( Continuación. )

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11:30 pm.

Taehyung no comprendía nada. ¿Que se supone que significaba esto? ¿Que no se supone que Minje estaba...?

¿Que mierda?

Minseok estaba completamente golpeado, lleno de sangre por todos lados. Mientras que Minje estaba sin un solo rasguño. ¿La razón? Ni idea. Eso lo confundió más.

Incluso se le había bajado la excitación que tenía, todo por ver a esos dos. A Minseok por estar en un estado tan malo y casi irreconocible debido a las heridas que tenía. Y a Minje pues.. a ella ya la consideraba horrorosa incluso si estaba en las mejores condiciones.

Se volteo con rapidez hacia Jeon; mirándolo con el entre cejo fruncido y los brazos cruzados, queriendo una explicación inmediata.

A Jeon en cambio le pareció tierna la carita de confusión que tenía el más pequeño. ¿Se supone que estaba tratando de verse intimidante? parecía un osito molesto.

Taehyung recorrió con la mirada el rostro de Jungkook, tratando de averiguar qué sucedía. Parecía serio, más bien tranquilo... hasta podría decirse que en sus ojos encontraba algo parecido a entusiasmo. ¿Emoción? Tal vez.

—¿Me vas a decir ya que es esto? ¿O tengo que adivinar yo solo? —. Ladeó su cabeza, mirando directamente a los ojos del mayor.

En el rostro solvente de Jeon, una sonrisa apareció. Una sonrisa inquietante ante los ojos de Tae.

Jungkook caminó con lentitud hacia el más pequeño, hasta que ambos cuerpos estuvieron a centímetros. Tomó sus caderas con ambas manos, y lo acercó lo suficiente como para que ambos rostros estuvieran juntos, con sus narices tocándose.

Con sus dientes, tomó el labio inferior de Taehyung sin mucha fuerza, y unos segundos después lo soltó. El pelinegro sonrió minucioso.

Beso castamente sus labios, sin decir o hacer algo más se alejó.

Taehyung soltó un suspiró, y volvió a posar su mirada en Jeon, quien había comenzado a caminar hacia el cuerpo inconsciente de ambas personas amarradas a una silla.

El rubio lo siguió con la mirada, esperando alguna respuesta a su pregunta. Jeon en cambio sólo se colocó atrás de donde estaban ambos cuerpos, e inclinó su peso en sus brazos hacia enfrente al respaldar de ambas sillas. Levanto la mirada, chocando la suya con la del menor.

—¿No es obvio? —. Río cortamente. —No es algo tan complicado de entender. ¿Acaso en necesario que lo diga de nuevo? —Cuestionó.

—Déjate de cosas y solo respóndeme Jeon. —Torció los ojos. No entendía porque no solo respondía y ya.

—Cuidado en cómo me respondes. —Le recordó, mirándolo a los ojos. Soltó un suspiro pesado, e hizo un movimiento con su cabeza, apuntando a Minje.

Taehyung miró a aquella, pero aún así no entendía.

—No entiendo y no voy a entender hasta que me digas exactamente lo que sucede. — Se cruzó de brazos.

Jeon resopló, pero asintió sin más.

Jungkook pensó unos segundos lo que iba a decir. Quería que al final de todo, Taehyung comprendiera todo sin tantas complicaciones.

—Dime amor, ¿Que sientes al tener a Minje aquí justo ahora? –. Preguntó.

Taehyung llevó su mirada a la mencionada. En menos de un segundo hizo una mueca de desagrado.

—Su sola presencia me irrita. La detesto. —Barrió de arriba a abajo el cuerpo amarrado de Minje. —Solo mírala; es ridícula. Esos zapatos son de la temporada pasada, y esa blusa es horrenda. —Río con burla.

A taehyung le parecía tan patética.

—Su cabello esta todo quemado de tantas decoloraciones que se a hecho. Parece que tiene alambres en vez de cabello. —Dijo con asco. —Tal vez y no es fea, pero su maquillaje nunca favorece con sus facciones y tono de piel. —Hizo una mueca.

—Tiene lindo cuerpo, lo reconozco, pero no lo suficiente como para creer que puede llegar a ser más linda que yo. —Jeon sonrió. —Tal vez y ella tenga pechos grandes, pero yo soy bonito y delicado. Ella es una tonta por creer que podía competir contra mi. —abultó sus labios, casi formando un puchero.

—Y vaya que los tiene...—Dijo Jeon, recordando la noche en la que la vio completamente desnuda. Y si era sincero, no le había causado absolutamente nada. No le gustaban las chicas ni un poco.

Taehyung al escucharlo frunció el ceño.

—¿Disculpa? —. Lo miró molesto. — ¿Te gustaron acaso? —.

Jeon al darse cuenta de lo que había dicho, negó rápidamente mientras soltaba una risa corta.

—No, por supuesto que no. —ladeó su cabeza. —Solo lo dije porque recordé cuando la vi desnuda, no porque me gustaran. —Aclaró. —En realidad, nunca he sido fan de los pechos, mucho menos de las mujeres. —

Taehyung enarcó una ceja.

—¿Ah no? —. Tae lo miraba atento, no queriendo perderse ningún gesto de Jeon.

—No. Aparte, amor tú sabes que las mujeres no me van. —Arrugó su nariz. —Prefiero los chicos bonitos y delicados. —Dijo, repitiendo lo mismo que el pelirubio se había dicho a sí mismo.

Tae en cambio retuvo la sonrisa que quería formarse en sus labios. Jeon lo notó.

—En especial si son rubios, de ojos azules, con hoyuelos, cabello rizado, delicados, estatura pequeña, hombros pequeños, cintura delgada y estrecha, caderas grades, piernas largas y bonitas y..—mordió su labio inferior por unos segundos. —Y un maldito culo enorme.

Esta vez, Taehyung no pudo evitar sonreír divertido.

—¿Todos lo que tengan esas características? —. Preguntó con una sonrisita.

Jeon negó.

—Solo si cumplen todos esos detalles peculiares, y si se llaman Kim Taehyung, claro. —

Taehyung desvió la mirada con una sonrisa.

Y cuando estuvo apunto de decir algo, la puerta de la habitación en la que estaban fue tocada. Taehyung miró a su novio, quien parecía algo molesto con la interrupción.

Jeon caminó hasta la salida, abrió la puerta y vio a Felix del otro lado.

