por una entrada de dos puertas cristalinas. 

—No pensé que me dejarían plantado..

Una zorrita situada en su hombro comenzó a brillar para luego tomar forma de un castaño con ojos verdes, chaleco y un aspecto militar, obviamente éste sería de unos 10cm de alto.

— ¡Hay que matarlo! ¡TATAKAE!

— ¿Cómo rayos espías mi mente? -Rió un poco mientras miraba a su compañera tomar la forma de un personaje de su vida pasada mientras gritaba-.

—Ehm... ¿Recuerdas tu cuaderno de recuerdos? -Mencionó la compañera con un tono algo nervioso-.

— Oh... entonces lo leíste -Volteó a ver a su compañera mientras que un aura chisporreante cubría su cabellera-.

—He..Hey... cálmate, recuerda que no lo puedes usar en las calles -Reprochó a su dueño-.

—Ahg.. maldición... Debería irme ¿No?

Unos tipos con aspecto extraño y muchos abrigos encima se colaron a la fila sin antes aviso, estaban a unos 15m de la posición del albino, pero no pudieron ser ocultados de su vista.

—No lo sé, sería bueno ir por unos..

—Oye ¿Viste eso? -Giró sus ojos hacia donde ocurrió la escena, ubicando a los sujetos sin necesidad de apuntarlos para que no lo descubrieran-.

—Chicos que tienen mucho frío, ¿Y qué? no nos incumbe -Volteó sus ojos después de sacar un suspiro-.

El peli blanco se puso serio mientras le clavaba una mirada fría a su compañera. 

— Donde tu ves una escena normal, yo veo algo poco convencional.. No tengo mi placa provisional.. debo pensar en algo.

—Hum... Recuerdo que en tu libro había un sujeto con un abrigo y una máscara, dicho personaje no fue descubierto hasta el final de la serie mostrando a alguien muy importante... Podrías copiarte la idea ¿No?.

En su espacio meditativo, el albino volteó su rostro a mirar a su compañera con una mirada que mostraba irritación por su lectura ilegal de su cuaderno personal. 

—Bueno.. supongo que es una buena idea, pero necesitare algunas cosas ¿Me pasas mi billet...?

Observó detenidamente a la criatura mientras ésta tenía su billetera inspeccionando muchas de sus fotos familiares.

—Jaja, miren a ese asocial en la esquina... espera.. eres tú- Comenzó a reír a carcajadas, pero paró en cuanto le arrebataron su motivo de risa-.

—Una capa y máscara será. .

*30min después*

Un sujeto de capa azul con cuello alto apareció, una máscara de un zorro blanco con detalles en los bordes de sus ojos, el cabello blanco de este se camuflaba perfectamente con la máscara. 

Una niña de vestimenta rebelde y pelo azabache con mechones dorados aparece junto a él, creando una escena no tan... agradable de ver. 

—Pareces un otaku -Comentó Scarlet-.

—Y tú una rebelde, además, deja de leer mi cuaderno, no deberías mencionar esos términos aquí. 

—Tú sólo enfócate en atrapar a los chicos malos, yo veré que puedo hacer -Dijo dejando ver un tono malévolo por parte de la pequeña-.

—Me das miedo, pero vamos, ya falta poco para que nos dejen entrar.

Una hora después, ambos sujetos en cubierto se adentraron en un edificio creado para el beneficio de los quirks.

Mientras miraban a quienes podrían ser los abrigados, caminaron sin parecer que siguieran a alguien.

— ¡MUY BUENOS DÍAS , INVITADOS!  Les agradecemos su presencia para la inauguración del centro de Quirks, aquí podremos alentar a nuestros futuros Heroes y reforzar a nuestros camaradas con conocimiento ¡Espero que la pasen estupendo en nuestra primer instalación! .

Kallen pensó "Vaya sujeto más gritón, por su tono y comportamiento está auto-descartado", luego ajustó la máscara para que al activar su quirk le sea más cómodo visualizar la escena.

— Y... ¿Cuánto durará esto? Es muy tardado.

— Tardará lo que deba de tardar... Ten pacien.. -En eso se tropieza con un señor de unos 30 años, pelo azul casi negro, no lo alcanzó a ver bien, pero algo que destacaba era una mirada atrapante, aparentemente enojada-.

— Ten cuidado, niño. Fíjate en donde andas.. -Comentó observándolo un poco, pero luego de un rato suspiró y se marchó-.

Mientras lo veía pasar, Kallen sintió un entumecimiento en sus manos, unos pequeños golpes en sus manos como sí fueran generados por una aguja no lo dejaban reaccionar.

— Esto... es extraño.. pero no es él, estoy seguro... -Comentó para luego dirigir su mirada al frente con miedo, pero luego vio a unos chicos molestos... ese sujeto venía de esa dirección. 

— ¿Crees que sean...? -Tras decir esto la chica rebelde, un sonido metálico surgió de entre la multitud llamando la atención de todos-.

—¡OIGAN INTERESADOS! SÍ QUERÉIS SALIR ILESOS DE AQUÍ, SACAD TODO LO DE VALOR QUE ESTÉ EN VUESTROS BOLSILLOS.

