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Chaewon frunció las cejas. Esto no se ve bien. Ella giró alrededor delante del espejo y resopló.

-No eres bonita- ella dijo, tirando del vestido por la cabeza y arrojándolo a un lado. Sus ojos se posaron en el vestido amarillo pastel colgando en el armario, pero se obligó a apartar la mirada. Era brillante. Eso no era normal. Hyejoo quería que ella fuera normal.

Después que Hyejoo se había ido la mañana siguiente, Chaewon inmediatamente se encerró en el dormitorio y comenzó a practicar. Practicar para ser normal.

Hyunjin había dicho que las parejas "normales" irían a la fiesta. Así que Chaewon tenía que ser normal. Eso es lo que Hyejoo querría.

La niña más pequeña buscó de nuevo en el armario. Decidió que no quería usar un vestido. Eso estaba bien. La gente normal podría llevar faldas también.

Chaewon sacó su falda púrpura favorita del armario y se la puso. Ella sonrió feliz a sí misma en el espejo, satisfecha con su reflejo. Después de encontrar un top blanco, Chaewon se estudió en el espejo. Ella parecía normal.

Por suerte, había observado a Hyejoo hacer su cabello las veces suficientes para saber lo que tenía que hacer. Caminó por el pasillo y encontró la botella de spray de color rosa que la chica mayor siempre utiliza. Chaewon le dio la vuelta en sus manos, frunciendo las cejas cuando se dio cuenta que no estaba segura de cómo usarlo.

Unos segundos más tarde, ella estaba tosiendo y escupiendo la sustancia en el fregadero. Bueno, al menos aprendió a cómo usarlo.

Después de limpiar su cara con una toalla, Chaewon rocío el producto en su cabello un par de veces y dejó la botella. Estudió su reflejo con atención mientras pasó los dedos por el cabello un par de veces.

Todo lo que quedaba era el maquillaje. Esta era la parte de la que no estaba segura. Recordó a Hyejoo usando un bolso negro de los cajones. Chaewon se arrodilló, para agarrar la bolsa de maquillaje y vaciar su contenido sobre el mostrador.

La niña más pequeña de inmediato agarró un contenedor colorido, luchando para destaparlo. Sin embargo no sabía su propia fuerza, porque una vez que finalmente consiguió abrirla, pasadores salieron volando cayendo en el suelo.

-Shhh- susurró Chaewon, agachándose y comenzando a recoger todas las piezas pequeñas. Cuando se puso de pie con sus manos llenas de pasadores, casi pierde el equilibrio cuando se encontró cara a cara con Heejin.

-¿Qué estás haciendo?-, Preguntó la chica más alta, levantando una ceja ante el atuendo de Chaewon.

-Yo...- Chaewon negó con la cabeza, derramando los pasadores de nuevo en el recipiente pequeño. -Me estoy preparando.-

-¿Para qué?-, ​​Preguntó Heejin. Chaewon hizo un gesto a su atuendo y sonrió.

-La fiesta- tarareó, volviéndose hacia el lavabo y estudiando los productos de maquillaje que había colocado sobre el mostrador. -Yo y Oli vamos a ir.-

-¿Sabe Hyejoo esto?- Heejin rio suavemente, pasando a Chaewon y sentándose en el borde de la bañera. Chaewon frunció las cejas y se encogió de hombros.

-Lo hará cuando regrese- Chaewon se rio, levantando una brocha de maquillaje. Inclinando la cabeza hacia un lado, la niña más pequeña estaba confundida.

-No sé lo que estoy haciendo-, Chaewon confesó, dirigiéndose a Heejin sosteniendo la brocha. La otra chica se rio, levantándose y sacudiendo la cabeza.

-En primera tu no tienes que utilizar eso,- ella tomó el cepillo de Chaewon y lo puso de nuevo en el mostrador. -No necesitas una gran cantidad de maquillaje.-

-Pero tengo que ser bonita-, Chaewon levantó las cejas suplicante.

-Ya lo eres,- Heejin rio y agarró un recipiente circular de rubor, abriéndolo y volviéndose a Chaewon . -¿Está bien si te ayudo?-

Chaewon asintió, sonriendo con entusiasmo. Heejin rio y giró suavemente a Chaewon para que estuviera frente a ella. Comenzó a colocar el rubor en las mejillas de Chaewon, lo que provocó que la pequeña empezara a reír.

