Cap. 61: Un Benlobo americano en Londres

Londres, Inglaterra

Por las alcantarillas debajo de la ciudad europea y en medio de ratas, caminaban dos personas. Un hombre y una mujer para ser exactos.

El hombre iba al frente. Era de mayor edad y con tez morena, con largo cabello blanco atado en una coleta. Usaba una camisa amarilla con dibujos verdes, un saco de cuero marrón con algodón blanco por dentro. Jeans azules y zapatos marrones se veían en la parte inferior.

Este hombre era Wes Green, un Plomero veterano y viejo amigo de Max Tennyson. Como dato adicional, pertenece a una tribu nativa de Nuevo México conocida como los Navajo.

La mujer era también de tez morena y pelinegra, con una larga coleta detrás y un largo mechón corriendo por su costado derecho. Labios pintados y aretes amarillos se distinguían además en su rostro. Usaba una chaqueta roja, con cuello, hombros y vientre blancos; y guantes marrones en sus manos. Debajo de la misma, usaba una camiseta mangas cortas roja. Usaba unos pantalones cortos verdes, junto a un cinturón gris con un arnés negro que corría por los muslos, con bolsas grises sobre los mismos. Unas botas marrones con gris se exhibían en los pies.

Ella era Kai Green, nieta de Wes Green, y sostenía una farola para alumbrar el camino.

Kai: ¿Cómo estás seguro de que es real, abuelo? Siempre pensé que sólo era una historia.

Wes: Si lo lees entre líneas, Robert Louis Stevenson te da pistas muy claras; que te llevan justo a... ¡Ah!

El veterano se detuvo al ver el escudo de los Caballeros Eternos sobre un muro, tapado por un poco de polvo. Lo presionó, y los ladrillos se abrieron girando de a poco para revelar un precario laboratorio del otro lado.

Wes: Camina detrás de mí – dijo mientras ambos entraban.

Kai: Ay, no es posible que este sea el lugar.

Wes: El laboratorio secreto del Dr. Jekyll, y...

Kai: Su legendaria fórmula – dijo mientras el hombre tomaba una serie de tubos de ensayo con un líquido morado dentro.

– La cual pertenece a nosotros.

Detrás de ambos, se revelaron los Caballeros Eternos; quienes los siguieron desde atrás. Estaban los Caballeros gemelos con máscaras triste y feliz, el Caballero Eterno Ninja, y Sir Morton (quien fue el que habló). Los mismos se hicieron a un lado para revelar a su rey, el Dr. Joseph Chadwick.

Chadwick: La orden real de los Caballeros Eternos. Gracias por su ayuda para recuperar nuestra fórmula.

Kai: ¿Su fórmula?

Chadwick: El Dr. Jekyll formaba parte de nuestra orden. Con sangre alienígena, creó un suero de súper fuerza para el uso de nuestros Caballeros en la batalla. Lo llevaremos y continuaremos nuestro camino.

Wes se acercó un poco al grupo, para lanzarles de improviso un par de frascos sobre una mesa que iniciaron un pequeño incendio al caer al suelo. Luego, rompió todos los tubos con el suero contra la mesa, justo cuando el Caballero Ninja se abalanzó contra él.

Wes: ¡Kai, corre!

La chica obedeció a su abuelo y corrió hacia la salida. Sir Morton se interpuso bloqueando la misma, pero Kai se deslizó por debajo de las piernas del Caballero y poder escapar. Sin embargo, este fue más rápido y la tomó del brazo antes de que lo hiciera; por lo que ella estrelló la farola contra su rostro, y aprovechó la distracción para quitarse su chaqueta y poder salir. Sir Morton, aún con la chaqueta en la mano, corrió tras Kai a las alcantarillas; pero se dio cuenta que ya no estaba al mirar por todos lados.

Dentro del laboratorio, los Caballeros gemelos buscaban más tubos con la fórmula por todos lados, mientras el Caballero Ninja retenía a Wes. De tanto buscar, solamente encontraron un tubo.

Chadwick: Un tubo es más que suficiente para mis... nuestros propósitos – se corrigió – Traigan a este hombre al castillo, requeriremos de su experiencia para recuperar la espada.

Los Caballeros Eternos salieron del laboratorio con Wes y la fórmula con ellos. En otra parte de las alcantarillas, se reveló que Kai estaba escondida sobre la estructura de las mismas; y se bajó para ver la retirada del grupo con su abuelo. Entonces, ella sacó su teléfono y marcó al número de un amigo al que no veía desde hace mucho (y remarco la palabra mucho) tiempo.

Ben Tennyson.

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Más adelante, Ben y Supergirl se encontraban de camino a Londres en una de las Javalinas de la Liga de la Justicia; con la kryptoniana conduciendo la nave, junto con el auto del héroe en la zona de carga. Ben tomaba tranquilo un smoothie, mientras Kara conducía con el seño fruncido.

Ben: Enserio, Kara, no tenías que venir conmigo – dio un sorbo a su bebida – Lo que sea que pase en Londres puedo manejarlo yo solo.

Supergirl: ¿Estás seguro de eso? – preguntó con una ceja alzada – ¿No es porque se trata de esa chica?

Ben: Kara, no empieces.

Supergirl: ¿Que no empiece? Atendiste muy rápido su llamada – dijo al borde de la ira – ¿Tan rápido quieres ayudarla? ¿A quién ayudarás después, a Julie? – Ben escupió su smoothie.

Ben: ¿Qué? Julie no tiene nada que ver con esto.

Supergirl: Tus padres me contaron que también estabas atraído por ella, y nunca me dijiste que pasó con ella realmente.

