Ya hice al amigo de Malka 😈🖐️
Voy a tratar de resistir mi impulso natural de shippear y dejarlos como amigos (porque luego se va a ver como Malka va creciendo. Tengo la foto de su versión 10-11 años y todo)

Bueno, a lo que venía. Vean al niño que hice en picrew (no se note mi necesidad de ponerle lunares a casi todos los personajes que hago xd) (no se note tampoco que siento que este wey es de algún otro lado pero hagamos como que no)

Ahora sí me voy a poner a escribir porque hacer a este niño me inspiró.

Hasta ahora, hemos visto bastante sobre la vida de MC y cómo ha llevado al asunto de criar a su hija junto a otras siete personas; toda su perspectiva está bien definida y, aunque tiene sus dificultades, parece estarlo manejando bastante bien.

Pero no hemos visto cómo le ha ido a Malka directamente. Sólo mencionamos las veces en que la dejaban y la recogían de la escuela o cuando sus padres la cuidaban, pero creo que podríamos profundizar un poco más en lo que ella siente de su situación.

Desde su punto de vista, los hermanos no son “siete personas que podrían ser su papá”, son siete papás y una mamá. Todos le agradan bastante, así que poco le importa quién sea su padre verdadero — quizás porque aún es muy pequeña —, así que en ese sentido todo es bastante simple.

Veamos un poco de su vida; hay que retroceder al día de su primer día de escuela.

Estaba muy emocionada puesto a que no había ido a la escuela ni en el lugar del que venía, así que sería algo muy nuevo para ella. Quiso irse lo más rápido que fuera posible, aún con su mamá preocupada, y sus siete padres ayudaron a su propia manera de darle consejos. Como su papá Asmo, quien le arregló el cabello y le dijo que tenía que destacar sí o sí, al contrario de su papá Leviathan; él le dijo que trate de pasar desaparecida y que no llame la atención. Su papá Satan le dio libros para que leyera en el tiempo que tuviera libre, su papá Lucifer le advirtió que pusiera atención y obedeciera a sus profesores, su papá Belphegor nada más le dijo que pusiera un libro frente a su cabeza si se quería quedar dormida para que no se dieran cuenta, su papá Beelzebub le dijo lo mismo pero para comer.

En lo que todos estaban de acuerdo era en decirle que no le hiciera caso a lo que sea que su papá Mammon le sugiera porque se iba a meter en problemas.

Su mamá lloró cuando se estaban despidiendo en la entrada de la institución, lo cual la confundió porque se iban a ver más tarde. Entró muy emocionada a la escuela y encontró el pequeño salón rápidamente; estaba segura de que todo le iba a salir bien.

Aunque los profesores eran medio antipáticos; poco les importaba quienes eran los niños o qué hacían. Nada más estaban ahí para asegurarse de que no se maten entre ellos y dejarles algún ejercicio básico para que no digan que no les enseñan nada.

Y, bueno, era de esperar que su tranquilidad no durara mucho. Las cosas se pusieron un poco complicadas durante cierto momento.

— Hueles a humano. — fue lo que uno de sus compañeras le dijo de la nada. — Pero no del todo...

— Mi mami es humana. — se tomó la molestia de contestar con tranquilidad. — Mi papi es un demonio. — al parecer el resto de niños en la habitación había tomado interés por la conversión, o siempre la tuvieron y no se habían atrevido a preguntar.

— ¿O sea que eres como... mezclada o algo así...? — trató de analizar lo mejor que su cerebro de niña pudo. — ¿Como mitad y mitad?

— ¿Creo?

— Eso es raro, eres rara.

— Mi mami dice que soy especial. — contestó de vuelta, no tomándose muy personal el comentario.

— Pero si no eres demonio ni humana, ¿qué se supone que eres? — no supo responder a eso. La verdad era que no tenía ni idea. — Da un poquito de asco.

— ¿Por qué?

