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ADVERTENCIA
Hay abuso/violencia en este capítulo. Por favor si son sensibles a este tema no lo lean. Es mejor que lo omitan, y empiecen a leer cuando las letras cursivas (flashback de Chaewon) hayan terminado.

•••

Chaewon se paró frente al espejo, limpiando descuidadamente el maquillaje de su rostro. Ni siquiera había querido ir a la estúpida fiesta, pero las chicas del equipo de animadoras la habían convencido para ir. Sin embargo, tan pronto como habían llegado allí, había sido completamente abandonada. Al no tener a nadie con quien hablar, Chaewon se fue a casa. En la lluvia.

Ella resopló, agarrando con sus pequeños dedos los bordes de la mesa y la cabeza colgando hacia abajo para tomar una respiración profunda. Como si su día no pudiera ser peor, oyó fuertes pisadas subiendo las escaleras.

Rápidamente, Chaewon cambió el interruptor de la luz a apagado y se presionó contra la puerta del baño. A medida que los pasos se acercaban, casi podía oír su corazón golpeando contra su pecho. Hoy no. No esta noche.

Los pasos se detuvieron frente a la puerta, y momentos más tarde la voz de su tío apareció a pulgadas de distancia de su oído.

-¿Dónde has estado?-

Chaewon hizo una mueca, apretando sus ojos. Solo quédate en silencio. Con el tiempo se va a dar por vencido y bajará las escaleras. Desafortunadamente, no pudo evitar jadear cuando él golpeó su mano contra la puerta.

-Chaewon, ¿dónde has estado?- Su voz era baja e intimidante. -Sal de ahí. Ahora.-

Chaewon se estremeció. Apretando la mandíbula, se volvió lentamente y abrió la puerta. De inmediato, olió el alcohol en el aliento del hombre mayor. Le revolvió el estómago.

-Sólo estaba-

-No- la interrumpió, dando un paso hacia delante. Chaewon dio un paso hacia atrás, a cambio, mordiéndose el labio cuando la espalda pego con la pared. Sus ojos recorrieron el pasillo vacío, desesperada por algún tipo de escape.

-¿Te has estado saliendo a hurtadillas de nuevo?- Se burló, inclinando la cabeza hacia un lado e inclinándose hacia delante. Chaewon simplemente guardó silencio. El silencio era mejor que cualquier cosa que pudiera decir. -Pensé que aprendiste la lección la última vez- gruñó.

-¡Habla, chica!- presionó su hombro con su dedo índice. La pequeña niña respiró hondo y se mordió el labio, evitando encontrarse con sus ojos. El aire olía a alcohol y le picaban los ojos, ayudando a las lágrimas que ya amenazaban con caer.

-El equipo de animadoras quería que yo fuera a la fiesta...- dijo Chaewon suavemente, inclinando la cabeza hacia abajo. Ella cerró los ojos, deseando que pudiera hacer clic con sus talones y mágicamente hacer todo eso desaparecer. Pero esto no era una película. Esta era la vida real. Demasiado real, en su opinión.

-¡Mierda!- escupió. Chaewon inhaló bruscamente cuando él le tomó la barbilla con la mano, levantando su cara y la obligó a mirarlo a los ojos.

Después de unos segundos de silencio, Chaewon miró a la pequeña mesa en el pasillo. Sus ojos se posaron en una foto de su tía Taeha y ella, en una de sus fiestas de cumpleaños. Por alguna extraña razón, una pequeña sonrisa se formó en su rostro.

Sin embargo fue rápidamente quitada de su rostro. Al segundo que su tío vio lo que estaba viendo, le dio la espalda y agarro el cuadro para a aventarlo y saliera volando por el pasillo. Este chocó con la pared, lo que provoco que volaran pequeños cristales en todas direcciones.

Sin pensarlo, Chaewon contuvo el aliento y corrió hacia delante, deslizándose con las rodillas tomando la foto de debajo de los cristales rotos. Ella gritó cuando una mano la agarró de la parte posterior de la sudadera, y prácticamente la coloco de pie. Chaewon se encontró con los ojos de su tío.

