Historia

Viviendo en el último distrito del RUKONGAI (ZARAKI) Yoh tuvo que crecer más rápido de lo normal, mientras pasaba su "feliz niñez" siendo perseguido por los habitantes del distrito 80 del RUKONGAI constantemente, se vio obligado a aprender a usar el REISHI para poder sobrevivir más tiempo, le tomo mucho si quiera hacer una pequeña esfera de REIRYOUKU, pero la perseverancia trae consigo el éxito, por esta razón después de 10 años entre hurtos, escapadas, golpizas y un entrenamiento en las bases del REIRYUOKU decidió recorrer los distritos del RUKONGAI después de varios meses llego al distrito 78 donde conoció a Renji Abarai y Rukia. Unos chicos de su edad que se dedicaban a realizar pequeños hurtos ya que al tener Reiatsu sentían hambre.

Solo estuvo un par de meses con ellos, tiempo en el que estos chicos le tomaron confianza debido a su habilidad para conseguir las cosas, aun así, no necesitaba que volvieran a usarlo solo como algo desechable, les ayudo a conseguir algo de comida en ese tiempo al igual que consiguió para él y así poder continuar con su viaje al centro del Seireitei y convertirse en alguien, no quería venganza, no quería riquezas, solo quería vivir su vida y si para poder hacerlo tenía que seguir ordenes nuevamente, lo haría siempre y cuando le dejaran vivir en paz. 

Continuo viajando durante varios meses más, tiempo después llego al distrito 47, había logrado un gran avance, pero en el camino se quedó sin recursos, así que tuvo que volver a robar para vivir, si lograba ser un Shinigami y esos viejos a los que robaba seguían vivos volvería a pagarles, tal vez, sin embargo sus actividades y camino fueron detenidos ya que al parecer un par de Shinigamis se encontraban vigilando, razón por la cual se desvió en medio de la noche a un bosque espeso lo que hacía que la poca luz de luna se perdiera debido a los grandes árboles.

En este bosque encontró a un ASPIRANTE A SHINIGAMI, logro reconocerlo gracias a sus vestimentas iguales a las de un Shinigami con la diferencia de que los Hakama eran blancos mientras que la parte del torso era de color azul, este se encontraba rodeado de cuerpos sin vida mientras en sus manos sostenía lo que parecía una esfera de REISHI la cual le entregaba a un hombre alto de Anteojos con el uniforme estándar del GOTEI 13 y el típico HAORI de capitán correspondiente a la QUINTA DIVISION con el cabello algo desordenado, el cual era acompañado por un adolescente de pelo gris corto, también con el uniforme SHINIGAMI y una placa atada a su brazo izquierdo destacando en su rostro una sonrisa zorruna igual los acompañaba un hombre adulto y alto de piel morena con el atuendo típico y un HAORI de CAPITAN perteneciente a la NOVENA DIVISIÓN el cual mantenía sus ojos cerrados y una expresión estoica en su rostro.

(imaginen el Haori del 5 escuadrón en Aizen y a Ichimaru un poco más grande con la placa de teniente)

- ¿... y bien tienes lo que pedí? 

-Si Aizen-sama eh reunido el Reishi que me pidió, ¿ahora podré ser su subordinado y ser entrenado por usted? 

Preguntaba el futro Shinigami al ahora identificado AIZEN el cual mantenía una sonrisa de superioridad en sus labios

-Por supuesto que no, ¿porque querría a alguien tan patético y sin talento alguno a mi lado? -

Decía esto mientras el alumno mantenía una cara de asombro y tristeza

-p-p-p-pero Aizen-sama ¡¡conseguí lo que me pidió!!

Hablaba con desesperación el estudiante

-Si lo hiciste, pero este REISHI apenas es útil, sin embargo, si quieres ser de ayuda para mi acompaña a mi socio, KANAME, lleva al chico a la base al menos servirá para algo.

El Moreno de ojos cerrados contesto con mucho respeto

-Si Aizen-Sama, sígueme muchacho.

