🦑▪ 12 ▪🦑

45 minutos luego del incidente...

Estaba agotado, sumido en un gran dolor que se encontraba en cada parte de su cuerpo. Sus brazos y piernas dolían como el infierno y su mente pareció dar mil vueltas hasta que pudo observar claramente a su alrededor.

Se sentía con una fatiga y náuseas horribles, a parte de que su fuerza no era mucha en esos momentos. Solo podía sostenerse de la madera suelta de por allí, los pocos pedazos grandes que podían soportar su peso fueron de mucha utilidad para poder permanecer a flote sobre el mar.

Prontamente sintió una calidez debido a los rayos del sol sobre su piel expuesta, y la brisa también lo cubrió.

Se supone que ya todo estaba bien, que había pasado la tormenta para darle paso a una absoluta paz, tranquilidad y a como era todo antes de la muerte de sus padres.

Se sintió bien, por unos minutos su alfa kraken se percibió calmado y dormido, lo pensó de esa manera porque ambos traían un peso cansado en el cuerpo. Como era de esperarse el sol tomó todo a su paso y alumbró todo el lugar que anteriormente tenía nubes grises.

Yoongi sonrió achicando sus ojos felinos y mostrando sus encías, ese tipo de sonrisa que no siempre se pudo obervar en él.

Respiró profundamente y luego...No sintió el aroma que tanto le gustaba, no lo sintió por ningún lado y su corazón empezó a latir desenfrenado, se olvidó por completo de aquella paz.

¿En dónde estaba Jimin? Otra vez lo había perdido, y esta vez la duda y su desconcierto le obligaron a sumergirse en las profundidades nuevamente.

Y así lo hizo.

Yoongi borró de inmediato su sonrisa, tomó una fuerte calada de aire y y se hundió por lo bajo, empezó a nadar hacia lo más profundo y bajo que pudiera. En sí la piedra esmeraldas, y su especie,  le permitían nadar y vivir bajo las aguas sin preocupaciones de por medio.

Siguió bajando, frunciendo su entrecejo cuando sus intentos parecían ser en vano. Siguió constante, hasta el punto en el que la figura del sol se perdió.

No estuvo seguro, de verdad creyó que la herida profunda que le hizo a su hermano había sido suficiente como para matarlo, pero no.

El alfa al bajar la mirada lo observó todo con claridad, había muchísima tinta negra en el fondo del mar.

Su pánico incrementó, ni siquiera tuvo tiempo de bajar aún más, dolorosos y duros zumbidos golpearon sus oídos, su cerebro se sintió como si estuviera a punto de explotar.

Una y otra vez, se repetía la tortura desde un comienzo.

Sus facciones no mostraban temor alguno, más que solo el rastro perdido de su pena al observar una gran parte de su barco hundido.

Park no tuvo tiempo de reaccionar, tan pronto como había cobrado la conciencia y fue soltado por el kraken de un verde obscuro, se vio siendo arrastrado por una fuerza sobre humana hasta el fondo del mar.

Fueron segundos en los que no pudo respirar y se vio absorto en la oscuridad.

Sorpresivamente no esperó terminar dentro una parte de su barco, atado a un pilar de madera, respirando oxígeno atrapado en una burbuja que los separaba del mar, a él y al que supuso era hermano de Yoongi.

Inyeop.

Realmente no esperó verlo de frente, peor si se trataba de la parte humana.

Era similar a Yoongi en algunos sentidos.

Ojos felinos y de un tono verde, la piel un tanto pálida y labios delgados. Las diferencias a pesar de aquello eran notorias.

Justo ahora ambos estaban frente a frente, Jimin podía sentir una mirada amenazante sobre él y como el alfa se movía de un lado al otro.

No lo pudo evitar, quería reírse de él en su cara luego de saber que posiblemente Yoongi le había dado la paliza de su vida y que si su alfa no hubiese mostrado la mínima de piedad, él ya estaría muerto.

-¿Qué estás esperando? Se supone que vas a matarme, ¿verdad?..- habló con algo de sorna y bien, estaba viéndose como la presa.

Ajá.

-Cierra la puta boca, pirata, o créeme que te dejaré para el final. Aún no me decido qué es más doloroso, matarte a ti enfrente de Yoongi o matar a Yoongi frente a ti..- murmuró con un claro disgusto, poco a poco recuperándose de las heridas que su hermano menor le había propinado.

Jiminie sonrió lascivo, cabizbajo y con la mirada perdida. Le divertía el asunto, no podía creer que el mayor se la había dejado fácil.

Inyeop se redujo a una miseria, a un ser humano alfa que podría fácilmente acabar. Solo necesitaba quitar la soga que amarraba sus manos a ese pilar hacia atrás.

Con cuidado fue moviendo sus manos rítmicamente, buscando la manera de liberarse sin que el alfa notara sus acciones. Sonreía gustoso, recuperando su maldita actitud de una buena vez, porque hablando seriamente, Jiminie se sintió mal al haberse permitido ser una miseria en comparación a un kraken.

