02 de octubre - Estadio Luna Park.

La última función en aquel gran estadio estaba a punto de comenzar, los nervios y la euforia iban en aumento. A pesar de ya haber dado 4 increibles shows, todos con localidades agotadas, la adrenalina de ser el último antes de la gira era muy grande.

Productores, bailarines, musicos y hasta los mismos actores, corrían por todos lados, faltaba un rato  para salir a escena y estaban preparando los últimos detalles.

Gaston, Agustin, Fausto, Gabriel y Renato se estaban terminando de alistar en el camarin que compartían. Cuando terminaron de vestirse, tres de ellos salieron a colocarse los microfonos, dejando a dos personas en una soledad incomoda.

-No puedo creer que estes enojado por esto. Sabias que iba a pasar - le habló un Gabriel Gallicchio indignado terminando de atarse las zapatillas, a un Renato Quattordio dolido que ni siquiera lo miraba - Eu mirame - se atrevió a acercarse a el y girarlo para que lo vea. - Gritame, puteame, hace lo que carajos sientas. Pero por favor, hace algo, te juro que nada me duele más que se corte lo que tenemos.

Renato trago saliva, a el también le dolia demasiado la situación. Sentia que ignorandolo, alejandose de el todo seria mucho más facil. Pero Gabriel no se la hacia para nada fácil. Se buscaban todo el tiempo, sin darse cuenta, necesitaban el uno del otro más que nadie.

-Se que esta mal lo que hago, y que no lo mereces. Yo jamás me imagine siendole infiel a alguien. Pero llegaste y le diste un giro de 180 grados a mi vida, y fue más fuerte que yo. Solo dame tiempo, antes de que empiece la gira te prometo que la dejo. Y me la juego por vos, que sos lo mejor que me paso en esta vida. - le prometió desde lo más profundo de su corazón mirando fijamente a esos ojos marrones de los que se habia enamorado desde el primer momento que lo vio.

Renato no pudo contestar, ya que los llamaron a ambos, quedaban minutos para salir y ya estaban muy retrasados.

La función transcurria normalmente, inclusive en el numero musical de "Bye bye bye" que compartían, ya que no tenian que interactuar en este.

Escena 11. Renato se dirigió al escenario, sentandose en el piso, debajo del farol. A pesar de estar actuando, su mente no dejaba de pensar, estaba a segundos de tener que volver a verlo, hacer como si nada, frente a miles de personas, que no estaban ni enteradas por lo que estaba pasando.

-Buenassss - levantó la vista al escucharlo, sacandolo totalmente de sus pensamientos, para asi comenzar la escena.

-Hooola- se le tiró encima abrazandolo, a pesar de que el Renato de hace unos dias odiaba la idea de que solo sea un abrazo, ahora le venia perfecto que no sea algo más - pense que no te iba a ir hasta el show. - le dijo separandose rápido del abrazo pero siéndole imposible soltarle la mano.

-Es que tenia tanto tiempo sin verte. Y me imagine que ibas a estar aca y me mande. - escuchó que le respondio, hacia un gran esfuerzo para no mirarlo.

-Si, estoy esperando a Romeo. Escuchame... - se giro inevitablemente ya que tenia que seguir con la escena como correpondia. - ¿te puedo contar un secreto y no se lo decis a nadie? A nadieee - sentencio mirando a un punto fijo detras del mayor.

-¿Que cosa? ¿Que me extrañas cuando no me ves? - Gallicchio se acerco y lo agarro de la cara muy delicadamente. A Renato se le nublo la mente, no pudo evitar cerrar los ojos ante ese contacto y agarrandole ambos brazos.

-Nah eso no - se alejó al reaccionar, escucho la linea del otro de "ah entonces ya no me interesa" y se giró para volver corriendo hacia el - Eso ya no es más es un secreto - lo abrazó, porque ademas de que estaba pactado en la escena, necesitaba sentir los brazos del mayor alrededor de su cintura más que nunca.

"Junior" le explicó a "Blas" lo que estaba sucediendo con Dante y Simona, lo que significaba que se venia el intento de beso entre ellos . Visualizó al público, encontrandose con la última persona que queria ver en ese momento.

-Me encantan las sorpresas, pero mucho más me gustas vos, porque te amo. - Renato se giró nuevamente, sintiendo las manos del rizado sobre su cara.

Recordó el rostro de la persona que los observaba desde las primeras filas y sin darse cuenta, se abalanzó hasta el rostro de Gabriel, depositando un pequeño roce de labios, que tras el rizado correr el rostro como pactaba la escena, terminó convirtiendose en un beso sobre su cuello, superando todo tipo de limites.

La escena siguio, aunque la mente de ambos chicos se encontraban en otra parte. Los dos eran totalmente conscientes de las consecuencias de lo que habia pasado.

Salieron de escena, pero no pudieron decirse nada ya que les tocaba el proximo número con "Hoy es solo hoy". Lo disfrutaron al máximo, cruzando una que otra mirada durante la canción como estaban ya acostumbrados.

Luego de la canción, salieron corriendo hacia el camarin. Venia la protagonista con "Soy Simona" y luego les tocaba a todos juntos en un "Un santito" donde la pareja tenia que compartir un abrazo bastante extenso.