—¿Que quieres? Deje muy claro que cualquier asunto me lo hicieran saber ya que terminará esto. —Jungkook no ocultó ni un poco la molestia que le causaba su interrupción.

Felix tragó grueso.

—L-Lo lamentó Jefe, pero a los chicos que estuvieron a cargo de acomodar todo lo de este lugar se le olvidó traer esto. —Le tendió un cuchillo bastante afilado y grande.

Jeon lo tomó sin mucho cuidado, dejándolo en un mueble que estaba cerca de la puerta.

—¿Y porque lo traes tú? —Preguntó.

—Bueno sucede que...—Felix pensó en una buena excusa, no podía decirle a su jefe que ambos chicos le tenían miedo y que por eso no se atrevieron a dárselos ellos mismos.

Jungkook lo miró impaciente.

—Sucede que su turno terminó. —Se apresuró a decirle. Mintiendo.

Jeon enarcó una ceja, soltando una risa corta. ¿Todos los que trabajaban para él eran tan patéticos?

—¿Piensas acaso que soy imbecil? —. Preguntó. Felix negó con rapidez. —¿Por que no solo me dices que son tan niñas que no pudieron entregármelo por su cuenta? —. apretó la mandíbula.

Felix sintió su corazón chocar contra su pecho con rapidez.

—Lo siento Jefe, yo solo-

—No me interesa. –Interrumpió. —Te prohíbo que vuelvas a tratar de mentirme, porque si te atreves a hacerlo otra vez, te voy a cortar la lengua y se voy a mandar a tu jodida madre como regalo. —Felix abrió los ojos. —Vuelves a hacer algo parecido y te mato. Y tú sabes que yo no me ando con mentiras.

—Si jefe, no sucederá de nuevo. —Jeon observó como agachaba la cabeza.

Soltó un suspiró fastidiado. Era tan ridiculo.

—Desaparece de mi vista pedazo de inútil. —No tuvo que decirlo dos veces para que felix hiciera una reverencia y se diera la vuelta, casi corriendo.

Maldijo por lo bajo, y con fuerza, aventó la puerta, azotándola.

Le urgía hablar con soobin. ¿Es que acaso contrataba a puras niñitas miedosas? Una mierda.

Si le tenían miedo a traerle algo a él, no se imaginaba que harían cuando les apuntaran con una arma en alguna balacera. Seguro gritarían como chica y saldrían corriendo. Él no necesitaba a " hombres" así en su organización.

Y a esos dos que mandaron a felix, les saldría muy caro. Su vida va a ser el costo por su cobardía. Imbeciles.

Se dio la vuelta. Levanto la mirada y notó que Taehyung lo miraba con una sonrisa.

—¿Que? —. Preguntó con fastidio mientras se acercaba a él.

—Nada. Solo que me pareces atractivo cuando regañas a tus hombres. —Admitió con una sonrisita, viéndolo acercarse.

—Eso no dices cuando te regaño a ti. —

—En realidad si me pareces atractivo pero no te lo digo porque me haces molestar. —Sonrió.

—¿Es así? —. Cuando estuvo cerca de él, lo acercó de un jalón en la cintura.

Taehyung asintió.

—Es inevitable. —Dijo el menor, haciendo a Jeon sonreír.

—Seguro que si lo es..—Se acercó al rostro de su novio, lo suficiente hasta chocar sus labios por largos segundos. Taehyung por supuesto que correspondió de inmediato. Cuando se separaron; Jeon soltó un suspiró. —Mejor hay que comenzar con esto, y así tú y yo nos relajamos más tarde. —

Taehyung asintió. Jeon soltó el cuerpo contrario y se alejó del menor.

Caminó por todo el lugar, inspeccionando que todo lo que le pidió a las dos niñitas miedosas estuviera en su lugar.

Taehyung en cambio observó con detenimiento a ambas personas amarradas. Primero llevo su vista a Minseok, quien de verdad estaba muy golpeado, tenía cortes que se veían muy profundos, moretes por todos lados de tonos verdes, mezclados con morados. Estaba lleno de sangre, en especial del rostro. El rubio no pudo evitar hacer un gesto asco. Estaba espantoso.

Después, miró a... Minje. La maldita estaba sin rasguño alguno. Ese detalle hizo que Taehyung sintiera un pinchazo de molestia. ¿Por que estaba en tan buen estado?

—¿Por que la prostituta de Minje está en perfecto estado? —. Preguntó con disgustó. —Dijiste que la maldita no te importa pero primero me mentiste acerca de su muerte, y ahora está aquí en muy buenas condiciones. —Reprochó. –A comparación de Minseok, ella está muy bien. ¿Acaso le pediste a tus hombres que no la lastimaran? —.

Taehyung no entendía absolutamente nada a su novio.

Jeon, –quien seguía revisando todo– volteo hacia su dirección y le dio una mala mirada.

El rubio resopló y torció los ojos.

—Deja de hablar si no tienes ni puta idea Taehyung. Sabes que odio tus insinuaciones tontas. —Sacó su teléfono de su bolsillo trasero y lo colocó en la mesa que tenía enfrente. —Absolutamente todo tiene un motivo. —Se dio la vuelta y caminó de nuevo hacia Taehyung.

—Pues si no me explicas, voy a seguir pensando igual. —Se quejó, viendo a Jungkook pararse a su lado.

—Entonces, te voy a explicar. —Ladeó un poco su cabeza, mirando a Minje atentamente.

Taehyung frunció el ceño cuando notó la mirada de su novio en Minje. Es que incluso le ponía celoso que la mirase. No le gusta nisiquiera que Jeon este en la misma habitación con ella, incluso si él está presente. No quiere tenerla cerca de Jungkook ni un centímetro.

—¿Puedes dejar de ver a...esta cosa y decirme de una vez? —. Apuntó hacia Minje, usando un tono lleno de repulsión.

—En eso estoy. —Respondió con ligera molestia.

Taehyung solo bufó y se cruzó de brazos. Esperó con poca paciencia, y por largos segundos la respuesta de su novio; casi un minuto entero, y cuando estuvo apunto de quejarse, Jeon habló.

—Anteriormente te pregunté que sentías acerca de que Minje estuviera cerca de ti, ¿no? —. Taehyung asintió. —Bueno, ahora quiero que me digas, ¿Que sientes ganas de hacerle cuando la miras y recuerdas todo lo que hizo?, ¿que es lo que quieres que le suceda? —. Preguntó.

