4.
Aquí esta lo que tanto me pidieron.
***
La mañana de el profesor Lee había comenzado bastante bien, se había despertado temprano, había tomado una ducha, después su esposa lo recibió en el comedor con un delicioso desayuno.
Sin mencionar que la noche anterior, después de llegar a su hogar después de clases su esposa lo recibió en bata y tuvieron una noche maravillosa (Según el) .
Hoy se despertó de muy buen humor, demasiado, diría yo. Incluso cuando llegó a la preparatoria, los inútiles de sus alumnos no pudieron arruinar su muy buen humor. Y eso era algo nuevo, ya que siempre que ponía un pie en la escuela, todo era estrés y más estrés, lidiar con adolescentes mal educados y estupidos era una tortura.
Pero al parecer hoy esos mocosos no podrían hacer nada para que se molestara. Parece que tener sexo después de mucho tiempo le había servido bastante, ahora le pediría a su esposa hacerlo por lo menos una vez a la semana definitivamente.
El señor de 54 años caminaba por los pasillos de la preparatoria, directo a el salón en el que le tocaba dar clase, que para ser sinceros era el que más odiaba. ¿Por que? Bueno, ahí se encontraban los alumnos que más repudiaba en toda la escuela; Choi yeonjun, Cha eunwoo, Shin yuna, y por último y el peor, Kim Taehyung.
Si bien odiaba a cada alumno de la preparatoria, estos eran los que llevaban la delantera. Yeonjun era el chico que siempre le estaba lanzando bolitas de papel con saliva, y cuando se daba cuenta, este se reía en su cara sin importarle ni un poco, incluso se atrevió a ponerle cinco cucarachas adentro de su maletín por haberlo reprobado, sin mencionar que el junto con otro chico pusieron cloro y y quien sabe que más en su café, tuvo que ir de inmediato al hospital. Definitivamente lo odiaba.
Eunwoo y yuna eran un dúo bastante insoportable a su parecer, ellos no le hacían nada, pero lo que hacía que lee los odiará era que hablaran todo el tiempo, y cuando digo todo el tiempo, es absolutamente todo el tiempo, no importa que haga, cuantos reportes o citatorios les pusiera, ellos nunca se callaban, parecía no importarles absolutamente nada, incluso creía que estos dos serían capaces de reírse a carcajadas en un velorio sin importarles nada. Eran unos maleducados, ignorantes, inútiles y detestables seres humanos. Los odiaba.
Y por último Kim Taehyung, ese alumno suyo, era sin duda el peor, era un jovencito grosero, maleducado, que se creía superior a los demás, mirando a todos con muecas y gestos horribles, nunca lo obedecía, lo contradecía, se burlaba de él con sus amigos e incluso aveces nisiquiera le importaba estar en la misma habitación que el mientras decía cosas malas, simplemente lo decía importándole muy poco su presencia.
La primera vez que lo vio, se imaginó algo diferente, ya que el chico tiene cara de ser una persona amable, gentil y estudiosa, pero resultó ser un mocoso caprichoso y mimado. ¿Pero mimado por quien? Por los tipos con los que seguramente se acuesta a diario para poder comer, sino como podría pagar todo lo que tiene, porque a primera vista se nota que el rubio se baña en dinero.
Aún que la diferencia en los demás y kim Taehyung, era que a ellos no los odiaba, mientras que a Taehyung lo odiaba, y le tenía lastima y asco. ¿Asco? Si.
Tal vez y no lo juzgaba por seguramente acostarse con hombres todo el tiempo, porque él comprendía que tenía qué sobrevivir, es por eso que le tenía lastima. ¿Y el asco por que? Por ser un homosexual. El consideraba que un hombre y otro hombre no podían estar juntos, es decir, era simplemente algo enfermo. Así no funciona, y le causaba demasiado rechazo saber que a este le diera igual y siguiera haciendo cosas totalmente enfermas, nisiquiera hacía un esfuerzo por curarse.
