Jaminique 3/4

Dominique despertaba en la cama de su gran habitación. James ya se había despertado e ido. Iba a pasar el día con sus amigos a modo de despedida de soltero. Mientras que ella tenía tarde de chicas en la pileta interna. Su habitación tenía un gran cabezal con una biblioteca, de costado tenía una ventana que daba al exterior. Se notaba que era obra de Merope, se dicr que tenia excelentes gustos. Pero James y Dom la reemplazaron por una habitación moderna.

Tambien tenía una puerta que lo conectaba con una mini sala que tenía dos puertas más que llevaba al estudio gamer de cada uno.

Pero bueno. Ese no era el punto. El castillo era enorme, cada piso tenía por lo menos veinte habitaciones, tres baños, una cocina/comedor, un comedor formal y una pileta techada. Se notaba que cada generación fue añadiendo cosas al castillo. James y Dom tardaron un mes en crear un nuevo piso y poner todo lo suyo en el primero y segundo. Tambien hicieron un subsuelo en donde pusieron un cine, una vinera y más cosas.

Pero vinieron para ver el dia de la boda, no para morirse de envidia. Las chicas llegaron a eso de las nueve de la mañana. Dom las hizo pasar al lujoso rellano y las llevó hasta la cocina en donde ya habia un gran desayuno preparado.

Las chicas se sentaron en la mesa encantadas. Empezaron a comer mientras charlaban. Jo y Clarissa charlaban con Scarlett sobre moda y el resto hablaba sobre sobre videojuegos. Cuando terminaron bajaron al sotano.

—¿A donde quieren ir primero?—preguntó Dom.

Decidieron ir al jacuzzi para relajarse, estuvieron ahí hasta las diez y media. Niky se puso su maya de AKatsuki con el shortsito para la pileta y el resto sud mayas. Salieron y se secaron en las reposeras al lado del jacuzzi. A eso de las diez y cuarto fueron al lugar de los dulces y entraron al cine. Vieron dos peliculas de Tim Burton: El Cadaver de la novia y El extraño mundo de Jack. Las dos favoritas de todas, hasta les gustaba a Jo, quien había heredado el disgusto de las cosas mundanas de su padre. Las peliculas terminaron a las tres de la tarde, en ese momento subieron hasta la cocina, donde ya estaba el almuerzo.

Despues del almuerzo se sacaron la maya y se subieron al auto de Dominique. Llegaron al Callejón Diagon y entraron al Caldero Chorreante, saludaron a Hannah y fueron a la pasteleria. Esta vez Molly estaba en el mostrador esperandolas con una sonrisa.

—Llegaron las mejores—dijo Molly salundandolas—. Sientense mientras preparo los últimos detalles ¡Emaly! ¡Una docena de macarrons con ocho tés a la mesa tres! Ya pagaron.

Las chicas agradecieron a Molly, los macarrons estaban deliciosos. Molly les dejó todos los dulces y dijo que llevaría la torta más tarde. Se apresuraron en llegar a la mansión y se encerraron en el lugar de maquillaje de Dom, en donde tambien estaba su vestido de novia en un maniqui.

—Bien, tenemos dos horas para dejarte perfecta—dijo Jo con una sonrisa.

Porfin una boda con los colores correspondientes y no con los colores de un funeral. Estuvieron dos horas preparandola. Si que era dificil maquillarla, debia de estar perfecto, cosa que como Cassie era la maquilladora no era tan facil como sonaba. EL veatido era perfecto, de color negro muy lujoso, una corona con esmeraldas, un velo tambien negro, un collar de plata con gemas azules, una liga negra y unos tacones negros y plateados.v

Las damas de honor tenían vestidos verde esmeralda. Eran: Cassie, Cissa, Danae, Afro y Jo. Clary no era dama de honor, pero estaba ahí para ayudar igual que Sakura.

A mitad de tarde (tipo cuatro y media) llegó Ginny a ayudar. Ella llevaba puesto un hermoso vestido: James era el primero de sus hijos en casarse, a pesar de que Lilu y Lorcan ya tenian un hijo de unos meses. La única regla de vestimenta era que no se podía llevar nada completamente negro.

La madre de la novia ayudó con el peinado. Y tipo seis y media ya estaba todo listo. Bajaron las escaleras, en donde Harry estaba. Subieron a la carroza negra tirada por thestrals.

Los mismos los dejaron en los pies del altar. Todo era muy bonito, habían montado una cabaña.

En el altar estaban esperado James y Fred. Tambien había una mesa con dos copas, dos velas y unos fosforos. Harry soltó a Dom y se fue a sentar del lado del novio. James agarró la mano de Dom y empezó con los votos.

—Con esta mano yo sostendré tus anhelos tu copa nunca estará vacía, pues yo seré tu vino— dijo agarrando la copa de oro que estaba sobre la mesa para despues agarrar la vela—con esta vela alumbraré tu camino en la oscuridad… Y con este anillo yo te pido que seas mi esposa.

Le puso el anillo que le correspondia y Dom hizo lo mismo y se besaron. Al bajar del altar todos empezaron a tirar petalos negros.

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