Ya habían pasado varios días desde que las clases empezaron e inevitablemente Franco y Ramiro quedaron juntos…

—¡No te aguanto más! — Ramiro golpeó la mesa que compartía con Franco.

—¡Ni yo a vos! — Franco repitió el gesto.

—¿Me podés dejar de copiar?

—Solo me estoy inspirando.

Ambos chicos se vieron generando rayos con sus miradas.

—Bueno, listo — Ramiro suspiró y comenzó a guardar sus cosas.

—¿Eh? Que haces?

—Me voy a cambiar de banco, no quiero estar cerca tuyo — el chico se levantó y se fue a otro lado.

—Ja, justo iba a hacer lo mismo… — murmuró intranquilo.

En el recreo Ramiro buscó algún lugar para alejarse del resto, así encontró un acceso a la terraza…

—Es un lindo lugar…

El miró alrededor notando que había una persona, y no cualquiera.

—¿Esa no es…?

"Raritos…" fue el recuerdo que vino a la mente de Ramiro. Aquella chica de pelo negro era también de su clase pero ahora no recordaba su nombre…

—Me voy… — el chico suspiró.

—¿Que es lo que quieres? — la chica se volteó a verlo.

—No… discúlpame llegué acá sin querer.

— Acércate — la chica hizo un gesto apoyando lo que dijo.

Ramiro se acercó y quedó cara a cara con la chica.

—Controla a tu amiguito ¿Quieres?

—¿Hablas del sordo? No somos amigos.

—Te sentas al lado, que se quede calmado.

—¿Pero que fue lo que hizo?

—Bueno… — la chica miró hacia otro lado.

·Flashback·

Por algún motivo Franco salió corriendo del aula justo cuando esta chica entraba así chocando y cayendo ambos…

—¿Eh? — Franco sentía algo raro en sus manos…

·Fin del flashback·

—Ok, no quiero saber que sigue — Ramiro se tapó la cara.

—Bien, ya puedes irte — la chica miró hacia delante.

Ramiro notó que la chica estaba viendo un estadio de beyblade con un bey girando en el medio.

—Oh, te gusta el beyblade – el chico se sentó en el suelo a unos metros de la chica.

—Te dije que te vayas.

—Soy libre, hago lo que quiero.

Hubo un silencio por unos segundos hasta que Ramiro suspiró.

—Soy Ramiro ¿Vos cómo te llamas?

—Jean.

—Cuidado que Logan no te mate… — Jean lo miró sin entender la referencia.

—¿Eres un blader?

—Algo así… en realidad no tengo ningún bey pero he visto batallas. 

—Deberías probar… no hay muchos bladers por aquí.

—¿Me prestas tu bey…? — una mirada de Jean respondió a Ramiro con un rotundo "no" —Traeré un beyblade para pelear ¿Que te parece?

—Digo que perderás, solo con ver tu cara puedo saberlo.

—…Ya sé que soy horrible pero no me lo digas tan a la cara —Ramiro se levantó y comenzó a irse —Vendré con algo bueno!

—Veamos con que Ragnaruk aparece…

Al llegar a su casa Ramiro investigaría sobre donde comprar un beyblade pero su búsqueda se vió interrumpida por el sonido de una llamada de su teléfono.

—¿Aloh? — Ramiro murmuró poniendo el manos libres.

—Rami ¿Cómo vas? — era Samy —Che estoy por salir de la escuela ¿Podemos salir a hacer algo?

—Justo ahora… — Ramiro miró la pantalla de su teléfono que mostraba una foto de la chica.

—Sucede que… debemos hablar.

Ramiro tapó el micrófono de su teléfono y procedió a gritar…

—COÑOOOOOO — procedió a destapar el micrófono —Voy para allá.

Ramiro recibió a Samy en la salida de su escuela con un saludo bastante seco, algo de lo que la chica no comentó.

—Bien… Por lo menos dime por quien me estás reemplazando — Ramiro frenó en seco.

