「13」

Once años atrás

Entusiasmado, un niño de cinco años corría hacia su madre, con el cabello desordenado se trepaba en el regazo de esta, escuchándola reír por la ternura que su pequeño cachorro le provocaba. La omega, encantada con tener a su pequeño tan cariñoso, comenzó a trenzar su alborotada melena, escuchando los pequeños quejidos del niño cada vez que por accidente jalaba algún mechón de su castaño cabello.

-¿Estás listo para la escuela, Jiminnie? -Pregunto dejando un pequeño beso en la mejilla del cachorro, quien volteando para verla, asintió.

-¡Si! Ya quiero tener amigos. -Canturreo feliz, devolviéndole el tierno beso a su madre antes de bajarse de sus piernas.

Solo unos cuantos minutos después ambos se encontraban en el auto de la omega, listos para ir a la escuela, siendo el pequeño Jimin el más emocionado. Era su primer día de escuela, y se sentía listo para conocer gente.

-Debes prometerme que no te meterás en problemas, no quiero que tu profesora me llame ¿entendido?

-Si, mami. -Con una mueca en los labios y de brazos cruzados asintió, colocándose el cinturón de seguridad cuando la mayor se lo indicó.- ¿Tú trabajas hoy?

-En la tarde, así que deberás quedarte con los vecinos.

-¡No! Son raros ¡No le dan dulces a Jiminnie! -Quejumbroso abulto sus labios, dándole una imagen demasiado tierna a su madre. Cada vez que se quejaba, gruñía o se molestaba, se volvía la viva imagen de su padre.

-Prometo darte una paleta al llegar del trabajo ¿esta bien? -Poco convencido el cachorro asintió, volviendo a sonreír cuando por fin un gran edificio se pudo ver frente a ellos.

Al fin habían llegado a la escuela y él ya estaba por abrir la puerta de lo entusiasmado que se encontraba al ver tantos niños de distintas edades corretear de un lado a ootroen la entrada de la escuela, queriendo ir allí cuanto antes.

Cuando bajaron del auto y Yoora o tomo de su pequeña y regordeta mano, el pequeño Jimin omenzó a jalar de la extremidad contraría una y otra vez, haciendo reír a la omega quien solo se dejaba arrastrar por su hijo, entendiendo el entusiasmo del cachorro. Pero en cuanto llegaron al salón poco a poco la emoción del niño se desvaneció, notando como varios compañeros lloraban al no querer dejar a sus padres, sintiendo como algo en su pequeño pecho lo molestaba e incomodaba, comenzando a sentir un cosquilleo en la punta de su nariz y un feo ardor en sus ojitos.

Y sin más, el también comenzó a llorar.

-Ay, mi amor, no llores. -Agachándose a la altura del castaño, limpio las pequeñas lagrimas que descendían por sus mejillas enrojecidas.- Te vendré a buscar en unas horas, no debes preocuparte.

-No, ya no quiero. -Negándose a dejar a su madre se abrazo a su abdomen, sintiendo las delicadas manos de la mujer en su cabello.

-Pero mira, hay muchos niños de tu edad, si sigues llorando se reirán de ti. -Gruñendo Jimin se abrazo aun más a su progenitora.- Park Jimin, no seas un bebé llorón.

-Soy un bebé. -Se defendió infantilmente.

Sin saber que hacer lo tomo en brazos cargándolo como si volviera a tener dos años, paseando por fuera del salón de clases, siendo observa por la maestra del cachorro, quien reía enternecida.

-¿Primer día? -Pregunto la beta, acercándose a acariciar los cabellos del niño.

-Si, y no me quiere soltar. -Puchereo la omega haciendo reír nuevamente a la chica al notar que efectivamente el malhumorado cachorro estaba firmemente agarrado de la ropa de su madre.

-A ver, ¿me lo daría? -Extendiendo sus brazos recibió a Jimin, quien intento bajarse en cuanto sintió el nulo aroma de la beta.- Hola pequeño, ¿no quieres entrar?

-No. -Respondió tajante, cruzándose de brazos.

-Pero vamos a ver una película.

-No veo. -Puchereando volteo hacia su madre quien rápidamente rebuscó en su bolso hasta dar con unas pequeñas gafas de pasta gruesa que coloco al cachorro.

-¿Es corto de vista? -Asintiendo hacia la beta, Yoora sonrió, subiéndole las gafas al pequeño al ver que resbalaban por su pequeña nariz.- Entonces lo sentare frente a mi ¿le parece? -Asintiendo nuevamente se despidió de su hijo, aprovechando que este estaba distraído jugando con los broches en el uniforme de su profesora.