Siempre lo veía usando blusas cortas, faldas, pantalones ajustados, que aún que él admitía que no se veía mal, no estaba de acuerdo con que este usara ese tipo de ropa, ya que mas chicos querrían hacer lo mismo, y luego la escuela estaría llena de estos fenómenos sin cura.
Definitivamente si eso llegará a suceder se lanzaría de el tercer piso, prefiere morir antes que convivir con más enfermos iguales a kim Taehyung.
Pero bueno, volviendo a lo de antes, al llegar a su salón, entro y fue directo a su escritorio para sentarse y sacar las cosas que necesitaría para la clase de hoy. Y al pasar lista, se dió cuenta de qué taehyung no había asistido a clases (otra vez).
Y no le molestaban para nada, era mejor para el, un mocoso menos que soportar, definitivamente hoy era su día.
Toda la clase continuó normal, obviamente con las travesuras absurdas de yeonjun, y las voces insoportables de eunwoo y yuna, pero aún así, prefería eso a soportar las miradas y muecas que le hacía el rubio cuando estaba presente.
Definitivamente sin la presencia de ese chiquillo se sentía más relajado.
Al terminar la clase fue a comer algo a la cafetería, después continuo las demás clases que le quedaban, y cuando llegaron las 2:30 pm, sintió un alivio al saber que ya se podría ir a casa. Tenía pensado llevar a su esposa a cenar algo, después llegar y dormir un rato, luego revisar algunos trabajos pendientes y de ahí ver una novela con esposa.
Lo mejor de todo era que mañana llegaría la directora de la preparatoria, así que podría comentarle de una vez por todas absolutamente todo lo qué taehyung ah hecho, y lo más seguro es que obtendría seguramente la completa expulsión de el rubio, algo que tenía demasiado entusiasmado al profesor.
¿Una escuela sin Kim Taehyung? Era un completo paraíso si lo pensaba.
—¡Nos vemos mañana, profesora park! —. Se despidió de su colega mientras caminaba a la salida. Segundos después esta se despidió de la misma forma con una sonrisa.
Una vez en la salida, camino tranquilamente al estacionamiento donde tenía su auto, al estar cerca, se detuvo unos segundos para poder sacar las llaves de este, y sin estarle prestando atención a su alrededor, no noto que tres hombres fornidos se acercaban a él.
Saco las llaves de su bolsillo, y al momento de estirar el brazo para ponerlas, alguien le puso una bolsa en la cabeza, y lo tomo duramente del cuello, tratando de hacer que se desmayara.
—¡S-suéltenme!—. Grito como pudo, sonando totalmente asustado y despertado.
Los hombres no dijeron nada y lo sostuvieron con más fuerza para obligarlo a caminar, mientras que Lee hacía lo que podía por no hacerlo, pegaba sus pies al suelo lo más fuerte que podía, tenía miedo y no se quería mover.
—O te mueves, o te mato, elige.—Dijo duramente uno de los hombres, el profesor al escuchar aquello, se asustó más y comenzó a llorar.
—¡Porfavor s-suéltenme, les doy lo que q-quieran!—. Estos rieron divertidos, les parecía gracioso que él les quisiera ofrecer algo, cuando ellos tenían el dinero dinero suficiente, ya que su jefe les pagaba bastante bien como para comprar lo que sea que quisieran.
—Solo cierra la boca y muévete, no tengo todo el día.—Sin esperar respuesta, lo jalo y casi lo llevo arrastrando. No podían perder tiempo, jeon les había dado una hora exacta en la cual debían de tenerlo en el lugar acordado, y sabían que si se tardaban más y llegaban después que jk, estarían muertos.
A tirones lo llevaron hacia la camioneta negra con los vidrios polarizados y blindados. Él profesor seguía llorando desesperadamente, no sabía lo que le esperaba y eso lo tenía totalmente aterrado.
—Ya deja de llorar como marica.—Se quejó uno de los hombres de jeon.
—Déjalo en paz felix, ¿No ves que al pobre le va a tocar ir con jeon? Suficiente tiene con lo que le espera.—Dijo soobin, con la intención de asustarlo más, lo cual funcionó ya que el hombre comenzó a respirar mucho más acelerado y a llorar más.