Dichos sujetos tenían como rehenes a un niño y un adulto, lucían profesionales así que no era mentira. Estaban posicionados de una forma rara, parecían ya haber trabajado juntos antes.

— ¿Cambio de traducción? Bueno, comencemos con la evaluación. 

P.O.V Kallen:

Eran 5 sujetos de los cuales sólo uno está armado, los demás han de tener quirk por obviedad.

Uno posee una vestimenta de cuero con múltiples llamas en la parte de sus pantalones, su quirk debe relacionarse con eso, está sujetando a un adulto.

El segundo posee guantes los cuales se está quitando, su mirada con una iris fina y color amarilla, además de unas escamas repetidas en su atuendo... debe tener relación con reptiles y no me gustaría saber qué hace.

El tercero, ubico muchos objetos de metal en el suelo y un cuchillo en su mano, el metal debe venir de él o algo relacionado, será fácil, aguanta niño, ya te liberare.

El cuarto, está detrás de todos y está sentado en el suelo, lo suyo no es el combate.. no comprendo qué será.

El quinto está apuntando al niño con un arma de fuego, no tiene quirk.. a actuar. 

P.O.V Narrador

— Mantente alejada Scarlet, será sencillo... 

— No lo digas dos veces, búscame cuando nos vayamos -Deja a Kallen con un aura de vergüenza mientras se dirige a un puesto de comida deshabitado-.

—Bu..Bueno, ya es hora.

Sus ojos se iluminaron de un celeste intenso que resaltaba por el fondo blanco de su máscara. Salió trotando hacia el sujeto con un arma, su rapidez ayudaría a que tardaran en percatarse de su existencia. Para ventaja del albino, la máscara evitaba las corrientes de aire que interfieren en su sentido de la percepción con sus ojos.

— APURENS...-Recibe un impacto en el estómago que lo levanta un poco del suelo- ¿¡Que!?.

Su apariencia es mostrada por primera vez como un niño en una convención, pero en este mundo sería un sujeto enmascarado.

— Hola... -Comentó con una voz distorsionada, no era tan tonto como los que hablan normal con una máscara puesta-.

Con su brazo izquierdo libre lanzó un golpe a la mejilla derecha del enemigo armado lanzándolo por los aires sacándolo del combate.

— ¿Quién sigue?

Tras mencionar esto unas cadenas rodearon los brazos del albino, este estaba apunto de contraatacar con electricidad, pero sonrisa se distorsiona en cuanto ve una llamarada acercándose. 

Antes de que esta llegara, el sujeto de la cadena lo levanta por los cielos y lo impacta un par de veces con el suelo en direcciones diferentes.

En cuanto Kallen se recompone y espera las llamas, un sujeto aparece cerca de él cómo si fuese un mago. Una persona de pelo azul oscuro con rasgos morados y mirada siniestra estaba enfrente de él cortando la cadena con un quirk que Kallen no pudo apreciar por lo rápido de la escena, sólo pudo ver unas partículas moradas.

— Estás por tu cuenta, niño -Tan misteriosamente como apareció, simplemente se desvaneció de la zona de una manera inexplicable al ojo humano o común-.

Esa sensación otra vez recorrió su cuerpo, enfocándose en sus manos dejándolo perplejo ante la situación, pero no era momento de congelarse como los otros heroes del lugar, debía actuar antes de que sea tarde. 

Sus ojos volvieron a resplandecer mientras que unos rayos formaron una X desde atrás de sus pupilas, bueno, eso dejaba ver la perspectiva. 

Volviendo al ataque, golpeó en el brazo al sujeto de la cadena quien, muy hábilmente, amarró las manos del albino, pero esta vez una descarga fue liberada en su contra.

Después de la vibración generada en las cadenas, romperlas fue un juego de niños, pero lo que seguía no lo era.

Dos cuchillos fueron arrojados hacia el albino, la dirección no estaba del todo bien, más era lo suficiente como para crear tajos en su vestidura y una grieta en su máscara. 

— Deberías calmarte, esto no es un juego -Lo observó detenidamente, el pandillero tenía una mirada algo sádica mientras sostenía lo que parecía ser una espada- Un tipo como tú me serviría, pero ya que... .

Kallen recogió los cuchillos y mientras corría a velocidad normal los fue lanzando mientras giraba en el aire. Los tiros no fueron nada precisos, pero lo suficiente como para crear un punto en el que al dispararle a los cuchillos con electricidad estos dirigirian la descarga hacia la hoja de la espada que acabaría por electrocutar de manera brutal al enemigo. 

Kallen celebró con una mueca de confianza en su cara. El rehén se le quedó observando con gratitud y se alejó a los pocos segundos. La tranquilidad no perduró, se volteó y observó a los otros maleantes.

—Oleada dos..

De repente los dos sujetos que estaban preparados para atacar desaparecieron tras caer por un agujero en el suelo, el sujeto que está sentado debe tener algo que ver. En cuanto iba a caminar hacia el objetivo, un par de enemigos descendieron sobre su cabeza evitando que se moviera.

