Bellwood, Nueva York

Era una tarde cualquiera en la ciudad que nunca duerme. Ben Tennyson/Ben 10 estaba conduciendo en su auto, junto a Kara Zor-El/Supergirl, como una forma de patrulla en Bellwood. Mientras lo hacía, bebía un smoothie cada tanto.

Ben: Ay, el sabor de uva no sabe igual desde que usé al Alien X para rehacer el universo.

Supergirl: Y no crees que el Sr. Smoothie sólo... ¿cambió la receta?

Ben: ¿Cómo es que aún no puedes creerme?

Supergirl: Teniendo en cuenta que no hay nadie, absolutamente nadie que recuerde la destrucción del...

En ese momento, el auto de Ben casi es arrollado por un camión fuera de control. Al fijarse mejor, vieron que tenía una B negra en medio de un cuadrado rojo; un logo bastante conocido para el dúo neoyorkino.

Ben: ¡Es el camión del Sr. Baumann!

El castaño dio un giro para moverse en dirección hacia donde fue el camión de Baumann, hasta que lograron alcanzarlo en un pequeño embotellamiento.

Ben: ¡Sr. Baumann, ¿está bien?!

Baumann: Todo está bien, Ben... – dijo nervioso y temblando.

Repentinamente, la cabeza del vendedor fue tomada desde atrás para hacerla estrellar contra la bocina de su vehículo. Detrás de él, se reveló la figura del villano físico-culturista Fisttrick.

Fisttrick: Ya lo oíste. No te metas, bro.

Baumann hizo marcha atrás su camión y fue en dirección contraria de donde vino, pero Ben hizo lo mismo con su auto y los siguió de cerca.

Ben: Fisttrick. ¿Cómo salió tan rápido de prisión?

Supergirl: No lo sé, pero sí sé cómo regresará rápido a prisión.

La Chica de Acero bajó del auto y voló hacia el camión de Baumann. Mientras pasaban por una construcción, Fisttrick sacó una pistola láser y abrió fuego contra Kara; pero las balas sólo rebotaron en ella.

La kryptoniana se puso enfrente del camión, y lo detuvo haciendo un poco de fuerza. Luego, moviéndose a gran velocidad, sacó a Fisttrick del camión y lo ató con unos alambres que había cerca.

Fisttrick: Ay, rayos – dijo frustrado.

Ben: Así es – dijo llegando al lugar – Ya te atrapamos, bro.

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Cuartel General de los Plomeros

Más tarde, Ben y Kara llevaron a Fisttrick a la base de los policías intergalácticos. Al llegar a la entrada, los recibieron Rook Blonko y otros Plomeros.

Rook: Fisttrick, tienes derecho a guardar silencio; o si eres telépata, el derecho a detener tus pensamientos. Tienes derecho a...

Ben: Bla, bla, bla – dijo interrumpiéndolo – ¿Pueden hacer los procedimientos aburridos cuando nos vayamos?

Rook hizo una mirada extraña, a lo cual Kara le levantó su mano en señal de que no le tome importancia. Los Plomeros sólo tomaron en custodia a Fisttrick mientras el dúo neoyorkino ser retiraba de la base.

– Suelten a mi cliente de inmediato – sonó una voz de la nada – Aquí abajo.

Al bajar la mirada, Ben y Kara se encontraron con un Galvan algo regordete. Vestía un traje formal, sin zapatos, con saco y pantalones negros, camisa blanca, y una corbata con rayas horizontales verdes y negras.

En sus manos traía un pequeño maletín negro, con cuatro círculos verdes en las esquinas que se unían a uno en medio; formando una especie de X. El Galvan abrió el maletín y este se transformó en una pequeña plataforma con al que se movía en el aire.

– Chadzmuth. Sin una inicial, sin apellido, sólo Chadzmuth. Abogado litigante intergaláctico – dijo flotando a la altura de Ben y mostrándole su identificación holográfica – Ahora: entiendo que mi cliente fue detenido de manera no apropiada, no fue detenido por Plomeros, y que no le leyeron sus derechos por completo.

Ben: ¿Sí? Pues tu "cliente" también secuestró un camión repartidor, y atacó a mi novia con un arma.

Max: Déjalo ir, Ben – dijo llegando al lugar junto al magistrado Patelliday.

Patelliday: Desafortunadamente, Chadzmuth tiene razón en su caso. No tenemos ningún derecho a detenerlo.

Max: Sí, igual que la última vez.

Ben: ¿Qué? – dijo impresionado – ¿Así es como pudo salir de prisión tan rápido?