—Oh es verdad, ¡Seguramente en cuanto tenga a el jefe jeon enfrente se hará polvo!—. Felix soltó una carcajada, soobin y bangchan solo sonrieron divertidos.
—¡Déjenme ir p-porfavor!—. Grito, tratando de quitarse la bolsa que tenía en la cabeza, se estaba ahogando.
—Cierra la boca, nadie te va a dejar ir, ahórrate tus putas plegarias para cuando tengas a el jefe enfrente, porque al menos que él lo decida, tú no te vas a librar de esto.—
***
¿Voy a morir? ¿Me van a torturar? ¿Van a golpearme? ¿Que se supone que pasará? Más y más preguntas pasaban por la cabeza de lee, quien ahora estaba en los que parecía un... ¿Motel?. La verdad no estaba seguro, era una habitación grande, con luces led en rojo, una pared con látigos, correas, varas y esposas colgadas, también había una repisa con diferentes dildos acomodados por tamaños, un pequeño ropero sin puertas con lo que parecía ser lencería colgada, y una gran cama en medio de la habitación con olor a vainilla.
Todo era demasiado extraño, el estaba amarrado a un sillón que estaba justo enfrente de la cama matrimonial, teniendo la vista perfecta de esta y un cuadro rojo sangre colgado arriba de la cama.
No podía hablar, tenía un trapo bien amarrado, que le impedía decir algo, estaba amarrado de todo el cuerpo y esposado, pero podía ver y no sabía si eso era bueno o malo.
Llevaba media hora ahí, y todavía no comprendía que es lo que hacía ahí, el no recuerda haber hecho algo malo o ilegal para ganarse eso. No lo merecía.
Escucho el ruido de unos pasos aproximándose a la habitación, su corazón comenzó a latir cada vez más rápido, estaba aterrado.
La puerta se abrió lentamente, y pronto un hombre pelinegro, con mandíbula marcada, ojos negros profundos, bastante alto y fuerte apareció en su campo de visión. Vistiendo un pantalón negro que se ajustaba bien a sus fuertes piernas, y una camisa blanca con los tres botones de arriba desabrochados, dejando ver levemente sus pectorales, y las mangas arremangadas, dejando a la vista sus fuertes brazos con las venas marcadas en estos.
Parecía un modelo o un actor, de esos que hacen el papel de CEO.
El pelinegro se sentó en la orilla de la cama, quedando con el profesor frente a frente.
—Lee Seohyung ¿Verdad? —. ¿Como sabía su nombre? ¿El era el " Jefe " jeon?.
—Claro que es así, se hasta tú tipo de sangre. —¿Que mierda?...
—Sabes, no soy de tardar tanto torturando a las personas debido a que siempre hacen lo que quiero en cuanto me tienen enfrente, pero tal vez estemos aquí unas horas, ya que creo que mi chico se tomará su tiempo para hacerte sufrir.— ¿Quién? No estaba comprendiendo nada, ¿Tal vez se confundió te persona, no?.
Jeon al ver su cara de confusión, decidió quitarle el trapo. Se levanto y camino lentamente a Lee, sin cuidado alguno, jalo del trapo, permitiendo que este pueda hablar.
—N-no estoy c-comprendiendo..—Dijo una vez vio que jeon se sentó de nuevo en donde antes.
—¿Ah,no?—. Lee negó rápidamente.
—Y-yo no soy la persona que busca. ¡S-si me deja ir j-juro que no dire nada, se lo s-suplico! —. Jeon río levemente.
—Solo cierra la puta boca, ya que llegue mi niñito verás y entenderás que no me equivoque de persona. —se levantó de la cama y fue a la mesita de noche que estaba alado de la cama para sacar un cigarro y prenderlo.
Luego volvió con el cigarro entre los labios y se sentó en la cama de nuevo. Miro fijamente al que se supone que era el profesor de su novio, a su parecer, era un chiste, no puede creer que esta cosa hizo sentir mal a su niñito precioso.
El hombre era alto, de pelo blanco, y al tener 52 años ya era obvia la edad, estaba muy arrugado, delgado y jodidamente viejo. Era simplemente patético.
