Ya era lunes por la mañana, Ryūko estaba en la academia platicando con su amiga de la clase B, Itsuka Kendo y con Tetsutetsu.

— ¿Y como fue su cita? — Pregunta la oji-verde.

— Fue genial y más cuando fuimos a las luchas — Habló Ryūko emocionada.

— Fue genial cuando Ryūko sometió al luchador en un segundo — Dijo el peligris sonriendo.

— Oye no me subestimes puedo ser muy fuerte si me lo propongo — Dijo ella con confianza y una alegré sonrisa.

De pronto estaba llegando Bakugou con cara de pocos amigos, vio que Ryūko estaba platicando con sus dos amigos de la clase B.

— Enana tenemos clases, vamos al salón — Bakugou tomó de la mano a Ryūko para alejarla del extra de Tetsutetsu y de Kendo.

— ¡Espera Katsuki aún falta para que inicie las clases! — Deteniendo su agarre.

— ¡Me da igual! — Gritó él con obvia molestia estirando la mano de la chica.

— ¡Nos vemos Kendo-Chan, Tetsutetsu! — Dijo ella siendo llevada por Bakugou.

— ¡Nos vemos Ryūko-Chan! — Ambos se fueron a su salón pero Tetsutetsu vio mal a Bakugou al ver que se llevó a Ryūko casi a rastras del pasillo entrando a su salón.

— ¿Por que hiciste eso? — Ahora fue Ryūko la que estaba enojada con él por la abrupta acción de éste.

— No deberías estar platicando con esos extras.

— Pero Kendo-Chan es mi amiga — Hizo pucheros enojada.

— Ya olvídalo ¿quieres? — Dijo molesto de que ella no dejará de quejarte de su acción repentina.

— ¿Por que te molesta que hable con ellos? Si son mis amigos también.

— ¡Ya deja de actuar como niña berrinchuda y siéntate!

— ¡Cuando tú dejes de actuar como si me dieras ordenes! Tú no me mandas — Salió del salón para ir al baño de mujeres, el chico explosivo se enojo al ver que ella no le hacía caso y por la cita de ayer parece que no fue nada, cuando Ryūko salió del baño después de lavarse la cara se encontró con las chicas.

— ¿Saliste el domingo con Bakugou? — Sonrió divertida Ashido.

— Tuviste dos citas Ryūko-Chan, que genial — Dijo la castaña.

— Es extraño por como es Bakugou-San...— Comentó Yaoyorozu.

— Tiene su carácter — Agregó Jirou.

La chica dragón suspiró cansada debido al interrogatorio de sus amigas — Les voy a explicar lo que paso.

(...)

Ya estaban todos en sus salones ya las clases habían iniciado para luego llegar la hora del almuerzo donde Ryūko se dirigió a una mesa donde estaban Midoriya, Todoroki, Uraraka y Iida.

— ¿No vas a sentarte en la mesa de Bakugou? — Preguntó serio Todoroki.

— Hoy no, en la mañana estaba insoportable — Dijo Ryūko aún enojada por lo de la mañana.

— Kacchan tiene su carácter agresivo — Y al decir eso notaban la mirada de este hecho una furia al ver que Ryūko estaba sentada a lado de Todoroki, ella ignorando a Bakugou por completo.

— En la mañana estaba platicando con Kendo-Chan y Tetsutetsu pero luego apareció Katsuki llevándome a rastras al salón aun faltando para entrar a clases, me interrumpió cuando hablaba con ellos dos eso no esta bien.

— Me sorprendió que te dejará llamarlo por su nombre — Dijo la castaña de cara redonda.

— Así es Kacchan no es novedad aunque eso de llamarlo por su nombre si me sorprende.

— Solo por que salimos el domingo eso no le da la autoridad para darme ordenes o ¿si? — Dijo Masayuki.

— Kacchan es muy orgulloso y posesivo tal vez a malinterpretado las cosas contigo Masayuki-San.

— No lo sé, solo sé que quiero comer a gusto con mis amigos — Respondió ella.

Mientras en la mesa donde estaba Ryūko platicando y comían a gusto, en la mesa donde estaba Bakugou...

— ¡Maldita enana como se atreve a ignorarme después de lo de ayer! — Grita molesto el cenizo.

— Pues por la versión que nos dijo Ashido de lo que Ryūko dijo que hiciste, tu no tenías por que enojarte por que ella hablara con Kendo y Tetsutetsu — Habló Kirishima.

— Esta celoso solo salieron una cita y ya Bakugou cree que tiene control sobre Ryūko — Opinó el azabache.

— ¡Cállense ustedes dos!