Sin mas entraron al salón, siendo Jimin el más curioso al ver varios niños de su edad jugando entre si, algunos aun lloraban y otros como él, estaban solos. Como había dicho la beta lo sentó frente a ella, junto a otro niño que jugaba con unas figuritas de Mario Bros, haciendo sonidos raros cuando estas chocaban entre si.

Ignorando al niño castaño saco un almohadón de su mochila, colocándolo en la mesa y, luego de sacarse sus gruesos lentes, apoyo su cabeza para intentar dormir mientras la profesora intentaba tranquilizar a los niños que aun lloraban.

Poco duro su siesta cuando el leve peso en su hombro lo despertó, abriendo sus ojitos noto al mismo niño de antes acurrucado en su costado, aun jugando con sus figuritas, pero apoyado en Jimin.

-Oh no~ me va a atrapar~ -Fingía una voz aguda mientras hacia correr a la Princesa Peach, hacia el otro extremo de la mesa, siendo seguida por lo que parecía ser un Dragón descolorido.

Encogiéndose de hombros volvió a cerrar los ojos, evitando soltar una risa al escuchar las voces raras que el niño ponía para cada personaje. De repente sintió suaves toques en su pelo, que bajaban a su espalda y volvían a su cabeza, el niño lo estaba ocupando como escenario para su juego.

En un momento se levantó con rapidez fingiendo un gruñido de dinosaurio que asusto al castaño, haciendo reír a Jimin por su improvisada travesura, siendo muy gracioso ver los ojitos extremadamente abiertos del otro niño. Pronto la risa del otro cachorro se escucho, dando pequeños golpes al hombro del castaño por asustarlo.

-¡Dinosaudio malo! -Fingió llorar aun golpeando a Jimin pero sin ser brusco, solo queriendo jugar.

-Se dice "dinosaurio", niño. -Lo corrigió Jimin, sonriendo amable mientras se colocaba sus lentes para poder distinguir de mejor manera las facciones de su compañero.

-Me llamo Taehyung. -Se presentó sonriente, extendiendo una de sus manitos.

-Yo Jimin. -Se presento igualmente, estrechando la pequeña mano que le era extendida.

-¿Jugamos? -Pregunto extendiéndole la figura del Dragón.- Tú persigues a princesa.

-Mmhh... ¡bueno!

Siendo vigilados por una sonriente beta comenzaron a jugar, Jimin siendo golpeado cada vez que fingía gruñir como un dragón, asustando más de una vez al pequeño Taehyung.


-¡Jiminnie! ¿Estas listo?

El fuerte grito de su mejor amigo lo saco de sus recuerdos, provocando que una tierna sonrisa con ojitos de alcancía apareciera en su rostro, siendo visto en el momento que el menor entro a la habitación, frunciendo su ceño curioso por lo que su amigo estuviera haciendo.

-Si Tae, solo buscaba algo. -Mencionó levantando sus audífonos, intentando ocultar entre su ropa las pequeñas gafas que encontró al desordenar sus cajones.

-Te dije que me pidieras ayuda si necesitabas buscar algo, te recuerdo que tu olfato no sirve para eso. -Aunque sonara cruel, Jimin ya estaba acostumbrado, sabia que no era capaz de varias cosas y una de ellas era ayudarse a si mismo.

Pero para eso tenia a sus amigos.

-Ya, lo siento. -Riendo avergonzado camino hacia Taehyung, quien lo tomo del brazo para jalarlo fuera de la habitación, llevando consigo el equipaje del rubio omega.

-Al fin iremos a Busan ¡que emoción!

-¿Yoongi y Hoseok Hyung? -Pregunto bajando las escaleras con ayuda del menor, agarrandose a la vez del pasamanos para no caer.

-Ayudando a tu madre... -Al llegar abajo fueron rápidamente hacia la camioneta de la madre del menor.- Vi lo que escondiste. -Mencionó el omega una vez sentados en el automóvil.

-¿Lo que escondí?

-Tus gafas... Esas que usabas de pequeño. -Soltando un "ah" Jimin asintió entendiendo a lo que se refería, sintiéndose levemente avergonzado.- ¿Qué hacías con ellas?

-Las encontré y bueno... Recordé cuando te conocí. -Sonrojado rio tímido, siendo inmediatamente abrazado por Taehyung quien había sentido una inexplicable emoción al escucharlo.

-¡Tan lindo mi Jiminnie!

