—¡Bienvenido a Rusia! —

Akim parecía el más emocionado de los tres hermanos Davydev. Vondra estaba levemente indispuesta por el viaje de tres horas en avión y a pesar de ello, no le intereso en lo más mínimo por ver a H, el pequeño gatito que había dormido todo el viaje. Kathia, por otro lado, en cuanto salimos del avión tomo su celular y no paraba de teclear con tanta velocidad que me sorprendió bastante.

Estábamos sentados en medio del enorme aeropuerto ruso, esperando que alguien venga a recogernos. Aun cuando había propuesto tomar un taxi, Kathia había respondido con un cortante "No, eso la molestaría" y preferí no decir más. Presentía que era un tema no muy agradable para ella

— Chertovski pozdno ... Eto deystvitel'no mozhet byt' nevynosimo..—Kathia se quejó en ruso viendo al techo

«Es tan malditamente impuntual... Realmente puede ser insoportable.»

Akim la vio con preocupación, y de un salto apareció hasta donde estaba Vondra. La pobre estaba casi desparramada sobre el banco mientras sacudía con poca fuerza a H.

—¿No quieres ir a las capsulas de sueño hasta que nos recojan? —pregunto su hermano

—¿Cápsula de sueño? —

Akim asintió con emoción de nuevo y señalo con su mano a un área separada donde había una clase de literas con puertas incluidas.

—Entras ahí y pones una alarma para despertarte. No entra ningún sonido, es genial—Akim explico

Vondra negó con la cabeza y dijo con voz débil—No... estoy bien...—

—¿Cuántos dedos ves? —pregunto Kathia acercándose a ella

—Azul—

—Suficiente—

La hermana mayor tomo a Vondra de un brazo y de un tirón la alzó para que ella se tambaleara y terminara sobre su hombro. Kathia pareció perder el equilibrio, pero logró mantenerse firme. Me paré rápidamente y me acerqué

—¿No quieres que yo la cargué...?—pregunté

—No, yo puedo. Si pude aguantar a ella pateándome constantemente durante cinco meses, puedo soportar su peso—Kathia respondió bruscamente

Levante las manos, no podía objetar nada al respecto. Además, no creía que fuera buena idea darle la contraria.

Kathia giro sobre su eje y arrastro a Vondra con ella por un par de pasos

—Es increíble... Sabía que no llegaría a tiempo...—murmuraba entre dientes

—Pues aquí estoy—

Kathia giro rápidamente, haciendo que Vondra por poco terminara de bruces en el suelo. Logro pararse y abrió sus ojos con pesar. Akim y yo vimos a la chica que apareció detrás de nosotros. Podría decir que parecía un poco mayor que Vondra y Kathia, pero aquel maquillaje y traje sastre la hacían ver muchísimo mayor. Sus ojos eran cafés claros, y su cabello castaño claro, tal y como sería el cabello de Vondra sin el tinte azul. Su checo era notoriamente más brusco y marcado que el de las gemelas y Akim

—Deberías saber mejor que nadie que Lobnenskoye en casi intransitable a esta hora para poder acceder al aeropuerto. Además, tuve una reunión de ultima hora par coordinar el buffet y entretenimiento en la fiesta que será mañana. —ella se quejó con un gesto dramático—Pero ya está, todo listo por ahora. El resto cae en ti, Ekaterina—

Kathia la observo con algo de aburrimiento, pero no dijo nada. Vondra, por otro lado, soltó una risa seca, haciendo que la mirada de la castaña cayera en ella

—¿Nunca puedes hacer algo sin llamar la atención, no Aleksandra? Desde que eres pequeña no podías andar por algún lugar sin gritar o reír como morsa. Finalmente logras cambiar tu carácter y ahora estás con ese espantosamente llamativo cabello azul mientras parece que estas borrachas en pleno aeropuerto. —

Vondra frunció el ceño e intento enderezarse. No tuvo éxito y no tuve más que acercarme y sostenerla.

La chica dirigió su mirada venenosa a mí y sonrió de la manera más cruel que vi en tiempo—Así que tú eres el invitado especial de Vondra y Kathia, él tal Hajek... Debo decir que esperaba un hippie drogadicto, pero veo que no eres así... O al menos no tanto, tomando en cuenta la cantidad de tatuajes que tienes—

No sabía quién era esa chica, pero no me agradaba en absoluto

—Kral, ella es Yelena Davydev, nuestra prima hermana. —Kathia presento después de unos segundos de silencio incómodo

—Un gusto— saludé con toda la hipocresía que tenía dentro de mí. Ya entendía que se refería Polak con "situación familiar complicada"

—El gusto es mío—ella respondió analizándome de pies a cabeza antes de darse la vuelta y caminar alejándose de nosotros. —Vamos rápido al auto. No tengo tiempo para esto—

Akim tomo su mochila de mano y se acercó a mí—Ella es muy gruñona, no le prestes atención—

Asentí con una sonrisa apretada. Kathia y Vondra empezaron a empujar el carrito juntas. Parecía que Vondra, después de todo ese comentario, se había recuperado

—¿Por qué no vino Klaus? —pregunto Vondra

—Tenía trabajo—su hermana respondió

—¿Trabaja? —

Kathia le lanzo una mirada bastante molesta.