-Eso hace cosquillas,- susurró Chaewon, tratando de mantener su rostro lo más quieto posible. Heejin rio y asintió con la cabeza. Dejó el cepillo de rubor y agarró el brillo de labios, frotando una pequeña cantidad en su dedo y extendiéndolo por todo el labio de Chaewon.

-golpea tus labios,- Heejin instruyó, volviéndose hacia el mostrador y comenzando a buscar un brocha para la sombra de ojos. Inmediatamente miró hacia atrás cuando oyó un ruido fuerte aplauso.

-Ouch-, Chaewon murmuró, retirando su mano de la cara y frotándose sus labios.

-No, no me refiero a golpear sus labios,- Heejin rio y rápidamente limpió el exceso de brillo de labios de las manos de Chaewon. -Quise decir golpéalos juntos. Al igual que esto. -Ella demostró con sus propios labios.

-Oh,- Chaewon se rio, imitando a Heejin y luego mirando esperanzada a la chica mayor.

-Buen trabajo,- Heejin le dio un pulgar hacia arriba y agarrando una paleta de sombra de ojos, abriéndola y mantenerla entre ellas. -Elige un color.-

-Este...- Chaewon frunció las cejas y señaló con el color que le llamó la atención. -Es de color rosa... pero ¿es... es... brilloso?-

-Brillante-, Heejin rio, deslizando el pincel por el color que Chaewon estaba señalando. -Brillante, brillo, reluciente, todas esas palabras funcionan.-

-Brillante-, susurró Chaewon, le gustaba la nueva palabra que había descubierto. Se le hizo cosquillas en los labios cuando lo dijo. -Bri... brillante- ella se rio.

-Exactamente- Heejin arrugó la nariz y golpeó el espacio entre los ojos de Chaewon. -Cierra los ojos y mantenlos cerrados hasta que te diga que puedes abrirlos de nuevo. ¿Okay?-

Chaewon asintió y cerró los ojos. Sintió los dedos de Heejin en su cabeza y se rio cuando la brocha recorrió a través de sus párpados.

-Puedes abrirlos ahora,- Heejin coloco la brocha sobre el mostrador y vio como Chaewon volvía a mirarse en el espejo. Cerró un ojo, tratando de obtener una visión de la sombras en sus ojos.

-Brillante-, señaló, sonriendo a sí misma en el espejo. Se volvió hacia Heejin y se rio en voz baja. -¿Hay más?-

Heejin levantó el cilindro de rímel y se preguntó si debería o no usarlo. Chaewon frunció las cejas y estudió el contenedor colorido.

-¿Qué es eso?-, Preguntó, tocando el rímel. Heejin desenroscó la tapa y se lo mostró a la niña más pequeña.

-Es el rímel. Va en las pestañas -, explicó Heejin. Chaewon asintió y se mordió el labio.

-No tienes que hacerlo si no quieres-, la mayor empezó a cerrarlo de nuevo, pero Chaewon la detuvo. La pequeña sacudió la cabeza y sonrió nerviosamente. Tenía que ser normal.

Después de unos minutos de que Chaewon luchara por mantener los ojos abiertos, Heejin finalmente fue capaz de conseguir una moderada cantidad de rímel en las pestañas de la chica. Chaewon se secó la nariz, secándose las lágrimas de sus ojos y dirigiéndose a mirarse de nuevo en el espejo.

-¿Me veo bonita?-, Preguntó, inclinando la cabeza hacia un lado.

-Por supuesto,- Heejin rio y amontonó todo el maquillaje de nuevo en la pequeña bolsa. -¿Es por es que te lo pusiste?-

Chaewon asintió y cepilló su falda ligeramente, con una suave sonrisa en su rostro. -Sí. ¿Hará feliz a Oli? -

Heejin se encogió de hombros y se apoyó en el marco de la puerta. -Pensé que no te gustaban las fiestas- dijo, realmente curiosa sobre el repentino interés de Chaewon en salir.

-Quiero-, Chaewon se encogió de hombros. -Quiero, por Oli.-

-¿Estás segura?- Heejin levantó una ceja. Chaewon sonrió y asintió con la cabeza.

-Sí. Estoy segura-, cruzó el pasillo y se sentó en la cama de Hyejoo, inclinándose hacia abajo y amarrando sus converse blancos en sus pies. Eran los únicos zapatos que le gustaba llevar. Parecía que cada otro par que se había probado tenía algo mal con ellos. Eran demasiado ajustado, o demasiado flojos o demasiado pequeños. Así que se quedó con lo que conocía.