-¿Perdón? -Riendo divertido soltó a su amigo quien esta vez fue abrazado por un Yoongi celoso que había escuchado la conversación de los menores, sentándose del otro lado de su novio.- Él es mío.

-Ugh, alfa celoso.

Burlándose del mayor todos subieron a la camioneta, yendo Hoseok de copiloto, Taehyung en la parte de atrás, seguido de Jimin y Yoongi, este ultimo aun abrazado a su novio quien no podía evitar sonrojarse por lo cariñoso que se encontraba el alfa.

-¡Al fin vacaciones! -Grito eufórico Taehyung, abrazando con emoción a su amigo de abultadas mejillas quien solo reía por el entusiasmo del chico.

-Si, por fin iremos a Busan. -Concordó el rubio, sintiendo como la fría mano de su hyung tomaba la suya, ampliando su sonrisa.- ¿Esta emocionado, Yoongi hyung?

-Mh... Se podría decir que si.

Observando a su lindo omega sonrió encantado, aguantando las ganas de pellizcar sus sonrojadas mejillas, y es que claro que estaba emocionado, pero no por ir a la playa, sino porque pasaría tiempo con la persona que más amaba en el mundo.

Y es que después de unas agotadoras semanas de examenes y pasando mediados de junio, al fin habían salido de vacaciones de verano, más que entusiasmado de visitar las playas de Busan, en especial al no tener que pagar hospedaje pues una vez Yoora se contacto con su hermano, este más que encantado los recibiría en su casa.


Cuatro horas de viaje después, al fin se encontraban entre las calles de Busan, todos completamente entusiasmados por todo lo que harían esa semana de vacaciones allí. Yoongi quien llevaba una cámara fotográfica no podía dejar de sacar fotos al paisaje que se veía fuera del auto, mucho menos se aguantó las ganas de sacarle fotos al dormido Jimin que se recargaba en su hombro. Tan tierno.

Taehyung quien dormitaba al lado de su novio sonrió divertido, dejando escapar un pequeño bostezo por el cansado viaje. Todo el entusiasmo que tenia al comienzo del viaje se dreno de su cuerpo en cuanto el sueño llego, algo que también le había pasado a Hoseok, solo que este ya estaba bien dormido apoyado en el cristal de la ventana.

-¿No dormiste, Yoongi? -Pregunto Yoora viéndolo por el espejo retrovisor, recibiendo una negativa de parte del pálido.- Si quieres, cuando lleguemos a la casa de mi hermano puedes dormir, de todas formas saldremos más tarde.

-Esta bien, gracias señora.-Sonriendo mínimamente agradeció, escuchando reír a la omega.

-Dime Yoora, o mamá, o suegra como me dijiste antes, lo que mejor te parezca.

-La llamare Yoora-nim... -Riendo avergonzado guardo su cámara, dejándola a un lado de sus piernas, intentando que no se cayera por el movimiento de la camioneta.

Quitándose a Jimin de su hombro se giro, quedando de tal forma que el rubio omega pudo apoyarse completamente en el pecho del mayor, aspirando su relajante aroma a lluvia que no hizo más que calmarlo aun más, impidiéndole despertar.

Yoongi solo acariciaba su cabello jugando con los pequeños rulos que se formaban por el movimiento de sus manos. Sentía la mirada de la madre de su novio a través del espejo retrovisor, pero poco le importaba. Él solo quería mimar a su lindo omega.

Unos cuantos minutos después el fuerte sonido de las olas golpear en las rocas despertó a los chicos, haciendo reír a Yoongi cuando comenzaron a gritar emocionados por al fin haber llegado a la tan ansiada playa. Jimin aun recostado en su pecho sonreía adormilado, jugando con el collar que Yoongi de vez en cuando utilizaba.

-Bien, ya llegamos, ayuden a bajar sus cosas, los esperare dentro. -Hablo Yoora estacionando el auto fuera de una casa demasiado grande a opinión de Yoongi.

Ayudando a Jimin a bajar de la camioneta, tomo su bolso y el del omega, negándose a que este lo ayudara lo que ocasiono los ya acostumbrados berrinches del menor y su constantes risas por lo tierno que se veía malhumorado.

Grande fue su sorpresa cuando el rubio corrió lo más rápido que sus piernas le permitieron hacia la casa, y justo cuando pensó que iba a caer, un alto chico de cabello grisáceo y sonrisa radiante lo abrazo alzándolo en el aire, provocando las risas de Jimin como también las de un emocionado Taehyung quien ya se encontraba abrazando al desconocido.