Ben: ¿Y qué quieres saber? – dijo fastidiado.

Supergirl: Todo.

Ben: ¿Todo? Muy bien – se acomodó mejor en su asiento – La conocí cuando tenía 15 años, antes de volver a ponerme el Omnitrix. Después de eso, tuvimos nuestra primera cita en los muelles, pero un Mecamorfo Galvánico con forma de perro la secuestró. Tuvimos una persecución alienígena, conocimos a otro Mecamorfo llamado Baz-El, y luego ella me dijo que no estaba segura de salir con alguien como yo. Y así terminó todo, sólo amigos. Lo único bueno fue que ella no reveló mi identidad.

Supergirl: ¿Y el perro?

Ben: Volvió con su dueño, naturalmente – luego volvió a tomar su smoothie, mientras Kara quedó en silencio unos segundos.

Supergirl: Agh, lo siento Ben – dijo algo cabizbaja – Es sólo que escuché que volver a ver a un ex después de tanto puede ser malo.

Ben: Pero Kai no es una ex. Sólo pensé que era diferente.

Supergirl: Volviendo a lo anterior, ya que lo mencionaste, no estaría mal tener un perro de mascota – dijo para cambiar el ambiente.

Ben: Si quieres le digo a Superman de traer unos días a Krypto.

Supergirl: Por supuesto que no – dijo mientras negaba con la cabeza – Aún no le caigo bien a ese perro.

Ben: Sí, claro – dijo riendo un poco – Ah, mira, ahí está...

Supergirl: Sí. Ya la vi – dijo con desgano.

El dúo neoyorkino visualizó a Kai parada sobre el puente de Westminster, cerca del famoso Big Ben, y aterrizaron frente a ella. Una vez hecho eso, bajaron de la nave.

Kai: Gracias por venir, Ben – dijo mientras el dúo se acercaba – No sabía a quien más pedir ayuda.

Ben: ¿Kai? – dijo algo sorprendido – Wow, estás más alta.

Kai: Claro que lo estoy, ya pasaron más de ocho años. Tú también eres más alto, tonto.

Ben: Sí, demasiado como para ser tu mascota.

Kai: Ay, pero Ben, tenías orejas peludas y cola rizada. Ay, olvídalo; tengo que rescatar a mi abuelo.

Ben: Más bien, tenemos que rescatar a tu abuelo. Kai, ella es Supergirl.

Supergirl: Kara Zor-El – dijo seria extendiéndole la mano – Y soy la...

Kai: Solamente te llamé como refuerzo – dijo interrumpiéndola.

Ben: ¿Refuerzo? – dijo levemente molesto – Soy un superhéroe, he salvado al universo cientos de veces.

Supergirl: Claro que no. Esta vez las conté y fueron tres – dijo levantando tres dedos de su mano.

Ben: Debe ser más que eso. El punto es, que Ben 10 no es el refuerzo de nadie – ahora sí dijo molesto.

Kai: ¿Entonces no vas a ayudarme?

Ben: Bueno, ya estamos aquí; así que... – dijo compartiendo una mirada desafiante con ella.

Supergirl: Iré a sacar el auto – dijo mientras se dirigía hacia la nave – Y ruega para que no lo abolle con un golpe – dijo en un susurro lleno de enojo.

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Más tarde, Ben, Kara y Kai se movían en el auto del castaño por las calles de Londres. Ben notó una extraña abolladura cerca del baúl, pero Kara le explicó que debió ser por algún movimiento brusco de la Javalina; así que le restó importancia.

Ben: Espera, ¿fueron al laboratorio del Dr. Jekyll? ¿El de "Dr. Jekyll y Mr. Hyde"? Eso es sólo una historia – dijo incrédulo pero sonriendo.

Kai: Y lo dice el chico que se convierte en alienígena – dijo irónica – Los Caballeros llevaron a mi abuelo a un castillo por una espada.

Ben: No hay problema. Inglaterra tiene, ¿cuántos, dos o tres castillos?

Supergirl: Son muchos más, cientos más – dijo seria cruzada de brazos.

Ben: Oh... ¿y con espadas? – dijo aún optimista.

Supergirl: Eso reduce el número – el héroe se alegró – Pero no lo suficiente, podríamos pasar un día buscando...

Kai: Oigan, yo ya sé dónde está – dijo interrumpiendo – A uno de ellos se le cayó esto – le entregó un papel a Kara.

Supergirl: ¿Mudanzas y bodegas? ¿El castillo del aullido?

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Resulta que el lugar era un edificio con apariencia abandonada, pero su letrero estaba bien iluminado. Tenía una bodega llena de cajas de varios tamaños; pero debido a la noche, todo se veía oscuro.

Supergirl: No hay nadie aquí – dijo luego de usar sus rayos X.

Los tres estaban escondidos detrás de unas cajas. Con lo que dijo la kryptoniana, salieron a investigar; y Ben olfateó una caja de comida china que estaba en una mesa junto a un televisor encendido.

Ben: Pues alguien sí estuvo aquí – dijo asqueado.

Kai: Buena investigación, Sherlock.

Supergirl: Aunque no lo creas, Ben es muy bueno con los misterios – dijo molesta mientras usaba sus rayos X en algunas cajas – Y seguramente él... – fue silenciada por su novio, el cual quería escuchar mejor.

Kai: ¿Nuevo Omnitrix? – dijo tomando la muñeca del castaño.

Ben: ¡Cuidado! – dijo apartando su mano – Me convertirás en cualquier cosa. Tiene nuevos alienígenas.

Kai: Entonces, no puedes convertirte en Benlobo aunque quisieras – dijo bromeando.

