3.Acoso
Realmente, Seungyoun amaba los fines de semana. No había nada mejor que levantarse después de las cinco de la mañana (que es la hora a la que se tenía que despertar normalmente), dormirse tarde y no tener nada, absolutamente nada, de tarea que hacer.
Claro, si no fuera porque esa mañana, cuando se levantó a desayunar, su hermana menor, DaeJung, les hubiera comunicado a el, HyoYeon y Sung Woon que esa noche iba a tener una pijamada con sus mejores amigas, lo que significaba que tenían que llevarla en el auto a comprar pizza y snacks al supermercado, quizá también de compras por ahí, al karaoke, y, además, soportar sus gritos de fangirls y adolescentes casi toda la noche.
En cuanto escucharon esa noticia, Sung Woon dijo:
—Está bien, supongo que esta noche no dormiremos —hizo una mueca, casuando una risita por parte de la menor de los cuatro—. Seungyoun no es mayor de edad todavía, pero ya tiene su permiso para conducir, así que el las va a llevar.
—¡Hyung! —protestó el menor.
—Nada de "Hyung". Acata las ordenes de tu hermano mayor —lo miró severa HyoYeon.
—Está bien, noona —accedió a regañadientes el menor—. Yo solo, con cuatro fangirls de compras y en un karaoke. Suena estupendo. ¿Mínimo puedo decirle a Gyul que vaya conmigo?
—Gyul para esto, Gyul para aquello, ¿por qué no te casas con el de una vez? —se burló DaeJung mientras bebía de su té.
—Créeme que ya lo tiene pensado —comentó la mayor de los cuatro, disfrutando del sonrojo de el hombre menor de la casa—. ¿Quienes dices que van a venir, Dae?
—Ya no va a venir YeoJin porque ya no es mi amiga, ni HaNeul. Así que van a venir HeeJin, HyunJin nuestra prima y SooJung solamente.
—¿Quienes son HeeJin y SooJung? Nunca nos has hablado de ellas.
—Son mis amigas desde primer grado, unnie. Pero no habían podido venir la última vez porque estaban ocupadas estudiando. Aunque ya no van conmigo a la escuela porque ya se graduaron, así que asisten a la misma que Seungyoun-oppa.
—Pues claro, si es la que está más cerca de aquí, las demás quedan como a media hora. Nunca he oído hablar de ellas, seguramente son nuevas —dijo el aludido.
—De hecho, entraron este año.
—No entiendo por qué a tus amigas les gusta venir tanto, tengo entendido que una de ellas tiene mucho dinero. Deberían hacer ahí las pijamadas —comentó HyoYeon.
—Dicen que les gusta mucho el ambiente de aquí.
—Naah, yo creo que vienen por Hangyul —intervino Sung Woon. Su hermano menor lo miró mal.
—O por ti —se encogió de hombros el mencionado.
Tomó su teléfono, abriendo el contacto "JankYULie", mientras Sung Woon y HyoYeon salían de la casa, para que el primero la llevara al trabajo.
—¡Adiós, noona! —le gritó, oyendo como la puerta se cerraba detrás de él. Mandó un mensaje.
"Lee Hangyul!"
Recibió la respuesta hasta diez minutos después:
"Gracias por despertarme, hyung. Acabo de recordar que no he lavado mis boxers"
Ugh.
"A mi no interesarme eso, Seungyoun pedirte un favor" Replicó.
"Lee Hangyul querer saber qué favor es" Recibió como respuesta.
"Hermana de seungyounnie tener pijamada en la noche, seungyounnie deber llevar a fangirls de compras y al karaoke"
"Hangyuk querer saber a que Seung referirse"
"Acompañameeee, Gyul-yah!!" Suplicó.
"Quieres que vaya contigo y esas chicas? :0"
"Si >:D"
Esperanza ante todo.
"Está bien. Iré para revisar que no se aprovechen de mi bello hyung y de paso me quedo a dormir a tu casa :3"
"Gracias, Gyullie!"
"Pero deberás comprarme una rebanada de pizza y un paquete de banana milk!!!"
Aish, ese tipo era astuto.
"Trato hecho. a las siete en mi house". Y ahí dio por finalizada la conversación.
...
—¡Seungyoun-oppa! —Unos gritos lo sacaron de su sueño—, ¡Hangyul-oppa ya está aquí!
Él estaba tan tranquilo durmiendo. ¿Por qué? ¿Por qué no podía dormir más tiempo?
—¡Dile que pase! —le gritó, estrellando su cabeza contra la almohada de su habitación.