— Y si hablas con Masayuki... — Dijo Kirishima

— ¿Y Te disculpas por ser tsundere y mandón? — Dijo Sero

— ¿¡Que!? ¡Para nada! ¡Ella vendrá aquí rogando! — Gritó irritado Katsuki.

— Pues no lo creo jeje — Sero hizo que los de su mesa miraran a la mesa de Ryūko donde llego Tetsutetsu dejando una pequeña caja con chocolates, Ryūko la abrió y le dio a todos los de la mesa, le dio uno a Tetsutetsu y le dió uno a Itsuka Kendo.

— ¡Ja! eso no es nada con el oso gigante que le gané a la enana en el parque de atracciones — Pensó Bakugou pero luego veo que Ryūko le dió un abrazo a Tetsutetsu por los chocolates viendo que éste estaba sonrojado por el abrazo. — Ningún extra me va a ganar — Pensó con obvios celos.

(...)

Ya habían pasado las clases y ya iban de salida todos, Ryūko como siempre acompañada de Todoroki ya que viven en la misma zona.

— ¡Ryūko espera! — Se acercó Bakugou a la chica para hablar con ella.

— Oye ya te dije no debiste enojarte así esta mañana — Regañó Ryūko.

— ¡Me da igual tú y yo tenemos que hablar! — Exigió Bakugou

— Pero tú y yo solo somos amigos no tenemos nada de que hablar, ya me voy a casa — Rápido Bakugou le sujetó el brazo pero Todoroki lo hizo que la soltara.

— Si ella no quiere hablar contigo deberías aceptarlo en lugar de forzarla — Dijo el heterocromático con seriedad.

— ¡Tú no te metas en esto maldito mitad y mitad! — Miró con odio a Todoroki.

— ¡Sabes que...vamos a hablar ya para que dejes de estar como anciana amargada! — Gritó Ryūko con enojó.

— ¿¡Me llamaste anciana amargada!? — Respondió Bakugou.

— ¡¡¡SI!!! — Ryūko liberaba un aura maligna azul y tenía los cuernos de dragón en su cabeza mirando con enojo a Bakugou, el cual por esa reacción se sorprendió ya que Ryūko también tenía su carácter cuando se enoja.

— Bien ¿ahora que quieres? — Ryūko y Katsuki estaban en un lugar alejado, ella le dijo a Todoroki que se adelantará primero al ir a casa que ella en un rato se iría después de hablar con Bakugou.

— ¿¡Por que le aceptaste los chocolates a ese extra!? — Preguntó molesto.

— ¡Por que él es mi amigo! Al igual Kendo-Chan, ni deberías de enojarte por cosas así — Ella desvío la mirada estando de brazos cruzados.

— ¿¡Y por qué no!?

— ¡Por que tú también eres mi amigo, no eres nadie para exigirme nada no eres mi dueño Katsuki! — Ella volvió a verlo estando aún enojada.

—... — Se quedó serio.

— ¡Aparte la cita de ayer fue de amigos no era para que te enojaras hoy con cualquier persona que hable, a mi no me gusta que me presionen diciéndome que hacer personas que no tienen autoridad para darme ordenes! — El cenizo aún se quedo serio y enojado por cómo ella le estaba hablando — Si ya no quieres ser mi amigo solo dilo y ya.

— Yo no soy tu amigo...— Respondió.

— Bien...— Ella se comenzó a alejar enojada pero Bakugou le sujeto el brazo y la acorraló en una pared — ¿¡Que haces!? — Gritó exaltada por tan repentina acción.

— ¡Yo no soy tu amigo por que quiero ser más que un estúpido amigo tuyo!

— ¿¡De que demonios estás hablando...!? — Algo había interrumpido a la chica dragón causando gran confusión, un enorme sonrojó y que su corazón se acelere por tal acción del chico explosivo.

Él...la estaba besando, en los labios, ese cenizo al tenerla acorralada aprovechó la oportunidad para robarle un beso, no sabía por qué tan repentina acción de parte de él pero el cenizo sabía que había deseado hacer eso.

Él tenía sus ojos cerrados disfrutando de aquello pero ella los tenía abiertos, Ryūko estaba sorprendida, sonrojada y confundida por aquel beso, lo miraba a él, la peliazul no entendía la situación en nada al no saber que hacer ante ese tipo de situaciones.

Cuando se separó de ella la miró fijamente diciéndole algo pero Ryūko salió corriendo debido a todo lo acontecido, estába demasiado confundida y lo único que pensó rápido fue correr.

Ella pensó que eso fue muy cobarde pero su cabeza no estaba pensando con claridad por culpa de Bakugou él cual comenzó a perseguirla cuando Ryūko huyó de él rápidamente.