Ben: Sí puedo, es sólo que n-no quiero. Y por cierto, ya dejé de llamarlo Benlobo. Su nombre es... ah... – vio un programa muteado del periodista alemán Wolf Blitzer en la televisión – Blitz... wol-fer.

Kai: ¿Blitzwolfer? Acabas de inventarlo, ¿verdad, tonto? – dijo incrédula.

Ben: ¡No es cierto!

Supergirl: ¿Puedo interrumpir a la "pareja" un momento? – dijo seria luego de encontrar un papel debajo de una alfombra roja.

Ben/Kai: ¿¡Qué!? – dijeron con los ojos abiertos.

Kai: ¿Pero ustedes dos no son...? – dijo señalando a ambos varias veces.

Ben: Kara, ¿qué dices?

Supergirl: Olvídalo – dijo negando con la cabeza pero molesta – Encontré algo aquí – luego enrolló un poco la alfombra.

Kai: Esta es la letra de mi abuelo – dijo luego de agarrar varios papeles debajo de la misma.

Supergirl: Parece un diagrama, que conecta las estatuas de la Plaza del Parlamento – dijo mientras el lugar era iluminado de a veces por Ben, quien jugaba con el Omnitrix – ¿Pero por qué está junto a un viejo mapa de Londres?

El mapa mostraba varios puntos y una X roja cada vez que Ben iluminaba los papeles con su reloj. Kara y Kai notaron esto, y la morena tomó otra vez la muñeca del héroe y apuntó contra los papeles.

Ben: Oye, deja de hacer eso.

Kai: Cada estatua representa un sitio histórico de Londres – dijo manteniendo la iluminación del Omnitrix.

Supergirl: Como un código oculto.

Ben: ¿Y cuál es la que tiene la X? Es muy sutil – dijo irónico.

Kai: Dice que es Oliver Cromwell. Mi abuelo lo relaciona con el Observatorio Real de Greenwich.

Supergirl: Algo anda mal – dijo con una ceja alzada – El mapa dice que es de 1860, pero la estatua se puso hasta 1899.

Kai: Es cierto. Antes de eso, había otra estatua de Cromwell en otro lugar de la plaza. Mi abuelo debía saberlo – dijo lo último en un tono apagado – Llevó a los Caballeros a un lugar equivocado a propósito.

Ben: Pues vamos para allá, para patear sus Eternos traseros – dijo animado.

Kai: No. Mi abuelo está arriesgando su vida para que los Caballeros Eternos no encuentren la espada que buscan, así de importante es. Quiere que lleguemos primero.

Supergirl: ¿Estás segura de eso? Cuando los Caballeros se enteren de que los engañó, pueden...

Kai: El abuelo dice que si fuiste Plomero, siempre lo serás. Él mismo puede cuidarse.

Ben: ¿Y dónde estaba la vieja estatua?

Supergirl: Cruzando la plaza – dijo viendo el mapa.

Kai: Entonces, el sitio histórico que marca es...

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El lugar indicado por el mapa era el famoso cementerio de Highgate, al norte de Londres. Los tres caminaban en medio de varias tumbas, sólo alumbrados por una farola sostenida por Kara.

Ben: Genial – dijo en una mezcla de emoción e ironía.

Supergirl: En realidad, lo es. En el cementerio de Highgate están las tumbas de personalidades muy conocidas en la historia humana. Michael Faraday, Karl Marx, Douglas Adams.

Kai: Y todos ellos han estado esperándote – dijo un tono tétrico falso, haciendo mímica con su mano.

Ben: Ja, ja – "rió" serio.

Kai: El secreto yace entre Hall y Wall – dijo viendo un papel.

Ben: Wall es muro, y no veo ninguno – dijo buscando por el lugar.

Supergirl: Es porque están escritos con mayúscula. Deben ser apellidos.

Los tres voltearon a ver dos tumbas, donde se leían en sus lápidas las palabras que dijo Kai. En medio de ambas tumbas, había otra sin lápida y muy sucia.

Supergirl: Bartleby Hall, Eunice Wall.

Kai se acercó a la tumba del medio y la desempolvó un poco, revelando el escudo de los Caballeros Eternos en medio de la misma.

Kai: ¡Es aquí!

Sin embargo, se asustó cuando la tumba se abrió sola. Al mirar bien, se dio cuenta que fue la Chica de Acero quien levantó la tapa de la misma; y por alguna razón estaba reprimiendo una risita.

Ben: Boo – dijo riendo un poco – No hay espada, sólo estas cosas.

Lo que Ben encontró debajo de la tumba eran un par de objetos con varias lupas pequeñas alrededor. Eran marrones, con detalles metálicos dorados, un pequeño espejo al comienzo, y un pequeño martillo al final.

En ese momento, sintieron ruidos metálicos cerca de ellos. Kara se dio cuenta de que tres cuchillas doradas se incrustaron en la tapa de la tumba; y al voltear, vieron al Caballero Eterno Ninja parado sobre una estructura.

La Chica de Acero lanzó con fuerza la tapa, pero el robot la esquivó saltando sobre la misma para llegar a donde estaban. Luego, este sacó dos espadas brillando rojas para atacar a Kai, pero fue apartada por Kara y retuvo los brazos del robot.

Supergirl: Escogiste un mal día para pelear, Ninja. Hoy estoy de muy mal humor.

La kryptoniana le dio una patada al pecho que lo alejó un poco. Luego, ella cargó contra el Caballero robot y retuvo varios ataques de las espadas del mismo. Entonces, el robot corrió para tomar distancia, y Supergirl lo siguió desde atrás.

Kai: Wow, tu novia es bastante fuerte.

