10
Marzo, 1945.
-¡Vamos!¡Deben hacer una fila!- Un tipo vestido de militar gritaba a un grupo de jovenes-¡América los necesita!-
Comenzaron a hacer una larga fila, para poder enlistarse a él ejercito.
-Mi padre estará muy orgulloso de mi, si me aceptan-hablaba animado un joven alto.
-Mi padre también, cuidaremos a nuestras familias desde el campo de guerra-le respondió su compañero.
-¿Cuántos años tienen?-Preguntó un castaño interesado en la conversación.
-Tenemos dieciocho años, ya podemos enlistarnos-Lo miró con curiosidad-¿Eres mayor de dieciocho? Pareces sólo un mocoso, jaja-Se reían los dos.
- Si, soy grande-Sonrió-también me quiero enlistar, proteger a mi familia y a nuestra patria-
-¡Así se habla!- Lo felicitaron.
Aquel chico sonreía, estaba entusiasmado.
-¡Eren!-Alguien gritó.
Todos jóvenes dirigieron sus miradas a unos oficiales que caminaban rápido.
-¡Ah!- el castaño iba a huir, pero lo detuvieron-¡No!¡Sueltenme!-
-Idiota-Un rubio alto lo tomó del brazo-Yo me encargo, gracias-Se alejó con el chico.
-¡Oye!¡Sueltame!-trataba de safarce-¡Zeke!- Lo miraba molesto.
-¡Eren!- Lo metió a una sala-¡¿Qué crees que haces, Eren?!-Cerró la puerta y se acercó al nombrado.
-¡Quiero entrar al ejercito!- Lo miraba desafiante-¡Quiero entrar y hacer algo por nuestro país y por nuestra familia!-
-¿De qué hablas?-
-¡Quiero aportar en esta guerra!-agachó la cabeza-Me siento inservible en la casa, en la escuela... Quiero ayudar-
-Eren-suspiró y gritó su mano por el rostro-¿Por qué crees que me uní al ejercito?-
- No lo sé-cruzó sus brazos-Eres grande-
-Tonto-sonrió-me uní al ejercito para poder ayudar a la familia, para protegerlos-
-¿Eh?- Lo miró a los ojos.
- En esta guerra, lo que menos me importa es morir... Porque se que tu y los demás en la casa estarán bien, yo quiero lo mejor para ustedes. Sólo es un pequeño sacrificio-
-¡Pero yo también puedo hacerlo!¡Ya soy grande!-
-Sólo tienes trece años, Eren... con esa edad no sabes nada de lo que es la vida-dejó sus manos sobre los hombros de su hermano-Yo quiero que vivas por mucho tiempo, Eren...-
- Yo puedo ayudarte...-Comenzó a llorar-Quiero ayudarte-
-Me ayudarás mucho, quedándote en casa, cuidando de tu madre e Isabel-
- Si-Asintió-está bien-
-Eso es-Le quitó las lágrimas con las palmas de las manos-Quiero que vivas mucho y disfrutes de tu vida, muy lejos de todo esto...-Lo abrazó con fuerza.
El adolescente correspondió el abrazo.
...
-Vaya-miraba la fotografía familiar-extraño esos momentos-susurró y miró el cielo.
Era la primera vez en mucho tiempo en que tuvo un pequeño recuerdo de su vida.
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