Gaston y Fausto luego de vestirse rápidamente, salieron el busca de sus parejas, mientras que Agustín solo paseaba por los pasillos antes de su siguiente escena.

Solo quedaban Renato y Gabriel. Que como de costumbre, eran los ultimos en terminar de prepararse, ya que siempre se colgaban mirandose, o dandose algún que otro besito. Pero esta vez era distinto, ambos no podian dejar de pensar en lo ocurrido minutos antes en el escenario, pero sabian que no era momento de hablar sobre eso.

Un golpe en la puerta los sacó de sus pensamientos. Renato fue al encuentro con la persona que se encontraba tras la puerta, quedando totalmente sorprendido al encontrarse con ella. La novia de Gabriel, Antonella.

-¿Eu Tatito quien es...? - fue hacia la puerta, ya que no era normal que se quedara tanto tiempo alli, sin decir siquiera quien era.

Se quedo totalmente estático al verla. Ni en su más grandes pesadillas se imagino esa situación. El, Renato y ella, en el mismo lugar, solos.

-¿Podemos hablar? - preguntó la jovencita ignorando a la tercera persona presente, y hablandole directamente a su pareja.

Gabriel aún shockeado, giró a ver a Renato que estaba igual que el, aunque este logro asentir y se retiro de ahi sin decir absolutamente nada.

Gabriel la invito a pasar, sin saber que carajo decir, le aterraba pensar la razón por la que lo fue a buscar.

-Me sorprende que vengas ahora, acordamos que después de la función nos ibamos a ver, asi no afectaba con mi trabajo - rompió el silencio, pasando una mano por sus rulos debido al nerviosismo.

-Si, ya se. Pero no creo que tu profesionalismo este funcionando. - el rizado la miró sorprendido ante aquel comentario. - los vi, bueno, en realidad todos los vimos. Vi videos de las funciones anteriores, y se que el beso que se dieron hacer un rato no esta guionado.

Gabriel volvió a paralizarse, no podia creerlo. Todas la veces que habia imaginado o soñado donde ella descubria sus sentimientos hacia Renato, no se comparaban en nada a lo que estaba pasando, a la realidad.

-¿No me vas a decir nada? No te pido que me pidas perdón de rodillas. Por lo menos explicame que mierda esta pasando Gabriel. - le pidió levantando la voz, al borde del llanto. - Me siento una estupida, ahora me doy cuenta de todo. Lo tenia frente a mis ojos y no quise darme cuenta. - sentencio ya con lagrimas cayendo por su rostro, tapandosela con las manos para ocultarlas.

-Anto perdón. Yo no queria que las cosas se den asi, pero pasó. Lo admito y me hagp cargo. Me enamore completamente de ese pendejo, ese pendejo 6 años menor que yo, totalmente diferente a mi. No se como paso, no lo busque, pero se dio. - se disculpó largando todo lo que se venia aguantando hace meses.

Se acercó a ella para abrazarla y calmar su llanto, lo que causo que ella se soltara bruscamente de su agarre y saliera corriendo del lugar, gritando y puteando a cualquiera que se le cruzara por su camino.

Lo que la ex pareja no sabia, es que Renato lo habia escuchado todo. Habia decidido quedarse, aunque le doliera lo que sea que escuchara, su cuerpo y su corazón le pedian que se quede.

Y valió la pena, al escuchar al chico del que esta completamente enamorado, confesarle a su ahora ex novia, que también esta enamorado de el.

La felicidad no le cabia en el cuerpo, queria correr a buscarlo, besarlo y ser por fin felices juntos, pero estaban en medio de una función. No era para nada el momento.

Ambos salieron a escena. Bajó la música de "Un santito" llegó su momento preferido del show. El abrazo. Luego de 3 vueltitas, como si de un cuarteto se tratara, se abrazaron.

Era por lejor la parte favorita de ambos, ya que pasaban un minuto y medio en los brazos del otro, junto con alguna que otra palabra linda del mayor, sacandole una sonrisa al más chico.

Esta no fue la excepción, 13 segundos de comenzar el abrazo,  Gabriel le dijo a Renato algo que necesitaba escuchar.

-Terminamos - soltó acariciandole suavemente la espalda y con una timida sonrisa.

-¿Que? - le preguntó sorprendido cambiando de posición, para que nadie le lea los labios, aprovechando para aferrarse más a el.

-Que anto y yo terminamos. Se dio cuenta de todo, le dije lo que me pasaba con vos y bueno, no me dejo de buena manera - comentó soltando una risita, haciendo sonreir al otro también.

-Eso significa que... - preguntó ansioso, aunque sabia lo que significaba, necesitaba que se lo confirmara.

-Significa que ya esta, que ya no hay nada que nos impida estar juntos libremente - le explicó agarrandolo más fuertemente.

-Te amo-  le dijo Renato imitando las palabras que estaban diciendose Dante y Simona.

-Te amo más - le respondió Gabriel sonriendo ampliamente.

No pudieron decirse nada más, ya que el show debia continuar. Las palabras sobraban, ya ambos se imaginaban todo lo que se vendria y los llenaba de felicidad absoluta. Por fim serían totalmente libres de amarse.