Y ahora, que lo veía así de cerca, encerrado en una especie de burbuja de aire en el fondo del océano, se pudo dar cuenta de que lo único que necesitaba era darle un golpe fatal en una parte importante. Listo, solo eso.

Después de todo él es Park Jimin, un jodido pirata desalmado.

-Te ves tan patético..- alegó el menor como si nada, alzándose de hombros cuando escuchó la "risa" del kraken.

Distraerlo, lo único que necesitaba para liberarse de las ataduras era eso.

Y lo estaba logrando exitosamente.

-Hey pirata, mira quién está allí, tu alfa ingrato viene en camino, ¿lo vez?..- apuntó con su mano a una esquina descubierta, en donde claramente se obervaba la silueta de una persona.

Era Yoongi, a pesar de que las aguas cristalinas distorsionaban la forma, pudo saberlo y estar seguro de aquello.

-Lo veo perfectamente, ¿y ahora qué? ¿No se supone que debes matarnos?, eres tan aburrido y fracasado..- Jimin chasqueó la lengua, mirándolo como un bicho el cual debía pisar.

Muy bien, Jimin lo estaba haciendo increíble. Un poco más y terminaba de mover su mano izquierda de entre la soga para por fin descartarse, con el hecho de que el pilar estaba húmedo, facilitaba el movimiento de sus dedos entre las sogas, pudo aflogar un poco el nudo para que sus muñecas mo dolieran tanto al momento de salir por completo.

Jimin sabía que una de sus manos saldría muy afectada del asunto, pero le valía un montón de mierda, en esos instantes lo único que quería era terminar con todo y por fin estar en entera paz.

Literal, perdió un ojo por estar en ese lugar y no iba a perder la oportunidad de acabar con ese malnacido.

-Pudrete..- susurró, algo fuerte. Su intención era ser escuchado desde un principio.

-¿Sabes qué? No me dejas otra opción..- el alfa mordió su labio inferior y apretó su puño derecho. En un rápido movimiento estampó un solo golpe en seco justo en la quijada del capitán Park.

Lo escuchó quejarse y escupir un poco de sangre, se veía tan lamentable, con algunos golpes y una gran herida que lo dejó sin visión en la parte derecha.

¿Cómo era posible que siguiera siendo "la gran cosa" en ese estado? Ese omega, de verdad que le estaba desesperando.

-¿Eso es todo lo que tienes?..- preguntó en voz alta, de la misma manera que suele ser.

Inyeop gruñó molesto, y cuando se dispuso a acercarse lo suficiente hacia Jimin, fue recibido con un "crack" proveniente de algún hueso del omega y un duro impacto hizo que se quedara sin aliento.

El omega tomó un impulso para safarse por completo, en el intento tronó algún hueso pero ya de por sí el dolor en su cuerpo le era inevitable. Con toda la adrenalina al tope se dispuso a dejar un golpe con su rodilla sobre el abdomen del kraken.

Inyeop no se quedó atrás, respiró profundamente y volvió a estampar su puño en el rostro del omega, y esta vez se aseguro de que cayera justo en su ojo lastimado, ocasionado que Minnie se retorciera del dolor.

-Maldito, debo admitir que tu fuerza de voluntad es admirable, de seguro que mi mamá te adorará, ve saludarla de mi parte..- soltó un fuerte gruñido, y el iris de sus ojos cambió drásticamente a un amarillo, igual al de su parte animal.

Inyeop le propinó una patada que desequilibró a Park, lo hizo tambalear y luego otra vez lo golpeó con sus puños, riendo en un desquiciado descontrol.

Jimin se quedó algo paralizado, pues el aroma de Inyeop incrementó en el ambiente cerrado, y el estar acorralado no le dejaba tantas opciones.

Se quedó en el piso, sintiendo como el alfa se posó sobre él, aprerando su cuello con sus largas y delgadas manos.

Apretó y apretó hasta que el rostro de Jimin se tiñó de rojo, y ese mismo rojo lentamente fue cambiando. El menos se estaba quedando sin oxígeno, los dedos de Inyeop parecían apegarse a su piel y su vista empezaba a tornarse borrosa.

Pequeñas lágrimas salieron de sus ojos, pensó rápidamente en como salir de ese problema.

Jimin golpeó los codos de Yeop, fallando en ese intento, también tanteó el rostro fijo del más grande y nada.

Tan solo...

-No debiste meterte en esto, es una lástima que los tuyos tengan que pagar después de ti..- murmuró como si nada.

¿Amenazar a Jimin? Okey, ¿pero amenazar a su tripulación? Eso nunca lo permitiría.

-Jodete..- susurró con el hilo de aire que le quedaba en los pulmones y de un solo puñetazo en la entrepierna del hombre sobre él pudo librarse.

