''Ella compró otro.''

''¿Qué?'' Yoongi cubrió sus ojos con una mano a la vez que alzaba la vista hacia Jimin, que se paraba con su espalda hacia el sol.

''Ella compró otro perro.''

''Tu madre.''

''Yup.'' Jimin se hundió a su lado y se tumbó. Su cabeza sobre el regazo de Yoongi. Yoongi alborotó su cabello.

''¿Comiendo?''

''Por supuesto,'' dijo Jimin. Estaba orgulloso de si mismo. Se sentía mucho mejor y más sano, su cuerpo rejuvenecido. Especialmente desde que Yoongi lo había estado animando a beber más agua también.

''¿Te animas a nadar más tarde?

''Tal vez.''

Yoongi tarareó en respuesta. Acarició el cabello de Jimin fuera de su rostro, y el chico se relajó. Él sopló un beso a Yoongi quién rodó los ojos pero rio. Contento, Jimin terminó quedándose dormido.

Despertó unas horas después con la piel caliente, sus brazos enredados en Yoongi. La cabeza de Yoongi estaba en su pecho y Jimin suspiró. El sol había alcanzado apenas la mitad del cielo, pero Jimin sentía que había dormido por años.

''Urgh'' se quejó. ''Tengo que ir a cuidar de ese perro.''

Con cuidado, tomó la cabeza de Yoongi y lo acomodó en la arena. Pero la sirena despertó de todas maneras.

''Quedate.'' Yoongi se había ido por los últimos dos días, al mar. Era evidente que había extrañado a Jimin. Jimin lo había extrañado también. Sabía que era estúpido. No podían pasar dos días sin suspirar por el otro.

''No puedo'' dijo desanimado. ''Tengo que ir a cuidar del perro.''

''¿Sabes? Podrías-''

''¡No!'' Jimin interrumpió su sugerencia. ''No te vas a comer a mi perro... De nuevo.''

''Hey, era solo una idea.''

''Sí, y por un segundo lo estaba considerando.''

''¿En serio?'' Yoongi se irguió esperanzado.

''Sí, pero no te traeré a mi perro a propósito para que lo mastiques.''

''Oh.''

Jimin se acercó y golpeó su nariz con carillo. Yoongi le frunció el ceño.

''Además, es mucho más grande que el otro. Dudo que puedas comértelo todo.''

''Te sorprenderías'' sonrió Yoongi.

''Suficiente, oh dios mío'' pero Jimin se reía, doblado sobre la arena.

Era un día brumoso y estaba divirtiéndose. Jimin no quería irse.

Se sentía un poco molesto sobre su madre insistiendo en conseguir otro perro, a pesar de que ella no cuidaría de él. Tanto su madre como su padre estaban ocupados todo el día en el trabajo. Él tendría que volver a la universidad pronto, por lo que quería pasar el resto de su tiempo con Yoongi, y sus amigos.

Había conseguido exitosamente partir su tiempo entre ir a la playa y encontrarse con Taehyung y Jungkook. Y era divertido, a pesar de que muy seguido terminaba girándose o protestando cuando ambos se toqueteaban mucho en público.

Todos iban a la misma universidad, asi que Jimin no estaría solo cuando volviera. Pero extrañaría a Yoongi.

Aún no le había dicho a la sirena que se marcharia pronto. Yoongi sabia poco sobre ese tipo de cosas, a pesar de preguntarle a Jimin sobre el mundo por el mundo encima del mar. Por supuesto, Jimin le había contado que estudiaba danza, y que estaba de vacaciones. Pero no le había dicho tenía que irse por un tiempo.

No estaba seguro de como lo tomaría Yoongi. Aún había algo acerca de él que Jimin no podía comprender.

--

Al día siguiente, Jimin se sentaba dibujando en la arena con Yoongi cuando su teléfono comenzó a sonar.

Yoongi no había visto un teléfono antes, y Jimin se lo estaba mostrando. Yoongi lo había girado una y otra vez en sus manos, inspeccionando el pequeño objeto rectangular.

''A diferencia del libro'' dijo Jimin. ''Si dejas caer arena o agua en él, se muere.''