Lee al tener la penetrante mirada de el hombre en el, se puso mucho mas nervioso, le estaba incomodando y asustando un poco. ¿Que se supone que hacía en un cuarto hecho especial mente para sexo? ¿Y si...?
—¿U-usted m-me hará algo? —Jeon volvió a poner la vista en el rostro de este mientras le daba una calada más a su cigarro.
—¿Algo de que? Porque tengo en mente tantas cosas muy dolorosas para ti...—Lee lo miro con pánico.
—¿Algo s-sexual? Prefiero que me mate si piensa qu- —Jeon no lo dejo terminar.
—¡Por Dios! Que puto asco. Si eso llegara a ocurrir me cortaría el pene. Me gustan los chicos, no los ancianos, imbecil. — Soltó con asco.
—¡¿Entonces que hago aquí?!—Alzo la voz, harto y desesperado por saber que hacía el en ese lugar.
—Haces demasiadas preguntas, no te olvides que yo te puedo matar cuando se me dé la jodida gana, así que mejor cállate.—
Antes de que Lee dijera algo, la puerta se abrió y de ella entró un chico rubio, con una bata muy corta, dejando a la vista sus bonitas piernas largas.
La bata también dejaba a la ver un poco las bonitas clavículas, con unas marcas moradas hechas por el
Pelinegro, las cuales ya estaba desapareciendo.
El profesor Lee lo miro fijamente, sin comprender que hacia él ahí.
—¿Taehyung? — El rubio no lo miro ni le prestó atención, solo se acercó a su novio para dejar un casto beso en sus labios.
—Te tardaste, ¿donde estabas? —. Le pregunto Jungkook.
—Hmm estaba buscando mi teléfono, es todo. —Jungkook asintió, y luego jaló al rubio de las caderas para que tomara asiento en sus muslos.
Una vez el rubio quedó frente a frente con su profesor, comenzó.
—¿Que tal, señor Lee? —. Lo miró de arriba a abajo.
—¿Que haces tú aquí? ¡¿Que hago yo aquí?!—Pregunto desesperado, queriendo respuestas.
—Yo le advertí muchas veces que usted estaba en problemas.—
—¿Me advertiste? ¡Entonces tú eres el que está detrás de todo esto! —. Alzó la voz, estaba entrando en pánico.
—No me grite, viejo estupido. Y si, yo soy el causante de que vaya a sufrir tanto, y no sabe el gusto que me da serlo, hace tiempo que quería hacerlo pero necesitaba planear bien diferentes tipos de cosas para hacerle —. Sonrió.
—¡Eres un mocoso estupido e imbecil! ¡¿No sabes tú lugar?! ¡¿Quien te crees que eres eh!—Grito furioso, ¿Enserio este mocoso estupido lo tenía amarrado?.
—Me creo la persona que lo hará pagar por cada insulto y regaño que me dio. Y sabe que, también me creo, y soy la pareja de el narcotraficante más importante de el bajo mundo. —Dijo con superioridad, recargando su espalda con el duro pecho de su novio.
Lee iba a decir algo, pero al escuchar lo ultimo se quedó helado.
—¿Que has dicho?—. Tae sonrió divertido al ver su rostro de horror.
—Así es, profesor. ¿De donde cree que viene todo el dinero con el que compro mis cosas? De mi novio, claro. Pero ahora que lo recuerdo, usted pensaba que me prostituia, incluso me llamo prostituto—. Recordó.
El profesor lo miró con rechazo, no podía creer que este adolescente de diecisiete años con cara de bebé estuviera con un hombre tan peligroso, que mataba y torturaba a personas.
Esperaba de todo menos qué taehyung estuviera involucrado con un delincuente.
—Da igual si viene de él o de otros, caíste muy bajo taehyung, tenía un poco de fe en ti, pero ya veo que solo eres un enfermo en malos pasos, que decepción. —Soltó con asco, pero sin dejar alado el tono asustado que tenía en su voz, pues no olvidaba a quien era el que tenía enfrente ahora.