Rook: Parece que no sólo Fisttrick.

El Revonnahgander veía una lista con los clientes de Chadzmuth, entre los cuales también figuraban Burbucasco y Sunder. Ambos criminales fueron liberados de sus celdas.

Chadzmuth: Esos son mis otros dos clientes. Voy a firmar para que los liberen.

Ben: Pero eso no es justo – el Galvan rió un poco.

Chadzmuth: El universo no es justo, niño – luego firmó una tablet verde con su pulgar, traída por una Plomera con traje rojo.

Ben: No sé cuál sea tu ángulo, pero...

Chadzmuth: No hay un ángulo, señor Tennyson – dijo volteando a verlo – La mayoría de los Galvanes usan su cerebro en pos de la ciencia. Yo he dedicado el mío a volverme la mejor mente legal del universo. No hay un truco o tecnicidad menor en leyes de cualquier planeta, de cualquier galaxia que no pueda encontrar y explotar.

Burbucasco y Sunder fueron liberados de sus esposas, y se reunieron junto a Fisttrick en la entrada junto a Chadzmuth. Sin embargo, es sus miradas se veía que no iban a parar de hacer fechorías.

Chadzmuth: Todos merecen un juicio justo. Llámame si necesitas mis servicios – dijo arrojándole una tarjeta holográfica verde con su número.

Ben: Sí, claro – dijo con ironía para después intentar romper la tarjeta, pero encontró que era muy dura; por lo que la guardó a regañadientes en su bolsillo trasero.

Supergirl: Espero que no nos topemos con él otra vez.

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Se toparon con él otra vez. Varias veces.

La segunda vez fue cuando un Ben transformado en Upchuck Perk detuvo a Thunderpig de robar un banco. Chadzmuth lo liberó apenas fue llevado a prisión.

La tercera vez cuando Ben transformado en Muy Grande detuvo a Trombipulor de atacar el Sr. Smoothies. El Galvan también lo liberó mientras el héroe descargaba su furia saltando sobre una tablet.

La cuarta vez cuando Supergirl detuvo a Fistina en Pueblo Bajo. La propia kryptoniana tuvo que detener a Ben también de atacar a Chadzmuth, y que este lo denunciara.

Ahora, durante la noche, un alienígena asaltaba a mano armada al vendedor de turno del Sr. Smoothies. Este hecho provocó que todos los presentes huyeran del lugar asustados.

– Me llevaré estos smoothies, y el efectivo que tengas.

Sin embargo, el delincuente sintió un vehículo llegar detrás suyo. Al voltear, vio a Ben 10 y Supergirl listos para detenerlo, por lo que el ladrón se rindió y levantó sus manos. Pero antes de que el dúo pudiera hacer algo, Chadzmuth apareció flotando entre ellos.

Chadzmuth: Ustedes no tienen derecho de acosar a mi cliente.

Supergirl: Ay, por favor, estaba robando smoothies – dijo molesta.

Chadzmuth: Presuntamente – dijo con una sonrisa maliciosa.

Ben: ¿Sabes? Son truhanes como tú los que hacen quedar mal a los abogados – dijo agachándose para estar a su altura. El Galvan sólo rió un poco.

Chadzmuth: Jovencito, ¿no sabes que los abogados siempre han tenido mala reputación? Y yo proveo un servicio importante, y todo el mundo tiene derecho a la mejor defensa posible.

Supergirl: Bueno... eso es cierto – admitió a regañadientes.

Chadzmuth: ¿Quién sabe? Tal vez un día, hasta el gran Ben Tennyson requiera mi asistencia.

Ben: Eso... jamás... pasará.

– Ben Tennyson.

Repentinamente, una voz grande, que mezclaba el tono de una mujer y un hombre, resonó por todo el lugar. Un gran portal se abrió en el cielo nocturno de Bellwood, y de él emergió un pilar de piedra con varios rostros alrededor.

De los ojos de estos rostros, salieron varios Celestialsapien de gran tamaño con armaduras y lanzas con dos puntas en las manos. Una luz vino debajo del pilar con rostros, y emergió la figura de otro Celestialsapien; pero este tenía barba, dos cuernos en forma de casco, ojos blancos, y su lanza emitía una energía entre sus dos puntas.

Este Celestialsapien era conocido como Starbeard, jefe de la Corte Intergaláctica.

Starbeard: ¿Creíste que nadie notaría cuando utilizaste tu forma Celestialsapien Alien X para recrear todo el universo y todo lo que incluye?