—¿Eh? — Samy levantó una ceja —¿Que decís?

—¿No me ibas a decir que querías cortar conmigo?

—Eh… osea si pero no…

—…Vamos a un bar — Ramiro suspiró.

El par se sentó en un bar y pidieron un café para cada uno.

—Me vuelvo a Japón… y la verdad no tengo ganas de una relación a distancia — Samy rió nerviosa.

—Ya somos dos…

—Entonces eso… ¿Que te parece si tenemos una última cita y después cortamos? Si algún día vuelvo acá saldremos de nuevo.

—Por mi bien.

—…Te lo estás tomando muy bien — Samy apretó las piernas —¡Creí que te molestaría! ¿O es que acaso no te importo?

—No voy a ponerme mal por algo que está fuera de mi control… vamos a divertirnos hoy ¿Si? — Ramiro le sonrió a la chica.

Jean volvió a su casa, subió al ascensor viejo que la llevaba hasta el octavo piso, en el proceso ella miró su beyblade…

Al llegar a su casa entró y escuchó un ladrido, ella vió a su perro Oliver.

—Tenés hambre ¿No?

La chica alimentó a su mascota y comenzó a hacer una limpieza de toda la casa… pasó por la habitación polvorienta de sus padres, ellos no venían hace mucho tiempo, la habitación de su hermana llena de cosas que no sabía para que servían y su cuarto lleno de pósters de grupos de música que supuestamente escuchaba…

Luego de algunas horas apareció su hermana, Sofía, que se internó en su habitación sin intercambiar palabra alguna.

Jean miró su bey y lo apretó con fuerza…

Ya era de noche y los noviecitos se tenían que separar.

—Ahhh, hoy la pasé increíble — Samy empezó a caminar hacia atrás, encarando a Ramiro.

—Me alegro… — el chico sonaba melancólico —Te voy a extrañar.

—Pero si sigo acá… — golpeó la cabeza de Ramiro.

—Estoy hablando en futuro…

—Hablando de eso… ¡VAMOS! — agarró a Ramiro de la mano y empezó a correr.

Samy llevó a plano man a su casa a la cual entró para buscar algo pero después salió…

—Esto es para que me recuerdes — Samy mostró una pequeña cajita.

—…¿Puedo ver qué es?

— ¡CLARO QUE NO! — volvió a golpear a Ramiro —Cuando me vaya lo abrís.

—¿Por qué me seguís pegando? — Ramiro actuó como si llorara.

—Porque ambos sabemos que te gusta — Ramiro se sonrojó.

—Solo un poquito… si no duele no sirve.

—Si ajá, lo que digas — rió la chica —¿Cenamos en mi casa?

—Yo invito — Ramiro empezó a contar el dinero que había traído.

—No me refería a esa cena, tontito — Samy le susurró al chico.

— ¿Y entonces a cua…? Ah, "esa" otra cena.

Y ya se imaginarán consiguió la noche…

A la mañana siguiente Ramiro salió al balcón de la casa de Samy.

—Por dios ¿Tuve mi primera vez? JA, la puse antes que Franco — el plano se mentalizó a si mismo.

Ramiro aprovechó y miró la caja que Samy le entregó anoche… de reojo miró hacia atrás y vió que la chica aún dormía… por ello decidió abrir la caja.

Lo primero que encontró fue una nota.

"Holis ¿O es chauis? No sé no importa. Te hice este regalo a mano para que me recuerdes cada vez que lo uses acéptalo y… no lo rompas por favor.
Te amo, Samy"

Ramiro vió que debajo de la nota había algo envuelto en burbujas de poliestireno, algo que el chico distinguió con el puro tacto.

—¿Un beyblade…?

El rompió la capa de burbujas y tomó lo que había dentro, efectivamente era un bey.

—¿…Por qué tantas notas? — había otra nota pegada al bey.

