- Con que Ramiro Dagna ¿Eh? - un Franco celoso preguntó.

- Ramiro Dagna - Ramiro aclaró - ¿Con quién tengo el gusto de hablar?

- Soy Franco Rey -Franco miró a Ramiro.

- Oh... ya veo - murmuró Ramiro.

- ¿De dónde salió este tipo? - murmuró Franco.

- ¿¡Y que tienes con Samy!? - ambos se señalaron.

- ¡Somos compañeros de la escuela! - Franco miró desafiante.

- ¡Somos amigos de la infancia! - Ramiro respondió con la misma cara.

- Mentira - Samy se puso en el medio de ambos - Tú eres de otro curso y a ti te acabo de conocer - Samy miró a Franco y luego a Ramiro.

- Chicos hay que guardar nuestras cosas - dijo una chica del curso de Franco.

- Oh, ustedes acaban de llegar. Vayan a dejar las cosas - Samy rió para después agarrar el brazo de Ramiro y salir corriendo.

- ¡AHHH MUY RÁPIDOOO! - Ramiro gritó con terror.

- ¡No me la vas a robar! - Franco Miró enfurecido.

En una esquinita estaba Sofía espiando a Franco con más celos que el Rey.

Pasaron un día tranquilo, hasta que en la noche.
Samy y Ramiro estaban en un restaurante que estaba dentro del hotel.

- Hoy la pasé muy bien - rió la chica.

- Yo también - Ramiro devolvió una sonrisa - Me gustó estar con vos.

- ¿Que hacen acá tan juntitos? - Franco apareció de la nada y se sentó junto a Samy - Te estuve buscando todo el día y no te encontré, Samy.

- Estábamos por comer ¿Quieres unirte? - Samy le preguntó a Franco.

- Claaro - Rey aceptó sin dejar de ver a Ramiro con desafío.

Samy cerró sus ojos consternada.

- ¿Saben? Para mí la segunda es la vencida - empezó a ella haciendo que los chicos se extrañen.

- ¿Y eso qué? - preguntó Franco.

- ¿Que es lo que intentas decir? - Ramiro intentó ser un poco más suave que Franco.

- ¡DEJEN DE PELEAR POR MI COMO SI FUERA UN PEDAZO DE CARNE! - Samy golpeó la mesa.

- ¿Pelear? ¿Cuando? - Ramiro miró Franco.

- Eso, que nos vamos a pelear si nos llevamos bien - dijo Franco.

- Re bien - dijo Ramiro.

- Recontra bien - Franco siguió.

- Ultra bien - Ramiro empezó a ponerse serio.

- Super ultra bien - Franco miró con su cara desafiante.

- Mega ultra bien - Ramiro devolvió la mirada.

- Si... se ve - suspiró Samy - Si tanto quieren pelear por mi hágamoslo bien.

Los chicos miraron a la fémina en disputa.

- Estamos en Bariloche hasta el Miércoles de dentro de 2 semanas, osea que faltan 10 días. Cuando queden 3 ustedes dos se enfrentarán en una serie de desafíos que elijo yo ¿Está claro? - Samy miró a los dos con seriedad - Hasta entonces... NADA DE PELEA - por un segundo Samy se pareció al diablo pero después volvió a ser un angelito - Vamos a comer.

- Al final es como Sofía... - murmuró Franco.

- Me encanta esta mina - murmuró Ramiro.

Los 3 comieron mientras hablaban cordialmente de disciplinas en las que Ramiro y Franco podrían competir.

- Bueno chicos, tienen 7 días, prepárense - Samy le sonrió a ambos y se fue.

- Prepárate vos, gordito - Franco rió mientras se iba.

- Gordo es mejor que sordo - murmuró Ramiro pero Franco no lo escuchó.

Cuando Franco se alejó alguien lo metió en una habitación.

- Así que vas a pelear con Ramiro - rió Matías con su grupo de amigos atrás.

- ¿¡Quién sos vos!? - Franco empujó a Matías

- Soy alguien que te puede ayudar con ese gordo - Matías rió

- Con Ramiro...? -

Al siguiente día el contador empezó... 7 días para el enfrentamiento.

Ramiro no sabía a qué iba a enfrentarse así que decidió hacer lo imposible...

- Si vas a hacer algo hacelo bien, sino ni lo intentes - Ramiro murmuró la frase de su padre mientras entraba al gimnasio del hotel.

Franco estaba con Matías en la habitación de este último.

- Bien veamos... Ramiro es un pelotudo - Matías empezó

- Eso ya lo noté.

- Es lento, tacaño, ingenuo... debo darle créditos, es inteligente, también tiene sus momentos de creatividad.