Ben: Yo le he enseñado muchas cosas – dijo señalándose a sí mismo.

Sir Morton: ¡Pero no le has enseñado a mirar atrás!

El Caballero llegó con otra espada roja corriendo detrás suyo, pero Kai le puso el pie y este tropezó, haciendo que rebote en el suelo y pierda su arma.

Kai: ¡Encárguense, yo salvaré esto!

Kai puso los objetos en una mochila y salió corriendo de allí, saltando sobre la cabeza de Sir Morton para pasar más rápido un muro mediano de piedra.

Ben activó su Omnitrix y se convirtió en Cuatrobrazos, cargó contra el Caballero y lo empujó contra el muro, atravesando el mismo y dejando a Sir Morton en el suelo otra vez.

Supergirl seguía luchando contra el Caballero Ninja, quien no dejaba de blandir sus espadas contra ella sin tener algún efecto. Peleaban sobre una tumba cuando la kryptoniana logró hacer que suelte una de las espadas.

Kai se encontró con los Caballeros gemelos mientras corría, ambos armados con espadas rojas también. El de máscara triste cargó contra ella, pero Kai supo desarmarlo y hacer una llave de espaldas. Mientras tanto, Ben forcejeaba con Sir Morton.

Sir Morton: Tu novia pelea mucho mejor que tú.

Cuatrobrazos: ¡Ella no es mi...! Espera, ¿a quién te refieres?

Sir Morton: La negra.

Cuatrobrazos: ¡Entonces no es mi novia! ¡Y eso fue racista! – dijo para someterlo en el suelo, pero antes de que pudiera asestarle un golpe...

Chadwick: ¡Ríndanse! ¡Todos ustedes! – sobre una colina, se reveló a él y a Wes Green con grilletes de madera – Si valoran su vida.

Wes: ¡No lo escuches, Kai!

A pesar de lo que dijo su abuelo, Kai soltó al Caballero con máscara triste, Ben dejó ir a Sir Morton y volvió a su forma normal, y Kara dejó de pelear contra el Caballero Ninja. Luego, los tres fueron llevados frente a Chadwick por sus oponentes.

Chadwick: La oculata, por favor – dijo refiriéndose a los objetos que encontraron.

Kai: ¿La oculata? – dijo sorprendida mientras el de máscara triste le quitaba la mochila – Abuelo, la espada que buscan no puede ser...

Chadwick: La espada de Sigurd, de Beowulf, y también de Arturo. Cualquiera que la empuñara en la batalla, en cualquier lugar, era invencible – dijo mientras el Caballero se arrodillaba entregándole la mochila, y él sacó los dos objetos – Se le conoce por cientos de nombres en el planeta, pero ustedes tal vez la conocen como...

Wes/Kai/Supergirl: Excálibur – el Plomero lo dijo cabizbajo, la morena consternada, y la kryptoniana seria.

Ben: Esa es sólo otra historia. ¿O no? – dijo en parte incrédulo.

Chadwick: Con Excálibur en mi mano, restauraré para los Caballeros Eternos nuestro derecho a conquistar el mundo. Ningún alienígena se atreverá a poner un pie o tentáculo sobre la Tierra nunca más – dijo de forma siniestra pero elegante.

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Más adelante, los Caballeros Eternos viajaban por el río Támesis en lanchas especiales. Estas eran negras casi en su totalidad, con algunos detalles en dorado y el piso rojo. Tenían una cabeza de caballo al frente, el escudo de su orden debajo de la misma, y una punta dorada en el frente como arma.

Iban por el río en formación triangular, con el rey Chadwick al frente, Sir Morton y el Caballero Ninja a los costados más atrás, y más atrás de estos los Caballeros gemelos. Ben y Kai estaban custodiados por Sir Morton, mientras que Supergirl y Wes estaban con el Caballero Ninja.

Curiosamente, los Caballeros fueron amables y les dieron a Ben, Kai y Wes chalecos salvavidas. Sin embargo, la Chica de Acero no corrió con la misma suerte por ser alienígena; pero no era como si lo necesitara de todos modos.

Ben: Qué buenos movimientos ejecutaste – le dijo a su acompañante – ¿Es alguna especie de técnica de lucha Navajo?

Kai: Sí, se llama judo. Tomé algunas clases en el centro comercial – dijo irónica.

Ben: Oigan, ¿y a dónde vamos a ir? – le preguntó al Rey Eterno.

Chadwick: La oculata fue diseñada por científicos de los Caballeros Eternos. Cuando las pongamos sobre las dos torres de Westminster en una noche de luna llena... como esta, la oculata nos dará la ubicación de la bóveda de Britannia; donde Excálibur ha permanecido desde que se usó para derrotar a Napoleón en...

Ben: Socio, sólo quería saber a dónde vamos – dijo agobiado interrumpiéndolo – Nadie te pidió una clase de historia.

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Los Caballeros Eternos y los héroes se detuvieron bajo el puente de Westminster (donde estaba estacionada la Javalina), y se movieron hasta el Palacio de Westminster; más precisamente hasta el techo del mismo.

Chadwick: Lleven a estos dos a la torre Victoria – les dijo a Sir Morton y los gemelos señalando a Wes y Kara – El Caballero Ninja y yo escoltaremos a Tennyson y a su novia a la torre Elizabeth.

Ben/Kai: ¡Ella/Él no es mi novia/novio! – se miraron desafiantes luego de hablar al mismo tiempo.

Supergirl: Cálmate, no te enfades ahora. Sólo espera un poco más – dijo susurrando para sí misma, conteniendo su enojo.

Ben: ¿Y dónde está la torre Elizabeth?