"Convertir el miedo en fortaleza es lo más valiente que una persona puede hacer… te presento a Acuario"

—¿A…aqua como el agua? — Ramiro recordó aquella ola que se lo llevó de niño soltando el layer que cayó al suelo.

—Oh mierda…

Al siguiente día Samy se fue del país… por su lado Ramiro se estaba intentando mentalizar sobre su bey.

—No es de agua, no es de agua, no es de agua.

Ramiro llegó a la escuela y se chocó con Franco.

—Ey no tuve protagonismo en todo el…

—Cerra el otro — Ramiro pasó a su lado.

En el recreo Ramiro se dirigió hacia la terraza y ahí estaba Jean, viendo su bey girar.

—Estoy listo — Ramiro miró a su compañera de clases.

—Si eso es lo que crees… — Jean tomó su bey del estadio —Pelea contra mi Dragonoid.

El bey de Jean tenía una forma que recordaba a la de un dragón rojizo.

—Bien este es mi Acuario (no es de agua no es de agua no es de agua).

—Conseguiste un bey único…

—Hagamos esto… — Ramiro puso su bey en un lanzador que compró.

—Si es que tan rápido quieres perder — Jean se puso del otro lado del estadio —A la cuenta de 3 empezamos.

— (¿Cómo era que se gritaba antes de lanzar…? Carajo no me acuerdo) – Ramiro empezó a golpearse la cabeza en busca de una respuesta.

—3… — Jean no notó el gesto del chico —2… — ella respiró pero empezó a temblar.

—(¿Está temblando? ¿Qué está pensando?) — Ramiro se estaba comiendo el coco — Che si te sentís mal lo podemos hacer otro día, estás temblando como una mosca después de ser aplastada.

—No, continuemos — Jean respiró profundo y logró dejar de temblar —1….

—(Dios, no me hagas quedar en ridículo).

—LET IT RIP!! — Jean lanzó su bey a máxima potencia.

—LERIRI!! — Ramiro lanzó mal y lo que cayó al estadio fue el lanzador.

Jean quedó con sus ojos formando un "…"

—¡Te estaba probando! Ahora viene la de verdad — Ramiro mintió —(Así que es "Let it rip").

…

Algunos días después Franco encontró la terraza y al subir encontró a una multitud de gente…

—¿Que pasa acá?

Franco se intentó meter entre la multitud pero no pudo…

—¡DRAGO! — Jean gritó pero Franco no entendió porque.

—¡Aguanta, Acuario! — Ramiro exclamó pero Franco seguía sin entender.

—¿Que está pasando? — Franco le preguntó a un random.

—¡Es una batalla bey amigo!

—¿Una… batalla bey?

—¡Dragonoid con un final explosivo, Jean Parisi gana!

Franco vió un camino por el cual pudo meterse y llegar nada menos que a la primera fila de espectadores.

—No puede ser, los que están peleando son…

En efecto eran Jean y Ramiro.

—¡UNA MÁS! — gritó Ramiro que estaba arrodillado en el suelo.

—Solo hoy vamos 302 a 0… deja de humillarte — Jean murmuró — Solo estás quedando en ridículo.

—¿Y qué? — Ramiro se levantó —No me importa lo que el resto piense de mi. Yo voy a pelear contigo hasta vencerte porque… PORQUE YO NO ME RINDO!!

—Eh!? — Jean se sorprendió y las palabras del chico la dejaron pensando. 

—Así que beyblade… — Franco rió —Bien… haré que te rindas ante mis pies, Ramiro.

Al llegar a su casa Franco pensó como conseguir un Bey y tuvo una maravillosa idea así que tomó su teléfono.

