XIV. El secreto de Kral
Cuando tenía seis años, pensé en cómo sería tener un hermano menor. Cestmir era mayor que yo por casi diez años y no jugaba conmigo ni pasábamos tiempo de calidad juntos. Tenía amigos, Polak y Lexa siempre estaban conmigo en casa o en el hotel, pero no podia dejar de pensar en cómo sería tener un hermano menor para poder jugar en casa cuando este solo, los días en los que mamá y papá estaban en el hotel o de viaje y Cestmir se encerraba en su cuarto.
Nunca les dije algo a mis padres porque los veia muy ocupados, y no consideraba prudente pedirles un hermano menor. Por eso en gran parte envidiaba a Polak al tener una hermana menor, él nunca estaba solo y lo veía cuidar de ella. No tenian mucha diferencia de edad y eso ayudaba. Con el tiempo me empezo a agradar ver a mis amigos con sus hermanos menores
Sin embargo, ahora mismo parecía que tenía frente a mí una versión retorcida los tres hermanos interactuando entre ellos.
Para empezar, tenía a Vondra con frente a mi comiendo en silencio mientras escuchaba de reojo la charla de mi mamá. A lado de ella estaba Lev, quien no paraba de hacer intentos algo obvios e infantiles para llamar su atención, como ser lanzarle una servilleta rota a su cuello, quitarle papas fritas o darle sus pimientos morrones. En mi opinión, solo hacía el ridículo. Pero el chico parecia no prestarle atención a eso, solo veía a su hermana menor. Y Akim era quien aparentemente disfrutaba más del almuerzo. Mis dos padres estaban sentados a su lado y le prestaban atención a cada mínimo detalle que hacía y palabra que decia, y ellos estaban embobados viéndolo. Comencé a dudar si hubiera sido bueno que decirles del hermano menor, pero luego después de analizarlo pensé que quizá lo que querían eran nietos.
Y yo no se los daría. Le encargaba eso a Cestmir.
En resumen, tenía a mis padres posiblemente deseando un nieto y sin notar la incómoda situación entre Vondra y Lev, y yo viendo el espectáculo en espera del siguiente movimiento que fueran a hacer.
-Señor Hajek, ¿Podría ver el hotel? Se ve muy amplio y me gustaria conocerlo. -pregunto inocentemente Akim
Casi pude escuchar los chillidos de emoción de mis padres. Casi
- ¡Por supuesto, pequeñín! -dijo mamá dejando su plato a un lado-Tenemos una piscina enorme y podrás nadar ahí en una media hora-
Akim, para su sorpresa, pero no la mía, tomo la mochilita que tenía y mostro unas bermudas
-Vine preparado-
Por la mañana le había comentado como era el hotel, así que cuando el menciono lo de "conocer el lugar" presentía que queria decir "Nadar en la piscina". Ese niño era más vivaz que todos en la mesa juntos
-Iré al departamento para poder recoger mi maya, entonces-Vondra repuso parándose de la mesa y tomando su cartera
-Yo también-
Mi mirada cayó en Lev cuando el soltó esas palabras y sentí las alarmas en mi cabeza encenderse
-No tengo ninguna bermuda aquí, así que los acompañare-me apresure a decir parándome
-Kral, tienes un recorrido en media hora-mamá recordó
Quise maldecir a los siete vientos, y fue aún peor al ver como Lev sonreía victorioso y me lanzaba una mirada que fácilmente se podia leer como un "Ja, ja, ja... Ya no puedes interferir". Suspiré pesadamente y no tuve más opción que dejarla ir con Lev. Los vi algo desesperanzado salir del hotel.
Akim me tomo del brazo y me jalo hasta la oficina de mis padres
-Dijeron que te traiga para que dejes de ver embobado a Vondra - explico encogiéndose en hombros
Asentí y llegamos a la oficina donde papá revisaba un cajón.
- ¿Y mamá? -
-Fue a ver a unos nuevos huéspedes-papá respondio concentrado en su tarea-Aquí está-
Akim se acercó y tomo un llavero que tenía unas cuentas de adorno, la cual reconocí al instante. Era la llave de mi casillero en la piscina. Durante gran parte de la secundaria invitaba a mis amigos para ir a la piscina y mis padres me habian dado ese casillero para poner mi ropa.