Taehyung pensó seriamente en la respuesta de aquella pregunta. ¿Que quería hacerle? No era tan complicado obtener una respuesta. Éstas llegaron en un segundo a su cabeza.

Quería hacerle absolutamente todo lo que le pudiese causar dolor.

El solo haberse atrevido a seducir a su novio, hizo que todas estas ideas de sufrimiento para ella llegasen sin dificultad alguna, el enserio le tenía demasiado rencor.

Esa maldita...

—¿Que es lo que quiero hacerle? — repitió la pregunta, tomándose algunos segundos para responder. —Quiero matarla. —Soltó sin duda; completamente seguro de sus palabras.

—¿Quieres matarla, amor? –. Preguntó Jeon con una sonrisa. Taehyung asintió. —¿De que forma quieres hacerlo? —.

¿De que forma? De todas las formas posibles que hubiesen que causen algún tipo de dolor insoportable hasta el punto de dejarte agonizando, cerca de tu miserable, dolorosa y horrible muerte. Taehyung estaba seguro de que esa mujer merecía absolutamente todo lo que venía a su cabeza cuando pensaba en ella, y créanme que no eran para nada lindos sus pensamientos.

Esa maldita lo hizo sentir de muchas formas; molesto, triste, celoso, ansioso y entre más. Todos las palabras hirientes que llego a decirle alguna vez, donde afirmaba que era poca cosa para Jeon, que no era suficiente para estar a su lado. Siempre tratando de hacerlo menos por su edad, sin importar que.

Al parecer tenía una obsesión con su edad..O eso creía Taehyung.

Tal vez estaba un poco celosa—Demasiado—de él, porque Jeon eligió estar con un " adolescente minando y llorón" que con una " Mujer linda, de buena familia, madura y sobre todo que le puede dar una hermosa familia"

Patética.

Lo trataba como si se estuviera aprovechando de Jeon, cuando por supuesto que no era así. Ella no sabía absolutamente nada, no tenía idea de cómo era su relación con Jungkook, pero aún así hablaba estupideces.

" En cambio tu, nisiquiera tienes familia, y para colmo todo ese dinero que tanto presumes nisiquiera es tuyo. "

" No pensé que alguien como Jungkook iba a tomar enserio a un mocoso de preparatoria. "

" Pues a esta "criada" toman mucho más enserio que a ti, es decir, ¿Quien tomaría enserio a un niño de primaria? "

" Sabes, quisiera tomarte enserio pero no has terminado nisiquiera el kinder, mejor hablemos cuando te gradúes, ¿Esta bien? "

Vaya obsesión. Aún que la entiende un poco, siendo quien es, él también estaría obsesionado consigo mismo. Taehyung consideraba que lo tenía todo; Belleza, juventud, personalidad, un novio guapo, adinerado y consentidor. Era fácil de entender que Minje se sintiera celosa, y quisiera estar en su lugar.

Parece que eso la hizo hacer ciertos actos que no fueron nada agradables para él. Que por cierto, arruinaron la felicidad con la que había llegado a casa.

Lo recuerda muy bien. El día anterior había salido con su mejor amigo, se había quedado a dormir en su casa y habían hecho una pijama. La pasaron muy bien, demasiado. Antes de dormir tuvo una llamada con su novio, logrando así que después pudiera descansar tranquilo; al día siguiente ambos habían ido a desayunar, después el chofer de Jimin lo dejó en su casa. Al entrar se había encontrado con Namjoon y Minje. Por alguna razón, la chica siempre le causó una mala vibra, desde el momento en que la miró sentada en su living, mirando atentamente a su novio. De inmediato sintió como una bola de celos se formaba en su pecho, así que al llegar a Jeon, lo besó frente Minje, tratando de dejarle claro algo de forma indirecta. Después, se excusó con Jungkook, diciéndole que quería estar a solas con él, todo con el fin de alejarlo de aquella mujer.

Los dos subieron a la habitación y estuvieron hablando un rato, dándose besos y sonriéndose. De un momento a otro Taehyung notó como Jeon recordaba algo, y se ponía tenso. Eso sin dudas hizo que se sintiera algo confundió y preocupado. Recuerda haberse sentado en su regazo, besarlo por unos segundos y preguntarle que tenía. Y aún que Jungkook se tomó su tiempo para decirlo, al final le termino contando absolutamente todo.

Sintió tantos celos y rabia que se puso a llorar. Es que incluso termino discutiendo a gritos con su novio, y ellos no suelen discutir a gritos; pero ese día eran tantos los celos que lo hicieron. Le molestaba demasiado que Minje haya podido lograr aquello.

Quería verla llorar tanto como el lloró ese día que se enteró de lo que sucedió. ¿Tanto fue lo que pudo causar esa tipa? Lo pagaría, y le saldría muy caro.

Ella realmente se iba arrepentir de haberse metido con él. Porque al haberse metido con su novio, y en su relación, ahora el problema lo tenía con él. Ella no se imaginaba las consecuencias que tendrían absolutamente todas las acciones que hizo.

—Quiero lastimarla..—Miró fijamente a la pelinegra inconsciente. —Quiero causar tanto dolor en ella, quiero que sienta todo lo que yo sentí multiplicado por diez—.

Jeon sonrió de lado, encantado con las hermosas palabras del más pequeño.

—Muy bien precioso, pero necesito que uses un poco más tu imaginación..—Ladeó un poco su cabeza, mirando detenidamente el rostro de Taehyung. —Piensa más allá de todo eso. Si, quieres lastimarla, ¿pero de qué forma? ¿Como quieres lograr aquello? ¿Con que quieres hacerlo? —. Cuestionó.

El pelirubio indagó en su imaginación por un minuto, pensando sin prisa. ¿De que forma? Es que nisiquiera estaba seguro. Lo que sí sabía, es que la quería escuchar gritar y lamentarse de todo lo que había hecho. Si, definitivamente.

—Observa a tu alrededor, date cuenta de donde estas. —Dijo Jungkook, tratando de ayudarlo un poco. —Ya te he traído aquí antes, ¿no? —. Taehyung asintió lentamente. —Tú has visto bastantes veces como yo lastimo a las personas que de alguna forma me hacen daño, entonces.. solo tienes que entrar en tu cabeza, y buscar entre todos esos recuerdos que tienes. Elige el que más gritos dolor tenga, el que más te haya parecido doloroso. —

El menor lo pensó. Si, había visto muchas veces a su novio matar y torturar a las personas que lo traicionaban de alguna forma. Entonces, tal vez si hacía lo que Jungkook le estaba diciendo, encontraría mejor la respuesta hacia aquella pregunta.