Ben: Te lo dije – le dijo a Kara cruzando sus brazos de forma orgullosa.

Starbeard: Estás acusado de alterar la realidad sin autorización, y por eso... debes pagar – el héroe se alarmó por esto – Ben Tennyson, prepárate para tu juicio.

Después de eso, los Celestialsapiens volvieron a las cabezas del pilar; incluyendo a Starbeard, y todos regresaron por el portal. Cuando este se cerró, todo pareció quedar como si nada hubiera pasado.

Ben: Hah, no estuvo tan mal – repentinamente, fue teletransportado enfrente de Kara y Chadzmuth.

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Corte Intergaláctica

Ben fue teletransportado hasta el banquillo de los acusados del máximo tribunal legal del universo. Este banquillo tenía dos asientos y flotaba en un disco dorado.

La Corte Intergaláctica estaba ubicada en una parte vacía de la galaxia. Sólo se veían estrellas, y grandes brumas rojizas y moradas a lo lejos. A una buena distancia, se podía observar un planeta rojo con anillos, similar a Saturno.

La Corte en sí era un gran pilar dorado flotante, conde el juez iba sentado en la punta superior; y arriba de él, tres pantallas holográficas. Dos platos voladores dorados más había también, donde estaban el fiscal y el jefe de la Corte. Alrededor, había un gran anillo dorado con varias aletas con pequeños propulsores para mantenerlo a flote. Como dato adicional, varias cámaras doradas flotaban alrededor de toda la Corte.

El juez era conocido Domstol. Era de la misma especie que el comandante del ejército Incurseano Raff. La diferencia es que su cabeza era dorada en vez de plateada. Ben ya lo había conocido previamente defendiendo un caso junto a Kevin.

El fiscal era conocido como Bailiff, y era de la raza Highbreed. Su apariencia era similar a cualquiera de su especie, pero era más musculoso en el torso y los brazos. Llevaba una placa con una estrella en el pectoral izquierdo, y un cinturón con algunas bolsas y una espada enfundada.

Bailiff: Caso de la Alta Corte Intergaláctica N° 1016-058 – dijo viendo algunas pantallas holográficas en su banquillo – El universo contra Ben Tennyson entra en sesión.

Domstol: Benjamin Kirby Tennyson, la fiscalía declara que con toda intención y conocimiento alteraste el tejido de la realidad, en violación de la ley de preservación de multi-universo – dijo también leyendo unas pantallas holográficas – ¿Cómo te declaras?

Ben: ¡Inocente! Digo, por favor, sí me recuerdas. ¿No, juez Domstol? – intentó persuadir al juez – Dom, tengo el Omnitrix. He salvado al universo, ¿no te suena?

Domstol: Claro que sí recuerdo y admiro al gran Ben Tennyson. Sin embargo, como esta es una demanda múltiple masiva – dijo mientras una gran pantalla se mostraba detrás de la Corte, con la imagen de cientos de alienígenas – Que involucra a todo el universo y a sus habitantes, su destino no depende sólo de mí. Este juicio se transmite a cuatro trillones de seres que votarán por tu inocencia o culpabilidad – dijo mientras las cámaras transmitían todo el juicio en varios planetas, incluida la Tierra – Pero espera, hay más. Guardia...

Un poco más abajo del banquillo del fiscal Highbreed, se apareció en el pilar de la Corte lo que parecía ser una balanza. En medio de la misma, estaba lo que parecía ser un rostro divido en dos colores: negro a la izquierda, y blanco a la derecha. Dicho rostro tenía los ojos del color opuesto de su lado, así como también cuatro púas alrededor. A los costados, dos círculos negros se visualizaban.

Bailiff: Este aparato es capaz de mantener una cuenta 100% correcta de cada voto en el universo en tiempo real.

Mientras el fiscal hablaba, en el círculo izquierdo de balanza se encendieron unas luces rojas, y en el derecho unas luces verdes. Como una muestra de prueba, la balanza se inclinó hacia ambos lados para probar el punto del fiscal.

Domstol: Y un afortunado votante ganará un fabuloso premio. ¿Tú abogado está presente o te defenderás solo?

Ben: ¿Cómo se supone que encuentre...? – decía mientras sacaba su teléfono para pedir ayuda, pero también sacó sin querer la tarjeta de Chadzmuth – Ay no, ya qué.

El castaño presionó la tarjeta, esta se dividió, y una imagen holográfica verde de Chadzmuth se hizo presente.

Chadzmuth: Hola. Esta es la oficina de Chadzmuth, abogado intergaláctico de la ley.