-Dame eso- escupió, arrebatando la imagen de las manos de la niña más pequeña. Chaewon gimió, obligándose a permanecer inmóvil en vez de luchar por ella. O esto terminaría mal.

El giró la imagen alrededor en sus manos, dejando de sujetar a Chaewon. Rápidamente ella dio un paso hacia atrás, sintiendo el cristal crujir debajo de sus tenis gastados.

-No la merecías- se rio con amargura. Chaewon contuvo las lágrimas mientras veía como el rasgaba la imagen en dos, tirando el papel detrás de él y dando un paso hacia ella.

-Deberías de haber sido tú- prácticamente gruñó. Chaewon sintió la primera lágrima escapar. Mierda. Si él la encontraba llorando, no tardaría en pasar lo inevitable. Presa en el pánico, rápidamente trató de escapar pasando junto a él dirigiéndose a su dormitorio. Mala idea.

La chica hizo una mueca de dolor cuando unos dedos fuertes se cerraron alrededor de su muñeca, tirando de ella hacia atrás y estrellándola contra la barandilla. Ella se quedó sin aliento, mirando detrás de ella en el largo descenso por las escaleras. Su mano libre inmediatamente apretó la barandilla, tratando de mantener los pies firmemente plantados en el suelo.

-Lo siento- susurró Chaewon, sintiendo su voz quebrarse en sus palabras. No podía controlar las lágrimas, y utilizaba su mano temblorosa para tratar de secarse los ojos antes de que fuera descubierta. Desafortunadamente, momentos más tarde, se encontró con la mano levantada y una conexión de esta contra su cara. Ella se estremeció, sintiendo el calor de la mano contra su mejilla.

-No, no lo sientes-, se rió con amargura. -Tú la mataste. ¿No crees que ya haz evitado la muerte demasiadas veces? -

Chaewon se quedó quieta, enfocando sus ojos en la pared detrás de la cabeza de él. Su respiración era inestable, y ella todavía estaba atrapada por la caída justo detrás de ella. Si quería, el podía enviarla volando sobre la barandilla con un solo empujón.

Sus manos fueron llevadas hasta sus hombros, clavando sus pulgares en el espacio debajo de sus clavículas. Ella gimió, tratando de quitárselo de encima. Esto sólo aumentó la presión sobre ella, moviéndose más cerca de su cara.

-Debimos de nunca haberte acogido- su voz era un susurro, en una octava en la que Chaewon sólo la podia asociar con odio puro. Ella cerró los ojos, tratando de borrar el olor de alcohol de su memoria.

-Eres como un jodido encanto de mala suerte-, continuó, clavando sus uñas en su espalda. Tomó todo en ella para no gritar. Si lo hacía, sólo empeoraría las cosas.

-Primero tus padres, después Taeha, ¿quién sigue? ¿Yo? -, Se rió entre dientes, soltando a Chaewon con un pequeño empujón que casi envió a la chica caer hacia atrás. Rápidamente se agarró a la barandilla, haciendo una mueca cuando sintió los pequeños cortes en sus hombros.

-Le podría decir a alguien, ya sabes,- Chaewon espetó. Ella no sabía lo que dentro de ella la había llevado para abrir la boca, pero lamentó al segundo que lo hizo. El hombre grande giró la cabeza, mirándola.

-¿Qué fue eso?-, Le miró, haciendo que el corazón de Chaewon se acelerara. -¿Y qué es exactamente lo que le vas a decirle a alguien?-

Chaewon tragó con fuerza, apretando los puños. -Acerca de esto-, le indicó a él. -Acerca de ti.-

-Pero no lo harías-, se rió con amargura. Chaewon inhaló lentamente, sabiendo que el tenía razón. Él era la única familia que le quedaba. Y la familia es la familia, no importa lo jodido que pudiera ser.

Sabiendo que había ganado, se rió para sus adentros y desapareció por el pasillo. Al segundo que Chaewon escuchó el portazo que indicaba que había cerrado su dormitorio, se apresuró a regresar al cuarto de baño. No tenía tiempo para lágrimas.