Bueno, pensemos..

Recuerda la vez en la que Jeon le prendió fuego a las extremidades de un hombre que había tratado de robarle un paquete de droga. Primero empezó; por sus pies, después sus piernas, sus manos, sus brazos, su torso, y hasta que llegó a la cabeza. Sus gritos fueron realmente desgarradores. O la vez en la que había encerró a uno de sus anteriores socios con una pantera porque había tratado de estafarlo, y hacerlo ver como imbecil. La pantera había le había arrancado una pierna, y mientras el hombre gritaba sin parar y se arrastraba por el suelo tratando de huir; Jeon y él estaban del otro lado de la jaula observando todo con diversión–en especial Jungkook–.

Sería divertido desnudar a Minje, y amarrarle al cuerpo trozos de carne, después a meterla a la jaula y verla correr y gritar como lunática desesperada mientras llora de miedo y ruega por que la pantera no la lastime.

¿Debería de hacerle lo mismo a Minje?

Se repitió esa pregunta por lo menos dos veces, y la respuesta es: No.

Claro que sería divertido, pero estaba seguro de que había algo mucho peor para ella.

Igual no iba a descartar esa idea para la siguiente persona que se atreva a llevarle la contraria y enfrentarlo así como lo hizo Minje. Tal vez y las dos hermanas sean las elegidas para cumplir con esa pequeña y linda idea...

Seguramente, él se encargaría de que eso sucediera.

Pero bueno, volviendo a Minje... La verdad es que no se le venía nada a la cabeza. Solamente quería escucharla gritar, llorar y arrepentirse. Y claro que iba a hacer que eso sucediera, pero aún no tenía idea de cómo hacerlo, tenía que ser algo que realmente la haga arrepentirse incluso de haber nacido.

¿Pero de que forma?

Taehyung suspiró con pesadez.

—¿No se te ocurre nada, uh? —. Preguntó Jeon.

El rubio negó.

—No, no sé aún. —Un puchero se formó en sus labios. Necesitaba ser más ingenioso. —¿Me ayudas? —. Pidió, con los labios medió abultados y ojos brillantes.

Jeon negó, sonriendo al verlo fruncir el ceño.

—¿Por qué no? —. Preguntó con molestia.

Jeon soltó una risa corta.

—¿Sabes porque Minje está sin un solo rasguño? —Taehyung negó con los brazos cruzados. —A diferencia de Minseok, Minje no tiene ningún golpe, ¿y sabes por que? Porque yo le pedí a mis hombres que no la lastimaran; para que así tú pudieras hacerlo, y desquitarte tanto como quieres; para que al golpearla, pudieras notar tu mismo todo el daño que le causas con facilidad, y para que desde el principio notes como la destruyes poco a poco. —Contó —. ¿De que serviría que te la trajera medio muerta? No sería tan divertido, sería mejor que tú la dejarás al borde la muerte, ¿no? —. Sonrió de lado.

Y Tae al prestarle atención a sus palabras, estuvo de acuerdo. Si, sería divertido verla hacerse mierda poco a poco. O bueno, a su ritmo, porque él sería el que decidiría eso.

Y vaya que las ganas no le faltaban... Por dios, su novio en verdad pensaba en todo.

—Oh, entonces ahora si suena como una sorpresa. —Una pequeña sonrisa apareció en sus labios. —Tú de verdad piensas en todo, aún que no me sorprende tanto viniendo de ti. —Jeon asintió y río cortamente.

Taehyung iba a decir algo más; pero el sonido de una persona removiéndose y soltando quejidos sonó por toda la habitación. Rápidamente el pelirubio llevó su mirada hacia el sonido, al igual que Jeon.

—Bueno amor, creo que es hora de comenzar con esto. –Miró a Minje fijamente, viéndola removerse sin mucha fuerza, debido a que apenas comenzaba a despertar. —Ya hemos perdido bastante tiempo, empecemos con lo divertido. —Sonrió de lado.

Y justó ahora que ya tenía el contexto de la idea que tenía en mente su novio, se sentía emocionado. Al inició estaba algo confundido y molesto por la presencia de Minje, pero ahora... El enserio estaba realmente entusiasmado por comenzar.

Llevó su vista hacia la otra persona; Minseok. Éste aún estaba inconsciente. Hasta parecía que ni siquiera respiraba, eso causó duda en Taehyung.

¿Acaso estaba...?

—Jungkook. —Llamó al pelinegro. Jeon hizo un sonido con la garganta, dando a entender que lo estaba escuchando. —¿Por qué Minseok no se mueve? Parece muerto. ¿Estás seguro que sigue vivo? —

Y es que a este punto lo dudaba. Él no se movía ni un poco, o siquiera respiraba. Aún que si así lo fuera, no le sorprendería. Los hombres de Jeon lo habían dejado en muy, muy, muy mal estado, así qué tal vez y Taehyung no estaba tan equivocado.

Jeon frunció el ceño.

—¿Que? por supuesto que está vivo, les deje muy claro que lo quería vivo, ellos no se atreverían a desobedecerme. —Afirmó Jeon.

—Pues a mi parecer, está muerto. —contradijo. —¡Míralo! nisiquiera respira; es muy raro. Tal vez y le diste mucha liberta a los idiotas de tus hombres y se les pasó la mano. O al menos eso pienso yo. —

—Cierra la boca. —Apretó los dientes. —Yo se lo que hago. Y no, no le doy libertades a nadie, no te confundas mocoso maldito. —Se acercó al cuerpo de Minseok, y con ambos dedos tocó el cuello ajeno, tratando de sentir su pulso. Esperó por unos segundos sin mucha paciencia, deseando que los imbeciles de sus hombres no se hayan pasado con los golpes.

Y cuando no sintió nada, maldijo por lo bajo y golpeó el cuerpo sin vida del adolescente. Taehyung se sobresaltó por lo duro que había sonado el golpe en la mandíbula de Minseok. ¿Por que se sorprendía? Era obvio. Solo con mirarlo por un pequeño tiempo te podías dar cuenta que ya no estaba vivo.