Ben: Escucha, lamento haberte llamado un truhan. Yo... ah... te necesito – dijo muy a su pesar – Ay... por favor – antes de que siguiera rogándole, Chadzmuth se teletransportó a su lado.

Chadzmuth: Acepto el caso – luego abrió su maletín para convertirlo en su plataforma – Tienes suerte de que yo jamás pierdo.

Ben: ¿Y cuántos casos has defendido ante la Corte Intergaláctica?

Chadzmuth: ¿Incluyendo este? – hizo una cuenta en su cabeza – Uno – esto preocupó a Ben, haciendo que se tome la cabeza – Esto será muy sencillo. Sólo tienen testimonios de carácter, no te preocupes.

Bailiff: El universo llama a declarar al señor Ignacius Baumann.

En el banquillo del estrado, el cual también era dorado y ubicado en la parte baja del pilar de la Corte, se teletransportó el vendedor.

Baumann: ¿Q-Qué ocurre? ¿Dónde estoy? – luego miró a un alarmado Ben – ¿Ben? Debí saberlo... – dijo molesto, pero fue interrumpido por la imagen del juez en una pantalla holográfica.

Domstol: Por favor, sólo cuente alguna interacción personal que haya tenido con el acusado.

Ben: Estoy perdido – dijo preocupado y escondido en su banquillo.

Unas placas metálicas que estaban detrás del estrado se acercaron a la cabeza de Baumann, y en las pantallas se vio los recuerdos de él y Ben cuando destrozó varias veces su auto en el pasado; para finalizar con la destrucción de su casa por la caída de uno de sus camiones desde el espacio.

Baumann: Ese muchacho me ha vuelto loco con sus tonterías toda la vida.

Domstol: Veamos qué dicen nuestros espectadores en casa – la balanza se inclinó del lado izquierdo.

Bailiff: La tendencia indica que claramente es culpable.

Ben: ¡Sálvame! – le suplicó a Chadzmuth, y este se acercó a Baumann.

Chadzmuth: Ahora, señor Baumann, ¿honestamente cree que mi cliente es capaz de crear un duplicado de todo el universo y todo lo que contiene?

Baumann: Ben Tennyson es incapaz de hacer nada que no sea destruir mi propiedad personal – dijo con enojo y resentimiento.

Chadzmuth: No tengo más preguntas, señoría – dijo tranquilo.

Ben: Ah, eso pudo haber sido mucho peor.

Starbeard: Señoría, la fiscalía quiere llamar a su propio testigo – en ese momento, al estrado fue teletransportada la Chica de Acero.

Ben: ¡KARA! – exclamó emocionado.

Supergirl: Ben, voté por ti hace poco. Por favor, díganme que gané ese fabuloso premio – dijo mirando a todos lados.

Starbeard: Kara Zor-El, ¿diría usted que su pareja, Ben Tennyson, es alguien que disfruta no hacer caso a regulaciones y procedimientos?

Supergirl: Pero claro que no – dijo segura y firme, lo que alegró a Ben – Mi novio no podría disfrutar de eso porque él no tiene idea de lo que son, así como de muchas otras cosas – la sonrisa de Ben se desvaneció, mientras la balanza se inclinaba del lado izquierdo.

Starbeard: No más preguntas, señoría.

Chadzmuth: La defensa desea interrogar a esta testigo – dijo acercándose a Kara – Ahora, por favor, concentre sus pensamientos y describa a la Corte el presunto crimen del que presuntamente fue testigo.

Las placas mostraron en las pantallas el día en que el Anihilaarg destruyó el universo; pero no se vio dicho suceso, de igual forma cuando Ben salvó el día como Alien X.

Supergirl: El Anihilaarg sólo resultó ser una farsa. El universo y todo lo que contiene nunca fue destruido.

Chadzmuth: El universo, y todo lo que contiene, nunca fue destruido. Señoría, la fiscalía ha fracasado en demostrar no sólo que mi cliente no cometió el crimen del que se le acusa, sino que dicho crimen nunca se cometió – la balanza se inclinó del lado derecho.

Ben: ¡Sí, inocente! – celebró levantando los brazos – ¡Gracias, universo!

Starbeard: La fiscalía quiere llamar a un último testigo al estrado: Benjamin Kirby Tennyson.

Sorpresivamente, el castaño intercambió lugares con la kryptoniana. Ahora Kara estaba en el banquillo de los acusados, mientras que Ben estaba en el estrado.