Chadwick: ¿Cómo es posible que nunca hayas oído sobre el Big Ben? – dijo señalando el mismo.

Ben: Ah, claro que conozco el Big Ben. El reloj gigante, todos lo ven.

Supergirl: Técnicamente, Big Ben es la campana dentro de la torre.

Kai: No corrijas al demente malo – dijo casi susurrando.

Supergirl: ¿Y quién lo corregía a él? – dijo dándole una mirada fría, casi hostil, asustándola.

Chadwick: ¡Ya basta de tonterías! Tengo una espada invencible que reclamar.

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Unos minutos más tarde, Kai estaba en la torre Elizabeth acomodando en un barandal la oculata; mientras Wes hacía lo mismo en la torre Victoria. Todos estaban serios en este momento, excepto una persona.

Ben: ¡Ben 10 en el Big Ben! – dijo alzando los brazos – ¿Qué tan grandioso es esto? ¡1.000.000 de grandioso! – Kai lo miró raro – Sí lo es.

Chadwick: Ah, no debe faltar mucho ya.

El Rey Eterno miró con un telescopio raro que la oculata en la torre Victoria ya estaba en posición, confirmado por Sir Morton. Una vez que la luna estuvo totalmente despejada, su luz se reflejó por los espejos de los objetos; y una luz verde salió por las lupas en forma de laser hasta el medio del río.

Unos segundos después, una estructura de rocas parecida a las de Stonehenge (dos rocas paradas y una acostada sobre estas) se elevó desde el fondo. La estructura estaba sobre una gran roca, con una puerta debajo de la misma.

Chadwick: ¡La puerta de la bóveda de Britannia!

Kai aprovechó que el rey estaba distraído y vio un cronómetro en su teléfono. Luego, se acercó disimuladamente a Ben.

Kai: Tendremos una distracción en diez segundos. Cuando ocurra, tienes que volar y conseguir la espada primero – dijo susurrando.

Ben: ¿Una distracción? ¿Qué clase de...?

La distracción llegó justo en ese momento en forma de campanada, la cual retumbó en los oídos de todos los presentes. Particularmente, el Caballero Ninja comenzó a fallar liberando pequeños rayos rojos, temblando con cada campanada del Big Ben.

Kai: ¿¡Qué estás esperando, Ben!? ¡Ve por la espada, deprisa! – gritó sobre el ruido cubriéndose los oídos.

Ben: ¡Omnitrix, dame algo que pueda volar!

Ben activó su reloj, pero no lo convirtió en una de sus formas voladoras. Lo convirtió en un gran hombre lobo gris con pelaje negro. Tenía puesto un traje entero sin mangas y con pantalones cortos verde, con los bordes de los brazos y piernas de color negro y una franja blanca en la cintura. El Omnitrix estaba en forma de collar verde en su cuello, además de tener brazaletes verdes en las muñecas.

Su forma consistía en un gran y espejo pelaje detrás de su cabeza y cuello, la parte superior de su hocico era gris, cuatro colmillos sobresalían de sus labios superiores, junto a una línea que dividía al mismo en dos. Tenía grandes y musculosos brazos, con púas saliendo de sus hombros y codos, dedos grises y uñas negras. Su cola era particularmente larga y llena de pelo. Sus piernas eras considerablemente más delgadas que sus brazos, flexionadas en forma de N, con dos dedos grises con uñas negras; más una adicional detrás del tobillo.

Esta era su forma Loboan, recientemente bautizada como...

Blitzwolfer: ¿Blitzwolfer, ahora? – luego se cubrió las orejas haciendo un lloriqueo característico de un canino – ¡Mis oídos son sensibles!

Kai miró al frente al ver que Ben no sería útil ahora. Cuando las campanadas cesaron, el Caballero Ninja se recompuso y atacó al héroe con sus cuchillas doradas. Ben abrió su hocico, dividiéndolo en cuatro; y lanzó un aullido sónico, en forma de ondas verdes, que desvió las cuchillas hacia el robot. Este logró repelerlas todas con sus manos, y sacó sus dos espadas rojas para atacar a Ben, quien esquivó un par de cortes para después subir por la torre, siendo seguido por el Ninja.

Sir Morton: ¿Qué centellos azules está pasando por allá? – se dio vuelta para ver a los Caballeros gemelos, a Wes y Kara; pero no vio a estos dos últimos – ¿Quién está cuidando a los prisioneros? – los gemelos se señalaron entre ellos.

Wes: Gracias, Supergirl – dijo mientras era llevado en el aire por la kryptoniana.

Supergirl: No hay de qué, señor.

Blitzwolfer: Lamento tener que hacer esto – dijo mientras esquivaba las espadas del robot – Es una pena desperdiciar a un ninja robótico.

Ben y el Caballero Ninja estaba peleando en la punta del Big Ben. El héroe se balanceó sobre la misma y empujó con sus patas por detrás al robot, haciéndolo caer al vacío.

Wes: Genial – dijo luego de aterrizar – Eso estuvo... – el Ninja cayó enfrente de ellos.

Supergirl: Cerca.

El robot tenía otra vez fallas y su cabeza estaba levemente separada de su cuerpo. Sin embargo, se auto-reparó en pocos segundos y se enfrentó hacia ambos sacando sus espadas.

Supergirl: Señor Green, yo me encargo. Usted póngase a salvo.

Wes: Parece que no es una opción – dijo viendo llegar a Sir Morton y los Caballeros gemelos por detrás.

Supergirl: Con todo respeto... – ella tomó al robot del brazo cuando este la atacó, y lo lanzó con fuerza contra los Caballeros, derribando a los gemelos porque Sir Morton se agachó para esquivar – Cuando digo "yo me encargo", yo me encargo.