— Porque sí. — la otra niña ya parecía fastidiada y lista para pegarle, cosa que Malka no entendía.

— Pero decir “porque sí” no tiene sentido.

— Tu cara no tiene sentido.

— No entiendo, ¿por qué te enojaste? ¿No sería más fácil que hablemos para arreglar el asunto?

— Tu cara es la que necesita arreglo.

— ¿Mi cara? — ahora estaba más confundida. — ¿Por qué sigues diciendo lo mismo? Es repetitivo.

— Tu cara es repetitiva.

— A mí me gusta tu cara.

— Tu cara- no, espera... — se quedó sin nada para atacar de vuelta.

— ¿No te... no te sabes más insultos? Igual y no tienes un vocabulario muy grande porque no lees.

— ¡Ya basta! Me estás dejando mal. — se rindió por fin ante el poder superior de Malka de no querer pelear. — Déjalo así, no vale la pena.

Y se fue.

La escuela era complicada; luego se lo contaría a su mamá.

Sin darse cuenta, en ese mismo momento, Malka había atraído la atención de alguien a quien le pareció que curiosa la forma en que ella evitó el conflicto de manera tan efectiva.

¿Cómo te acercas a alguien que no te sabes su nombre pero le quieres hablar porque te llamó la atención? ¿Sólo llegas y dices “hola”?

Él estaba teniendo ese problema, pero tenía algo llamado orgullo y no iba a dejar que el miedo a acercarse a una extraña que ni demonio ni humana era le impida hablarle. Dejó cualquier pensamiento que muestre timidez de lado y se acercó con toda la confianza del mundo a Malka.

— Oye. — llamó la atención de la niña quien estaba concentrada en un libro o algo así. — Tu nombre... ¿cuál es?

— Malka. — ella respondió con una sonrisa, feliz de hablar normalmente con alguien por fin. — ¿Y el tuyo?

— Samael.

(Era el nombre más sencillo xd Literalmente no supe cómo más ponerle; me fui por lo seguro)

— Seamos amigos. — ella le pidió de forma directa. Los demás niños en la habitación ahora los estaban viendo curiosos por ver qué respondía. Claramente esperaban que le dijera que no o algo así, pero en realidad no tenía razones para hacerlo.

Y además la niña a la que ella había dejado como tonta unos días atrás le caía medio mal.

— Bueno. — están pequeños; tampoco es como que lo haya analizado muy a fondo. Se encogió de hombros y aceptó la petición. — Una pregunta. ¿Cómo es eso de que tú mamá es humana?

— Creo que conoce a muchas personas aquí, como a mis papás y el otro humano, y los ángeles. Oh, y esa persona que no me acuerdo su nombre pero vive en un castillo; son todos amigos de mi mami. — eso sí había tardado en procesarlo; no entendió nada.

— ¿No querrás decir “papá”?

— No, yo tengo 7 papás y una mamá. — la expresión del niño cambió a una de sorpresa, pero era una buena; hasta parecía feliz.

— Yo tengo dos mamás. — se señaló a sí mismo mientras lo decía. Ahora Malka era la que estaba sorprendida y feliz.

— ¡Que genial!

— Me caes bien. — ignoró las miradas de confusión por parte de sus compañeros. Malka era agradable, y no era tan busca-pleitos como el resto de niñas en el lugar; era el inicio de una hermosa amistad.

— ¡Tú también me caes muy bien! — confesó, sintiéndose cada vez más animada.

Al final pasaron el resto del día juntos y Malka terminó por presentarle a su mamá y uno de sus tantos papás al niño. Habían acordado que algún día lo invitaría a jugar a su casa porque habían logrado encontrar un montón de cosas en común entre ellos.

🌺 De nuevo cortísimo, pero es que la batería 😭😭 Prefería esto a volver a actualizar en mil años. Además me puse contenta escribiendo al amigo de Malka cuyo nombre surgió a último minuto.

Besitos en las manos, cuídense y tomen mucha agua.