Starbeard: Presento ante la Corte la Prueba A: un smoothie de uva del Sr. Smoothies – dijo mientras un vaso con dicha bebida se materializó frente a Ben – Señor Tennyson, ¿podría, por favor, beber la Prueba A para la Corte?

Ben: ¿Yo? De hecho, no tengo sed – dijo nervioso.

Domstol: Beba el smoothie, señor Tennyson – le dijo desde la pantalla holográfica.

El castaño se quedó mirando el vaso, como si tuviera un duelo de miradas con el rostro dibujado en el mismo. Al final, terminó tomando el vaso y bebiendo el smoothie.

Starbeard: ¿Usted nota algo raro en ese smoothie? – Ben estaba notablemente nervioso – ¿Algo diferente?

Ben miró a todos lados de forma nerviosa, como si todas las caras presentes en la Corte y en la pantalla grande lo asecharan con que dijera la verdad. Y al final...

Ben: ¡Está bien, lo admito! ¡No sabe igual! – dijo levantando los brazos con culpa – Llegué tarde a salvar al universo y todo lo que contiene de la destrucción, así que usé a Alien X para crear un duplicado. ¡PERO NO PUDE IGUALAR EL SABOR A UVA! ¡AY, NO PUDE! – puso su cabeza contra el estrado mientras lloraba, luego le dio otro sorbo al smoothie y siguió llorando.

Starbeard: Señoría, la fiscalía descansa.

Ben fue teletransportado nuevamente al banquillo de los acusados, donde Kara le tomó un hombro y una mano como forma de consuelo.

Chadzmuth: Tranquilo, chico. En el peor de los casos, habrá que hacer restituciones.

Ben: ¿Restituciones? Pero significa que el universo y todo lo que contiene será destruido, ¡de nuevo!

Chadzmuth: Relájate, falta mi argumento final. Ahí es cuando siempre me los gano – luego rió un poco mientras se acercaba al centro de la Corte – ¡Señoría!, y seres indeterminados del universo: todos sabemos que los Celestialsapiens cambian el universo tan seguido como mi cliente cambia de camiseta – Ben agarró su camiseta en varias partes mientras Kara tapaba su nariz – Bueno, mal ejemplo; pero mi punto, y sí tengo uno, es que los Celestialsapiens cambian el universo todo el tiempo. Incluso la apariencia y voz del Primer Pensador Azmuth ha cambiado al menos tres ocasiones – en las pantallas sobre la Corte, aparecieron tres imágenes de Azmuth – Para lo que sabemos, los Celestialsapiens están cambiando el universo en este momento. Yo les pregunto, damas y caballeros; y especies más agrestes: ¿está bien acusar a un delgado y debilucho humanito...?

Ben: ¡Oye! – dijo levantando su puño.

Chadzmuth: ¿... como responsable de las acciones de toda una especie de seres omnipotentes? Creo que no, ¡no les digo! – dijo levantando sus brazos para enfatizar, y Kara aplaudió su discurso – Y ahora, prepárate para la magia – le susurró a Ben.

Domstol: ¿El universo llegó a un veredicto?

Unas cuantas luces verdes se encendieron en el lado derecho, algo que alegró al dúo neoyorkino y el abogado Galvan; pero todas las luces rojas del lado izquierdo se encendieron, inclinando la balanza hacia este lado. Este hecho alarmó de sobremanera a Ben y Kara, pero dejó a Chadzmuth pensativo.

Domstol: El universo ha hablado; y te declara, Benjamin Kirby Tennyson, culpable con toda culpabilidad – dijo luego de golpear su martillo – Tú, RookBlonko148, ganaste una estrella – la imagen del Revonnahgander celebrando apareció a un costado del juez.

Supergirl: Rook... – dijo en un susurro molesta.

Ben: ¡NO! ¡No es justo!

Bailiff: Silencio, o vaciaré la Corte – dijo mientras el juez golpeaba su martillo.

Chadzmuth: Los tengo donde los quiero. Todo es parte del plan.

Ben: ¿Que el universo me encontrara culpable es parte de tu plan?

Chadzmuth: Si le parece a la Corte, mi cliente quiere invocar el Juicio Tetramand de Combate – le dijo al juez desde la pantalla en su asiento – Es tu turno, chico – le susurró a Ben.

Ben: ¿Ah, sí? Es que... yo... no puedo controlar en qué me va a convertir el Omnitrix – el Galvan se sorprendió haciendo un chirrido.

Chadzmuth: Pudiste decirlo antes de que basara todo tu caso en eso – dijo molesto.

Ben: ¿Cómo iba yo a saber que...?

