Akim en persona era alguien de aspecto tierno; quizá era por su edad, pero daban ganas de tomarlo por las mejillas y apretarlas mientras él reía. Aunque no sabía si reiría o no. Su cabello estaba ligeramente más largo que en las fotos, y era tan ondulado como el de sus hermanas. Sus ojos de cerca eran avellana y daban una sensación cálida. Era adorable.

Lev, en cambio, parecía haber cambiado casi por completo comparado con las fotos de seis meses atrás. Su cabello no era largo, se lo había cortado y le daba un aire más maduro. Tenía un poco más de músculo y una sombra de barba. Pero sus ojos eran casi impresionantes, y estaba seguro de que el podría hacer a cualquier chica

Incluso a Vondra.

Akim me observo esperando una respuesta, y yo le di una sonrisa tímida.

-Sí, vive aquí, ella...-

- ¿Dusal? -

Los tres dirigimos nuestra mirada a Vondra, quien había llegado justo en el momento menos indicado. Akim sonrió con emoción y de un salto enredó sus brazos a su cintura abrazándola, mientras ella parecía haberse quedado cargando después de ver a sus hermanos.

-Von, ¡Te extrañé mucho! Mamá y papá dijeron que podía venir con Lev esta semana de vacaciones, así que vine tan rápido como pude... ¡Mira! -chilló abriendo el pequeño maletín que tenía en el piso, sacando varios videojuegos-Este lo compré semana pasada e intenté jugar con papá, pero se confundía, podríamos jugar ahora...-

En ese momento, ella reaccionó y dijo-Dus, no saques todo aquí-lo reprendió y me observo apenada por el espectáculo que su hermano menor estaba montando. Luego paseo sus ojos y se quedaron en Lev. Me quede expectante por la situación, y aunque suene feo, valió la pena. Vondra pareció palidecer levemente y trago en seco-Hola Lev-

Rápidamente le di una mirada al chico y noté ese extraño brillo que caracterizaba a los chicos enamorados. Una pequeña sonrisa se dibujó y se agachó junto con Vondra para volver a poner las cosas en su maleta-Es bueno verte de nuevo, Von-

Para ser sincero, antes creía que las palabras de Kathia eran exageradas. Una parte de mi decía que Lev sería más maduro y dejaría ese sentimiento atrás. No eran hermanos consanguíneos, ella lo consideraba como uno. Él fue un apoyo cuando Kathia también superaba la muerte de sus padres. Pero cuando observé como su actitud con Vondra eran más de un chico enamorado que de un hermano mayor ayudando, supe que era cierto

Y eso me repugno.

Plan para evitar que Vondra se vea más afectada por Lev que por la muerte de sus padres ¡Activado!

Pero quizá era mejor que le más atención a Lev que a sus padres...

¡¿Qué?! ¡Deja de pensar tonterías Kral! Concéntrate en lo acordado con Kathia, Tesar y Louise

Tosí falsamente para dejar en claro que seguía ahí, y Vondra se paró rápidamente.

-Perdón Kral, se hizo un alboroto aquí-excuso riéndose nerviosamente-Ellos son mis hermanos, Dusal y Lev.-presento señalándolos-Chicos, él es Kral, mi vecino-

Akim estiro su mano con firmeza y dijo- ¡Un gusto conocerte! Puedes llamarme Dus o Akim-

Sonreí con ternura de nuevo y le di la mano. Luego observe a Lev y este me lanzo una mirada fulminante. Sentí como me analizaba de pies a cabeza, y me sentí algo intimidado

Algo. No sentí la necesidad de entrar al edificio y abandonar a Vondra en la calle con sus problemas, no.

Su mirada solo era un poco escalofriante, un poquito

Si Tesar estuviera aquí, ya estaría riéndose

-Kral Hajek, un gusto-me presenté con la sonrisa entrenada que tenía para los turistas. La sonrisa que mi mamá llamaba "Sonrisa confiable"

-Lev Pavlik, hermano adoptivo de Vondra-

Y ahí iba esa aclaración innecesaria. Sonreí de nuevo y escuché como Akim bufaba

-Vaya, creí que dejarías de aclarar eso. -suspiro-Somos hermanos, no importa si nacimos del mismo vientre o no-

-Eso fue muy maduro. -comente

-Mat' lo dice todo el tiempo, por eso lo dice-Vondra susurró, ganándose un puchero de Akim

- ¡Pero es cierto! -

-Sí, tienes razón. -ella comentó abrazándolo un poco y viendo a Lev-Somos hermanos-

Hubo un tenso silencio hasta que otra vez tosí para llamar la atención

-Vondra, ¿No tienes trabajo? -pregunté

Ella asintió y tomo sus llaves-Es en el cuarto piso, verán mi apellido. No puedo quedarme porque tengo trabajo, pero regresaré a las 9-

- ¿Y cómo entrarás? -pregunto Akim preocupado

-Esto...-

-Yo la recogeré-me apresuré a decir, ganándome otro ceño fruncido de Lev. Tenía la impresión que si las miradas matarán, ya estaría cinco metros bajo tierra después de morir desangrado y con Kathia pateando mi tumba por mi inutilidad.