Ante la expresión confundida de Yoongi, Jimin explicó que este dejaría de funcionar si algo, incluso si fuese algo pequeño, le pasará, porque era sensible. Yoongi parecía entender entonces. Fue más cuidadoso con el teléfono después de ello.

Cuando Jimin lo encendió, Yoongi sólo parpadeó a la pantalla brillante.

Jimin rápidamente le mostró como funcionaba, cambiando una y otra vez entre simples apps de juegos, antes de jadear y abrir la cámara.

''Yoongi, ¡oh mi dios! No sabes acerca de las cámaras, ¿cierto?''

Yoongi sacudió su cabeza, perplejo.

''Es como,'' buscó por las palabras. ''Es cómo un reflejo. ¿Sabes? Cuando te ves a ti mismo en algo brillante.''

Obtuvo un asentimiento de la sirena.

''Si, entonces esto es como un reflejo permanente.'' Jimin colocó su cámara frontal, y presionó su cara junto a la de Yoongi. Su mano sosteniendo su teléfono enfrente de ambos, sonriendo. Se tomó algunas fotos con un Yoongi impresionado, antes de sentarse derecho y checar su rollo de fotos.

Le mostró a Yoongi una de las fotografías, y de la nada, la sirena se mostró fascinada. Sostuvo el teléfono con fuerza. Curiosamente estudiándolo.

Jimin le sonrió emocionado cuando este lentamente alzó la vista. Después le mostró a Yoongi más fotos de las que había tomado. Algunas en la playa, el paisaje, los campos verdes al otro lado de su casa. Luego otras de si mismo, Taehyung y Jungkook.

''Esos son mis amigos'' explicó. ''Ellos están juntos.'' Jimin bloqueó su teléfono.

De repente se enderezó y lo encendió de nuevo, rápidamente tecleando su contraseña. No había wifi en la playa, pero Jimin estaba dispuesto a sacrificar sus datos por esto.

''Yoongi, esto es una app'' comenzó a explicar. ''Es como cuando tomamos fotos hace un rato, pero...'' balbuceó y sostuvo el teléfono frente a ellos una vez más. Yoongi fijó la mirada, y levantó sus manos hacía su cabeza, buscando las orejas de perro que habían aparecido en su cabeza. Palpó su cabello confundido.

Jimin rio. ''Es la app, Yoongi. No tienes orejas de perro, solo aparecen en la pantalla.''

Terminaron tomándose muchas fotos, Yoongi confundiéndose cada vez que su cara se distorsionaba, se cubría de brillos o terminaba con flores en el cabello. Jimin mostró una sonrisa diferente, una nueva pose cada vez, mientras Yoongi tentativamente miraba a la cámara.

Entonces, el teléfono de Jimin comenzó a sonar.

Yoongi había saltado del susto, ojos abiertos y retrocediéndose.

Jimin tomó el teléfono y lo contestó. No lo traía consigo usualmente, pero Taehyung le había dicho que lo llamaría para decirle cuando y donde se verían aquel día. Jimin le había dicho esto a Yoongi, pero por la mirada en su rostro, parecía que la sirena aún no estaba muy preparada.

''¿Hola?''

Jimin se alejó del teléfono cuando Taehyung le gritó su nombre en la oreja. Siseó. Jimin no quería volverse sordo prematuramente si podía evitarlo.

Por el rabillo del ojo, Jimin podía ver a Yoongi observándolo. Su mirada calculadora. Sin embargo, cuando Jimin se volvió a verlo con una sonrisa, ya no estaba.

Resultaba, que Taehyung y Jungkook habían decidido impulsivamente salir ahora en este mismo momento y ya estaban de camino a casa de Jimin. Jimin maldijo.

''Okey, claro, estaré ahí pronto. Okey, adiós.'' Jimin terminó la llamada y miró a Yoongi con culpa.

''Cambio de planes, me quieren ahora.'' Jimin puchereó. ''Lo siento Yoongs. Tengo que irme.'' Dijo con tristeza.

Yoongi se encogió de hombros. Sus labios se contrajeron hacia arriba al final.

Cuando Jimin se volvió, Yoongi atrapó su muñeca.

''¿Me ves aquí a medianoche?'' preguntó.

''Claro.''