- ¿Es fuerte? -

- ...Por pura fuerza no puede ni matar a una mosca - Matías se rascó la espalda - No tiene nada de fuerza -

- Lento y débil... en una pelea mano a mano le podría ganar - murmuró Franco

- ¿Se van a cagar a palos? Lo quiero ver - Matías se interesó - No sé que le ven a esa chica pero ustedes peleen para mi diversión -

Samy estaba paseando por el hotel cuando vió a Ramiro corriendo en una cinta para correr...

- Ja, se lo está tomando en serio - ella recordó lo que decía el chico - ¿Se supone que nos conocemos de antes? - ella decidió investigar.

Nos adelantamos 2 días, Franco y Matías estaban en un acantilado.

- ¿¡QUE CLASE DE ENTRENAMIENTO ES ESTE!? - Franco estaba llevando una bolsa llena de piedritas con su cabeza.

- JAJAJA que boludo - rió uno de los amigos de Matías.

- Es un entrenamiento para fortalecer tu resistencia - explicó Matías.

- Oh... - murmuró Franco para después caminar con más esmero.

- Se la creyó enterita - rió otro amigo de Matías.

- Pero cállate - Matías recriminó.

Cuando ya faltaban 2 días Ramiro ya parecía otro...

- Ya me entra esta ropa que me compró mi vieja pensando que estaba más flaco.

- Wow ¿ese es Ramiro? - una chica pasó caminando.

- Ni en pedo amiga, Ramiro está re gordo - dijo una chica que la acompañaba.

- Esto será problemático... - murmuró Ramiro.

El empezó a caminar hacia su habitación y se cruzó con Matías y Franco...

- ¿Ahora que hacemos? - Franco miró a su nuevo amigo

- Pues... podemos hacer que camines con hielo en lo pies, así vas a mejorar tu resistencia - Matías propuso.

En ese momento Matías chocó contra Ramiro.

- Discúlpame, no estaba prestando atención - dijo Matías sin reconocer a Ramiro, quien solo asintió para después irse.

- Así que Matías está boludeando a Franco... de seguro le dijo que lo iba a ayudar. Pobre pibe, casi me da pena.

Literalmente un segundo después encontró a Samy hablando con unas chicas de su curso.

- Bueno, nos vemos después Samy - una de las chicas se despidió mientras se iba con el resto del grupo.

- Claro claro - rió ella.

Samy volteó y vió a Ramiro... ambos se quedaron en silencio.

- Es imposible que hayas bajado 60 kilos en 5 días. En realidad es imposible que lo hayas hecho en un año entero - Samy miró al chico.

- Vaya, me reconociste - rió el chico.

- ¿Que hiciste para conseguir eso? - preguntó Samy - Lo digo en serio, lo que sea que hayas tomado podría hacerte mal.

- Ay dios, no te preocupes. Estoy joya - Ramiro se señaló con orgullo.

- Por ahora... si estás mal para pasado mañana me quedo con Franco eh - advirtió ella.

- ¿Me estás amenazando con eso? Si pasado mañana estoy mal me corto las venas - en ese momento recibió un golpe de la chica.

- ¡IDIOTA!

Ella tomó a Ramiro y se lo llevó a algún lado...

- Che Franco ya tengo un plan - anunció Matías - cuando sea el día del encuentro yo y los pibes agarramos a Ramiro y vos te quedas con la minita.

- Pero eso es muy... sucio - murmuró Franco.

- ¿Y? Acá lo importante es que te quedas con la chica ¿O no?

Franco se quedó unos segundos dubitativo...

- Tienes razón.

Samy y Ramiro estaban en una playa de Bariloche, pese a que hacía un frío de los mil demonios.

- ¿Y que hacemos acá? - Ramiro evitaba mirar a Samy a la cara.

- Quería pasar tiempo contigo - la chica estaba apoyada en una baranda.

- ...Si Franco nos ve va a pensar que me tenés favoritismo - rió Ramiro.

- No estaría equivocado... - murmuró Samy.

- Eh... ¿¡EHH!? - Ramiro cayó al suelo.

- Le hablé a mi padre de vos y me pasó unas fotos de hace muchos años - Samy miró directo a Ramiro - Recuerdo casi todo.

- Eso es bueno - murmuró Ramiro con un escalofrío - Nunca vas a recordar todo.

- No pareces sorprendido - comentó la chica.

En su mente Ramiro estaba como "SIIII VAMOS LOS PIBES VIVA ARGENTINAAAA" aunque por fuera no lo demostrara.

- Emh... creo que me lo esperaba - mintió Ramiro.