—Me importa una mierda su opinión, en estos momentos nisiquiera tiene voz aquí. —Sintió como jeon apretaba su cintura con la mano disponible que tenía, ya que en la otra tenía el cigarro.
—¿Que harás? ¿Me vas a matar? ¡Hazlo! Prefiero eso a seguir viéndote, me das tanto asco, con solo verte ya es una tortura para mi. —El rubio lo miro divertido.
—No será así de fácil para usted señor, y no sabe lo feliz que me pone que me tenga asco, porque lo que sigue seguro lo hará sufrir tanto.—
Taehyung se levanto de el regazó de su novio, quien ya estaba medio duro, pues escuchar a taehyung ser un mocoso grosero lo prendía demasiado.
El rubio se paró enfrente de el profesor Lee, y se desamarró la bata lentamente, dejándola caer y revelando su cuerpo semi desnudó, ya que abajo llevaba unas bragas blancas.
—¡¿Que haces?!—Asustado por lo que podría pasar, sintió como su corazón latía a mil por hora al ver por primera vez a un chico desnudó.
—¿Me veo lindo?~ —. Pregunto con voz aniñada, queriendo molestarlo mas.
Lee lo miro con asco y rechazo, tenía unas ganas inmensas de escupirle.
—Te miras lindisimo amor. —Halagó jungkook, quien tenía la vista perfecta de el gran culo de su novio.
Taehyung le sonrió a el anciano y le guiñó el ojo.
—Disfrute del show. —Le dijo sin más, para después darse la vuelta y caminar hacia su novio, que lo miraban fijamente.
Al tenerlo cerca, se subió a su regazo y rodeó su cuello con ambos brazos, mientras que el pelinegro tomó ambos cachetes con sus fuertes manos y los apretó duramente, sacándole un jadeo al rubio.
El profesor lee estaba paralizado y no entendía el por que.
Jungkook miró unos segundos a lee y al notar que tenía la vista en su chico, no pudo evitar sentir celos y ganas de clavarle dos cuchillos en los ojos por estar mirando algo que no le pertenecer.
—Hagamos esto rápido, me jode que te vea y en cualquier momento voy a ir por el puto cuchillo que está en la mesa y le voy a cortar el cuello. —Taehyung río, y rápidamente besó los labios de su novio.
Jungkook chupo y mordió los bonitos labios rosas de su novio, lo beso fuertemente, metiendo su lengua después de unos segundos, oyendo al otro soltar un jadeo y sentir como se comenzaba a restregar en su pene.
Jungkook nalgueo con ambas manos al rubio, incitándolo a moverse contra el más duro. Tae sonrió en medio del beso e hizo lo pedido.
Se movió lentamente, pero al mismo tiempo de forma dura, tratando de sentir lo más posible el pene de su novio abajo de él, duro y caliente como le gusta.
—Así bebe, así...—Jadeo, concentrado en lo bien que se sentía tener al rubio frotándose contra el.
Lee seguía sin saber qué hacer, estaba comenzando a sentir náuseas, quería que la tierra se lo tragara, era lo más incómodo que ha vivido en su vida, y sin duda lo más raro y enfermo que presenció.
Unos minutos después, miró como el rubio se quitaba la última prenda, quedando completamente desnudo, y un minuto después el pelinegro hacía lo mismo.
Ahora teniendo a ambos desnudos, no pudo evitar cerrar los ojos, el enserio no quería ver ni escuchar absolutamente nada.
Tae al notarlo acerco a el.
Y se iba a quejar, pero luego se le ocurrió algo.
—Mmm, esta bien si no quiere ver, pero ahora que lo pienso, ¿Sería muy humillante para usted si mi novio me jode aquí donde estoy? —Literalmente estaba a menos de 20 cm de su cara.
Lee a abrió rápidamente los ojos, encontrándose con el pene de el menor casi cerca de su rostro, así que rápidamente lo elevo y miro el rostro de él rubio, evitando prestarle atención a lo otro.
—¡¿Te volviste loco?! !Estas enfermo! —.
—¡oh! ¿Y si me corro en su cara? ¡Sería tan divertido! —. Lee lo miro horrorizado, este niño estaba enfermo, era mucho más grave de lo que se imaginó.