Cuando esto había comenzado, ella se pasaba horas llorando. Pero ahora, se había acostumbrado. Chaewon pensó que no tenía sentido en sentir lástima de sí misma. Esto era cómo se suponía que su vida tenía que ser. Algunas personas estaban destinadas a ser políticos, algunos hombres a recoger la basura, y Chaewon era la destinada a ser la receptora del abuso de alguien. Eso debía de haber sido cómo el universo quería que fueran las cosas para ella.

Cerró la puerta detrás de ella, dejarla sin cerrar era un error fatal que había hecho antes. Su mano encontró con el interruptor de la luz, jugo con él por unos momentos. Mordiendo su labio, decidió por mantener la luz apagada. Prefería estar en la oscuridad a enfrentarse con su reflejo. Ya que solo esto haría las cosas más reales para ella.

La pequeña niña se quitó su camisa, la arrojó a un lado y pasó sus dedos a través de las heridas en la espalda. Era casi como si clavando sus uñas en sus hombros dejara una marca. Como si quisiera asegurarse de que las cicatrices dejaran un recordatorio permanente del dolor que había infligido.

Cuando apartó las manos y sintió la sangre, Chaewon suspiró suavemente. La luz de noche en el baño le dio luz suficiente para hacer su camino al lavabo. En silencio, ella humedeció una toalla de papel y se secó los hombros, para liberar de su piel la sustancia roja.

Una vez que se había limpiado, se echó agua fría en la cara para tratar de mantener las lágrimas. Con un suspiro profundo y tembloroso, salió del cuarto de baño y fue de puntillas hasta el extremo opuesto de la sala.

Encendió la luz una vez que llegó a su habitación, rodeada por el color amarillo cegador de sus paredes. La pequeña niña se cambió en su pijama, colapsando en el extremo de su cama con un profundo suspiro.

Un movimiento por el rabillo del ojo captó su atención. Chaewon se incorporó lentamente, arrastrándose más cerca de su ventana. En la casa de a lado había una ventana que a través de ella pudo distinguir dos siluetas detrás de la cortina.

Una de ellas era una niña. Ella lo sabía, ya que había visto a la joven familia afuera en una ocasión. Ella vio como la chica más pequeña saltó a los brazos de la figura, envolviendo sus brazos pequeños alrededor del cuello de la persona. Chaewon suspiró. En un arranque de frustración, cerró su cortina y pateó el borde de su mesa de noche. No era justo.

¿Por qué tenía que ser ella?

Chaewon apagó las luces, ya que no tenía interés en estar despierta por más tiempo. Ella con mucho gusto tomaría cualquier tipo de escape que el sueño podría ofrecerle. Suavemente, se arrastró debajo de sus mantas.

Cuando era una niña, Chaewon siempre creyó que sus mantas podían mantener las cosas malas fuera. No importaba qué, era como si los monstruos imaginarios no podían tomarla mientras estuviera bajo las mantas. Pero ahora, sabía que eso no era cierto. Porque allí estaba, debajo de sus mantas, y todavía podía sentir la sensación del calor en la mejilla en donde su tío la había golpeado.

Si las mantas no guardaron las cosas malas afuera, entonces, ¿qué lo haría?

-¿Chaewon?-

La niña más pequeña saltó cuando la voz de Hyejoo invadió sus visiones. De repente, ella fue arrastrada de nuevo a la realidad. Todo comenzó a esfumarse de su visión hasta que finalmente pudo ver con claridad. La niña más pequeña se estremeció, dándose la vuelta y dándole la cara a la chica contraria.

-¿Acabas de...?- Hyejoo señaló Chaewon y luego de vuelta a sí misma. -¿Acabas de...?- Ella luchó por encontrar las palabras adecuadas.

Al segundo que Chaewon la miró con los ojos vidriosos, Hyejoo dio un paso hacia delante y tomó las mejillas de la niña más pequeña. -Hey, hey, mírame,- dijo en voz baja, manteniendo la voz baja en un intento de no asustar a la chica.