Al menos para los dos alfas que veían la escena confundidos. Y no por no conocer a ese alfa, porque era obvio que lo era por su altura, sino porque ninguno de sus lobos se sintió amenazado cuando sus omegas saludaron con excesivo cariño al alto chico, al contrario, el joven trasmitía una extraña aura de confianza que los confundía.

-¡Yoongi hyung! ¡Hobi hyung! Vengan... -Haciéndole caso al rubio se acercaron a ellos, dejando sus bolsos en el suelo para poder hablar comodamente.- Él es Chanyeol hyung, mi tío. -Tomando la gran mano del alfa mayor recibió una animada sonrisa, contagiando a Yoongi quien no pudo evitar sonreír a la vez que hacia una pequeña reverencia.

-Mucho gusto, soy Min Yoongi, novio de Jiminnie. -Se presento con todo respeto, haciendo reír al alfa mayor.

-El gusto es mío, Yoongi. -Volteando hacia el alfa pelirrojo que ya se encontraba abrazado de Taehyung, lo saludo.- Entonces tu eres "Hobi".

-Jung Hoseok, pero me llaman Hobi... -Enseñando su carismática sonrisa imitó a Yoongi haciendo una leve reverencia que fue correspondida.- Un gusto.

-Igualmente... -Volteando hacia la casa el alfa mayor los invitó a pasar, jalando a Jimin quien no parecía querer soltarlo.- Vamos, deben conocer a mi omega.

Asintiendo volvieron a tomar sus bolsos y los de sus omegas, para así seguir al peligris al interior de la gran casa, exclamando sorprendidos por lo espaciosa que esta era. Dejando sus bolsos al lado de un sofá, como ChanYeol se los pidió, caminaron hasta el patio trasero, el cual tenia vista al mar y donde Yoora y un bonito chico se encontraban conversando animadamente.

-Baekkie, ven aquí. -Con sumo cariño llamo a su omega quien, al voltear, dejo ver un pequeño bulto en su estomago que hizo gritar de emoción a Taehyung.

-¡Baekhyun hyung esta embarazado!

-¡No te creo! -Respondió Jimin soltando a su tío para caminar hacia el otro omega que reía divertido, jalando las manos de su sobrino para llevarlas a su vientre.— H-Hyung... ¡Que bonito!

-Gracias, Jiminnie. -Con cariño beso la frente del menor, abrazándolo y riendo al sentir como olfateaba su cuello.- ¡Yah! Se que huelo diferente, detente.

-Es que huele a leche y manzanas. -Puchereando se alejo del castaño, sonriendo al no poder contener la emoción de al fin tener un primo. Aunque este aun esté en camino.

La risa de los alfas detrás de él llamaron su atención, más específicamente la risa de Yoongi pues no sabía que sucedía como para que su novio estuviera riendo tan cómodamente, aunque la verdad le encantaba escucharlo reír.

En cuanto volteo el fuerte aroma a tierra húmeda llego a su nariz, confundiéndolo aun más de lo que ya estaba, sintiéndose extrañamente emocionado. Con cuidado camino hasta los mayores, sintiendo las manos de Yoongi tomar uno de sus brazos, exaltándose al sentirlo tan frio al tacto.

-Tú tío acaba de echarme encima un vaso con agua, dile algo. -Puchereo Yoongi sabiendo que su novio no podría verlo, pero si escuchar el berrinche en su voz.

-¿Por qué hizo eso? -Frunciendo su nariz volteo hacia donde creía estaba su mayor, guiándose por la gruesa risa de este.

-Fue un accidente, lo juro.

Los alfas seguían riendo sin más, mientras Jimin intentaba con manos suaves estrujar la polera de Yoongi, quien no podía evitar reír por los tiernos pucheros de su lindo rubio, demasiado enamoradizo para darse cuenta de la cara de idiota que estaba haciendo, o así era a ojos de su mejor amigo.

-Venga, vayan arriba, la ultima habitación es de ustedes, puedes cambiarte ahí. -Musitó Chanyeol viendo como su omega lo observaba con una ceja alzada, claro indicio de que no le agradaba que haya sido tan imprudente.

-¿De nosotros? -Pregunto Jimin esta vez, soltando la ropa del pelinegro pero tomando la fría mano de este, sonriendo casi imperceptiblemente al sentir una suave caricia en su palma.

-Tú y Yoongi dormirán juntos, TaeHyung y Hoseok en la habitación continúa y Yoora en la del primer piso... -Restándole importancia hablo, yendo luego donde Baekhyun quien lo llamaba con su mano.