—!Alejate de mi! —.
Taehyung lo ignoro y tomó el trapo que estaba tirado en el sillón, lo uso para volver a taparle la boca.
—Mucho mejor. ¡Ah!, y si cierra los ojos, mi novio le va a meter diez agujas en cada uno cuando terminemos. Hay dos cámaras grabándolo, así que nos daremos cuenta. —Sin decir ni una palabra más, corrió entusiasmado a la cama, donde estaba su novio recargado en la cabecera de la cama completamente desnudo mientras se masturbaba lentamente. De solo recordar que había un viejo cincuenton viéndoles hacía que le diera nauseas y se le bajaba la erección.
Tae se sentó encima de su novio, con el pene entre ambas nalgas se movió lentamente, tratando de ponerlo más duro que antes.
Jungkook lo sostenía de las caderas con fuerza, abofeteó el glúteo izquierdo con su grande mano, dejándola roja.
—Deja de jugar y apúrate.—Tae al escucharlo puchereo y asintió.
Alzó un poco su cuerpo para que jeon pudiera tomar su polla y meterla lentamente en el.
Al sentir cómo está entraba en el, no pudo evitar jadear ante el dolor y placer que sentía estar siendo partido. Y jeon jadeo por lo delicioso que el interior de su novio asfixiaba su pene.
—¿Como puedes apretar aún así de rico si te cojo casi a diario, eh?—. Azoto ambas nalgas
Tae sonrió y besó desperadamente los labios de su novio. Mientra se besaban, el rubio comenzó a hacer ligeros movimientos con sus caderas, tratando de meter más profundo el pene de el pelinegro.
Se sentía tan bien montarlo.
—Ahhh~ —. El rubio mordía sus labios, mientras que jungkook besaba y chupaba su cuello, al mismo tiempo que tenía ambas manos en las nalgas de el rubio, ayudándolo aque se moviera más duro.
Al pasar los minutos, los "ligeros" movimientos se convirtieron en brincos bruscos y desesperados, y los jadeos pasaron a ser gemidos altos y agudos por parte de él rubio, y bajos y roncos por parte de él pelinegro.
El rubio se sentía en el paraíso, enterrar la polla dura de su novio en el era la cosa más placentera y rica de el mundo, sin duda alguna.
Se estaban comenzado a sofocar, las pieles chocaban sin parar, el ruido chicloso de los besos y el pene de el mayor entrando y saliendo de el rubio se hizo más alto.
Taehyung brincaba como loco en el pene de el mayor, buscando sin parar su punto, ese que lo hacía llorar y retorcerse de placer.
—Así a-amor...—Mordió su labio fuertemente, mirando unos segundos a su novio, quien estaba brincando contra su polla bruscamente, con la boca completamente abierta y los ojos llorosos; una obra de arte.
El rubio rebotaba con todas sus fuerzas, volviéndose loco con cada segundo que pasaba. Soltaba gemidos agudos y altos, que lograban calentar más a jk, lo que hacía que el pelinegro quisiera joderlo mas fuerte si era posible.
—Ya no p-puedo mhm~ —. Había estado brincando sin parar por mucho tiempo, se sentía un poco cansado ya. Se detuvo unos segundos, segundos que lograron desesperar al pelinegro quien tenía unas ganas inmensas de correrse ya.
El mayor se recostó completamente en la cama, con el rubio aún encima de él, envolvió a su novio de la cintura con sus fuertes brazos, y dobló sus piernas para comenzar a penetrarlo desde abajo.
Tae al sentír como el pene de el mayor chocaba exactamente con su punto una y otra vez, abrió la boca y sus ojos se pusieron completamente en blanco.
—!Oh-h por d-dios si!~ —. Abrió más sus piernas, tratando de que llegara más lejos.
—¡T-tan r-rico oh!~...—
—Eso es... abre más las piernas, c-como la puta que eres. —Amaba tenerlo así, tan abierto para el.
El pelinegro soltó la cintura de su niño y tomó con fuerza ambas caderas para que se quedara quieto y poder darle mejor.