Mientras tanto, Kai intentó bajar sosteniéndose del barandal; sin embargo, este se rompió haciendo que la morena caiga hacia el vacío.

Kai: ¡AUXILIO!

Blitzwolfer: ¡Kai! – gritó para bajar deslizándose por la punta de la torre.

Kai: ¡AUXILIO! – volvió a gritar sosteniéndose de la punta de la aguja larga del reloj.

Ben arrancó parte del barandal y dobló uno de los extremos, dándole la forma de una escalera; la cual colocó debajo de la posición de Kai.

Blitzwolfer: Escucha, Omnitrix: si esto no funciona, voy a necesitar algo que pueda volar.

Ben dio un salto hacia abajo, logró tomar la punta de la aguja pequeña del reloj para impulsarse hacia arriba nuevamente, y tomó con su mano izquierda la aguja grande mientras se sostenía de la escalera improvisada con sus patas. Luego, sostuvo a Kai.

Kai: Buen muchacho – dijo acariciando su cabeza.

Blitzwolfer: Sí... – dijo cohibido por las caricias.

Ben subió a Kai de regreso a la torre, donde regresó a su forma normal mientras se tomaban ambos de los brazos.

Chadwick: Ay, el amor juvenil – dijo interrumpiendo el momento – Ahora, si no hay más interrupciones, quisiera ir a reclamar Excálibur para conquistar el mundo.

Supergirl: Como si yo lo fuera a permitir.

Los tres se dieron vuelta para ver a una Supergirl con el seño muy fruncido, con los brazos cruzados y flotando en el aire. El Rey Eterno fue hacia el barandal para ver a su equipo tendido en el suelo, con Wes Green en el medio y saludando desde su posición.

Chadwick: ¡Incompetentes!

Supergirl: Pobre Rey Eterno – dijo aterrizando frente a él, haciéndolo retroceder mientras avanzaba – Sin caballeros, sin espada, sin poder. Estás solo.

Inesperadamente, el rey empujó a Ben y tomó a Kai del cuello a la vez que sacaba una daga de su espalda. Luego, la apuntó contra el cuello de la morena.

Chadwick: Un movimiento en falso, y la atravieso – dijo con una sonrisa confiada.

Supergirl: Puedo ser más rápida que eso – dijo estática en su lugar.

Chadwick: ¿Quieres ponerlo a prueba? – dijo haciendo que la daga toque el cuello de Kai.

La Chica de Acero iba a moverse para salvar a la morena, pero fue Ben quien levantó su mano para evitar que hiciera eso. Kara se sorprendió, pero decidió rendirse; después de todo, Ben lo le pediría algo así si no tuviera algo en mente.

Chadwick: Y ahora, si ya no hay más interrupciones, ¿qué tal si continuamos nuestra aventura juntos? – dijo aún sosteniendo a Kai – El suspenso está matándome.

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Unas horas después, luego de que los Caballeros Eternos se recuperaran de la paliza de la kryptoniana, estos estaban frente a la puerta de la llamada bóveda de Britannia junto a los héroes. Los Caballeros gemelos usaban lanzas para forzar la puerta, sin resultados.

Sir Morton: La puerta está sellada, señor – le dijo a su rey, quien se acercó molesto a ver.

Ben: Yo no hubiera podido entrar. Bien, me sentía mal por no haber llegado primero – dijo feliz cruzando sus brazos.

Kai: Ni siquiera lo intentaste – dijo seria.

Ben: Ah, ¿quién estaba salvando tu vida? ¿Qué pasó con "buen muchacho"?

Kai: Eso fue para Blitzwolfer.

Supergirl: Espera, ¿estás diciendo que no tenías un plan para entrar? – le dijo susurrando a Ben – Yo podría haber entrado.

Ben: Kara, este es el plan – dijo también susurrando.

Chadwick: Niños, estoy ocupado tratando de ser invencible – dijo revisando la puerta – No me hagan tener que callarlos.

El Rey Eterno quitó un poco de polvo de la puerta, y vio un pequeño agujero con el símbolo de su orden en medio de él. Después, puso su anillo sobre este, lo giró como si fuera una llave, y la puerta se abrió con un ligero temblor.

Supergirl: No se preocupe, señor Green. Ben y yo no permitiremos que el Rey Eterno tenga a Excálibur. Se lo aseguro un 100%.

Los Caballeros y los héroes bajaron por unas escaleras hasta una gran sala iluminada por viejas farolas que funcionaban con fuego. De entre todas las cosas, se distinguió la espada Excálibur en medio de la sala, enterrada en una gran piedra.

Ben: ¿La espada en la piedra? ¿Es enserio? – dijo con las manos en sus bolsillos.

Wes: Es una medida de protección.

Supergirl: Sólo aquel que sea digno puede sacarla.

Chadwick: O aquel que tenga un suero de súper fuerza – dijo acercándose a la espada, apartando bruscamente a Wes y Kai.

Una vez que el rey estuvo al frente de la espada, este sacó el frasco con la fórmula del Dr. Jekyll y lo bebió todo de una vez. Inmediatamente, todo su cuerpo comenzó a reaccionar al suero, provocándole un gran dolor de por medio.

Ben: Oigan, no veo que esto termine bien.

Wes: Esto no es un juego, Ben.

Ben: Tranquilo, señor Green, yo lo arreglo. Superhéroe – dijo con una sonrisa confiada, señalándose a sí mismo. Kai y Wes lo miraron raro.

Supergirl: 90% segura – dijo cubriéndose parte de su rostro.