- Seguro seguro - rió Samy extendiendo su mano para que Ramiro la use para levantarse - Dale que está fresco.

Ramiro se levantó y miró a Samy por detrás del hombro...se le hacía difícil verla a los ojos.

- En la competencia con Franco voy a rendirme.

- ...¿EH?

- Me parece estúpido pelear por ti... te estamos tratando como un objeto uno como una persona con decisión.

- ...Es que los dos se lo tomaron muy en serio - rió Samy haciendo que Ramiro vea extrañado - Ni en sueños iba a quedarme con quién gane, solo va a ser una forma de que Franco y vos resuelvan sus problemas.

- Osea que... ¿lo de que el que ganan se queda con vos era joda? - la chica asintió a la pregunta.

- Al terminar la competencia simplemente iba a golpearlos en la cabeza a ambos.

- Alto spoiler... - rió Ramiro.

- Mira el lado bueno, ésta competencia ha hecho que bajes esa panza tuya.

- ¿Sos gordofobica o que onda?

- No, pero lo tuyo era zarpado, por eso me preocupa como hiciste.

- Te dije que no te preocupes - Ramiro suspiró - Volvamos.

- Si, ya está oscureciendo.

Franco y Matías estaban viendo la televisión completamente aburridos.

- ¿Conoces el beyblade? - preguntó el Rey.

- Oí a Ramiro hablar de eso...algo de unos trompos... un juego de niños.

- De niños... - Franco miró al suelo.

Al día siguiente Samy reunió a Ramiro y Franco en el mismo lugar para comer.

- Bien veamos... - Ramiro se sentó en un lado.

- No importa que ahora seas flaco, te voy a destrozar - dijo Franco.

- Baja un cambio, es mañana.

- Competirán en 2 competencias - Samy captó la atención de los chicos - La pienses competencia será una carrera de aquí al cerro catedral.

- ...Espera... eso está un toque lejos, no me quiero morir corriendo - Ramiro se espantó.

- Muy lejos ¡Pero lo haré! - Franco se levantó de un salto.

- Era broma... - Samy hizo que los dos chicos queden (ー_ー) - Los estaba probando.

- ¿Y que probaste? - preguntó Ramiro

- Que me gusta más la gente realista que la idealista... - Ramiro y Franco se vieron - Osea que Ramiro obtiene un desde antes de comenzar - Samy se levantó y le dió la espalda a los chicos.

- ¿¡C-CÓMO!? - ambos quedaron sorprendidos.

- Serán 2 peleas, la primera será un partido de UNO y la segunda serán unas preguntas - Samy suspiró - El físico me puede chupar la concha, a mí me importa lo de dentro.

- ...Lo hubieras dicho antes - rió Ramiro.

- Cerra el orto vos - Samy miró a Ramiro.

- Bueno bueno... agresiva - rió el chico.

- Si ya todo está claro, prepárense - Samy vió a ambos chicos con una mirada crítica.

El día llegó y el trío acordó un lugar y hora.
En el momento culmen Franco llegó al lugar, ahí ya estaba Samy.

- Buen día - ella bostezó, no había dormido bien.

- Ya son como las 3 de la tarde...

- Es una expresión.

Los minutos pasaron y pasaron... después se convirtieron en varias horas.

- ¿Y Ramiro? - Franco estaba extraño.

- No me jodas que... - Samy recordó las palabras del chico faltante "Si pasado mañana estoy mal me corto las venas" - AY POR DIOS - ella salió corriendo.

- ¿¡Samy!? - Franco fue detrás de ella - No puedo dejar que se entere de que Matías lo agarró.

Horas antes Ramiro estaba caminando por una plaza cuando se encontró a cierto grupo.

- Ramiro Dagna - rió Matías junto a sus amigos, pero el chico lo pasó por al lado.

- Creo que te estás confundiendo de persona - Ramiro mintió para que no molesten.

- Franco me contó de tu cambio. También nos pidió que nos hagamos cargo de vos mientras el se chapa a la chica que te gusta.

Ramiro ya había preparado un movimiento para salir de ahí corriendo antes de que alguno de los pibes haga algo.

- Pero sabes que? Me gusta ver el mundo arder, así que te dejaré ir.

- Sos peor que una rata - Ramiro miró a quien en algún momento fue su amigo - ¿Que te entró en la cabeza? Antes de Bariloche estaba todo bien.

- Mi cabeza está sana, Ramiro... es solo que no vale la pena estar contigo.

- Bah, ni que me importe tu opinión. La próxima vez que me veas ni me hables, no quiero tener nada que ver con vos - Ramiro empezó a irse.