Vondra me vio agradecida y nos despedimos, para que ella luego de dar dos pasos se dé la vuelta- ¡Dusal, no te olvides que tenemos un nuevo integrante en la familia! -

Akim sonrió ampliamente, pero tapo su boca para ver a Lev, quien aparentemente no sabía sobre H. En su lugar, pareció malinterpretar por completo las palabras de Vondra y abrió sus ojos para verme y verla

- ¿Qué rayos...? -

No logro terminar la pregunta, pues Akim lo empujo dentro del edificio y cerró la puerta

-Sabes que ese comentario tenía doble sentido, ¿no? -

Vondra me observo de reojo y guiño el ojo para mi sorpresa. Solté una risa cuando ella se fue manejando su bicicleta a toda velocidad para ir a Aux

Lev era... especial. Si antes creí que Vondra era rara, el podía ganarle ampliamente

Cuando recogí a Vondra, ella evitó por completo hablar de Lev y se centró en Akim

-Tiene once años, y le encanta el deporte. Juega basquetbol desde pequeño, y es muy competitivo. Debería usar lentes, pero no le gusta a menos que este jugando videojuegos. Le encanta el clima frío y quiere ir a Rusia pronto. Le gusta casi la misma comida que a mí, pero tiene un carácter parecido al de Ekaterina. Le encantan los animales. Es muy tierno, aunque quiera parecer serio-

Enumeró un montón de cosas sobre su hermano menor mientras caminábamos al edificio. Cuando llegamos y subimos, encontramos a Lev parado en la puerta con Akim a su lado alzando a H.

-Tu broma casi me mata-

-Mi broma fue excelente. Vos eres el exagerado-

-Ja ja ja-él dijo con voz monótono. -mira cómo me río-

Ella viró los ojos y se despidió de mí.

Al día siguiente trabajo por la mañana (no pudo hacer su rutina con H) y por la tarde toco la puerta de mi casa

-Lev compro pastel de manzana, y Akim quiere invitarte-

Detrás de ella vi a su hermano casi oculto tras la puerta, viendo que sucedía. En cuanto noto que lo veía, se fue corriendo. Reí un poco y asentí

Tome mis llaves y cerré la puerta de mi departamento. Ni bien dimos dos pasos, ella se acercó y susurro

-Perdón por la actitud de mi hermano, es bastante... serio y puede ser ofensivo-

Asentí y entramos a su departamento. Akim estaba sentado frente a un monitor bastante moderno que ella había comentado que le servía para hacer ediciones de fotografía y videos, pero esta vez estaba en la pantalla de inicio de Final Fantasy VII. Lev estaba en la cocina mientras preparaba algo, y vio de reojo para bufar un "hola", imité su acción y me senté en el sofá de siempre

-Este... Kral...-pregunto Akim acercándose a mí- ¿Te gusta jugar Final Fantasy? -

Claro que sabía jugar, desde que estaba en el colegio nos reuníamos en la casa de Polak por las tardes. E incluso ahora lo hacíamos, así que no pude evitar sonreír ampliamente. Escuche una risa y voltee a ver a Lev, quien me veía con una expresión que podría decir claramente que decía "infantil". Viré los ojos y me senté a su lado.

-Pido a Barret Wallace-

Akim sonrió con emoción y comenzamos a jugar. Pasaron treinta minutos cuando recién recordé que debía evitar que Vondra se quede más tiempo de lo necesario a solas con Lev, y ahora estaban solos en la cocina. Después de dejar el pastel de manzana sobre la mesa, había ido a ayudarlo para preparar cafés. Parecían estar hablando tranquilamente hasta que note algo que me alarmo: él la abrazaba por la cintura mientras Vondra cortaba algo que no logre ver bien. Ella enrojeció rápidamente y entré en pánico

¿Qué podía hacer? No podía levantarme de la nada y correr para separarlos, sería estúpido. Empecé a maquinar algo para separarlos cuando H fue mi salvación. El gatito, que había estado dormido todo el tiempo, se despertó y vio el pastel, para saltar a la mesa, caminar perezosamente hasta él y antes de que pudiera pensarlo, se paró sobre el pastel y hundió sus patitas. Por suerte, Vondra noto eso y ella misma dio un salto corriendo hasta la mesa

- ¡H! -chillo sacando al gato que lanzo un maullido ahogado

Lev se quedó en la cocina y suspiro viendo a Vondra mientras ella tomaba una servilleta y limpiaba las patas del gato. Sonreí internamente y tomé a H para que ella botara el pastel. Vi al gato y este me observo fijamente, como diciendo "No te preocupes, te cubro".

Fue la primera vez que un gato me caía bien.