El suero finalmente terminó por transformar al Rey Eterno en un gran simio, casi del tamaño de Humungosaurio. Su rostro obtuvo bastante pelaje, su piel se tornó morada, sus dientes puntiagudos, su voz se hizo más gruesa, y parte de su armadura se rompió. El metal que cubría sus brazos, muslos, dedos de los pies y manos, y a los costados de su tórax se desprendieron. También la falda metálica que traía se había desprendido.

Chadwick: Desde este día en adelante, ocuparé el lugar que me pertenece – dijo tomando el mango de la espada – No sólo el rey de los Caballeros Eternos, sino el rey de toda la Tierra. Heme aquí proclamándote a ti, Excálibur... ¡MÍA! – hizo fuerza para sacar la espada, pero nada pasó – Dije, heme aquí proclamándote a ti, ¡mía!

El rey hizo más fuerza para sacar la espada, pero no consiguió resultados. Frustrado por esto, se acercó después hacia Ben.

Chadwick: Tú, transfórmate en alienígena y saca la espada de la piedra.

Ben: ¿El rey de los Caballeros me pide ayuda? – dijo burlándose mientras se señalaba con sus manos.

Chadwick: La espada – dijo acercando su rostro amenazadoramente – O sus vidas perecerán.

Ben: Qué rey del drama. Bien, ábreme espacio – dijo acercándose a la espada.

Kai: ¡No, Ben!

Wes: ¿Supergirl? – dijo algo nervioso.

Supergirl: 80% segura – luego cubrió su rostro con las dos manos.

Chadwick: Ay, rápido, ¿qué esperas? – dijo después de ver a Ben parado frente a la espada.

Ben: Muy bien, muy bien, no te enojes.

El castaño activó su Omnitrix y se transformó en su forma Tetramand otra vez. Con sus cuatro manos, tomó el mango de la espada e hizo fuerza para sacarla; pero igualmente no pasó nada.

Supergirl: 90% segura – dijo aún con su rostro cubierto, pero con sus dedos separados para poder ver.

Chadwick: ¡Hazlo!

Cuatrobrazos: Pues si es tan fácil, hazlo tú.

Ben volvió a su forma normal, sólo para volver a activar su reloj y convertirse en Humungosaurio. Tomó nuevamente el mango del arma, hizo fuerza; y esta vez parecía que la sacaría de la piedra, sorprendiendo a amigos y enemigos por igual.

Sin embargo, Ben se dio cuenta de que no sacó la espada de la piedra, sino que levantó la misma con piedra y todo.

Humungosaurio: Esta es una espada que se queda en la piedra.

Chadwick: ¡No, no, no! – dijo apartando a Ben de un golpe para golpear la roca – Esto debe ser un truco alienígena. ¡Destrúyanlos! – dijo señalando a los héroes.

Sir Morton: ¿Mi lord?

Chadwick: ¿Cómo te atreves a cuestionar a tu rey? ¡Destrúyanlos a todos!

Supergirl saltó directamente a atacar al Caballero Ninja, mientras Ben tomaba a Sir Morton y lo usaba como arma para golpear a los Caballeros gemelos.

Humungosaurio: Eso no va a pasar.

La Chica de Acero siguió luchando contra el robot, el cual usaba sus espadas para defenderse. Sin embargo, Kara logró quitarle sus armas ágilmente para después alejarlo con una patada. El Ninja disparó sus cuchillas contra ella, pero estas sólo rebotaron en su piel.

Supergirl: Ya estoy harta de ti – dijo para después atravesar su pecho de un golpe, por lo que este cayó al suelo desconectado – Descansa en pedazos.

Humungosaurio: ¡Vengan, salgamos de aquí! – dijo tomando a Kai y Wes.

Chadwick: No. Nadie se irá sin el permiso del Rey Eterno.

El ahora gran simio lanzó la piedra con la espada y esta chocó contra una válvula de agua, mientras Ben corría hacia la salida. Esta misma se cerró luego de que el agua comenzara a inundar de a poco la sala, por lo que el héroe usó la piedra para tratar de romper la puerta a golpes; pero no consiguió romper ni la puerta ni la roca.

Humungosaurio: Sí, les dije que esta espada jamás saldría de la piedra – inesperadamente, el Rey Eterno lo tomó del cuello.

Chadwick: ¡Nadie se va sin mi permiso! – dijo haciéndolo retroceder.

Supergirl: ¡Señor Green! – dijo viendo que él y Kai estaban rodeados por los otros Caballeros – ¡Tome! – dijo lanzándole una de las espadas del Caballero Ninja.

Wes: Gracias otra vez, Supergirl.

El veterano blandió la espada y cargó contra Sir Morton y los Caballeros gemelos, y logró desarmarlos a todos gracias a su entrenamiento Plomero.

Mientras tanto, Ben se quitó de encima al Rey Eterno y lo lanzó contra una estructura metálica en forma de trapecio, donde estaba encima otra válvula de agua. El simio se recuperó al instante y cargó contra el héroe, quien logró acertarle con su puño y someterlo en el suelo. Sin embargo, el rey logró zafarse al lanzarlo con sus pies contra la misma estructura, la cual se rompió y comenzó a liberar más agua.

Humungosaurio: ¿Ves qué pasa cuando haces eso? Ya no voy a ser amable contigo, amigo.

Ben cargó contra el Rey Eterno, quien esquivó dos golpes de puño y luego le acertó dos con sus propios puños, haciéndolo chocar de nuevo contra la misma estructura y dejarlo en el suelo.

Humungosaurio: Espero que Kara no haya visto eso.

