capitulo 20 : un louis mentiroso.
Narrador omniciente :
Mientras tanto, en el centro de la ciudad, un ojiazul hacía las compras del mes (o más o menos para lo que le alcanzara el dinero), en ese momento se encontraba en el supermercado, justo en la sección de snack's, aún debatiendo en su cabeza si le alcanzaría para todo o por lo menos para lo más necesario. Louis empezó a trabajar semanas después de la muerte de sus padres, cuando la comida se terminó y los gastos comenzaron a llegar, actualmente tiene dos empleos, trabajaba en dos bares sirviendo bebidas.
Uno de los bares en los que trabaja es de mala muerte, y para su suerte, es en el que más trabaja y menos le pagan, pues trabaja en ese bar semanalmente, y en el otro, solo trabajaba los sábados. Aquel trabajo le daba mucho más dinero que el primero, que por que no dejaba el primero ?, muy sencillo, "cada centavo cuenta".
Obviamente, louis es menor de edad, solo tiene dieciséis y no es como si su aspecto le ayudase a pretender mas edad, por lo tanto, trabajaba ilegalmente. El mismo castaño, suponía que sólo fue suerte, no todo el mundo, permite que menores de edad sin autorización de sus padres y/o tutores trabajen, y mucho menos en lugares asi.
Richard, un hombre tacaño y egoísta, accedió a darle trabajo a louis con la condición el tercio del salario correspondiente, y como el ojiazul estaba desesperado, así que no tenía otra opción, tuvo que aceptar los términos.
Tiempo después, pudo encontrar un segundo empleo, un club nocturno, el cual tenía por nombre "universo rosa", trabajaría como barman y solo tendría que compartir las ganancias con su compañero de trabajo cory, cincuenta por ciento es más que nada.
Para su casualidad, este lugar era un bar LGBT, rápidamente, aprendió el arte del coqueteo, el trabajo en el lugar era muy sencillo, coquetear con un hombres, hacerles comprar bebidas y así ganar dinero. No era algo de lo que louis se enorgullesca, pero daba para las cuentas y la comida, por supuesto que jamás se involucraría con un cliente, con nadie, louis tenía una meta que alcanzar :
1. Estudiar y ser el mejor en su clase, solo así conseguirá una beca universitaria.
2. Ahorrar suficiente dinero para escapar de casa.
3. Ser libre.
Tres simples y sencillos pasos que le darían la suficiente madurez y determinación, para algún día (ya recalque "algún dia" ?) Pueda especializarse en diseño de modas, ya que se la pasaba haciendo bocetos en su cuaderno, cuando tenía tiempo libre, claro. Soñaba con que algun día, famosas estrellas de cine, artistas, etc, podrían lucir sus creaciones en la alfombra roja.
Louis dio un suspiro y puso sus pies en la tierra, en ese momento tenía que decidir qué llevar, ya que su hermano Tomy, le pidió, no, le ordeno que le trajera unas frituras, pero esas frituras eran muy caras. Y si las comprara, no le alcanzaría para otras cosas que eran mucho más importantes, pero si no las compraba, tendría una paliza segura por parte de su hermano.
Escogió la mejor opción, estaba a punto de tomar las frituras de queso del estante, justo cuando su mano se topó con otra, la de una mujer madura, para ser exactos.
— perdón, puede tomarlas, us...— el mismo louis callo su voz, no tenía palabras, piel blanca, castaña, casi del mismo alto que el ojiazul, esa mujer era anne styles.
— no te preocupes, cariño, puedes...dios mío, louis ?, eres mi louis tomlinson ? — pregunto la mujer, con aquella voz dulce y atenta, la misma que le recordaba a harry, literalmente, los styles estaban en todos lados.
— amm, y-yo...hola anne — el pobre castaño apenas si pudo articular palabra, la susodicha miró a Louis, con ojos vidriosos, para luego darle un abrazo.
— cielo, no sabes cuanto ten extrañé, no volví a saber de ustedes después de la mudanza — comento anne, para luego separarse de louis y analizarlo rápidamente — awwwww...sigues siendo el mismo chico que se robó el corazón de mi Harry — dijó, louis aguanto las lágrimas en ese momento, malos recuerdos llegaban a su mente — dios mío !, que es esto !? — anne miraba a louis de manera perturbada, mientras que pasaba sus dedos por el rostro del ojiazul, justo donde estaba su cicatriz, para ser exactos.
— amm, tuve un accidente...y me corte — se excusó el ojiazul, louis sabía sabia muy que estaba mintiendo, no fue un accidente, fue un castigo, y el recuerdo de aquel momento ahora adornaba su mejilla izquierda. Una prolija cicatriz que iba desde más abajo de su cien hasta su mentón, por suerte, se podía cubrir con maquillaje...pero era demasiado difícil cubrirla.
— oh, entiendo...como están tus padres — soltó ella son sutileza, el ojiazul sintió como un balde de agua fría caía sobre el al escuchar esa pregunta.
"Que irónico, será un recuerdo ?" — pensó el, mientras asentía desorientadamente.