El enemigo reptil puso sus dedos sobre la nuca del peli blanco provocando unas heridas por el ácido que emanaba de sus dedos, o más bien manos.

Kallen gritaba de dolor, pero luego decidió usarlo a su favor apretando los dientes y generando por un leve momento una corriente eléctrica en su espalda. 

—¡DESGRACIADO! -Comentaron ambos sujetos quienes se colocaron rápidamente en posición de batalla-.

El del fuego dirigió varias patadas en dirección de Kallen, los ataques no lo alcanzaron, pero una serie de esferas fuego desprendida de estos sí lo harían. 

Kallen, sin ver una salida, saltó enfocando su energía en sus piernas intentando ir por encima del fuego, lo logró por poco, pero su brazo izquierdo fue afectado por la llamarada.

—Van a pagar por esta capa, estúpidos.

Sin previo aviso apareció enfrente del reptil y lanzó una patada alta a su estómago que, acto seguido, estallaría en electricidad alejando al enemigo hasta impactar con una máquina. 

Kallen volteó a ver al del fuego, pero en cuanto iba a lanzar un golpe un dolor de cabeza se apoderó de su atención. 

—Maldición, me excedi...

—¡Estas acabado niñato! -Exclamó el de fuego -.

El sujeto me sujeto ambos brazos y bajó mi cuello ligeramente realizando una llave de lucha libre.

—Tsk... A..Aficionado. .-Kallen estiró sus brazos y ayudó con su postura para poder alcanzar el cuello del enemigo y llevarlo hacia adelante levantando su cuerpo por completo por los aires e impactando con el suelo- Su peso debió haber acabado con él..

Se puso en camino hacia el último sujeto que estaba desprotegido casi temblando, pero un poco de seguridad se notaba en su hablar.

— ¿Quién eres... muchacho?

— Soy el punto débil de su Quirk -Mencionó con una mirada carente de vida dejando ver en sus ojos unos destellos débiles de su quirk-.

El enemigo únicamente sonrió, no dudo por ningún segundo al realizar su siguiente acción que fue crear un agujero debajo de su mismo cuerpo para huir de la estructura.

Kallen quedó confundido al ver la escena, pero en cuanto pudo se sentó mientras proseguía a alimentarse con...

—Un poco de chocolate debería reponer la energía de mi sistema..

Disfrutando como niño pequeño, Kallen estaba comiendo una barra de chocolate para cuando Scarlet se dirigió a él y le dijo de manera nerviosa.

—En...Enmascarado. .-Apuntó con su mano temblorosa hacia atrás de su espada-.

Una figura de pelo azabache y liso, unos lentes amarillos, bufanda blanca y una sonrisa forzada estaba atrás de su compañera. Su vestidura era parecida a la de un ninja con esa bufanda que le terminó por agradar a Kallen.

—¿Enmascarado? ¿Qué nombre es es...? -Dijo Kallen para luego mirar atrás de la chica-.

—No creo que tengas licencia ¿O si, niño? -Comentó el héroe profesional EraserHead-. 

—No, no la tengo, pero sí me deja ir le... daré el crédito -Por otro lado, Scarlet se reía de él -.

—Lo siento, pero temo que deberé entregarte a los policías, no ensuciare la justicia -Comentó mientras limpiaba sus lentes extraños-.

— ¿Justicia? ¿Dónde estaba esa justicia cuando tenían a esos rehenes cautivos? -Comentó con un disgusto incrementando al escuchar sus palabras-.

—Estábamos rodeando la zona junto al héroe profesional Endevoar, no podíamos actuar hasta asegurar que todo saliese lo mejor posible.

Al recibir la nueva información, Kallen se asustó en demasía porque estaba rodeado y no saldría impune. Él da unos pasos hacia atrás, pero luego es detenido por el héroe cuatro ojos.

—Te diste cuenta de que no puedes escapar, entrégate muchacho -Se fue acercando poco a poco, pero en seguida el niño desapareció-.

Kallen se movió rápidamente con su quirk hacia atrás de él y lanzó una patada a su pierna por detrás, provocando que se arrodillara.

Aisawa entró en profesión y se dispuso activar su quirk intentando borrar la habilidad del enmascarado, pero dada la velocidad no alcanzó a mirar al enemigo.

Se intentó un intercambio de golpes, pero el albino recibió uno en el estómago que lo sacaría de su zona de confort llegándose a esconder atrás de un pilar lo más rápido que pudo. Intento asomarse para ver al héroe, pero no podía arriesgarse.

—Eres hábil, debo reconocerlo.. Pero no podrás conmigo -Sacó su bufanda mientras se acercaba al pilar- Es hora, chico.. -Lanzó la bufanda a la estructura, pero algo extraño ocurrió-.

En medio camino de la bufanda, Kallen lanzó un rayo hacia esta provocando que se volviera tiesa como una roca. El albino sonrió y aprovechó la oportunidad para salir del edificio por una ventana abierta. 

Hizo lo posible para llegar hasta el techo, pero una vez allí se encontró "atrapado" por muchas patrullas policiales rodeando el área y Endevoar enfrente de la entrada.

—Trajeron a las fuerzas especiales¿Eh?..