—Maldita sea...—Maldijo.

—Te lo dije, y no me hiciste caso. —Observó a su novio caminar con rapidez hacia el mueble donde había dejado su celular. —Sabes, deberías de asegurarte que tus hombres entiendan cuando matar a alguien y cuando no. —

—Cierra la boca, Taehyung. —Tomó el teléfono con brusquedad, lo prendió y comenzó a revisar entre sus contactos el número de soobin. —

—Solo estoy tratando de ayudar. —Resopló. —Pero da igual Minseok. Sinceramente no me emocionaba hacerle algo, él me da completamente igual, vivo o muerto. —Miró sus uñas desinteresadamente. —La verdad es que Minje es lo emocionante de todo esto, así que...—

—Te dije que te callarás la jodida boca, estoy tratando de hacer una maldita llamada. Cállate. —Volvió a ordenarle con molestia.

Taehyung rodó los ojos, y formó un mohín con sus labios. Observó a su novio llevarse el celular a su oído, mientras movía el pie con impaciencia por el suelo, esperando a que la llamada fuera atendida.

—¿Soobin, donde mierda estas? —. Escuchó a Jeon preguntar. También, pudo oír muy apenas la voz de soobin del otro lado, debido a que la habitación estaba en silencio. —Dile a Hoseok que se encargue. Yo te necesito aquí ahora. —Ordenó —. ¿Como que para que? Te vale mierda, para lo que sea que te pida, tu solo te callas y obedeces. —Taehyung soltó una risita, le causaba un poco de gracia ver a Jeon regañar a soobin. —Como sea. Tráeme a los dos imbeciles que tuvieron el encargo de traerme a Minseok acá. Al parecer esta muerto. —Suspiró con pesadez. —Y trae mi arma, ya sabes cual. Los quiero aquí de inmediato. —Jungkook dijo un par de palabras más, y un minuto después colgó la llamada.

Jeon suspiró con fuerza.

Les había dejado muy claro lo que quería que hicieran, pero al parecer no fue suficiente. Estaba harto.

—¿Que harás? —. Pregunta Taehyung, mirándolo con duda.

—Necesito dejarles claro que cuando yo doy una orden, se tiene que cumplir tal y como lo pedí. —De forma lenta, y sin prisas, comenzó a arremangar las mangas de su camisa. —Tú sabes lo mucho que me molesta que me desobedezcan. —

Y vaya que lo hacía. Le jodia tanto. Si él daba una orden, tenía que ser cumplida cuando y como dijo. Las cosas de hacían a su manera, como quiere y a la hora que quiere. No tenía que repetir lo mismo dos veces para que se cumpla.

Todos sabían para quien trabajaban, ¿no?.

¿Entonces por que siempre que les pedía que hicieran algún " trabajo " algo salía mal?

Jeon no confiaba en nadie, y si tenía que matar a la mayoría por un error; lo haría. El no perdonaba nisiquiera una equivocación. ¿Por que? Bueno, cualquier error por más mínimo que fuese, de alguna forma terminaba afectándolo a él..

No necesitaba a imbeciles que no supieran escuchar y seguir una sola orden. ¿Para que? No servían de nada, solo le causaban más problemas. Eran unos inútiles.

Es que ni una cosa bien pueden hacer.

—Siéntate por allá. —Ordenó, apuntando a un sillón rojo que estaba a unos metros, frente a ambos cuerpos; pegado a la pared.

—¿Por que? aquí estoy bien. —Dijo con simpleza.

—¿Te pregunte si querías? Te estoy ordenando que te sientes allá. Hazlo. —Exigió. Cansado de que hoy la mayoría no hicieran lo que pedía. —No me hagas repetirlo, no estoy de humor y creo que ya te diste cuanta. Así que, o me obedeces, o yo mismo te voy a obligar a obedecerme. —  Miró fijamente a Taehyung.

El rubio hizo una mueca de molestia, y de mala gana caminó hasta el sofá, para después dejarse caer bruscamente sobre el; sentándose y mostrando su descontento.

Jungkook empujó su lengua contra su mejilla interna y desvió la mirada.

Ese mocoso malcriado...

Nisiquiera tenía ganas de regañarlo por las muecas que hacía. Demasiado tiene con las demás personas, es por eso que no le dijo nada. Da igual, ya después tendría todo el tiempo del mundo para reprenderlo duro.

Pasaron al rededor de cinco minutos. La puerta fue tocada tres veces. Y al saber quienes estaban detrás, Jeon dio la orden de entrar.

Soobin, y otros dos hombres se adentraron a la habitación. Los tres hicieron una reverencia hacía Jeon y Taehyung. O bueno, solo soobin y uno de los dos hombres, porque el otro solo saludó de esta manera a Jeon.

Jeon no lo notó, pero Taehyung como soobin si. El pelirubio hizo un gesto disconforme por la poca importancia que se le fue dada, hallándolo algo ofensivo. Mientas que soobin al percatarse, se aclaró la garganta y miró serio a JaeSung; el cual era nombre de éste.

—JaeSung, el joven Kim está presente también. Deberías de ser respetuoso. —Le dijo Soobin con voz neutra. Jeon al escuchar lo dicho por el peliblanco, miró rápidamente a JaeSung con el ceño fruncido.

Éste tragó grueso, y maldijo en su mente. Se sintió intimidado al tener la dura mirada de Jeon en él. Sintió su corazón palpitar de forma rápida.

—Lo lamentó Jefe...—Se disculpó, haciendo una reverencia torpe.

—¿Por que te estás disculpando conmigo? —. Preguntó Jeon, nada contento con el trato de el hombre hacia el menor. —Deberías de disculparte con mi novio. —

—Si, solo que yo-

Jeon lo interrumpió.

—¿Quien te crees que eres para llegar e ignorar su presencia? ¿Ah? ¿Acaso te crees mejor que él? —JaeSung comenzó a negar frenéticamente.

—No, p-porsupuesto que no, Jefe. —

—¿No? ¿Entonces por que no mostraste respeto? —. Jungkook apretó la mandíbula. —¿Te sientes superior a mi niño? ¿Por eso piensas que no debes saludarlo también? —.

JaeSung comenzó a sentir miedo. Acababan de llegar y ya estaba metido en algo muy grande con Jeon. Sintió como pequeñas gotas de sudor de formaban en su frente.