— ellos están bien — una mentira más no haría daño...o si ?, sus padre se encontraban seis metros bajo tierra, y no, no quería lastima de nadie, y por más que amara a anne como una segunda madre, le dio la sonrisa más falsa que dio en su vida.
— me alegro Louis, aunque...te ves algo delgado, sin ofender — dijo anne, mientras que louis se mantenía cabizbajo, odiaba que lo criticaran, aunque solo comentaran por pura preocupación — te encuentras bien ? — pregunto la mujer, de manera cautelosa.
— s-si, es solo que...tengo que irme, hay varias cosas que debo comprar — louis volvió a excusarse, anne le dio una mirada comprensiva y triste, como si ella supiera algo que el no.
— claro, por supuesto...oh, si llegas a necesitar algo, puedes llamarme — anne saco de su bolso una tarjeta con su número, para luego entregársela a louis — en serio, si necesitas ayuda, solo llámame...ok ? — insistió la mujer, Louis solo asintió y tomó la bolsa de frituras con queso, para luego ponerla en su canasta, anne hizo lo mismo.
— adiós, anne — se despidió Louis.
— hasta pronto louis, cuidate mucho — la castaña comenzó a caminar lejos de él, hasta que salió del pasillo, el ojiazul dio un suspiro cansado en ese momento, por que ?, por que ahora ?. Era como si el destino le intentase decir algo, solo sacudió su cabeza ligeramente, para luego concentrarse en las compras.
Narra shawn:
Alexia me había invitado a su casa con la intención de ver una película, en muestra de agradecimiento, me sentí un tonto al haberle rechazado, explicándole que no podía faltar por más tiempo al trabajo. Ya había faltado dos días, y en uno de ellos mentí para no asistir, aunque debía admitir que me gustaba estar con alexia.
Ya no tenía tiempo para cambiarme de ropa, así que solo fui a casa por mi audi, me sentí extrañamente nervioso, raven me conocía demasiado bien y lo más probable es que ella pensara que le había mentido, por que así fue. Aquella latina no era para nada bonita cuando se enojaba, y estaba cien porciento seguro de que me mataría, ok, fui demasiado dramático, pero estaba en lo correcto al explicar que estaría en serios problemas.
(...)
Cuando por fin entré a la cafetería, zayn fijo su vista en mi, para luego rodear el mostrador apresuradamente y abalanzarse a abrazarme, zayn es muy alegre y divertido, el es aquel tipo de persona que podía iluminar la habitación más oscura con presencia.
— no sabes cuanto te extrañe, ayer vino la señora garner y literalmente me insultó porque se acabaron los brownies...en serio te necesitaba! — explicó, el moreno era toda una mezcla de emociones en ese momento, tanto que me costaba identificar cada una — dios, he estado tan ocupado que ni siquiera me ha dado tiempo de separar por colores mis ositos de goma, oh, es una marca nueva que compre !...— me sentía mareado, cuando zayn empieza, no hay quien lo pague.
— ammm...ze, yo...— el me volvió a interrumpir.
— déjame terminar — dijo el — raven es tan irritante, hoy se quedo conmigo porque según ella se sentía demasiado mal como para ir a la universidad, y que gran casualidad que hoy, Charlie tendría que presentar un examen muy importante y por eso no se pudo quedar — comento el, se veía muy gracioso haciendo todo ese tipo de expresiones raras, pero aún así me mantuve indiferente.
— chicos, se que no hay nadie por atender...pero saben muy bien que la barra no se debe quedar sola — raven aprecio de la nada, la chica se dirigió a nosotros con voz firme, aveces ella podía llegar a intimidar.
— lo s-siento raven — me disculpe, para luego dirigirme junto con zayn a la barra, raven se sentó en uno de los taburetes.
Hice mi rutina común, tomé un mandil y me lo puse, me recargué en la barra, al darme cuenta de que aún no habían clientes por atender.
— y...como te sientes shawn ?, mucho mejor ? — pregunto raven, la susodicha parecía muy interesada en el tema, ella lo sabe todo, estoy taaan...muerto.
— b-bien, mucho mejor — respondí con original nerviosismo, ella me miró con los ojos entrecerrados, mientras que zayn se rascaba la nuca compulsivamente.
— shawn...hay algo que quieras decirme ? — raven me estaba fulminado con la mirada, talvez debería decirle, no hice nada malo después de todo.
— me ayudas ? — le suplique a zayn, en ese preciso momento, una chica tocó la campanilla del mostrador, y lo siguiente fue que el moreno me dio una mirada de "ops, lo siento".
— oh dios!, que veo ahí ?, una clienta...lo siento, shawn, pero amo mi trabajo! — exclamo el chico, podía notarse su falsa pena a kilómetros, de eso estaba muy seguro.
— shawn...— reproche, reproche, reproche.
— mentir es malo ? — pregunte, sonando inocente, demasiado para mí gusto.
— solo cuando me mienten a mi — respondió raven, de manera tosca — ahora...escupelo! — pidió ella, yo ladeé la cabeza con confusión.
— eso es antigénico — comente, ella se golpeó la cara con la Palma de su mano, estaba frustrada ?.
— no literalmente, shawn — me explico la castaña — quise decir que me contaras la verdad — continuo.
— oh...
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