Esto se pondría bueno.

Yelena básicamente nos botó del auto en la entrada de la casa de los Davydev.

El camino fue rápido y no logre ver parte de las calles de Rusia por ello, además de que tenía a H entre mis manos y se había dedicado a morderme todo el camino. Vondra había logrado dormir y sus hermanos se mantuvieron en un silencio supracal. Yelena tenía la bella y escalofriante habilidad de manejar y responder mensajes al mismo tiempo, así que todos nos manteníamos tensos y sin saber qué hacer.

Cuando nos dejó en la entrada de la casa, sin ver a nadie en especifico dijo—Mañana vendrá un auto a las 9 para recogerlos y llevarlos al sastre para terminar con los detalles de sus trajes. A las 13:00 es la cena con la familia y debes estar a las 17:00 en la Central para terminar con los ultimo detalles—informo y luego partió sin esperar respuesta

—Perra loca—susurro Akim

Vondra y Kathia lo vieron con sus mejillas rojas y nerviosas

—¡Dusal! —chillo Vondra—¡No puedes decir eso! —

—Pero Lev y Kathia siempre lo dicen—él se quejó

Kathia enrojeció aún más y tomo la maleta de ella y de Akim antes de caminar a toda velocidad a la casa.

Cuando caminé unos cuantos metros, no vi más que árboles y una entrada de piedra en la que fácilmente pasaban 4 autos. Akim se adelantó con la jaula de H y Vondra arrastraba sus pies con cansancio, así que Kathia retrocedió para hacerle compañía.

—Al menos podría habernos llevado hasta la puerta...—

—Estaba ocupada, Von...—

—¿Lo dices en serio? —

—No, que va. Es una perra loca—

Ambas rieron en voz baja y pensé que era algo tierno. Seguí caminando hasta que vi como entre las copas de los árboles se veía un gran techo. Akim comenzó a gritar cosas que no entendí por la distancia, pero no le preste atención.

Era increíble la casa de los Davydev. Si antes vi a la casa de los Pavlik como una mansión, esta era un castillo. Era casi ridículamente enorme, aun tomando en cuenta que ellos pensaban criar tres hijos ahí. Akim había abierto la jaula de H y el gato estaba explorando las gradas que daban a la gran entrada.

—¡Kathia, Kathia! Mira, cambiaron el color de las baldosas en la cocina—dijo con emoción

Kathia asintió—Si, se lo pedí al tío Vlad. Me alegra que lo haya hecho—

Vondra se quedó parada frente a las gradas y las vio fijamente, sin moverse. No la veía enferma, pero si insegura por estar ahí. Me acerqué a ella y le di un apretón en su hombro—¿Vamos? Comienza a anochecer y a hacer más frío—

Ella dirigió una mirada rápida a mí y asintió antes de subirlas.

Vondra fue quien abrió la puerta principal, dejando ver el enorme Hall y una casa vacía, y escalofriantemente limpia. Akim corrió para prender las luces y dejo a H en un sofá antes de jalarme de la mano

—La cocina es por aquí... y el escritorio de Kathia es aquí... —explico llevándome a cada rincón para mostrarme

Después de enseñarme todo el primer piso me llevo a mi habitación. Nuevamente, mi departamento se vio ridiculizado. Era enorme, con un baño privado que era más grande de lo necesario. Aunque pusiera todo mi armario y vida ahí, sobraría espacio.

Cuando termine de desempacar algunas cosas, Kathia me llamo para cenar y baje esperando ver un mini buffet gourmet.

Me encontre con dos cajas de pizza grande y a los hermanos sentados en el living frente a un televisor.

Senti ganas de reírme a los tres embutiéndose pizza mientras veíamos una serie rara de Netflix.

Al acabar nuestra improvisada cena, Kathia alzo su lata de Coca-Cola y dijo—Por un buen viaje—dijo con una mueca

Akim y Vondra levantaron sus latas y los imité.

Realmente esperaba que fuera un buen viaje. Y no solo por mí.

¡Comenzamos con viaje a Rusia!

¿Qué les pareció el primer encuentro con un Davydev en Rusia? ¿Qué opinan de Yelena? Es solo el principio de todo lo que vera Kral en estos días....

Les quiero agradecer nuevamente por todo el apoyo a Bloody Valentine :3 y también disculparme de antemano si es que me atraso en los capítulos estos días. Comenzaré clases mañana, y haré todo lo posible para seguir actualizando seguido. La siguiente actualización será en jueves :3

Nos leemos

Bre :3