—Hola, necesito ayu…

—FRANCO CREÍ QUE NUNCA LLAMARÍAS, LLEVAN 13 SEMANAS Y 2,5 DÍAS, OSEA 93,5 DÍAS QUE SON 2244 HORAS ENTONCES 134640 MINUTOS QUE TAMBIÉN SON 8078400 SEGUNDOS DESDE LA ÚLTIMA VEZ QUE ME LLAMASTE!!!!!!!! — se podían sentir los problemitas de Sofía hasta en su voz pero Franco no lo notó

—¡NECESITO CREAR UN BEYBLADE! — Franco interrumpió antes de que la chica siga gritando.

—¡ENTONCES VENÍ A CASA, ACÁ TENEMOS TODO!

—¡NO TENGO COMO IR, ESTÁN EN TIGRE!

—¡TE MANDO UN CHÓFER!

—¡¿NO HAY OTRA FORMA?!

—¡NO!

—¡DEJEN DE GRITAR! — se escuchó la voz de Franco Reina.

—¿Y si no qué? — Rey intentó provocar a su amigo más grande.

—Ya dejaste de gritar, gané — se escuchó una puerta cerrandose.

—Mi hermanito se fue — anunció Sofía —Ahí te mando un auto!

Franco se pasó esa noche y el día siguiente creando un beyblade que terminó y se fue corriendo a la escuela.

En el recreo Jean y Ramiro estaban peleando de nuevo pero esta vez fue distinto.

—¡LERIRI! — Franco apareció en el aire lanzando su bey.

El layer del bey cayó directo contra el estadio haciendo que el bey rebote y caiga en el ojo de Ramiro.

—¡HIJO DE PUTA ¿QUIÉN FUE EL GRACIOSO!? — Ramiro se agarró el ojo que estaba sangrando.

—Fui yo, que buen chiste fue — Franco no había notado el ojo de Ramiro.

—Pero… ¿Estás bien de la cabeza vos? — Jean miró a Franco —Casi le sacas un ojo.

—¿Que decís? Solo se está haciendo el exagerado, lo hace siempre.

—¡NO IMBÉCIL! — gritó Ramiro

— Uhh llamemos a los profes — dijo un random.

El lugar se fue vaciando hasta que quedaron los ahora 3 bladers…

—Te fuiste a la mierda… — Ramiro estaba apoyado en una pared.

—No lo hice a propósito — murmuró Franco.

—Pero lo hiciste — Jean miró al chico sordo.

—Ahora vas a tener que compensarme… — murmuró Ramiro.

—¿¡QUÉ!? Ni en pedo amigo.

—Deberías, es lo justo — Jean apoyó.

—QUE LA CHUPE LO JUSTO, YO NO LE VOY A DEBER NADA — Franco se fue enojado.

—Bueno, ya podés parar… — Jean miró a Ramiro.

—Si, me duele la muñeca — Ramiro se sacó la mano del ojo mostrando que estaba perfecto —Fue muy conveniente que justo hoy que teníamos que traer colorante rojo pasara esto.

—La cara de todos me dió gracia.

—Se ve que ya agarramos confianza ¿No? — Ramiro miró a Jean.

—Algo… ¿No estarás intentando hacer cosas sucias conmigo no?

—No gracias, ya tengo nov… bueno, tenía novia — Ramiro miró su bey —Además no sos de mi tipo.

—Espero que así sea, en cuanto sienta que quieres algo te rompo la cabeza.

—Igualmente.

—¿Y ese bey? Es el de el pibe ese — Jean señaló el bey de Franco en el suelo.

—Lo dejó así nomás… que personaje… — Ramiro tomó el bey de Franco —Parece un Kerbeus pero dorado.

— Aver? Dame dame — Jean extendió sus manos infantilmente haciendo que Ramiro se ría.

—¿Y el raro era yo? — le dió el bey.

—Mh… ya sé que nombre ponerle! — Jean miró el bey en profundidad.

—¿Pero Franco no le habrá puesto algún nombre ya?

—No sé pero por el momento será…

PERRITO!!!

Continuará…

Me dió flojera hacer la pelea de Jean y Ramiro así que me inventé eso del colorante rojo XD