Mientras el aspirante a Shinigami acompañaba al nombrado como Kaname, el seguidor más joven de Aizen se dirigió a este ultimo

-Aizen-sama ¿qué haremos con el pequeño fisgón?.

Decía mientras su sonrisa crecía aún más y sus ojos se abrían un poco mostrando una mirada afilada que se dirigía a nuestro protagonista.

Yoh al escuchar las palabras provenientes del peligris sintió que todo se detuvo, sus piernas temblaban, las palmas de sus manos se encontraban sudando y sus ojos comienzan a cristalizarse, una viva imagen del miedo era lo que se veía en la figura de nuestro protagonista, hacía mucho que había dejado de sentir eso pero estos sujetos eran diferentes, sobre todo el tipo castaño de anteojos, parecía una deidad, ya que a pesar de ocultar bien su Reiatsu, de alguna forma el pequeño niño pelinegro podía sentir su gran poder espiritual, quería correr, aun así sabía que sería imposible huir, quería gritar, pero su voz simplemente no salía, entonces recordó la razón por la que recorría el Rukongai, quería, no, debía ser más fuerte, incluso más que ese sujeto que tanto lo aterraba y por eso salió de su escondite encarando al par de Shinigami, ya había perdido su infancia, perder la vida en ese punto ya poco importaría. 

Decir que ambos estaban sorprendidos era poco, Aizen lo observo por un par de minutos castaño y pelinegro se miraron fijamente y entonces el peligris hablo.

-Sé que soy insistente Aizen-sama, pero ¿qué deberíamos hacer?.

Aizen seguía observando al chico, algo en él le decía que era peligroso y que debía eliminarlo, pero por otra parte tenia curiosidad, quería ver su crecimiento, que es lo que haría, tal vez se estaba ablandando sin embargo negó con la cabeza para responder a su acompañante

-No le haremos nada, Gin, tengo curiosidad por este niño quiero ver su crecimiento, saber de lo que será capaz en un futuro.

El ahora identificado como Gin se vio impresionado ante esta respuesta, su líder había demostrado ser implacable, un ser frio que le había robado todo a su mejor amiga, así como a varios pobladores del RUKONGAI e incluso enviando a sus experimentos al MUNDO MATERIAL, experimentos HOLLOWS que eliminaban humanos a cada momento, ¿acaso no se daba cuenta, que la curiosidad y osadía que estaba mostrando hacia este chico que incluso Gin reconoció como un peligro podría terminar siendo su condena en un futuro? No era como si le importará después de todo solo lo seguía para poder regresarle a su amiga lo que AIZEN le había robado si este niño representaba un peligro para el hombre de anteojos era mejor para él, pero solo el, solo ICHIMARU GIN podía acabar con la vida de ese hombre enfermo de poder.

Con estos pensamientos en mente el peligris Gin asintió con esa gran sonrisa que no vacilo durante todo su pensamiento y respondió

-Entiendo Aizen-sama, sin embargo ¿no será un problema el que haya visto esto?.

Aizen sonrió y miro a Gin para contestar

-No te preocupes Gin. -mientras tomaba su Zanpaku-tō y decía-. QUEBRANTA, KYOUKA SUIGETSU. -Después de todo si se hace fuerte tal vez nos sea de utilidad en un futuro, una vez desarrolle su potencial-.

Después de estas palabras todo se volvió borroso para nuestro protagonista, lo último que logro ver fue como Aizen y Gin se retiraban en la oscuridad del bosque mientras Yoh se desplomaba en la pastura y quedaba inconsciente.

Eso es todo por hoy, espero les haya gustado y de haber sido así regálame un comentario, eso me ayudara a mejorar, también si te sobra tiempo dame una estrella solo si te gusto el capítulo, en los comentarios te aclararé las preguntas o dudas que puedas tener siempre y cuando no sean Spoilers, Dicho esto gracias, que tengas buen día, tarde o noche, Nos vemos la Próxima.