Ramiro estaba yendo al lugar de la competencia cuando sintió un dolor en su estómago...

- Oh, mierda... - cayó al suelo violentamente.

Una migraña atacó a Ramiro en ese momento, el dolor fue cegador y Ramiro perdió el conocimiento...

Matías vió al chico y decidió no dejarlo ahí tirado... no era una mala persona, según el mismo.
El chico dejó a Ramiro en su habitación del hotel.

Cuando Ramiro despertó notó que su visión era prácticamente inexistente... no veía absolutamente nada, aún así conocía la habitación así que se levantó y se movió agarrado de la pared.

- Carajo... - Ramiro empezó a toser sangre.

En ese momento alguien golpeó la puerta.

- ¿¡Rami, estás acá!? - Samy preguntó

Al no haber respuesta ella empezó a forcejear con la puerta sin poder abrirla.

- Déjame a mi - Franco la corrió para después patear la puerta.

La puerta no se abrió... más bien Franco cayó al suelo por intentar dar una patada voladora...

- ¡Voy a llamar a alguien! - Samy salió corriendo.

Ramiro pudo abrir la puerta pero no veía quien estaba.

- ¿¡Samy!? - Ramiro se precipitó al suelo pero Franco lo agarró antes.

- ¿¡Que carajo pasó!? - Franco ayudó a Ramiro a levantarse - ¿Esto lo hizo Matías?

- No... no... - Ramiro empezó a hiperventilarse - ¡Al baño!

Franco llevó a Ramiro al baño donde empezó a vomitar una extraña sustancia...

- Esto es por... es por lo que tomé para bajar de peso - Ramiro explicó intentando contener el vómito.

- ¿¡Qué!? Tomaste algo?

·Flashback·

- Entonces una competencia eh? - Ramiro estaba en su habitación de hotel - No me parece correcto pelear por Samy pero si ella quiere... voy a llamarlo a el.

El buscó entre sus contactos para después llamar.

- Hola, Martin...

- ¿Cómo que Martin? Es papá.

- Bueno... hola papá - suspiró Ramiro.

El chico procedió a contar toda la situación a su padre.

- Entonces... te gusta una chica y a otro también le gusta. Bueno tenés que hacer que vaya con vos - el padre se oía como si estuviera pensando mucho.

- No habrás descubierto América diciendo eso, no?

- Me parece que te estás olvidando con quién estás hablando, yo no soy un amiguito tuyo, soy un papá y me tratas con respeto.

- Ajá...

- Para empezar vas a tener que bajar de peso, cómo estás ahora no te va a querer ni una mosca. Es imposible que con puro ejercicio bajes hasta algo normal... te mandaré algo para que tomes.

- ¿Algo?

- Mientras menos detalles tengas mejor. A los días de empezar a tomar vas a sentirte un poco mal, vas a tener que estar en cama por un día entero o más.

- Ok... yo me encargo del resto.

- Ni una palabra a tu madre.

- Ni media letra...

·Fin del flashback·

- Eran unas pastillas raras... si para el esto es "un poco mal" debo tener miedo de cuando algo me haga mal - Ramiro rió.

- ¿¡Te parece que es un buen momento!? - Franco estaba asustado luego de la historia.

- Siempre es buen tiempo para la comedia, Franquito... ¿Te puedo llamar Franquito?

- ¡No!

- ¿Si? Dale! - Ramiro empezó a levantarse - ¿Me llevas a la cama? Si podés tráeme un balde o algo así por si vuelvo a vomitar.

Franco ayudó al chico y lo llevó a su cama.

De repente llegaron unos hombres de seguridad junto con unos médicos.

...

Los médicos llegaron a la conclusión de que lo que Ramiro había tomado habían sido anfetaminas, aunque no eran normales, eso por los síntomas del chico.

Para el siguiente día, el último del viaje, Ramiro estaba internado en el hospital, su visión había vuelto parcialmente aunque un oculista del hospital le había hecho una prueba confirmado que ahora sufría de miopía y astigmatismo... que debía usar lentes en resumen.

- Que viajecito - murmuró él chico - Ahora yo me tengo que quedar acá y no sé cómo voy a volver a casa.

En ese momento se abrió la puerta dejando ver a Samy.

- ¿¡QUE FUE LO QUE PASÓ!? - ella lo tomó del brazo.

Franco entró y vió al par con algo de envidia.

- ¿Cómo estás? - Franco se tragó sus sentimientos.

- Mejor... gracias a vos - Ramiro miró al chico - Gracias, te la debo.

- Me la debes - confirmó Franco.

- ¿Por qué siento que entre nosotros dos van a haber muchas deudas? - Ramiro preguntó con una corazonada.

