Narra shawn/ al mismo tiempo:

Emily, mi padre y yo nos encontrábamos en la sala, mientras que mi nana hacía la cena, Emily saltaba y corría por toda la sala, se veía realmente feliz por el vestido de princesa que mi padre le compró, yo observaba el resto de las cajas y bolsas que eran para mi. No me malinterpreten, mi padre también le compró muchos otros regalos a mis hermanos, tomé una de las bolsas, la cual me llamaba mucho la atención, cuando vi su contenido, noté que era un buzo de tay die en color azul y blanco.

El buzo se asemejaba mucho al cielo, me encantaba, no, me fascinaba, pero aún así mantuve mi expresión neutral.

— te gusta ? — me pregunto mi padre, parecía muy emocionado he impaciente por mi respuesta, solo asentí en ese momento.

— g-gracias papá, m-me gusta mucho — le respondí con neutralidad.

— te mataría sonreírme ? — me pregunto el, yo asentí — shawn... — mi padre dijo mi nombre en forma de reclamo, yo le sonreí falsamente en respuesta, podría ser actor algún día, al parecer se lo creyó.

— ammm...p-papa, e-esta bien si veo las demás c-cosas más tarde ? — le pregunte a mi padre, el asintió con compresión.

— claro, no hay problema, pero...no te gustaría abrir la caja grande ahora ? — me pregunto el, había algo muy parecido a la emoción en su rostro, supongo que era algo muy bueno.

Asentí con la cabeza y tomé la gran caja rectangular entre mis manos, la agite un poco y pude ver que no era muy pesada pero tampoco muy ligera, delicadamente, tome la tapa entre mis manos y cuando la pude abrir, mis ojos se cristalizaron...era un guitarra. Esta era de un color caoba cobrizo, era muy hermosa, recuerdo cuando nana me regaló mi primera guitarra, la tenía en mi casa, la que me dio en mi décimo cumpleaños, el año en que mamá se fue.

— papá, p-podre ser normal a-algun día ? — le pregunte con la voz entrecortada, las lágrimas mojaban mis mejillas, el me dio una mirada de lástima, de pena, odiaba esas miradas.

— campeón — empezó con la voz suave — tu ya eres normal para mi, para emily, para nana y para tus amigos...raven, zayn, Charlie también, para nosotros eres normal a tu manera, todos somos diferentes pero tu...eres único, y algo me dice que harás algo grande con tu vida — me dijo, con una sonrisa en su rostro, el estaba acostumbrado a estas pequeñas "crisis" que sufría constantemente.

"Sonreí falsamente...otra vez"...

"Era mejor que a que se preocupara por mi"...

Narra garnet :

Me molestaba que mi padre tuviera preferencia hacia shawn, se que soy el hijo mayor, pero jamás he hecho algo malo para merecer que mi padre me ignore. Si, talvez me burlaba de shawn o algunas veces tenia mis roces con el, pero es mi hermano y lo quiero....a mi manera, aunque aún me sentía resentido.

Llevaba caminado como más de media hora, tanto que ya había llegado al vecindario en donde shawn vivía, saque un cigarrillo de mi bolsillo, lo prendí con mi encendedor y le di una calada, era tarde y la calle estaba sola. Eran las ocho y media de la noche, estaba pensando en llamar a alguno de mis amigos, cuando escuché un sonido, como cuando dejas caer algo. Mire hacia el frente y pude ver un chico, se veía bastante joven, estaba sentado en una mecedora y me miraba fijamente, sus ojos estaban cubiertos por un par de lentes de sol.

"Quien usa lentes de sol en la noche ?"— me pregunté internamente.

Camine hacia el, necesitaba distracción así que, Cruze hacia la calle y mi dirigí hacia su casa, pase por el jardín y me senté al pie de las escaleras de su portico.

— puedo hacerte compañía ? — le pregunte de manera coqueta, el solo me ignoro — ammm...me estas escuchando ? — volví a preguntar de manera incómoda.

Me levanté de mi sitio y camine hacia el, pase mis manos por su rostro, el no se inmutó ante mis acciones, y en ese momento, se me ocurrió quitarle los lentes de sol, pude ver en ese momento cómo sus ojos se encontraban cerrados, el chico estaba dormido. Soy un idiota, ni siquiera me di cuenta de que el chico estaba dormido, la idea de hacerle una broma paso por mi cabeza, así que tomé otra calada de mi cigarrillo y lo solté en su rostro.

Aquel chico, comenzó a toser y en seguida se despertó, quedé totalmente fascinado con el color de sus ojos, estos eran de un color café extremadamente claro, así como de un color ámbar, por instinto lo tomé de las manos, estas comenzaron a temblar.

— quien es ?...— pregunto el chico, con voz asustada he insegura.