Antes de que Heejin pudiera responder, ambas chicas se escucharon cerrando la puerta principal. El rostro de Chaewon se iluminó y saltó de la cama.

-¡Oli!- Gritó, prácticamente cayendo por las escaleras. Se agarró de la barandilla para mantener el equilibrio y sonrió ampliamente a Hyejoo. -Hola-, ella se rio.

-Cuidado, Wonnie,- Hyejoo se rio, lanzando su mochila a un lado y dando a la chica más pequeña una vez bajado por completo. -¿Que has estado...?-

-Me vestí,- Chaewon dio una vuelta y sonrió con orgullo. -Para la fiesta.-

-¿Fiesta?- Hyejoo levantó una ceja.

-Sí, la fiesta- Chaewon inclinó la cabeza hacia un lado y se acercó a Hyejoo. -¿Recuerdas? Estaban hablando de ella ayer-.

-Oh, sí,- Hyejoo asintió, recordando su conversación con Hyunjin. -No me di cuenta que querías ir.-

Chaewon se mordió el labio. La verdad es que tenía miedo de ir a la fiesta. Pero su deseo de ser normal y complacer a Hyejoo fue mayor. -Quiero ir, ¿podemos?-, Preguntó con esperanzas, estudiando el rostro de Hyejoo.

-Bueno, ya que te has vestido...- Hyejoo se rio suavemente y giró un mechón de cabello de Chaewon alrededor de su dedo. -¿Supongo que debería ir a prepararme?-

-¡Sí!- Chaewon sonrió con emoción y prácticamente tacleó a Hyejoo en un abrazo. Podía llegar a demostrar a la chica mayor que ella era normal. -Gracias, de nada.-

Chaewon esperó pacientemente en la sala de estar, viendo un episodio de Friends, mientras que Hyejoo se vistió. Estaba tan fascinada por los personajes en la pantalla que no oyó los suaves pasos que bajaban las escaleras.

-¿Está bien?- Una voz suave vino de detrás de ella. Chaewon se dio la vuelta, con los ojos como platos al ver a Hyejoo. La niña mayor vestía jeans negros con top guinda debajo de su chaqueta de cuero. Chaewon luchó por encontrar las palabras.

-Hermosa,- dijo después de unos momentos, poniéndose de pie y corriendo a Hyejoo. Ella pasó los dedos por el material de la chaqueta de la muchacha. -Eres tan bonita.-

Hyejoo se sonrojó y se tapó la cara, que sólo hizo que Chaewon riera tiernamente. -Vamos a ir con Hyunjin y su cita, por lo que tenemos que esperar para irnos-, explicó Hyejoo, extendiendo la mano y colocando sus manos en la cintura de Chaewon. La niña más pequeña se estremeció.

-¿Estás segura de que quieres hacer esto, Wonnie?-, Preguntó Hyejoo, presionando su frente contra la de Chaewon y sintiendo la cálida respiración de la chica más pequeña contra su piel. -Si no te sientes cómoda, no tenemos que ir.-

-Quiero- Chaewon frunció las cejas. No le gustaba que Hyejoo tratara que ella admitiera que estaba asustada. Tenía que ser normal. -Quiero-, repitió, con firmeza en su voz. Hyejoo sintió y decidió no llevar el tema más lejos.

-Hey, está bien,- Hyejoo se rio en voz baja, todavía un poco preocupada. -Yo solo estaba asegurándome.-

-Oh,- Chaewon murmuró, sacudiendo la cabeza y mirando hacia el suelo. -¿Me veo rara?-, Preguntó, dando un paso hacia atrás sacudiendo su camisa. Estaba cada vez más nerviosa.

-Te ves hermosa,- Hyejoo le dio una suave sonrisa. -Pero, ¿qué cambió?-, Se alzó una ceja.

Chaewon se sonrojó, mirando hacia el suelo. -Creo que eres tan hermosa, Oli. Me alegro de decírtelo.- Levantó la mano y corrió su pulgar por el labio inferior de Hyejoo, estudiando su rostro con atención.

El rostro de Hyejoo se puso rojo y se estremeció. Chaewon movió lentamente sus manos hasta los hombros de Hyejoo y se puso de puntillas, juntando sus labios suavemente.

Chaewon sintió la sensación de demasiado-familiar de las mariposas en el estómago. Era algo que ella no quería olvidar. Nadie más la hacía sentirse así. Sólo Hyejoo.

-¡Hey perdedoras, nuestro carro está aquí!- Hyunjin llamó, corriendo por las escaleras y la interrumpiendo a las dos chicas. Hyejoo saltó, dando la vuelta rápidamente tratando de ocultar su frustración. Chaewon se quejó por la pérdida de contacto.