Jungkook se sentía desesperado, quería correrse ya.
Ambos chicos ya ni siquiera se acordaban de la presencia de el anciano, quien había vomitado aún con el trapo en la boca y los miraba con los ojos llorosos y asqueados.
—Jodido mocoso estupido, t-te excita que te vean m-mientras te follo , no es así?... —El rubio nisiquiera podía responder, estaba más concentrado en lo bien que se siente ser penetrado por su novio.
—¡Responde p-perra!—. A este punto a jeon le estaba constando un poco hablar también, la sensación de su pene siendo absorbido fuertemente no lo dejaba concentrarse también como quisiera.
—¡S-si. si! Ah!~—.
—Puta de m-mierda..~ —. El pelinegro aumentó la velocidad de sus embestidas, ahora siendo mucho más rápidas y firmes, dejando al rubio viendo pequeñas estrellas atrás de sus ojos, y con las saliva cayendo de su boca.
—¡Oh si, si, si!~ —
—Maldita sea...— Estaba apunto de correrse, sentía las paredes de el rubio apretar más su pene con cada segundo que pasaba.
—Mi a-amor —. Gimió el pelinegro
Penetró unos segundos más y soltó todo el líquido caliente en el agujero de su chico, quien también se corrio segundos después al sentir el líquido de caliente dentro de él.
El rubio estaba fuera de si mismo, escuchaba un pitido en sus oídos, y veía puntitos por todos lados, también las piernas le temblaban horrible. Mientras que jungkook estaba con los ojos cerrados y con sus caderas moviéndose ligeramente aún adentro de su chico para desfrutarlo más.
Salió lentamente de su interior con pesar, y lo acomodó a un lado de él.
—¿Estas bien, bebé?—Pregunto.
El rubio asintió, más dormido que despierto. Estaba cansado, quería dormir abrazado a su novio, pero tenían algo pendiente que terminar.
Así que se levanto de la cama como pudo, y miro al profesor, quien estaba con los ojos bien abiertos el rostro lleno de vomito, temblando y horrorizado.
Tae río divertido y volteo a ver a su novio, quien miraba a el anciano de forma asesina.
—Ya nos vio follar como querías, ¿Lo puedo matar ya? No sabes como me jode que te haya visto desnudo. Le voy a arrancar los ojos por ser tan obediente y ver algo que no le pertenece al hijo de puta. —. Se iba a levantar para ir por el cuchillo pero taehyung lo detuvo.
—No, espera. ¿No crees que es su turno? —. Jungkook lo miro confundido, y segundos después lo miro furioso por la idea qué pasó por su cabeza.
—¿Acaso quieres que el cabron te folle a ti? ¿Que puta mierda dices, mocoso imbecil?—Se acercó rápidamente a él para agarrarlo de el cabello con fuerza, jalo de él y lo miro completamente molesto.
—¡Claro que no! Que asco. Solo digo qué tal vez y si alguien se lo folla o el folla a un chico, le gustara, y si no le gusta pues igual seria un tipo de tortura para el, ¿No? —Jungkook lo pensó, y la verdad es que no le interesaba, solo quería matarlo cuanto antes por haber visto algo que no debía y que solo él tenía permitido ver.
Jungkook al escucharlo, lo soltó.
—Lo que quieras amor, mientras me dejes matarlo al final, todo bien. —Tae sintió y aplaudió felizmente.
—¡Perfecto! —Lee los miraba con odio, con vomito en todos lados y lágrimas acumulándose cada vez más en sus ojos, nisiquiera podía decir algo, no tenía palabras.
Estos dos estaban dementes...
***
Empecé a escribir esto a las 12 y termine a las 3:30 am, VALORENLO PQ ME DESVELE PARA DARLES ESTO. Y ya tenía sueñito pero yo había dicho q iba a actualizar así que llegue a mi casa y me puse a escribir. 😭
VOTEN ALV Q SI ME ESFUERZO
¿Ya les dije la edad de jk? ¿Cuántos creen que tenga el guapote? 😘
ahora si, nos vemos en cinco días o una semana, no se, CHAU.
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