—Estoy seguro que incluso si no te decía soobin algo, hubieses seguido ignorando a Taehyung. —

Y mientras JaeSung seguía negando, soobin caminó hasta su jefe para tenderle el arma que era de su pertenencia.

—¿No? ¿Acaso estás tratando de decir que miento y que me equivoco? ¿Es eso? —. Jeon tomó el arma que le estaba dando soobin, y al tenerla ya en sus manos la recargó. Se comenzó a acercar con lentitud hacia Seung de forma amenazante.

JaeSung abrió los ojos en grande. El pánico inundando todo su cuerpo.

Taehyung solo observaba todo con una sonrisa. Ese maldito se lo merecía por tratarlo de esa forma. ¿Que más da? Debía de aprender que nadie podía tratarlo como si fuera algo insignificante.

—Jefe, n-no fue mi i-intención. ¡Lo juro! —. Su respiración estaba acelerada.

—¿No lo fue? Me vale mierda, lo ignoraste como si fuese nada, y eso yo no sé lo permito a nadie. —Estiró el brazo, y apuntó con el arma hacia el cuerpo de Seung.

El mencionado sintió sus ojos humedecerse, su cuerpo temblar, la desesperación y pánico llegar como una ola gigante. Mientras seguía retrocediendo; con sus brazos trató de cubrirse, aún que era tonto porque ni siquiera eso podría evitar que la bala perforara algún lugar de su cuerpo.

—¡Jefe y-yo lo siento! ¡Perdóneme! —. Rogó entre llanto.

—¿Por qué sigues disculpándote conmigo, estúpido inútil? —. Preguntó fastidiado sin dejar de apuntar hacia el contrario.

—¡J-Jefe yo no-

Jeon sin dejarlo terminar jaló del gatillo; Una bala atravesó justo en el cráneo del hombre. Su cuerpo cayó con brusquedad al suelo. Las gotas de sangre cayeron en distintos lugares de la habitación, manchando con pequeñas gotas a Jeon, soobin y al otro hombre; quién se encontraba en shock, parado en su lugar mirando el cuerpo sin vida de su compañero.

Taehyung en cambio se encontraba limpio, puesto que se había cubierto con una manta que era parte de la decoración del sofá. El pelirubio se descubrió, y sonrió al ver el cuerpo del hombre tirado en el suelo, botando bastante sangre, que comenzaba a formar un charco de ésta.

—Merecido totalmente. —Soltó una risita.

Jeon apretó la mandíbula, y de forma lenta llevó su mirada al otro hombre; WooHan. Éste seguía mirando el cuerpo de su compañero. Aún seguía estático.

Soobin se encontraba alado de Jeon, parado derecho y observando todo en silencio. No se podía ir de ahí hasta que su Jefe diera la orden.

Woohan sintió la intensa mirada de Jeon en él, así que llevó la suya hacia la contraria. Sintió como su cuerpo se tensaba al ver el rostro solvente de Jeon; su mirada siendo tan oscura y fulminante. Era muy intimidante.

De repente el miedo e incertidumbre hicieron presencia en él de forma chocante.

Jeon era aterrador.

Jungkook movió su cuello a ambos lados, tronando su cuello. Soltó un suspiro satisfactorio cuando esto sucedió. Taehyung mordió su labio inferior, pues ese bajo sonido era demasiado atractivo a su opinión.

—¿Quién fue? —. Él tono de voz con el que le preguntó fue completamente serio. El realmente no podía perder más tiempo.

Woohan trago grueso y lo miró de forma confundida, sin entender a que se refería.

—¿Ah? No s-se a que se refiere Jefe. —

—¿No lo sabes? —. Woohan negó.

Jeon hizo un gesto de inconformidad. Al parecer nadie sabía nada en esta maldita casa. Estaba harto de absolutamente todo, debería de comenzar a ser él quién autorice a las personas que se supone que trabajan para él.

—¿Cual fue la orden que les di a ambos? —. Llevo su mano a su cabellera negra y la echo hacia atrás.

—Que fuésemos por el chico d-de nombre Minseok después de c-clases y que cuando lo tuviéramos en nuestras manos lo golpeáramos un poco. —Repitió lo mismo que Jeon les había pedido días atrás.

—Exacto. Dime algo, ¿fui claro? —. Woohan asintió con rapidez.

—Claro que si Jefe. —

—¿De verdad? Pues al parecer se les olvidó un pequeño detalle. —Jeon apretó los dientes. —Yo les recalqué que lo quería vivo... —Dijo de forma pausada, fulminando a woohan con la mirada. —¡¿Que mierda no saben seguir una indicación?! -.

Woohan abrió los ojos en grande, sin entender nada.

—¿Q-Que? Nosotros n-no-

—¿No? ¿Entonces porque putas esta muerto? —. Woohan sintió que su sangre se congelaba. —Yo les dije una y mil veces que lo golpearan, pero que lo quería vivo. ¡¿Lo dije o no?! —.

—Si, s-si pero no comprendo. Jefe, l-le juro que nosotros lo d-dejamos vivo. —Miró a Jeon con suplica, rogando porque lo escuchara.

Según woohan; ambos golpearon a Minseok por bastante rato, pero recuerda que al final de todo, dejaron al adolescente vivo. !No comprendía nada!.

—A mi no me jures nada, pedazo de inútil. ¡Di solamente una orden y no pudieron seguirla tal y como se les fue dada! —. Se acercó amenazante, con el arma aún siendo sostenida en su mano.

Woohan no comprendía nada, solo sentía el pánico y terror que le causaba ver a Jeon acercarse así a él. No sabia que hacer, su Jefe parecía no querer escucharlo, ni siquiera daba indicios de que fuera a ceder.

Su única alternativa para que Jeon se detuviera fue arrodillarse; juntó sus manos, suplicándole a Jeon que párese.

—¡Se lo j-juro Jefe! ¡P-porfavor, porfavor! —rogó. Sus ojos inundados en lágrimas.

—Completamente patético, ridículo e inútil. No pudieron seguir una puta indicación fácil. —El sonido del arma siendo cargada resonó en la habitación.

La respiración de woohan se detuvo.

¡Ellos de verdad no había matado al chico! ¡Lo dejaron vivo! ¡Vivo!