-¿Estas lista?- Preguntó Hyejoo, volviéndose a Chaewon. Se mordió el labio, mirando hacia el suelo. Ella no estaba segura acerca de esto, pero tenía que demostrarle a Hyejoo que ella podría ser normal. Chaewon no quería perderla. Así que ella asintió suavemente.

-Vamos,- Hyejoo agarró la mano de Chaewon, llevándola hacia la puerta. El pequeño gesto le dio a Chaewon una ráfaga de confianza, y saltaba alegremente detrás de la niña mayor. Rápidamente se dio cuenta de que los saltos no eran normal, sin embargo, y aminoró el paso a un simple caminar.

Dentro de los quince minutos que tardaron en llegar a la fiesta, el sol desapareció detrás del horizonte. Chaewon cerró los ojos en la parte trasera del coche. No le gustaba la oscuridad. Había cosas malas en la oscuridad. Cualquier cosa desconocida era mala.

-Wonnie- Hyejoo empujó suavemente el brazo de la chica, sacándola de su trance. -Estamos aquí.- Chaewon asintió rápidamente, arrastrándose fuera del coche detrás de Hyejoo. Inmediatamente se encontró con el golpeteo fuerte del bajo proveniente de la casa.

Hyejoo miró a la pequeña, preocupada. -¿Estas segura acerca de esto?-

-Sí- Chaewon asintió con firmeza. -Ya te lo dije.-

Hyejoo respiró hondo, apretando la mano de Chaewon y lentamente caminando hacia la casa. Para ser honesta, a Hyejoo tampoco le gustaban las fiestas. Pero Chaewon había sido tan seria acerca de querer venir. Hyejoo no quiso aprovechar la oportunidad de estar lejos de ella.

Chaewon siguió tímidamente detrás de Hyejoo. La música fuerte era físicamente dolorosa en sus oídos, pero se obligó a soportar. Por Hyejoo.

Saltó cuando una bebida fue puesta en su mano al momento en que pusieron un pie en la casa. Chaewon inclinó la cabeza hacia un lado, olfateando el líquido y luego llevando la copa a los labios. Sin embargo antes de que pudiera tomar un sorbo, Hyejoo prácticamente se lo arrebató de las manos.

-No bebas eso, es malo-, advirtió, negando con la cabeza y colocando el vaso en una mesa al azar. Chaewon frunció las cejas, recogiendo el vaso de nuevo y estudiándolo. Olía muy familiar.

Una sensación nauseabunda se apoderó de ella y rápidamente dejo el vaso, moviendo la cabeza y volviendo a lado de Hyejoo. -Malo- susurró, apretando los puños.

-Hey, hey, está bien.- Hyejoo agarró la mano de Chaewon llevándola a la cocina. Tenía que hablar en voz alta para hacerse oír por encima de la música. -¿Qué quieres hacer?-

-¿Qué... ¿qué hay para hacer?- Chaewon escaneó la habitación. Una pareja estaba pegada a la pared, prácticamente comiéndose sus caras. Chaewon hizo una mueca.

-No estoy segura, la verdad,- Hyejoo se encogió de hombros. -Esta es la área de Hyunjin y Heejin, no la mía. Apenas ellas pueden conseguir que vaya a uno d– ella dejó de hablar cuando se dio cuenta que Chaewon no estaba prestando atención.

En cambio, la niña más pequeña tenía los ojos fijos en un grupo de adolescentes en la sala. Una multitud se había formado en torno a dos chicos universitarios, mirándose el uno al otro. De repente, un golpe fue lanzado, y Chaewon se estremeció.

-Mierda- Hyejoo maldijo en voz baja, agarrando la mano de Chaewon y tirando de ella fuera de la habitación antes de tuviera que ser testigo de algo más. Encontró la puerta de atrás y rápidamente llevo a ambas al patio trasero.

-¿Por qué estaban peleando?- Preguntó Chaewon tímidamente, mirando hacia atrás en dirección a la casa. Siguió a Hyejoo a un círculo de sillas en el patio.

-El alcohol hace que la gente haga cosas locas a veces,- Hyejoo se encogió de hombros, mordiéndose el labio cuando oyó un choque que venía de dentro de la casa. Se maldijo por permitir que Chaewon viniera con ellos.

-No me gusta el alcohol- Chaewon negó con la cabeza y miró hacia abajo.