Chaewon parpadeó un par de veces, mirando a Hyejoo. La chica mayor casi podía sentir el dolor que irradiaba la niña más pequeña.

-Chaewon, mírame,- Hyejoo repitió. -Esto...- ella hizo un gesto por la habitación. -Esto es real. Esto es este momento-.

-Y eso...- Ella se acercó y señalo con su dedo índice en la sien de Chaewon. -Eso no es real. Está en el pasado. Se ha ido... se acabó-.

Todo lo que la niña más pequeña podría ofrecer era un gesto lento antes de que se llevara las manos para ocultar su rostro, sintiendo la primera lágrima por su mejilla. Hyejoo respiró hondo y metió a Chaewon en sus brazos.

-Vamos a acostarnos, ¿de acuerdo?- Hyejoo agarro su toalla con una mano y con la otra llevó a Chaewon por el pasillo. Estaba agradecida que sus compañeras no estuvieran en casa por unas horas, de lo contrario tendría mucho que explicar.

Una vez que llegaron al dormitorio, Chaewon suavemente suspiro y caminó hacia el armario. Hyejoo hizo lo mismo, cambiándose en una camiseta suelta y un pantalón suelto. Chaewon optó por un par de shorts y una camisa de gran tamaño de bandas de Hyejoo. Chaewon observaba ansiosamente mientras Hyejoo se terminaba de cambiar.

Sin ninguna palabra, Hyejoo se arrastró sobre la cama. Ella palmeó el espacio a su lado, que Chaewon llenó rápidamente. Acostada de espalda, Hyejoo atrajo a Chaewon a su lado. La niña más pequeña apoyó la cabeza en el hombro de Hyejoo, tratando de respirar profundamente y dejando que los restos de su memoria se fueran.

-Dime acerca de lo que viste- Hyejoo susurró después de unos momentos de silencio. Chaewon miró con confusión, sus ojos vidriosos se reunieron con los de Hyejoo.

-Trata y dime lo que viste-, explicó Hyejoo, empezando a acariciar el cabello de Chaewon. -Tienes tanto encerrado allí-, susurró, pasando su pulgar sobre la frente de Chaewon. -Eso es mucho para que lo maneje alguien tan pequeño. Tal vez decirle a alguien te ayudará a quitarte un peso de encima-.

-Me golpeó,- susurró Chaewon, apartando la mirada de Hyejoo por la vergüenza. La tinta negra cerca de la clavícula de la chica le llamó la atención y poco a poco se acercó, pasando los dedos sobre la piel expuesta de su tatuaje. Hyejoo se estremeció.

-Continua-, susurró la niña mayor, a pesar de que preferiría no escuchar estos recuerdos. Chaewon no se merecía todo lo que le había sucedido. Y ahora, ella tenía prácticamente vivir todo de nuevo. Pero Hyejoo haría cualquier cosa para aliviar su dolor.

Los dedos de Chaewon siguieron trazando el contorno del tatuaje de Hyejoo, moviéndolos trazando la forma de los pétalos de la margarita. Se mordió el labio y miró a Hyejoo.

-Era de noche-, continuó, recordando más detalles. -Y volvía de una fiesta... y él estaba enojado. Y él me golpeó. Y... -De repente, recordando algo, Chaewon se sentó rápidamente.

Hyejoo se confundió cuando Chaewon tiro rápidamente su camisa sobre su cabeza. La pequeña niña volvió la cabeza tanto como pudo, tratando de ver la parte posterior de los hombros.

-¿Qué estás haciendo?- Hyejoo se sentó junto a la chica, colocando una mano sobre los hombros de Chaewon. Momentos más tarde, la niña más pequeña no pudo evitar echarse a llorar.

-¿Qué pasa?- Hyejoo colocó rápidamente a Chaewon en su regazo, y la niña más pequeña hundió la cabeza en el cuello de la niña mayor. Los ojos de Hyejoo viajaron hasta los hombros expuestos de Chaewon, dándose cuenta lo que buscaba cuando vio las pequeñas cicatrices en ambos lados.