Escuchó los pasos acercándose a su habitación y cómo abrían la puerta, pero no le puso cuidado. Sin embargo, no se esperaba que alguien se tirara sobre el, causando que se rompieran sus huesitos (o eso sintió).
—¡Seungyoun-hyung, ya llegué! —Un grito perforó sus oídos.
—¡Ahhhhhhh! —se quejó, gritando—, ¡Mi espalda, estupidooo!
—¿Te lastimé, hyung? —al instante el peso se quitó de él y se acomodó a su lado en la cama—. ¡Lo siento mucho, hyung-ssi!
—Creo que me rompiste los huesos —Se levantó de la cama y se sentó, sobándose la espalda. Para después rodar y subirse sobre su estomago mientras le pegaba con su peluche de Rilakkuma—. ¿Has comido muy bien, verdad, niño?
— ¡Ah, ah, ah! ¡Lo siento, hyung-ssi! ¡Seungyoun-ah, por favor! —lo jaló de los hombros, atrayendolo hacia su rostro, donde dejó un casto beso en su nariz, provocando que el otro se volviera blandito de pronto y cayera a su lado. Le pasó una pierna por el torso y se abrazó a él como un peluche—. ¿Me perdonas por dañar tu cuerpito?
—Ya que —bufó el otro, peinando sus cabellos con los dedos—. Hangyul, voy a estar leyendo un libro, ¿ok? —se estiró un poquito y alcanzó su libro, sobre el que estaba una bolsa negra—. Ten —le entregó la bolsa—. Es lo que te traje de China.
—¿Qué es? —cuestionó, incorporándose. Tras ver lo que había dentro, sus ojos se iluminaron—. ¡Me trajiste mangas! ¡Gracias, Seungyoun! ¡Te amo!
—Si, si, yo también te amo. ¿Lo vas a leer?
—No, los voy a dejar para leerlos en mi casa. Ahora quiero descansar junto a hyung —dejó la bolsa al pie de la cama y le volvió a pasar la pierna.
Seungyoun no supo cuanto tiempo pasó en esa postura tan cómoda, con el muchacho abrazado a él mientras leía, hasta que oyó como tocaban la puerta de su habitación.
—¿Puedo pasar, oppa? —se oyó la voz de DaeJung.
—Si, pasa.
No levantó la vista, ni siquiera se mostró un poco cohibido. A su hermana no le importó, pero oyó un pequeño gritito. Fue ahí donde levantó la vista encontrándose con tres muchachas en el umbral de su habitación. Jamás había habido tantas chicas —o personas— casi dentro de su habitación, por lo que se puso algo nervioso. DaeJung pareció entender, por lo que les dijo a las muchachas algo que él no entendió y estas bajaron al primer piso.
—Como ya te diste cuenta, oppa, mis amigas ya llegaron —dijo la chica irónicamente.
El mayor se sonrojó, soltando una carcajada nerviosa. Se incorporó y, mientras sacudía al menor que parecía haberse quedado dormido, preguntó:
—¿Tienes las llaves del auto?
—Si —se las tiró y salió, no sin antes decirle que lo esperaba abajo.
...
Cuando Hangyul y Seungyoun bajaron las escaleras, el menor no se esperaba encontrarse, de nuevo, con esa chica sentada tranquilamente en la sala de el mayor.
¿Era acaso la chica del autobús una acosadora? ¿Cómo había averiguado que él iba a estar ahí, justo ese día? ¿Cómo había conocido a la hermana de Cho?
Su paranoia lo estaba volviendo —quizá— un poco loco.
¡El tenía miedo!
—¡Vamos, manos a la obra! —les dijo Seungyoun a las cuatro chicas que se hallaban en la sala—. La verdad no sé como se van a acomodar ustedes cuatro atrás, porque Hangyul tiene reservado el lugar de copiloto. ¿A donde vamos a ir primero? —cuestionó, caminando por la acera de la calle camino al auto.
—Vamos a ir de compras al centro comercial —respondió DaeJung mientras subían al auto.
...
Seungyoun y Hangyul llevaban aproximadamente dos horas siguiendo a cuatro muchachas locas por todo el maldito centro comercial. De Bershka a Forever 21 y luego de tiendas de discos a tiendas de cosas de idols.
Cuando, ya cargados de bolsas de DaeJung, estuvieron a punto de entrar a Etude House, Hangyul lo tomó de la mano y lo pegó, de forma dificil, a él.
—Seungyoun-hyung, ¿aprovechando que estamos aquí que te parece si comemos algo por ahí?
—Me parece bien —sonrió el otro—. Déjame decirle algo a Dae.