Mientras tanto, Kai y Wes seguían enfrentándose a los Caballeros Eternos. El Plomero era bastante ágil con la espada y logró cortar una de las armas del Caballero con máscara triste. La morena hizo tropezar nuevamente a Sir Morton, quien soltó un disparo con su arma a otra válvula, haciendo salir más agua que arrastró a Kai por la sala; por lo que intentó sostenerse de la espada Excálibur, pero algo curioso pasó.

Kai: ¿La moví? – dijo sorprendida, pero esa distracción hizo que volviera a ser arrastrada por el agua.

Supergirl: Tengo que sacarlos de aquí – dijo para moverse hacia la puerta de salida – Como diría Diana: Hera, dame fuerza.

La kryptoniana comenzó a hacer toda la fuerza que podía, logrando levantar de a poco la puerta gruesa de piedra, y también haciendo que el agua se nivele un poco. Wes notó esto y se dirigió a los Caballeros.

Wes: No podemos perder el tiempo peleando, o ninguno saldremos de aquí con vida.

Sir Morton: Un Caballero siempre obedece a su rey – los gemelos asintieron.

Wes: Su rey se ha vuelto un monstruo loco de poder, literalmente – los Caballeros voltearon a ver al Rey Eterno.

Humungosaurio: Destruirnos a todos no hará que consigas esa espada – dijo mientras tenía sometido al rey – Causa y efecto, hermano. Aprende y vive.

El rey se molestó por esto y logró zafarse del agarre de Ben. Luego, lo tomó de su cuerpo y lo lanzó contra otra válvula, y también rompiéndola.

Sir Morton: En fin. Necesitamos una tregua temporal – los gemelos bajaron sus armas.

Supergirl: ¡Salgan de aquí rápido!

Todos voltearon a ver a la Chica de Acero, quien ya tenía la puerta lo suficientemente abierta para que salgan todos. Sin embargo, esto le estaba tomando mucho esfuerzo y fuerza, pues la puerta intentaba cerrarse sola y esto hacía que se formen pequeños cráteres bajo los pies de Kara.

Sir Morton: Es fuerte. Debió ser ella quien sacara la espada.

Supergirl: ¡Por favor, salgan rápido! ¡No resistiré mucho!

Los Caballeros Eternos fueron los primeros en correr por la puerta; pero antes de salir, Sir Morton se dirigió a la kryptoniana.

Sir Morton: Cuando volvamos a vernos, enemigos seremos una vez más.

Supergirl: Y yo que creía que ya éramos amigos – dijo irónica pero entrecortado por el esfuerzo. Sir Morton salió después.

Kai: ¡Ben! – dijo viendo que el héroe seguía peleando – Transfórmate en ti, hay que salir de aquí.

Humungosaurio: ¿Oíste, cara de chango? Es hora de irnos – dijo mientras lo sostenía de sus piernas, luego lo bajó y lo tomó del hombro – Vamos, después de ti.

Chadwick: No necesito tu caridad, Tennyson. Yo soy el Rey Eterno más poderoso de todos los tiempos, ¡y tú eres un mugroso alienígena!

El rey lo tomó de su mano y lo girar varias veces hasta lanzarlo contra el agua. Segundos después, Ben regresó a la normalidad mientras tosía un poco.

Ben: Espero que Kara no me haya visto.

Supergirl: ¡Sí, lo vi! – dijo algo fastidiada – ¡Ahora sal de aquí!

Ben volteó a ver al Rey Eterno, el cual se sentó sobre un trono al final de la sala. Soltó un poderoso rugido, pero el castaño sólo negó con la cabeza decepcionado. Luego, salió por la puerta.

Una vez que Ben salió, la Chica de Acero soltó la puerta, haciendo un gran retumbe y un pequeño temblor. Después de eso, voló hacia la superficie, donde estaban los demás esperándola.

Supergirl: ¿Y los Caballeros Eternos? – preguntó al no ver a los villanos.

Wes: Debieron evacuarse a otra parte del río.

Kai: O se evacuaron a un peor lugar.

Ben: Eso es asqueroso – dijo serio luego de reírse un poco. En ese momento, la puerta de la bóveda de Britannia se hundió.

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Unos minutos después, los héroes estaban en el puente de Westminster, detrás de la Javalina en la cual llegó el dúo neoyorkino.

Wes: Ben, Supergirl, gracias por su ayuda – dijo dándole la mano a ambos héroes.

Supergirl: Fue un gusto, señor.

Kai: Sí – dijo acercándose a Ben – Además, me encantó ver a Benlo... es decir, a Blitzwolfer de nuevo.

Ben: Pensé que dirías eso – dijo riendo un poco.

Kai: Y también casi me dio gusto verte, Ben – iba a darle un beso en la mejilla, pero fue apartado bruscamente por Kara.

Supergirl: Okay, amiga, guarda tu distancia – dijo seria.

Kai: Sí, lo siento – dijo algo asustada – No interrumpamos a la gran pareja – luego se fue arrastrando a Wes del lugar.

Ben: Las chicas son más baratas que cualquier alienígena – dijo mientras se dirigían a la Javalina.

Supergirl: Sabes que soy una chica, ¿verdad? – dijo molesta por el comentario.

Ben: En realidad...

Supergirl: En realidad, hoy duermes en el sofá.

Ben: ¿Qué? – quiso parar a su novia, pero esta avanzó más rápido a la nave – Rayos.

Una vez dicho y hecho todo, el dúo despegó rumbo a la Torre Metro en Metrópolis para dejar la Javalina. Después de eso, fueron en el auto de Ben hacia Nueva York, donde el castaño pasó la noche más incómoda de su vida.

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