-¿Él te hizo esto?- Preguntó Hyejoo suavemente, pasando los dedos sobre la cicatrices blancas. Chaewon se estremeció al principio, pero se calmó con su toque. La niña más pequeña, simplemente asintió, avergonzada de que había dejado que esto le sucediera.

-Aquí-, susurró Hyejoo, llegando a su mesa de noche tomando un marcador negro. Chaewon se confundió cuando Hyejoo destapó el plumón y comenzó a dibujar algo en su espalda.

-¿Qué estás haciendo?- Chaewon aspiró, levantando un poco la cabeza tratando de estirar el cuello hacia atrás.

-Dándole las estrellas,- Hyejoo se mordió el labio en la concentración antes de dejar el plumón a un lado. Antes de que Chaewon pudiera hacer cualquier otra pregunta, Hyejoo bajó de la cama jalando a Chaewon con ella llevándola frente al espejo en la pared dándole la vuelta para que pudiera ver su espalda.

-Gira tu cabeza un poco,- Hyejoo instruyó, empujando suavemente la barbilla de Chaewon a un lado para que pudiera ver su reflejo en el espejo. Los ojos de la niña más pequeña se agrandaron cuando vio las estrellas pequeñas, de negro garabatos donde sus cicatrices habían estado.

-Eres una galaxia, Wonnie,- susurró la niña mayor, arrastrando los dedos por la espalda de Chaewon. -Hay un sin fin de pensamientos, sentimientos y emociones todos almacenados en ti.-

-Y sólo porque algún amargo agujero negro intenta robártelos, nada puede controlarte-, Hyejoo continuó, mirando a los ojos de Chaewon en el espejo. -Al final, ganas con sólo seguir existiendo.-

-Y sí, tal vez tienes algunas cicatrices para demostrarlo-, Hyejoo se encogió de hombros y le besó la mejilla. -Pero hay mucho más para ti que tu cuerpo. Él no puede dañar lo que realmente importa.- Dio la vuelta a Chaewon y llevó su mano justo encima de su corazón.

-No importa cómo nos caemos, o las cicatrices que tenemos que mostrar por ello,- Hyejoo corrió su pulgar sobre la suave piel en la mejilla de Chaewon, capturando las lágrimas que habían caído. -Todo lo que importa es que vuelvas a levantarte.-

Un momento de silencio pasó entre ellas mientras que los ojos vidriosos de Chaewon estudiaban los de Hyejoo. De repente se movió hacia delante, prácticamente tacleó a la niña mayor en un abrazo. Sus manos se aferraron a la parte posterior de la camisa de Hyejoo y hundió su cabeza en el hueco de su cuello.

-Gracias-, Chaewon murmuró contra la piel de Hyejoo, haciendo que la otra chica tuviera escalofríos. -Tú me ayudas mucho. No sé qué haría sin ti.-

-Puedo decir que un montón de palabras bonitas, pero al final del día tu eres la única asombrosa aquí, Chaewon- Hyejoo apretó la mano de la niña más pequeña y suavemente la llevó de vuelta a la cama. Chaewon inmediatamente se metió bajo las sábanas, mirando a Hyejoo.

Una vez que Hyejoo volvió a acostarse, Chaewon reanudó en trazar el contorno de su tatuaje. -El rompió una fotografía,- la niña más pequeña continuó.

-No tienes que...- susurró Hyejoo, levantando la cabeza cuando se dio cuenta Chaewon todavía estaba tratando de explicar lo que había visto. La niña negó con la cabeza.

-Quiero- se mordió el labio. -Necesito.-

-Si sientes que puedes,- Hyejoo dio a la chica una suave sonrisa. Chaewon asintió y dirigió su atención hacia el tatuaje de Hyejoo, riendo en voz baja cuando vio que a la chica se le había puesto la piel de gallina a su toque.

-La foto era de mí. Y mi tía... Tía Taeha,- Chaewon trago su nudo en su garganta. -Él la rompió... y él... él me golpeó,- respiró hondo y miró a Hyejoo para estudiar su reacción.