— como que quien es ?, niño — le pregunte extrañado y vi como eso lo puso más nervioso, como prueba, hice un gesto de como si lo fuera a golpear, pero el ni siquiera se movió — eres ciego — mi voz sonaba confusa, aún cuando estaba afirmando.

— si, p-podrias decirme ....quien eres ? — me pregunto el muchacho.

— oh, si, pues...mi nombre es garnet, y pasaba por aquí cuando te vi, te vi solo así que quise entablar una conversación contigo, siento mucho haberte despertado....solo quise hacerte una broma — lose, maquille un poco-bastante la verdad, que ?, si le decía la verdad sonaría como un raro, "oye chico, caminaba por aqui con toda la miseria del mundo hasta que escuche un ruido, que probablemente fue mi imaginación y ahora mismo te estoy hablando sin conocerte ", patético no ?.

— ummm...entiendo, y se puede saber de que quieres hablar ? — me preguntó el.

— pues en verdad no lose, cieguito — reí internamente por el apodo que le improvise al chico.

— soy oliver, solo te lo digo para que no me pongas apodos ridículos — me comento el.

— wow, el cieguito se defiende — me reí con gracia.

— eres patético — dijo oliver, en un susurro irritable.

— hey, el patético aqui, eres tu, yo si tengo vida social y no paso la noche en el pórtico de mi casa — me defendí hábilmente, empeze a discutir con el.

— y quien crees tu que es más patético ?...porque a mi parecer, es bastante miserable que estés esquivando tus verdaderos problemas personales, hablando con un discapacitado mientras inhalas de tu cigarrillo, cuando mejor podrías estar conviviendo con tu familia — vaya, vaya, al parecer el chico es bastante inteligente, me había destrozado con unas cuantas palabras.

— debo admitir que he quedado sorprendido por tu respuesta, cieguito — le comente de manera coqueta — y...tienes amigos, liv ? — le pregunte para cambiar el tema.

— ahora me llama liv — reclamo en voz baja — no, acertaste, no tengo vida social...no tengo amigos — escupió el con simpleza.

— y siempre estás aquí solito ? — le volví a preguntar, esta vez, con aire infantil.

— desde que despierto hasta me duermo — se encogió de hombros, mientras me respondía.

— vaya...— exclame — entonces yo seré tu amigo — le dije.

— por qué querrías ser amigo de un ciego ? — me pregunto oliver, su rostro expresaba extrañeza.

— por qué supongo que a ambos nos falta un amigo...un verdadero amigo — le respondí con franqueza.

— reconoces este sonido ? — le pregunte, mientras agitaba sus lentes de sol, los cuales aún se encontraban en mis manos.

— ammm, no lose, suena raro....que es ? — preguntó el, tímidamente.

— son tus lentes de sol — le respondí.

— quiero que me los devuelvas — me ordeno el ojimiel, parecía enojado.

— huuuuy, el cieguito está molesto — me burle — tranquilo, no te los pienso dar...por ahora, prometo dárselos mañana — le dije.

— que ?, no los quiero mañana, los quiero ahora ! — debía admitir que el chico era verdaderamente atractivo cuando se enojaba.

— wow,  se nota que me extrañaría si me voy — dije con sorna, mientras me acercaba más a el, considerando que me había alejado un poco, tomé sus rostro entre mis manos, sus ojos tenían una mirada perdida.

— q-que haces ? — pregunto liv, de manera nerviosa.

— solo quiero besarte — le respondí en un susurro, eso pareció alarmarlo más, pero ya era muy tarde, ya había juntado mis labios con los suyos.

Nos besabamos con un vaivén lento, el me siguió el beso casi al instante, el me tomo por los hombros, mientras que yo lo apegaba más a mi cuerpo, sin que el chico se levantara de la mecedora, la falta de aire nos separó.

— cuán...tos...cuantos años tienes ? — me pregunto oliver, entre jadeos.

— por qué la pregunta, cieguito ? — le respondí con una pregunta.

— que se yo si eres un viejo con voz de adolescente ? — dijo el con burla, yo me toque el pecho dramáticamente, aunque el no pudiera verme.

— para tu información, acabo de cumplir dieciocho — le comenté, en fracción de segundos, su expresión cambió a una de sorpresa.

— dios mío...— exclamó el — eres un asalta cunas, tengo dieciséis — me acusó el, mientras miraba a la nada.

— oh vamos, solo te llevo dos años...no es el fin del mundo, mi cieguito — le respondí burlón.

— maldita sea, deja de llamarme así ! — me reclamo.

— hey, hey, hey...más respeto, cieguito, fíjate en que no estabas pensando en eso cuando casi te meto la lengua por la garganta — me defendí, y así como abrió la boca para intentar defenderse de mi, así mismo la cerró rápidamente, casi al instante lo escuché tragar duro, el estaba totalmente sonrojado.

— c-creo que tienes...razón...