Si, tal vez y lo golpearon bastante, pero no lo suficiente como para matarlo. Recuerda que incluso lo dejaron consciente cuando lo amarraron a la silla. Aún podía hablar, y se la pasó por quince minutos insultándolos. ¡Él estaba completamente bien! No comprendía como es que pudo morir.

Era extraño, hasta podría decirse que sospechoso. Alguien lo mato, y no fueron ellos dos. Podría hasta jurarlo por su misma madre que ellos no habían sido los responsables de aquella muerte.

Es que si tan solo hubieran visto al chico minutos antes.. !Ellos no fueron!

Sintió la punta helada del arma en su cabeza. Al tener la cabeza agachada sus lagrimas caían al suelo, su respiración errática y desesperada se podía escuchar a la perfección.

—¡No fuimos n-nosotros! ¡S-se lo juro por m-mi madre! —. Volvió a rogar por una última vez.

—Cierra la boca. —Apretó más el arma contra la cabeza de woohan. —Minseok está muerto porque no fueron capaces de medir su fuerza. Todos los que trabajan para mi saben que conmigo no se cometen errores..—Los jadeos y llanto de woohan se hicieron más altos. —Yo di una maldita orden y no pudieron cumplirla apesar de que fui lo suficientemente claro. —

Taehyung comenzó a subir de nuevo la manta. Se cubrió casi todo, solo asomándose un poco para poder ver lo siguiente.

—J-jefe...—Todo su cuerpo temblaba. Sabía que Jeon no iba a escucharlo por mas que se lo suplicara. Era inútil seguir haciéndolo. Solo le quedaba aceptar lo que sea que fuera a pasar.

—A mi nadie me desobedece, absolutamente nadie. Y eso te lo vas a llevar tú a donde sea que vayas a parar. —Y sin decir algo más, jalo del gatillo.

El sonido del disparo llegó hasta los oídos de Taehyung, quién se cubrió de nuevo lo más rápido que pudo.

El cuerpo del hombre cayó de forma brusca al suelo, con un agujeró en el cráneo; justo alado de su compañero.

Nada nuevo.

—Mal nacidos. —Insultó por última vez a ambos hombres muertos. Sin duda era una satisfacción matar a las personas cuando lo amerita.

Soobin se aclaró la garganta antes de hablar.

—Señor, ¿gusta que me encargue de limpiar esto? —. Preguntó su hombre de más confianza.

Jeon negó.

—Aún tengo más cosas que hacer, no puedo perder mas tiempo. —Suspiró. Aún tenía pendiente el tema de Minje. —En una hora y media voy a llamarte, así que estate al pendiente. —Soobin asintió. —Bien, entonces puedes irte. Asegúrate de que nadie entre al menos que yo lo indique. —

—Como diga Jefe. Me retiró, muchas gracias. —Dió una reverencia hacia Jeon, después giró hacia Taehyung para hacer lo mismo.

El pelirubio le sonrió como respuesta, elevando su brazo para hacer un movimiento de despedida con su mano de forma lenta; Algo juguetona. Claro que todo esto lo hacía de forma de broma.

Soobin sin decir o hacer algo se dió la vuelta lo más rápido que pudo, no quería problemas con Jeon. Salió casi corriendo de la habitación.

Jungkook en cambio lo miraba con el ceño fruncido. Ese maldito mocoso solo lo hacía para hacerlo molestar. Agradecía que soobin se fuera rápido porque si no tal vez también le hubiese tocado recibir una bala en la cabeza como los otros dos.

Taehyung de dejó caer en el respaldo del sofá, y aventó la manta sucia al suelo. Observó el rostro molesto de su novio y sonrió inocente.

—¿Que sucede? ¿Uh? —. Preguntó con fingida duda. Claro que sabía lo que hacía, pero era divertido fingir que no.

Jeon apretó la mandíbula y se acercó hacia donde estaba el menor. Se paró justó frente a donde estaba él sentado.

—Vuelve a hacer algo parecido y te vas a arrepentir. —Taehyung fingió no comprender a lo que se refería.

—¿Hacer que? —. Un mohín adorno su rostro, mirando hacia arriba.

—Tú lo sabes, pequeño niñato. —Ladeó su cabeza un poco.

—No hice nada, solo fui amable. —Se excusó. —¿Que tiene de malo serlo? —. Lo miró con ojitos grandes.

—Si claro. Y en especial porque eres súper amable con todas las personas. —Dijo de forma sarcástica.

Taehyung soltó una risita.

—Es que soobin me agrada. —Y aun que todo lo decía bromeando, esto no.

La realidad es que soobin si le caía bien. A diferencia de los demás hombres que trabajaban para Jungkook; soobin siempre era un poco más sencillo, es decir, que parecía no estar temblando cada vez que Jeon hacía presencia en algún lugar.

Mientras que los demás casi se arrodillaban ante Jeon, soobin solo se quedaba serio y a su lado. Completamente preparado para todo. Sabía seguir las órdenes a la perfección, y siempre cumplía con sus trabajos.

Aparte, siempre le mostraba respetó incluso sin que Jungkook esté presente. A diferencia de los demás quienes algunos solo lo tomaban en cuenta cuando estaba junto a su novio.

Soobin era su favorito. Incluso podría hasta admitir que era guapo, —no más que su novio, claro. —

—No me interesa si te agrada o no. Te prohíbo sonreírle de esa forma, a él y a cualquiera. —No le gustaba nada.

Esa bonita sonrisa que resaltaba sus labios rojizos solo debía de ser dedicada a él.

—¿Enserio me estás prohibiendo sonreír? —. Preguntó divertido.

—Sonreír no, obvio no. Mientras esas sonrisas sean para mi puedes hacerlo. Pero si van a ser para otra persona entonces prefiero que no lo hagas. —

—Vaya, no creí que de tantas cosas que están prohibidas para mi, una de ellas iba a ser sonreír. —Río.

—Sigue burlándote y te voy a cocer la boca para que no sonrías o hables con nadie más. —Amenazó.

—¿Cocer mi boca? —. Fingió asombro. —Si haces eso tampoco podrás escuchar mi voz de nuevo... Tampoco vas a poder besarme otra vez. —Hizo un mohín con sus labios. —¿Pero sabes que es lo peor? —. Le preguntó.

Taehyung se enderezó de nuevo, y con una sonrisa juguetona se acercó a la pelvis de Jeon, pegando su mejilla al bulto sobresaliente del pantalón.

