-¿En verdad son personas?- pregunto el León Cobarde

-Eran personas reales- Aclaró el Arlequín- ahora son mejores que reales, como marionetas actúan como personas cuando quiero que ¡BAILEN!- grito agitando la escoba mágica para provocar el movimiento de las marionetas

Pero los títeres no salen de sus vitrinas, ni siquiera se abrieron las puertas de esta

-¿eh? ¿Que esta pasando? ¡Dije bailen!- grito el Arlequín

Pero aún así, los títeres no iban a bailar. El Arlequín golpea el cetro con la palma de su mano, intentando que funcionará-

-¡Oh, vamos! ¿Qué pasa con esta cosa? ¿¡Por qué no está funcionando? ¿Por qué no están bailando!?-

León intenta acallar sus risas mientras Espantapájaros tenía expresión perpleja al ver que la magia de la escoba no funcionaba

-Tal vez ellos no quieran bailar para ti, de igual forma no puedes hacer que alguien haga algo en contra de voluntad como bailar. El baile es muy personal-  dijo el hombre de hojalata

-Si, el baile es muy personal- enfatizó el Espantapájaros

-¡Callense! Estoy tratando de esta porquería funcioné- grito el Arlequín agitando con fuerza el cetro para este funcionará