Domstol: ¿Algún problema, caballeros?

Ben: ¡Sí!

Chadzmuth: ¡NO! – lo interrumpió con miedo de perder su primer caso ante la Corte.

El abogado Galvan señaló su muñeca, dándole a entender a Ben que use el Omnitrix. El castaño activó el dial y buscó su forma Tetramand; y cuando la encontró presionó el dial, convirtiéndose en Cuatrobrazos.

Cuatrobrazos: Digo, n-no, no hay problema. S-Soy un Tetramand listo para... ¿qué tengo que hacer? – le preguntó a Chadzmuth.

Chadzmuth: Como Ben, te presentaste ante la Corte y perdiste; pero los acusados Tetramand enfrentan a sus acusadores en una arena. Y el ganador... gana.

Starbeard: La fiscalía llama...

Un halo de luz se hizo presente en medio de la Corte, y de este apareció otro Celestialsapien. Tenía puesta una armadura gris que consistía de unas botas metálicas que cubrían hasta un poco sobre las rodillas, con un par de aberturas en las pantorrillas. En su torso, traía una protección que cubría toda su zona lumbar y genital; sólo con algunas aberturas a los costados y dejando al descubierto la zona pectoral. Traía brazaletes con dos aberturas, y una banda metálica en cada brazo. Una banda metálica más atravesaba su pecho en diagonal. Su casco cubría toda su cabeza, dejando sólo una abertura para los ojos y "nariz" en forma de V; y por encima de este, una cola de caballo estrellada que fluía como si fuera una flama.

Starbeard: Al Gladiador Galáctico.

Domstol: Que el Juicio Tetramand de Combate comience.

Ben fue teletransportado hasta quedar enfrente del Gladiador Galáctico. El héroe se quedó esperando el primer movimiento, pero vio que el Celestialsapien no se movía. Luego, Be flotó para acercarse un poco más y agitó su mano frente al rostro del Gladiador; y cuando no vio reacción por parte de este, golpeó sus dos puños superiores.

Cuatrobrazos: Hah, es fácil golpear algo que no se mueve. Para cuando termine con él, sus dos voces van a estar peleando sobre hacia qué lado va a caer.

Ben intentó darle un golpe al Gladiador Galáctico, pero este se teletransportó hasta detrás del héroe para esquivarlo. Ben intentó golpearlo nuevamente, y el Celestialsapien volvió a teletransportarse.

Luego, el Gladiador encerró a Ben en una burbuja hecha por sí mismo, pero este se liberó haciéndola estallar desde dentro. El Gladiador le dio una fuerte patada hacia arriba; y a gran velocidad, se movió para quedar encima de Ben y regresarlo al banquillo de los acusados con un golpe con sus dos puños estilo martillo.

Cuatrobrazos: ¿Cómo se supone que peleé contra alguien que puede cambiar lo que sea? – dijo luego de tomarse la cabeza.

Chadzmuth: No hay nada en las reglas del Combate Tetramand, que diga que tienes que seguir siendo Tetramand.

Cuatrobrazos: Genial, eso sí cambia todo – volvió a su forma normal, sólo para convertirse en su forma Opticoid.

Multiojos: Oh, te voy a acabar.

Ben volvió a flotar para dispararle una ráfaga de varios láseres salidos de sus ojos al Gladiador Galáctico. Este los esquivó todos, por lo que el héroe disparó un gran rayo desde su ojo del pecho; pero también fue esquivado por el Celestialsapien teletransportándose. El Gladiador apareció detrás de Ben y lo golpeó, sólo para aparecer nuevamente frente a él y volver a golpearlo hasta hacerlo regresar a la normalidad.

Ben: ¡Eso no se hace, Gladiador Galáctico! – dijo molesto levantando su puño.

Supergirl: Transfórmate en Alien X, Ben. Es el único que puede vencerlo.

Ben: ¿Crees que eso no lo sé, Kara? Lo haría si pudiera, ¡pero no puedo y no lo haré!

Sin embargo, en contra de sus palabras, el héroe se convirtió en su forma Celestialsapien. Kara se alegró, mientras el Gladiador Galáctico subía su guardia; pero Ben sólo estaba estático en su lugar.

Supergirl: ¿Ben? – dijo extrañada.

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Dentro del Alien X, Ben se levantaba luego de su repentina transformación. Detrás suyo, oyó la voz de Serena llamándolo.

Serena: Ben Tennyson – dijo levantando una ceja – ¿Ya volviste?

Bellicus: Demasiado pronto, si me preguntas.