-No sabía que aún lo mantenías cerrado-comente sonriendo mientras Akim me mostraba la llave-Pasaron como seis o siete años desde entonces...-
-Tu madre y yo quisimos guardarla como recuerdo-el respondio alegremente-Cest no traía a sus compañeros, pero vos sí. Era algo tierno para nosotros ver a un montón de chiquillos entrar a escondidas para poder meterse a la piscina en verano-recordó riendo-Vayan yendo, ordenaré algunas cosas aquí y les daré encuentro-
Acompañe a Akim hasta los vestidores y lo ayude a buscar mi antiguo casillero, el que estaba literalmente casi oculto. El pequeño tomo la llave y abrio el candado con algo de dificultad. Cuando esta se abrio, me encontre con cosas que creí haber perdido. Mi cuaderno de Geología, el libro que Lexa me había prestado, unas cuantas cartas de Yu Gi Oh!, incluso unas poleras por las que había peleado con Cestmir por creer que él las había tomado sin pedírmelas. Y varias fotos.
Akim no le dio atencion a ninguna y dejo su mochila en un rincón. Corrió a un vestidor y volvió mas rapido de lo que esperaba ahora con unas bermudas de color verdes, acomodando con torpeza sus cosas y dejando caer algunas fotos. Akim con nerviosismo tomo y disculpándose, las dejo donde estaban.
Una cayó y senti como palidecía levemente al ver cuál era
Era el último año de colegio, y estabamos parados frente a Piscina Olímpica de Tabor. Lexa, Trava y Polak como siempre estaban conmigo. Y a nuestro lado, dos personas más.
Dos estudiantes de intercambio.
Rapidamente, Akim tomo la foto y la puso de vuelta al montón. Despues de darme una disculpa rápida corrió de vuelta a la piscina y escuche un chapuzón. Sin embargo, me quede ahí parado, viendo el casillero cerrado. No creí que esas fotos estuvieran ahí.
-Akim tiene más energía de la que aparenta-Comento riendo mi papá acercandose a mi- ¿Todo bien, hijo? Te ves algo pálido-
Parpadee levemente y Sonrei-Si, no hay problema papá-
-A mí no me engañas con esa sonrisa de negocios, Kral-papá refuto
-Vi unas fotos de mi último año en la secundaria papá, nada más-
La mirada de papá se suavizo, y me tomo del hombro-Hijo...-
-Tengo que ir a trabajar. Les hablo por la noche-
Me despedí con la mano de Akim (quien iba por la tercera vuelta) y camine rapidamente hasta la oficina para recoger el file e ir a trabajar. No tome atención a los nombres, solo me fije la nacionalidad y que tipo de tour querrían.
Cuando entré a la sala de espera, ya estaba el grupo de diez personas ahí. Todas parecian de mi edad.
Me acerqué hasta el escritorio y dije-Buenas tardes a todos. Mi nombre es Kral Hajek y seré su guía hoy. -
Escuché que algunos respondían de manera distraída y di una mirada rápida a todos para reconocerlos en lugares donde haya más turistas. Fue entonces cuando una corta cabellera rubia llamo mi atencion. Trague en seco y desvié la vista antes de que ella me hablara.
- ¿Están listos? -
En todos los años que trabajaba como guía turístico, nunca me senti tan nervioso. Despues de ir al Castillo Kotnov, el Museo del Chocolate y a la Cima de la Montaña, senti que el camino al Jardín Botánico fue eterno. Evite por todos los medios tener más contacto de lo necesario con ella. Me maldije por no leer el file antes de encontrarme con ellos, porque podria haberle pedido a Gian o Pettra tomar mi lugar.
Un grupo de amigos provenientes de Inglaterra, entre ellos estaba June Olsen. La mejor amiga de ella.
-Vaya, con esa cara no pareces un guía turístico, sino un guardia de cementerio-
Gire y me encontre del otro lado de la reja a Polak. Tenía un par de papeles bajo su brazo y vestia uno de sus tantos ternos. Supuse que había salido de la Fiscalía. Polak, el chico más fiestero y desordenado que conocía, era un abogado y trabaja en casos como adopciones o problemas intrafamiliares. Creo que nadie del grupo creyó que el llegará a ser un abogado, pero ahí estabamos. Yo entre turistas pensando de que manera huir de June y el felizmente caminando por Tabor.