—Nunca mas vas a poder follarme la boca. —soltó con un tono de voz lastimero, para posteriormente dejar un beso por sobre la tela del pantalón; Justo encima del pene cubierto.

Escucho un suspiro pesado.

Jeon tomó entre sus dedos los cabellos rubio, y jalo de éstos con fuerza; separándolo de su pelvis.

—Detente. —Ordenó como advertencia. —Estúpido manipulador. No se que intentas, si tú y yo sabemos que sería más un castigo para ti. —Se burló ahora él.

Taehyung quiso negarlo, si. Pero la verdad es que tenía razón.

Adoraba tener la boca llena de la polla de Jeon. Enserio que si, es por eso que la realidad era que si aquello llegase a suceder, el que terminaría llorando de desesperación sería él.

Taehyung hizo un puchero, mirándolo desde abajo. Llevo su mano hacia el bulto de Jeon, y comenzó a acariciar aquel. De arriba hacia abajo, aún siendo sostenido del cabello por su novio.

—Es verdad. Pero no puedes culparme, tu sabes lo mucho que adoro tu polla. —Dijo sin dejar de acariciar el bulto. —Hasta podría ponerle un maldito altar. —

—Lo sé, por eso es que lo digo. Sería más sufrimiento para ti que para mi. —Soltó una risa corta. —Solo mírate, acabo de quitar tu cara de mi pene y ya tienes tú pequeña mano ahí de nuevo. Es como si tuvieras un imán. —

Taehyung sonrió.

—Tal vez lo tenga. —Se encogió de hombros. —Te puedo hasta admitir que solo con verte este lugar cubierto me caliento. —Mordió su labio inferior.

Jeon lo miró con burla. Aún que en cierta parte lo entendía, porque a él le sucedía algo parecido con respecto al menor. Solo tenia que verlo con las piernas descubiertas y ya quería abrírselas para follarlo.

Soltó el cabello rubio.

Podía sentir como la pequeña mano de su novio lo frotaba cada vez más duro. Pero, aún no se olvida donde y porque están en ese lugar, así que recordó algo.

—Sabes amor, dices que amas mi polla. Entonces, ¿consideras que es solo tuya? —. Taehyung frunció el ceño, y asintió sin duda alguna.

—¿Que? Obvio que si. ¿Que clase de pregunta es esa? Es incluso más mía que tuya... Oh, no, espera. Es completamente mía, que tú la tengas no significa nada. Es mía. —Recalcó.

—¿Lo es? Humm, me parece que alguien de aquí no lo tuvo muy claro...—Taehyung lo miró con duda.

—¿Que? —. Preguntó, dándole un apretón duro debido a la molestia que aprecio por lo dicho.

Jeon soltó una jadeo, sin borrar la sonrisa que tenía en el rostro.

—Resulta, amor; que esa noche donde Minje trató de acostarse conmigo, me acaricio de la misma forma en la que lo estás haciendo tú. Claro que solo fue un momento, pero aún así lo hizo. —Contó. Taehyung detuvo el movimiento de su mano de forma abrupta.

Tal vez no todos lo recuerden, pero Jeon no mentía, eso si sucedió. A Jungkook no se le podía olvidar ese detalle; debido a que cuando eso sucedió fue raro para él, todo porque había estado mucho tiempo sintiendo únicamente las caricias de su novio en esa zona. Las manos de otra persona ahí eran completamente extrañas.

—¿Que hizo que? —. ¿Esa maldita se había atrevido a hacer tal cosa?

—¿Que sucede, amor? —Claro que se estaba burlando de Taehyung.

Taehyung lo miró con molestia, y alejó sus manos de aquel lugar.

—¿Me lo dices enserio? —. Preguntó.

—¿No me crees? —. Alzó una ceja.

Taehyung apretó sus labios, y resopló.

Sin mucha fuerza le dió un empujón a Jungkook, y se levantó del sofá. Jeon solo sonreía divertido por la reacción de su novio.

Ese pequeño detalle no se lo dijo el día que le contó todo, se le había pasado. Pero entiendan, en ese momento con solo decirle que Minje había estado en su habitación esa noche Taehyung estaba sacando humo de todos lados, así que se saltó ese detalle, aún que igual ni siquiera lo dejo terminar.

Taehyung caminó hacia el cuerpo amarrado de Minje. De ahí le siguió Jeon.

Una risa burlesca sonó proveniente de Taehyung por todo el lugar. Éste se paró frente a Minje, y se cruzó de brazos. Solo con verla ya tenía ganas de matarla él mismo con sus propias manos.

Esa maldita...

La detesta. Sin dudas que lo hace.

Y justo ahora más que nunca, ¿por qué? Bueno...

—Vaya, aparte de ser una puta fácil resbalosa, eres  chismosa. —Dijo con burla mezclada con asco.

La pelinegra estaba despierta. Había estado observando todo desde que mataron al último hombre, había fingido seguir inconsciente debido a que no sabía que más hacer. Estaba asustada.

Y por supuesto que había escuchado tal conversación de la pareja, pero oír que Jeon la mencionaba, no pudo evitar abrir los ojos. Se olvidó complemente de mantenerlos cerrados.

Tener al rubio frente a ella, mirándolo de tal manera; con esa mirada llena de asco y rencor...

No tenía idea de nada, solo sabía que el adolescente que tenía enfrente la miraba como si quisiera asesinarla.

—Al fin esto va a comenzar...—Soltó Jeon.

Y Taehyung asintió.

Ahora si, le va a cobrar cada una de las tantas cosas que le hizo. Se va arrepentir.

***

Ya saben, voten.

Últimamente me ha caído mucho hate, será mejor que pare pq la vdd ya me estoy cansando.

Bueno, quisiera poner algo pero justo ahora traigo prisa así queeeee.

Quisiera dedicar este capítulo a: @jungkookBTS567 pq ella literal se fijó en cada detalle del fic y hasta teorías hizo. Me dio bastante ternura. 🤍

Y a las niñas de mi insta, pues el siguiente va a estar dedicado completamente a ellas. Las iba a poner aquí pero como lo dije en insta, mis amigas me están esperando y sin muchas chicas entonces ya me quiero ir así que lo dejo para la otra. PERDONNN.

Ahí tengo sus user, que me los pasaron por priv.

Cualquier error luego lo corrijo, AHORITA YA ME QUIERO IR.

BUENO YA, CHAU.