Ben: No hay tiempo de hablar, estoy peleando por mi vida; y por la de ustedes – decía desesperado – ¡Si el Alien X pierde, todo el universo se destruye; permanentemente!

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Mientras Ben debatía dentro con Bellicus y Serena, el Gladiador Galáctico atacaba al Alien X sin piedad con varios golpes. Uno de estos envió a Ben a estrellarse con una luna cercana.

Supergirl: ¿Por qué Ben no está peleando? –preguntó con extrañes mientras miraba la pelea junto a Chadzmuth.

Starbeard: Su conciencia dual debe deliberar, y llegar a un acuerdo antes de que Alien X pueda hacer algo.

Supergirl: ¿Y eso cuánto tardará? – preguntó preocupada.

Starbeard: Una eternidad, tal vez unos siglos menos.

Mientras tanto, el Alien X yacía dentro de un cráter en la luna donde cayó. El Gladiador Galáctico voló hacia él y comenzó a propinarle varios golpes en el suelo.

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Todo esto era visto desde una pantalla dentro del Alien X, como si fuera una vista en primera persona; a la vez que los golpes del Gladiador Galáctico se sentían como retumbes.

Serena: Es el Celestialsapien más decisivo que he visto en mi existencia.

Bellicus: Estoy de acuerdo, no podría debatir algo ni aunque su vida dependiera de ello.

Ben: ¿Qué no están escuchándome? – se giró para verlos – ¡Ahora nuestras vidas y las de todo el universo dependen de que ustedes sean un poco más decisivos! – se interrumpió al sentir más golpes del Gladiador.

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Supergirl: Señoría, esta pelea no es justa. Ben no puede defenderse – dijo recordando su entrenamiento Amazona.

Domstol: Tal vez debió seguir siendo Tetramand – dijo encogiéndose de hombros.

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Ben: ¿Qué tal si ustedes se quedan debatiendo todo lo que quieran? – decía mientras el Alien X seguía recibiendo golpes – Y mientras están ocupados con eso, déjenme controlar al Alien X.

Serena: Admiro tu pasión, estoy de acuerdo.

Bellicus: Me parece que tu pasión está mal dirigida, moción rechazada.

Los tres vieron cómo el Gladiador Galáctico se alejó para tomar distancia. Luego cruzó sus brazos en forma de X, hizo brillar una energía blanca, y voló en dirección a Ben para darle el golpe final.

Ben: ¿Ven? Así, préstenme las llaves del Alien X un rato para salvar al universo y ustedes pueden... seguir divirtiéndose peleando por todo lo que quieran. ¿De acuerdo?

Serena: Cuando lo pones de esa manera, de acuerdo.

Bellicus: No estoy de acuerdo en que será divertido; pero si significa que podemos discutir a gusto, secundo la moción.

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El Gladiador Galáctico se acercaba a gran velocidad hacia Ben para estrellarse contra él. Cuando llegó, hubo una gran onda expansiva vista hasta de lejos; sin embargo...

Ben logró retener al Gladiador sin problemas con su mano izquierda.

Alien X: ¡Sorpresa!

Después, Ben le propinó un fuerte golpe que lo mandó a volar lejos. El Gladiador logró frenar en el aire; pero Ben se movió a gran velocidad y volvió a atacarlo, haciéndolo estrellar con algunas rocas.

Luego, comenzó una batalla de fuerza y velocidad. Tanto Ben como el Gladiador se movían rápidamente por todo el lugar golpeándose y destruyendo algunas lunas en el proceso. En un pequeño mano a mano, Ben logró mandar a estrellarse al Gladiador con otra luna; pero este la destruyó creciendo a un tamaño gigante, para después atrapar al héroe con una mano.

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Ben: ¿Un poco de ayuda? – preguntó mientras soportaba la presión de la mano del Gladiador.

Serena: Dijiste que querías hacer esto sin nosotros.

Bellicus: ¿Y quién es el indeciso ahora?

Ben: ¡Ay, ustedes son imposibles! – dijo molesto – El Gladiador Galáctico tiene tanta suerte, no tiene problemas para decidir qué hacer – luego tuvo una idea – ¿Pero y si tuviera que tomar más decisiones?

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La mano del Gladiador Galáctico emitió un brillo verde, luego comenzó a temblar y agrandarse más, para después explotar por completo.

Alrededor del Gladiador, aparecieron múltiples Aliens X; los cuales comenzaron a girar alrededor de él mientras regeneraba su mano. Al girar, los Aliens X formaron un agujero negro a la altura de la cintura del Gladiador; y este fue tragado por el mismo en un resplandor verde.

