Hora de la cena en la casa de los lamentos, y la parte favorita de todos era la siguiente:

— Malka, ¿cómo te fue hoy, linda? — su mamá le preguntó, y la pequeña tardó un momento en responder mientras masticaba.

— ¡Me fue muy bien! — mostró una gran sonrisa mientras lo decía, así que debía ser verdad. — Saqué buena calificación en mi examen, el almuerzo fue bueno y ahora tengo novio.

Hubo unos segundos de silencio general hasta que todos gritaron de la sorpresa.

— ¡¿Disculpa?!

— ¡Tienes apenas diez años! ¡No puedes tener novio!

— ¡Está creciendo demasiado rápido!

— ¡Debe ser mentira! ¡Díganme que es mentira!

— ¿Será una de esas bromas con cámara escondida?

— Por el bien de quien sea este... "novio", le conviene que sea una broma si quiere despertar mañana.

— No lo he conocido y ya lo odio.

— ¿Por qué se enojaron tanto? ¿Hice mal?

— No, Malka... — Lucifer se encargó de explicarle. — No puedes tener novio a los 10 años. Eres muy pequeña para algo así. Termina con él.

— Pero es muy lindo. Y dijo que quiere hacer un pacto conmigo.

— El niño va en serio.

— ¿Es más lindo que todos tus papás?

— Sí, es muy, muy, muy, muy, muy, muy lindo.

— ¡Mentira! Nadie es más lindo que yo. — Asmodeus estaba ofendido a un nivel personal. — ¡Recuérdalo! Las tres cosas más lindas en los tres mundos son, primero, YO, y siempre he sido yo. Segundo, tu mamá, y tercero tú. ¡El niño es un farsante!

— Entonces es lo cuarto más lindo después de mí.

— ¡No lo digas tan a la ligera! Yo seré el juez de eso.

— Aún así, no puedes tener novio, Malka. — continuó Satan, ignorando el berrinche de su hermano.

— ¡No es justo! Mamá tiene siete novios y yo no puedo tener ni uno.

MC casi se ahoga con el agua al escuchar eso.

— ¡Eso es diferente!

— ¿Por qué?

— Porque... yo soy adulta.

— ¿Entonces puedo tener novio cuando crezca?

— No.

— Jamás lo voy a permitir.

— Primero muerto.

— De ninguna manera.

— Ya quisieras.

— Ni hablar.

— Definitivamente no.

— ¡¿Por qué no?!

— ¡Porque lo decimos nosotros!

— Pero-

— Malka, — Lucifer la interrumpió, tratando con todas sus fuerzas de convencerla. — no puedes pactos con demonios extraños. No sabes qué tipo de personas son. Y si no sabes qué tipo de persona es, tampoco puede ser tu novio.

— ¡Te equivocas! — los demás jadearon de la sorpresa. Nadie, además de probablemente Satan o Belphego, se atreve a decirle eso a Lucifer a la cara. — Sí lo conozco bien. Es buena persona.

— No puedes saberlo con seguridad, ¿o sí? ¿Desde hace cuánto lo conoces?

— Desde hace como... un mes. Eso es mucho tiempo, ¿no?

— No.

— Bueno, pero te digo que sí lo conozco bien. ¡Es muy bueno conmigo! ¿Y por qué querría hacer un pacto conmigo si no me quisiera?

— Eso... es un buen punto, pero la respuesta sigue siendo no. No puedes tener novio. Eres demasiado pequeña; no tienes la responsabilidad para un compromiso como ese.

— ¡Eso es muy injusto! — sus ojos empezaron a ponerse llorosos.

Oh, no... un berrinche.

— Malka, no te atrevas.

— ¡Los odio! ¡No quieren que sea feliz! — por supuesto que no lo decía en serio, pero era una niña y la criaron demonios; hacía berrinche cuando no le daban lo que quería. Así que se dedicó a llorar muy fuerte.

— Malka, no necesitas llorar. — MC trató de calmarla con suavidad. — No es que no queramos que seas feliz, pero eres muy pequeña. Cuando crezcas, a pesar de lo que tus papás puedan decir, sí podrás salir con quien quieras.

— Jamás dijimos que estuviéramos de acuerdo con eso.

— Ignóralos, lo que quiero decir es que no queremos que te pase nada malo. Estaremos bien con quien sea que quieras salir cuando tengas la edad para hacerlo, pero a tu edad no es algo responsable. Si este chico te quiere de verdad, lo entenderá y esperará. Es así como funciona el amor. A veces amas a la persona correcta en el momento equivocado. Justo ahora, no sé si sea la persona correcta, pero definitivamente es el momento equivocado.

— ¿O sea que tampoco puedo hacer un pacto con él?

— Me temo que no; es un compromiso muy grande para él y una decisión muy importante como para que la tome a esta edad. ¿Crees que podrás esperar un poco a que crezcas y ambos tengan claro lo que quieren?

— Pero... yo ya sé lo que quiero.

— Claro que sí, pero lo que quieres a veces cambia. Si tus sentimientos siguen igual cuando crezcas, sabrás que es amor real. Porque dura toda la vida.

— ¿Y tú amas a uno de mis papás más que a los otros?

— Eh... ese es un tema un poco controversia. — se acercó a ella, susurrándole al oído. — Pero aquí entre nosotras, sí hay uno de ellos. No se los vayas a decir. Se pondrán celosos. — la niña asintió.

— Hey, ¿qué le estás susurrando ahí?

— Nada. En fin, ¿lo pensaste mejor, Malka?

— Sí... ¿crees que me estoy apresurando?

— Un poco.

— Entonces... supongo que esperaré. Pero, ¿qué pasa si mis sentimientos no cambian y los de él sí y ya no quiere estar conmigo?

— Significaría que no valía la pena. Te lo dije; el amor de verdad no cambia sin importar cuánto tiempo pase.

— Pero, ¿cómo hago para terminar con él? No quiero romperle el corazón.

— ¡Yo puedo ayudar con eso! — Asmo contestó de inmediato. — Hay muchas maneras de terminar con alguien. Algunas mejores que otras. En todo caso, te sugiero que lo hagas en persona, y no seas demasiado cruel.

— Sólo dile lo que sientes con sinceridad y él entenderá. La comunicación es importante en una relación. — ah, quizás ella no era la mejor para hablar sobre eso. Rápido se dio cuenta de que debió haber seguido su propio consejo. Tal vez Lucifer tenía razón; tal vez las cosas hubieran sido mucho más sencillas si tan sólo les hubiera comunicado sus preocupaciones desde antes.

— Gracias, mamá. Trataré de seguir tu consejo... espero que se lo tome bien.

— Estoy segura de que lo hará.

— Perdón por haberlos preocupado. Estaba muy emocionada.

🌺 Una disculpa por la falta de inspiración en esta historia. Me ha sido difícil encontrar situaciones que pueda escribir aquí.

Besitos en las manos, cuídense y tomen mucha agua.