Fue corriendo hasta donde se encontraba su hermana.
—¿Qué pasa, oppa? —cuestionó la menor, una vez que estuvo ahí.
—Si encuentras algo de SHINee por aquí, ya sabes que hacer —le tendió las bolsas y un par de billetes, procediendo a salir corriendo de la tienda, dejando a la muchacha un tanto confundida.
Estuvieron un rato buscando un buen lugar y al final, sus estómagos decidieron entrar a un Subway, donde Hangyul pidió un sandwich de pechuga de pollo y Seungyoun de jamón, acompañado con dos sodas grandes. Tomaron asiento y esperaron unos minutos.
—Realmente tengo mucho hambre —se quejó Hangyul, sobando su panza—. Creo que podría comerme una vaca entera.
—¿No comiste, Gyul? —preguntó el mayor, un tanto preocupado.
—No... Mi madre está trabajando doble turno y KaHei sigue en la universidad —contestó el menor, jugando con unas llaves, intentado fingir indiferencia. Realmente, Seungyoun sabía que al chico le dolía un poco estar tan desatendido.
—Oh —comprendió el muchacho, estirándose sobre la mesa para quitarle las llaves al otro y tomarle la mano. Sonrió—. ¿Crees que ellas estén bien?
—¿Te refieres a las amigas de Dae? Si, por supuesto que si. Ya están bastante grandes y una de ellas ya anda pasando números de teléfono a chicos altos y guapos.
—¿A qué te refieres...?
—La chica de la camiseta rosa es la misma chica que vimos en el autobús el primer día de clases y la que me encontré en la fila de la comida el mismo día.
—¿Ah, enserio? ¡Daebak!
—No quiero sonar paranoico, pero tengo la ligera sospecha de que... Ven, acercate, acercate —el mayor acató la orden—, es una acosadora.
El otro se separó y cubrió su frente con su mano, sonriendo.
—Eres todo un caso, Han.
Cuando salieron después de comer, se dirigieron a Etude House, donde se supone que habían dejado a las chicas.
Para su sorpresa, ahí no estaban.
Al instante, tomó su teléfono para preguntarles su ubicación, recibiendo como respuesta que se encontraban en una tienda Pull&Bear.
¡Ellos realmente tuvieron que recorrer un kilómetro en busca de esas niñas!
...
Llegaron a la casa de SeungYoun cargados de bolsas de compras, con dos cajas de pizza e increíblemente cansados, dejando todas las cosas en la entrada y acostándose en un sillón de de dos plazas a descansar. A pesar de que hubiera otro desocupado en frente, ellos —de una forma desconocida— habían logrado acomodarse abrazados.
—¡Realmente ustedes son un caso! —exclamó HyoYeon, que había salido de no-sabia-donde.
—Ni que lo digas, unnie —resopló la menor de la casa.
...
A veces, a DaeJung le molestaba que esos dos fueran tan obvios y al mismo tiempo tan descarados para no decir nada sobre lo que obviamente tenían. Ella sabía que en el lugar donde vivían era bastante común que hubiera tanto contacto físico entre personas del mismo sexo, pero eso ya era demasiado, ¡ellos parecían una clase de pareja recién casada y con un hijo! ¡Y lo peor era que HeeJin-unnie ya le había preguntado si ellos dos tenían más que una amistad, a lo que ella, un tanto confundida y nerviosa había contestado un "No, no, p-para nada. Ellos solo son mejores amigos".
Incluso HyoYeon-unnie y Sung Woon-oppa parecían cansados, pero ellos al parecer les causaba gracia la situacion. Sin embargo, a la menor de la casa no le divertia en absoluto: ¡ella quería que su hermano o ya se consiguiera otra pareja que no fuera el menor o ya le plantara un beso a Hangyul en los labios!
Incluso, a veces se preguntaba que tanto hacían cuando se encerraban en la habitación de su hermano o cuando el chino se quedaba a dormir a su casa —como esa vez, que se fueron a dormir antes de las diez de la noche, alegando que tenían sueño—.
Y al parecer si que tenían sueño, por que en las seis horas mas que estuvo despierta, no oyó un solo ruido proveniente de la habitación de su Seungyoun.
///
Mis datos aún sobreviven 🤧
Ya salio el reality de FLASH ¿lo están viendo?
Yo aún tengo que esperar 😭
En otras noticias Hangyul y Seungyoun son compañeros de cuarto, gracias mundo
Faltan tren días para el debut, lloro
El martes toca capítulo así que les tocará aguantarme fangirleando y llorando sorry
Priki adiós 🐅🌈
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top