- Que curioso, iba a decir lo mismo.- rió Franco.

- ¿Ya terminaron su charla? Es mi turno - Samy miró a Ramiro - ¿¡Cómo que tomaste droga!? SOS TARADO? - la chica golpeó el pecho de Ramiro, el chico se empezó a morder el labio aguantando el dolor.

Ella pasó de los golpes al llanto.

- Me preocupaste...

- Te lo dije cuando hablamos... No te preocupes.

- ¿Que decís? Me preocupe yo, imagínate como se debe haber puesto ella - Franco se acercó enojado.

- ...Si, supongo que tenés razón.

Hubo un silencio en el que solo se podían oír ruidos de afuera y a Samy llorando.

- ¿Y entonces que? Franco ganó la competencia? - Ramiro intentó romper el ambiente.

- Si - Franco asintió - Pero... creo que Samy ya no me interesa.

- ¿Mh?

- Creo que... - Franco se acercó a una ventana - Lo que siento por ella es gratitud... desde que la conozco me ha tratado como un igual y me ha defendido ante los demás.

- ...Hablas tan bajo que ni te escuché - murmuró Ramiro.

- ¿¡El sordo no era yo!? - Franco se dió vuelta.

- Pero es que hablas muy bajito.

- ¿¡Qué decís!? - Franco se acercó enojado - ¿¡Querés pelear!? -

- Como querer, si, pero estoy un poco... indispuesto.

- En cuanto salgas de acá nos cagamos a palos.

- Hecho.

Ambos chicos miraron a Samy que aún seguía llorando en el pecho de Ramiro.

- ¿Cuánto tiempo más vas a estar llorando? - Ramiro levantó una ceja.

- ¡Pero no seas insensible! - Franco se quejó.

- Samy... yo estoy bien, vos estás bien... Franco está bien, si eso te sirve. Así que deja de llorar, porque no hay algún motivo para hacerlo.

- Que maduro... - Franco se sorprendió.

- En realidad si la situación fuera al revés yo estaría llorando peor que ella - Ramiro miró a Franco.

- ...

...

- Y ese fue el resumen de lo que pasó en el viaje - Franco suspiró.

- A la mier... - Gabriel abrió los ojos - ¿Y este chico, Ramiro?

- Sigue en el hospital de Bariloche... me dijo que lo iban a sacar en una semana.

- Dios mío, que historias las de tu generación - el campeón argentino de beyblade habló - En mis tiempos los triángulos amorosos se resolvían con un duelo de baile.

- ¿Vos bailabas?

- Nah, bailaban para conquistarme a mi.

Cuando Ramiro volvió a Buenos Aires, en el aeropuerto lo esperaba su madre junto con Samy.

- ¡RAMI! - las dos fueron hacia el, la más chica corriendo.

- He vuelto - Ramiro sonrió con confianza.

...

Ramiro y Samy ahora estaban en la casa del chico, merendando.

- ¿Y en que quedó lo de Franco y nosotros? - Ramiro aprovechó que su madre había ido al baño.

- Ah sí... - Samy miró al suelo un segundo - Debo tomar fuerzas, un segundo.

- ¿Fuerzas para que? Ni que te vayas a confe...

- ¿Querés salir conmigo?

Ramiro cayó hacia atrás golpeando su cabeza contra el suelo

El tiempo pasó y empezó un nuevo ciclo lectivo... tanto Franco como Ramiro empezaban la secundaria.

Ramiro llegó puntual a la puerta de su nueva escuela, aunque esta estaba cerrada.

Por su lado Franco llegaba un poco tarde a su escuela, pero al llegar a la puerta también estaba cerrada.

Alguien abrió ambas puertas y los chicos tuvieron sus reacciones... Franco se puso serio y Ramiro sonrió.

- Bien - dijo Ramiro.

- Aquí vamos - Franco suspiró.

- ¡Una nueva aventura! - dijeron ambos

Franco giró su cabeza, al igual que Ramiro...

- ¿¡QUE CARAJO HACES VOS ACÁ!? - ambos se señalaron

- Raritos... - una chica pasó por en medio de ambos.

Los dos la siguieron con la mirada desde que la escucharon hablar.

- ¿Qué? - la chica se volteó.

FIN

El próximo capítulo será:
Arco 1-Capitulo 1: Es hora de ser blader

Y que les pareció?
Todavía no hay ninguna batalla beyblade importante XD

En realidad en este capítulo Ramiro y Franco iban a crear sus beys y pelear, pero me pareció mejor hacerlo así porque estoy poniendo las bases para muchas tramas futuras...

Buenas noches