Despues de ti.

No era la primera vez que pasaba, había ya vestido ropa de ese estilo por petición de su amado sueco, Ángelo siempre fue un poco más informal a la hora de vestirse, cosa que Afrodita no, pero algunas veces le pedía a su amado que lo hiciera por cuestiones de etiqueta y otra cosas extrañas.

Era un día especial, pero la melancolía invadía el alma de Ángelo, recordaba a la perfección la primera vez que uso uno de esos, un traje, negro completamente, brillante y suave, recordaba a la perfección la fecha: 7 de noviembre; recordaba el lugar y la ocasión: su boda con la persona que más amaba en el mundo, aquella persona que fue capaz de llevarlo al cielo sin despegar los pies de la tierra.

Un día demasiado especial despues de varios años, veía como aquellas prendas se acomodaban en su cuerpo, acaricio de manera inconsciente el anillo de bodas en su dedo y sonrió con tristeza.

—Si tan solo estuvieras aquí.

Sus palabras fueron llevadas por el viento, quizá hasta los oídos de su amado sueco, hace cuatro meses que lo había perdido, por culpa de unos desgraciados sin alma, su amada rosa había dado todo cuanto podía en ese momento para salvarle la vida a un niño que luego de ello se convirtió en su retoño.

Salió de casa con un ramo de rosas rojas en la mano, se adentro al frio y solitario lugar donde descanzaba su amada rosa, busco y encontró, se inclino y dejo salir todo lo que estaba ahí, dentro de el, dejo las bellas rosas en un florero cerca de la lapida d Afrodita.

—Feliz aniversario amor.

Se quedó un rato más en ese lugar, recordando los momentos que había pasado junto a su amado sueco, las peleas, las reconciliaciones, las risas, los juegos, las lágrimas, el amor que se tenían y que nunca de los nunca olvidaría, la promesa de encontrarse en la otra vida para poder seguir siendo felices y por supuesto siempre tendría en mente sus últimas palabras.

Deseaba con toda el alma al menos verlo de nuevo, ver su sonrisa y su ojos, perderse en el sabor de sus labios, pero sobre todo deseaba pasar la eternidad a su lado, daría lo que fuera por haberlo tenido a su lado solo un poco más, incluso renunciaría a su estilo de vestir solo por él.

Dan R