-¿Quieres detenerte?- Preguntó Hyejoo, notando ansiosa a Chaewon. La pequeña niña sólo suspiró y asintió con la cabeza, apoyando la cabeza en el hombro de Hyejoo.

-¿Cantas?- Susurró Chaewon, mirándola. Hyejoo se rio en voz baja y alisó el cabello de Chaewon.

-Sólo para ti-, le besó la frente de Chaewon y miró hacia el techo cuando comenzó a cantar.

I've been awake for a while now

(He estado despierta desde hace un tiempo)

You've got me feelin' like a child now

(Me tienes sintiéndome como un niño ahora)

'Cause every time I see your bubbly face

(Porque cada vez que veo tu cara burbujeante)

I get the tingles in a silly place

(Me sale el hormigueo en un lugar tonto)

It starts in my toes

(Que inicia en mis dedos de los pies)

And I crinkle my nose

(Y yo arrugo mi nariz)

Wherever it goes

(Donde quiera que vaya)

I always know

(Siempre sé)

That you make me smile

(Eso me haces sonreír)

Please stay for a while now

(Por favor, quédate por un tiempo ahora)

Just take your time

(Solo tomate tú tiempo)

Wherever you go

(Donde sea que vayas)

The rain is falling on my window pane

(La lluvia está cayendo en el cristal de mi ventana)

But we are hiding in a safer place

(Pero estamos escondiendonos en un lugar más seguro)

Under covers staying dry and warm

(Bajo cubiertas permanecemos secos y cálidos)

You give me feelings that I adore

(Y me das sentimientos que adoro)

It starts in my toes

(Que inicia en mis dedos de los pies)

And I crinkle my nose

(Y yo arrugo mi nariz)

Wherever it goes

(Donde quiera que vaya)

I always know

(Siempre sé)

That you make me smile

(Eso me haces sonreír)

Please stay for a while now

(Por favor, quédate por un tiempo ahora)

Just take your time

(Solo tomate tú tiempo)

Wherever you go

(Donde sea que vayas)

But what am I gonna say?

(Pero ¿qué voy a decir?)

When you make me feel this way

(Cuando me haces sentir de esta manera)

It starts in my toes

(E inicia en mis dedos de los pies)

And I crinkle my nose

(Y yo arrugo mi nariz)

Wherever it goes

(Donde quiera que vaya)

I always know

(Siempre sé)

That you make me smile

(Eso me haces sonreír)

Please stay for a while now

(Por favor, quédate por un tiempo ahora)

Now just take your time

(Ahora solo tomate tu tiempo)

Wherever you go

(Donde sea que vayas)

I've been asleep for a while now

(He estado dormido desde hace un tiempo)

You tuck me in just like a child now

(Usted me meter en tan sólo como un niño ahora)

'Cause every time you hold me in your arms

(Porque cada vez que me tienes en sus brazos)

I'm comfortable enough to feel your warmth

(Yo soy lo suficiente para sentir su calor confortable)

It starts in my soul

(Y comienza en mi alma)

And I lose al control

(Y pierdo todo el control)

When you kiss my nose

(Cuando besas mi nariz)

The feeling shows

(Los sentimientos se muestran)

'Cause you make me smile,

(Porque me haces sonreír,)

Baby, just take your time

(Bebé, toma tu tiempo)

Now holdin' me tight

(Ahora abrázame fuerte)

Wherever, wherever, wherever you go

(Donde quiera, donde quiera, donde quiera que vayas)

Wherever, wherever, wherever you go

(Donde quiera, donde quiera, donde quiera que vayas)

Wherever you go

(Donde sea que vayas)

I always know

(Siempre sé)

'Cause you make me smile

(Porque me haces sonreír)

Even just for a while

(Aunque sólo sea por un rato)

-¿Más?- Chaewon se rio, mirando a Hyejoo. La niña mayor se rio en voz baja y pasó los dedos por el cabello de Chaewon .

-Solo para ti.-

Solo les queda un capítulo a favor por la maratón, planeo subirlo mañana. Recuerden votar por loona en starpass y guardad los 500 heart jelly para la votación en vivo :] hay que darles ese segundo win
Lippie ✨

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