-Cállate y mira por la fuente-susurré haciendo señas con mis manos
Polak fruncio el ceño y vio hacia donde señalaba. Parecio analizar a las personas hasta que abrio sus ojos de par en par-Espera, ¿Esa no es June Olsen? ¿Entonces también esta...? -
-No, no está-interrumpí-Gracias a Dios, no está-
-Con razón parecia que querías subirte por un árbol y ocultarte. -Susurró y entro al parque- ¿Te hablo? -
-Nada sobre ella. Solo algunas preguntas sobre el recorrido-
-Es mejor-el comento-Te acompaño de vuelta al hotel. Así no estás solo-
- ¿No tienes trabajo? -
-Termine con el papeleo hoy. Estoy libre, si quieres luego vamos a tu casa y jugamos un poco-
Sonrei un poco, agradecido por mi amigo
-Gracias, Pol-
Los intercambios estudiantiles eran comunes en Chequia. Tenemos uno de los mejores sistemas educativos de Europa, y varios estudiantes aprovechaban esa oportunidad. Mi hermano intento convencerme para irme por un par de años y "extender mi mundo", pero no me agradaba la idea. ¿Para qué querría irme, si aquí tenía todo lo que queria? En Chequia hay dos clases de personas: las que les gusta la simpleza del país y se quedan, y las que deciden irse lo más pronto posible para poder tener una vida mejor. Yo pertenecía al primer grupo, Cestmir al segundo.
Por eso, cuando entré al último año de la Secundaria y un grupo de cinco estudiantes de Inglaterra llegaron no me sorprendí. Los presentaron, nos dieron la tarea de ayudarlos a conocer la ciudad. No se veían felices. Llegue a escuchar que ellos querían ir a Praga, la ciudad más conocida de este país por sus hermosos castillos. Antes de postularse no pensaron en leer las normas, y reglón donde decia que se hacía un sorteo aleatorio para que cada estudiante de intercambio llegara a una ciudad distinta.
Por eso, me propuse una meta: mostrarles lo mejor de Tabor.
Las primeras semanas no se veía a gusto, no le encontraban nada de especial a lo que les mostraba. Aun así, intente con todo hasta llevarlos a la Piscina Municipal. Esa fue la primera vez que los vi felices. Despues de tomarnos un par de fotos, Lexa se me acerco y dijo
-Lo lograste-
- ¿Lograr que? -pregunto ella, acercandose mientras se hacía un moño
Me removí nervioso, pero Sonrei y me sinceré-Queria que se sintieran más a gusto en Tabor, así que mi plan era lograr que se divirtiera-
Ella rio a carcajadas y me dijo-Tu peor defecto, Kral, es que te preocupas más en otras personas que en ti mismo-
Lexa se quedó anonadada al oír eso, y de no haber sido por Kiara estoy seguro de que la hubiera maldecido públicamente. Pero para mi, no fue malo. Me quede sorprendido, porque jamás considere eso un defecto
Ella lo veia así, era distinta. Queria saber que más pensaba ella.
- ¿Kral? -
Di un saltito en mi lugar el escuchar que June me hablaba, pero aun así volteé y Sonrei-June, que coincidencia-
-Una grande-ella dijo riendo-Cielos, casi no cambiaste, solo te ves más maduro...-
Asentí efusivamente. No sabía que decir. Queria evitar ese tema a pesar de todo.
-Olyvia me menciono que trabajabas como guía turístico, pero no el lugar. -
Ese tema. Ella.
-Si, seguro se le paso. Ya sabes, su futura boda debe tenerla como loca-finalmente solté, como aceptando para mí mismo la realidad.
-Kral, cancelo el compromiso-
El mundo se detuvo a mi alrededor, e intente decir algo lógico, pero no podia procesar esas palabras. Olyvia había roto su compromiso.
-Pero...-
-Ella te dirá todo a su tiempo-ella corto y sonrio un poco-Fue bueno verte Kral.
Despues de eso, el camino a casa fue lento y tedioso. Una parte de mi queria preguntarle a ella, pero no podia. Me había prometido no hablarle, no acercarme, olvidarme de ella. Ahora, con esa noticia, no podia dejar de pensar en ella.
Llegué al edificio y puse la llave de mala gana, algo enojado porque Polak no había cumplido su promesa. Una llamada de su hermana hizo que volará a su casa para verla.
Escuche unos murmullos y voltee, encontrándome con Vondra, Lev y Akim a una cuadra de distancia. Los tres parecian estar contentos, pero note que la chica se sentia incomoda cuando Lev intento tomarla de la mano.
Tu peor defecto, Kral, es que te preocupas más en otras personas que en ti mismo
Sonrei inconscientemente. Quizá eso era cierto. Pero ahora mismo, prefería centrarme en Vondra y sus problemas que en Olyvia.
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