-Ni a mí- Hyejoo admitió, llegando a tomar la mano de Chaewon. Sin embargo al mismo tiempo, la más pequeña recordó que se suponía que era normal. Chaewon se puso de pie y miró hacia la puerta.

-Quiero volver a entrar-, dijo nerviosamente, caminando hacia la puerta. La verdad es que todo sobre este lugar era aterrador para ella. La música fuerte, la gente, las luces intermitentes, todo. Ella lo odiaba. Pero quería pasar tiempo con Hyejoo.

Se arrastró hacia la puerta y la deslizo para abrirla lentamente. Hyejoo iba detrás de ella, cuando abrió la puerta dos hombres tropezaron a través de esta y casi se estrellaban contra Chaewon. Dio pasos hacia atrás, cachando a la chica con sus manos justo cuando caía al suelo.

-Por favor-, ella negó con la cabeza, sintiendo sus manos comenzaban a temblar. Estaban demasiado borrachos como para fijarse en ella, simplemente caminaron pasando a la más pequeña en el suelo. Chaewon gimió.

Hyejoo apretó los puños y miró a los dos hombres que se perdían de la vista.

-Vamos,- dijo en voz baja, renunciado a lo que Chaewon trataba de hacer. Sabía que estaba molestando a la chica. -¿Qué tal si salimos de aquí?-

Chaewon se secó los ojos, mirando a Hyejoo y sintiendo un nudo en la garganta. Esto no era normal. Hyejoo quería que ella fuera normal. Ella negó con la cabeza lentamente.

-Bien que mal- Hyejoo agarró la mano de Chaewon ayudándola a ponerse de pie. -Yo no quiero estar aquí tampoco, Chaewon .-

-¿En serio?- Chaewon inclinó la cabeza hacia un lado. Hyejoo asintió en silencio, llevando a Chaewon al frente de la casa.

-Pero las fiestas son normales-, susurró Chaewon. Hyejoo entrelazó sus dedos y miró a la niña más pequeña interrogante.

-¿Qué?-

-Yo no soy normal-, Chaewon negó con la cabeza y se llevó las manos para secarse los ojos. -Tengo que ser normal. Normal es bueno-.

-Estás loca-, Hyejoo mantuvo un firme control sobre la mano de Chaewon. -¿Qué hay de malo en no ser normal? ¿Quién quiere normal? -

-Tu- Chaewon señaló a la chica mayor. -Hyunjin también.-

Hyejoo recordó de pronto la conversación que probablemente Chaewon había escuchado y al instante la culpa se apoderó de ella.

-No quiero normalidad, Wonnie- ella se detuvo una vez que llegaron a la parte delantera de la casa. -Te quiero a ti. No necesito normalidad-.

-Pero...- Chaewon bajó la mirada hacia el suelo y suspiró. -Soy molesta. No soy normal. A nadie le agradaré a menos que sea normal-.

-Hey, no te atrevas a decir eso,- Hyejoo tomó el rostro de Chaewon y la miró directamente a los ojos. -Me gustas. A Hyunjin le agradas. A Yerim le agradas. A Heejin le agradas. A muchas personas les agradas. No tienes que ser normal. Ser normal es sobrevalorado-.

-Lo siento- susurró Chaewon. Hyejoo negó con la cabeza.

-No tienes nada que lamentar, babé- besó la frente de Chaewon y agarró a la chica en un abrazo. -Para ser honesta, probablemente odio las fiestas tanto como tú.-

-¿En serio?- Chaewon se rio en voz baja, alejándose del abrazo.

-Lo hago- Hyejoo reiteró lo que había dicho. Le dio a Chaewon una sonrisa tonta y agarró la mejilla de la chica más pequeña. -He oído que hay un muy buen lugar de helado de yogur a pocas cuadras de distancia. Creo que deberíamos de visitarlo-.

El rostro de Chaewon se iluminó y asintió con la cabeza rápidamente. -Me gusta el helado de yogur, mucho mejor que las fiestas.- Hyejoo se rio y rodo sus ojos juguetonamente.

-Yo también, Wonnie,- llevó a la niña más pequeña por la acera, pateando una piedra mientras caminaban. Quizás Chaewon tenía razón, esto no era normal. Pero carajo, eso era exactamente lo que quería.


Esta parte vino con muchas faltas de ortografía y me molesta tener que arreglarlas jsjajs, también con MUCHAS comas después del signo de diálogo, así que disculpen si les molesta pero da paja borrar una por una.
Lippie ✨

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