-Ya les dijeron, suban sus cosas. -Les ordeno Yoora entrando a la casa seguida de su hermano y cuñado, dejando fuera a los cuatro adolescentes.

Hoseok fue el primero en entrar, feliz de poder dormir con su chico mientras que este reía nervioso, pues seria la primera vez que dormiría en la misma habitación que su alfa, aun cuando ya se habían quedado en la casa del otro, nunca habían dormido en la misma habitación.

Por otro lado Yoongi no se quejaba, ya había dormido algunas veces junto a Jimin, tanto en la misma habitación como en la misma cama, pero Jimin estaba inexplicablemente nervioso, no sabia si era por la noticia de dormir junto al alfa, o el aroma de este que aun invadía su olfato.

Quizás un poco de ambas.

Como Yoora había dicho antes, luego de cambiarse de ropa, se había dejado caer en la gran cama que los tíos de su novio les habían proporcionado en su estadía allí.
Estaba tan cómodo y relajado que ni cuenta se dio cuando un escurridizo Jimin se había adentrado en la cama, hasta que las pequeñas manos del chico rodearon su cintura exigiendo cariño, algo a lo que no se negaría.

-Estas muy cariñoso, Jiminnie. -Musitó el alfa, escuchando el leve gimoteo que Jimin dejaba escapar al estar escondido en su cuello.- ¿Te sientes bien?

-Solo quiero mimos... -Musitó bajito, sonriendo al sentir las grandes manos de su hyung en su espalda y cabeza, suspirando cuando comenzó a jugar con su cabello.

YoonGi no dijo nada más, concentrándose en mimar a su novio y de paso disfrutar del dulce aroma a moras que el chico dejaba escapar al estar relajado. Amaba el dulce aroma de su dulce Jimin, lo relajaba demasiado al punto de dormirlo, pues incluso en clases había caído dormido debido al aterciopelado aroma.

Pronto sus ojos se comenzaron a cerrar, bostezando dispuesto a dormir todo lo que su cuerpo pidiera, pero la singular pregunta que su omega soltó provoco que todo cansancio dejara su cabeza para prestarle atención.

-¿Le gustaría tener hijos, Hyung? -Tímido pregunto, jugando con el collar del mayor, mordiendo su labio inferior por la expectación.

-Hijos... ¿contigo? -Jimin asintió despacio, evitando soltar un insolente "Obvio".- Quizás...

-¿Cuántos quiere tener?

-Uno. -Contesto simple, encogiéndose de hombros cuando el menor pregunto "¿por qué?" mientras se acomodaba en la cama para abrazar de mejor manera al chico.- Me gustaría consentirlo y malcriarlo, pero no demasiado, no quiero que sea un revoltoso.

-Yo quiero tener dos, un niño y una niña.

-Yo un niño, para llevarlo a cazar. -Sonriendo al imaginar aquello volvió a cerrar los ojos, acurrucándose más cerca del omega, si es que eso era posible.

-¿Si tuviéramos una niña no la llevaría a cazar? -Pregunto con el ceño fruncido, siendo él ahora quien acariciaba el cabello del mayor.

-Claro que si, pero me gustaría que ella fuese una artista. -Suspirando respondió, sin poder contener la sonrisa que se le escapo.- Si tuviéramos una niña quiero que sea bailarina, o actriz.

-¿Actriz? ¿Por qué?

-Porque al ser tú su padre, sería hermosa igual que una actriz de Hollywood.

-¡Hyung!

Riendo divertido abrazo a su novio con fuerza, comenzando a dejar pequeños besos en sus mejillas y cuello, escuchándolo reír risueño. Amaba esos momentos donde solo eran ellos dos, sin nadie que los pudiera molestar, imaginando un futuro juntos, sintiéndolo tan cerca pero tan irreal a la vez.

Aun así Yoongi era consiente de su amor por el omega, así que sus fantasías de una familia con este no eran tan irreales como podían sonar.

-Sabes que te amo ¿verdad? -Pregunto después de un rato en el cual lo único que se escuchaba era el mar fuera de la casa.

-Lo se, hyung... -Sonriente dejo un pequeño beso en los labios de su alfa, escuchándolo suspirar.- Yo también lo amo.

-Bien, porque si no me amaras, yo lo haría por ambos.

-No sea tonto.

-Por ti, siempre bebé.

-¡Yah!

Nuevamente rieron, sintiéndose tan completos al estar en los brazos del otro que nada ni nadie podría arruinarles su felicidad.

     










Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top