Un brillo blanco se vio por todo el lugar, y después Ben apareció en medio de la Corte con un derrotado Gladiador Galáctico. Este se puso de rodillas, mientras Ben celebraba levantando el puño.

Supergirl: ¡Increíble! – dijo con sus ojos brillando – ¡El Alien X es genial!

Alien X: Te lo dije.

El héroe volvió a la normalidad, y después fue teletransportado hasta el banquillo de los acusados. El Gladiador Galáctico también fue teletransportado hasta donde estaba Starbeard, quien le puso una mano en el hombro como consuelo.

Domstol: Orden, orden en la Corte – dijo golpeando su martillo – El vencedor en el Juicio de Combate Tetramand es: Ben Tennyson.

Ben: ¡Sí! – exclamó con los brazos levantados.

Domstol: Adicionalmente, con base a lo que acabamos de ver, es perfectamente claro que Ben Tennyson no estaba controlando a Alien X al momento del supuesto crimen. Por lo tanto, la Corte declara a Bellicus y a Serena culpables de una alteración universal no aprobada – en las pantallas de arriba, aparecieron las imágenes de los seres celestiales – Y los sentencia a pagar restitución, con cinco piezas de tydenita cada uno. Se levanta la sesión – dijo golpeando su martillo.

Ben: ¿Por eso fue todo? ¿Cinco simples piezas de tydenita? – dijo molesto.

Chadzmuth: Te dije que jamás pierdo. Y no iba a perder por primera vez frente a la Corte Intergaláctica – Kara impidió que Ben atacara al Galvan, mientras él recibía una llamada.

Fisttrick: Tienes que sacarme de aquí. Chadzmuth, ¿dónde estás, bro?

Chadzmuth: Hablando de casos...

En ese momento, tanto Chadzmuth como el dúo neoyorkino fueron teletransportados fuera de la Corte.

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Cuartel General de los Plomeros

Donde fueron teletransportados los tres fue a la base terrestre Plomera, donde los oficiales estaban conteniendo a un grupo de criminales que querían salir.

Max: ¡Ben! ¡Kara! – dijo al verlos a ambos.

Chadzmuth: ¿Cómo se atreven a tener a mis clientes en estas condiciones de confinamiento?

Max: Chadzmuth, ¿por qué no estoy sorprendido?

Supergirl: Tranquilo, señor Tennyson – dijo soltando a Ben – Chadzmuth salvó a Ben.

Ben: Sólo me salvó de gastar tydenita.

Chadzmuth: De nada – luego volteó a verlo – ¿Y ahora llevamos este tema frente a un juez o llegamos a un acuerdo?

Ben: Ay, tienes suerte de que ahora le tenga respeto a los que deciden las leyes.

Chadzmuth: ¿Y...? – dijo mientras firmaba con su pulgar para liberar a sus clientes.

Ben: Y... te lo agradezco – dijo a regañadientes – Te debo una.

Chadzmuth: Espera que veas mi factura – dijo casi en un susurro.

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Brooklyn, Nueva York

Después de todo lo que pasó en el día, Ben y Kara se fueron a su departamento para relajarse un poco. De paso, compraron un par de hamburguesas con papas y un par de pequeñas gaseosas.

Kara: ¿Sabes? Este día me recordó a cuando tus enemigos nos hicieron un juicio.

Ben: Es cierto – dijo abriendo sus ojos – Podría haber llamado a Van Dorn para que me defendiera.

Kara: No creo que hubiera aceptado – dijo riendo un poco – Oye, ¿y cuándo volverás a ser Alien X de nuevo? – preguntó algo entusiasmada.

Ben: No creo que vuelva a hacerlo – dijo decepcionando un poco a Kara – Bellicus y Serena me prestaron las llaves por un rato para pelear, no sé si sean tan bondadosos la próxima vez.

Kara: Oh, rayos – en ese momento, la tarjeta verde de Ben sonó.

Ben: Oye, ¿puedes verla? Tengo los dedos llenos de chile – la rubia tomó la tarjeta.

Kara: Es la factura de Chadzmuth.

Ben: ¿Qué? – dijo extrañado, pero vio que Kara abrió los ojos como platos – ¿Cuánto es?

Kara: Ah, no es que quiera alarmarte... pero creo que tendrás que pedirle ayuda a Batman.

Ben se acercó a ver el precio que Chadzmuth solicitaba que se le pague, y el grito de indignación del castaño se escuchó por todo el departamento y algunos de los vecinos.