Se puso a toser cuando su cuello estuvo sin presión alguna, respiró agitado y con su corazón bombeando d el nerviosismo.

-Puedo se-sentir tu miedo..- una sonrisa, como toda esa cínica fachada, se colocó en los labios delgados del pelinegro.

-Yo también puedo sentir el tuyo..- su respuesta fue dada como la más obvia de todas, desesperando aún más al mayor de los Min.

Inyeop se puso de pie, y en un abrir y cerrar de ojos levantó a Jimin de sus ropas rasgadas, lo tomó también de sus hebras negras y mechones rubios, con una extrema rudeza lo tiró a un lugar recóndito de los restos del Escarlata hundido.

La espalda de Jimin volvió a chocar contra la madera mojada y áspera, varios pedazos fueron rotos en el proceso y cayeron por su alrededor, incluso pequeños trocitos se clavaron en su piel debido a la fuerza con la que fue empujado.

-¿Qué crees que harás ahora? Yoongi nunca podrá entrar aquí, este espacio y la tinta nunca se lo permitirán..-  dijo el alfa.

Jimin se sostuvo con sus manos contra el piso, pretendió levantarse pero no pudo, sus manos y anatomía en general dolían un montón.

-Ahora sí, me permitiré acabar contigo primero, honestamente, me traes demasiados problemas.

El mayor llegó hacia Jimin, le propinó una patada en el abdomen, tal vez devolviendo el golpe que le fue dado anteriormente.

Soltó un par de carcajadas antes de que otra vez volviera a bajar hasta la posición de Jimin, por segunda vez colocando sus manos alrededor del cuello del omega menor y lo apretó con todas sus fuerzas.

La dificultad de respirar fue mucha, Jimin ya no podía liberarse del agarre del alfa que seguía siendo firme en su garganta, otra vez se estaba quedando sin aire, atrapado en ese espacio y con su vida dependiento de un hilo.

Jimin golpeó con sus manos el pecho de Inyeop, no vio reacción alguna sobre él y decidió golpear las manos y brazos que lo sostenían.

Las opciones lo limitaron, y por ende sus manos recorriendo a su alrededor. Buscó con su tacto entre los pezados de madera sueltas, con desesperación y la mirada rígida sobre el alfa, sujetó con firmeza una pieza de por ahí, y con aquello en su mano golpeó con dureza directo a la cabeza de Inyeop.

El alfa se quejó por el dolor, llevando por instinto sus manos hacia el costado de su cráneo. Gruñó con molestia y ardor, fijó su mirada en el omega.

Un error demasiado impredecible, tardó mucho en darse cuenta.

Jimin ya estaba de pie, junto a él y con una sonrisa que le heló la sangre.

-Sorpresa.

El mayor ni siquiera alcanzó a reaccionar, cuando ese mismo trozo de madera suelta y algo puntiaguda fue enterrada a un lado de su garganta, hasta llegar a la vena yugular interna.

Soltó un suspiro lastimero, empuñando la madera clavada en él con una sensación extraña. Inyeop obervaba su propia sangre salir a chorro, y claro, la vida se le estaba yendo de las manos pero no se iría solo.

-No es bueno que desees tener el poder, al final de todo, es ese mismo poder el que te consume hasta matarte...Nos vemos en el infierno, hijo de puta.

El alfa kraken cayó al piso mal herido, de fondo se escuchaba como el sonido de un cristal rompiéndose.

El agua comenzó a entrar en la esfera de protección que Inyeop había creado estando vivo, y los restos de la mitad del navío Escarlata prontamente se llenaron de agua hasta el final.

Jimin cerró sus ojos y el mar lo hizo sucumbir.

Así era como debía morir un pirata, a lado de su barco y a la par de mil tesoros escondidos.

El último suspiro de Jimin fue suave, dio lo poco que le quedaba de aire a las profundidades y terminó por decidir descansar.

Se mantuvo quieto con los ojos cerrados, esperando tranquilamente a que su tiempo terminara. No pudo discernir muy bien, pero unas manos ligeramente cálidas sostuvieron su rostro en un desliz, fue misteriosa la manera en la que funcionó y en como sus labios se unieron con los de Yoongi estando casi al final del mar.

Su omega se lo repitió allí mismo.

"Quiero volver a casa"






























💛💛💛

Espero que les guste, perdón si ven algún error.

¿Qué les pareció?

¿Preguntas?

¡Muchas gracias por haber leído esta historia, me pone muy feliz haberla podido concluir, aunque bueno, no tanto porque si la voy a extrañar :')

Es mi primera pelea de este nivel, kajdks espero de verdad que al menos haya quedado decente. Mood: agradecida de que al menos se entienda 😭🤙

De aquí nos falta el epílogo para concluir mejor, y si, habrá un tremendo salto de tiempo ahr :'3

¡Mil gracias por cada voto y comentario! Nos leemos la próxima, tqm.

Sempai❤

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top