End.

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"Nuevo mensaje"

Número desconocido:
>Nadie debe pasarla mal en su cumpleaños.<

"Tristemente cierto", pensó Ryan trás leer ese mensaje de algún desconocido.

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Hace como 2 o 3 meses vine a vivir solo, bueno, aún que tenga la compañía de Ak, así se siente, asi me siento yo...así se siente mi vida ahora.

No fue por el hecho de las burlas de Ken o Pewd que me mude, si no, que aparte de ser tratado por mi madre como un simple objeto para que mi padre se quedara junto a ella, me dolía, nunca le importe de verdad a ella, realmente no, por el hecho de que mi hermano mayor ya es independiente y esta formando una familia, no es de gran importancia, y su hermano menor no es de sangre de mi padre, tampoco importa mucho, digamos, que yo por ser su único hijo menor, soy como una atadura que usa mi madre para que él se mantuviera a su lado, aun no acepta su ida...aun que bueno, ERA su atadura, desde que me mude ella me ha estado intentando convencer regresar....¿pero para qué?, solo me usa, no le intereso, mucho menos a parte de mi familia que nos visitan en festevidades, me tratan de bicho raro y me miran de una manera que no puedo descifrar, solamente una pequeña prima mía de 6 es la única que no me trata mal o hace sentir incomodo. Parte de ser tratado así es   por ser bisexual, no se lo dije a nadie directamente, mi madre lo descubrió.

En fin, últimamente mis ánimos han estado por los suelos, me siento inútil y miserable, no sé el por qué exactamente, no he comido casi nada, apenas un vaso de agua, desde hace 2 semanas estoy así, desde hace 4 con brazos vendados, ¿por qué rayos sigo haciendo esas tonterias?, tal vez no soy consciente cuando lo hago, siempre reacciono cuando veo la sangre, soy un tonto, lo sé. Un tonto al que le hace falta algo muy necesario pero no sabe el qué.

Ahora mismo me encuentro en mi habitación, no sé donde este Ak y no me interesa, estoy acurrucado entre las sabanas grises de mi cama con toda luz apagada, exceptuando por la televisión donde pasaban caricaturas para adultos algo grotescas, hace como unas 4 o 5 horas intento conciliar el sueño, y no lo he logrado, no sé que hacer, no sé que hacer exactamente con mi vida la cual día a día pierde el sentido que antes poseía, ahora, cada día siempre anhelo la noche para dormir, pero en este momento me es imposible, maldito insomnio.

》hay una manera para dormir efectiva, y no son pastillas.《

Habló mi subconsciente. No, no creo ser capaz de terminar con mi vida como si de una pelicula se tratase, llevo tanto evitando eso y no lo voy a dejar de hacer por mi maldito subconsciente por más tentador...que suene.
Sonó mi telefono celular, lo cogí y ví quien me llamaba, mi madre, seguro para convencerme de regresar con ella y terminar insultandome...como si fuera un error....lanzé mi celular lo más lejos que pude y lo más fuerte.
Tal vez no sea tan malo dormir para siempre, ahora que lo pienso, no tengo a nadie por el cuál seguir viviendo, y Ak no depende de mí, asi que, ¿qué tan malo puede ser?, pensé levantandome de mi cama para ir al baño, prender la luz y tomar una pequeña navaja que había ahí para mirarla con detenimiento, "¿de verdad lo haría?".

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Tomó la navaja con fuerza y la posicionó en su brazo justo donde una vena.

"¿De verdad lo haría?", se repitió asi mismo en pensamiento, y lo hizo, corto su vena, toda la sangre salía sin descontrol, dibujo con esa misma una carita feliz en el espejo antes de caer desmayado por la pérdida de sangre al suelo del baño, todo, absolutamente todo se torno negro, así como lo era su vida.

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Al despertar se encontró en una habitación blanca, con aparatos y el conectado a esa maquina que veía el pulso del corazón, tenía las muñecas vendadas, y solo era confusión lo que rondaba por su cabeza, al cabo de unos segundos todo recobró el sentido y solo soltó un suspiro resignado, ¿no estaba muerto?, pensó Ryan, un doctor entro y le sonrió amablemente pero solo le ignoro, estaba realmente desorganizado respecto a su mente. El doctor le hizo unas cuantas revisiones y se fue, ¿como es posible que no estuviera muerto?, pensó de nuevo, y entonces entró por la puerta la razón por la cual estaba vivo en estos momentos, debió haberlo imaginado, solo dio un suspiro corto y cerro los ojos.

-seguro que comenzarás a bombardearme de preguntas.- habló Ryan antes de que el sueco lo pudiera hacer

-por ahora no, no quiero abrumarte hoy, más bien lo contrario.- dijo el sueco

-¿que harás?.- preguntó el menor pues le conocía bien como para saber que tramaba algo

-celebrar .- soltó el sueco, a lo que el menor solo le miro desconcertado - es tu cumpleaños después de todo, ¿no?.- terminó de hablar

-¿después de esto te iras?.- habló murmurando el menor de los dos

-¿por qué habría de hacerlo?.- preguntó inocentemente el sueco

-por qué todos hacen eso....- respondió el menor mirando hacía otro lado

-¿y por qué crees que yo lo hare solo por que los demás lo hacen?, no te dejare solo después de esto Ryan.- dijó el sueco, el cual provoco una extraña sensación en el menor al llamarle por su nombre, a lo que el menor le miro directamente a esos ojos azules llenos de vida.

El sueco le sonrió.

Eso derrumbó toda la pared de miedo y abandonó que siempre estuvo presente en el menor.

Ya sabía exactamente lo que le faltaba, aquello que anhelaba y no sabía lo que era. Aquello que el sueco le brindaba y jamás se dio cuenta.

》Amor. 《