Brooklyn, Nueva York

Departamento de Kara

Nos ubicamos justo donde quedó el anterior capitulo. Ben y Kara estaban frente a un ser que apareció de la nada y que se hacía llamar Mr. Mxyzptlk.

Mxyzptlk: Primero pondré el ambiente – frotó sus manos haciendo salir energía – ¡Velas! – un montón de estas aparecieron por toda la casa.

Kara: ¿Quién eres?

Mxyzptlk: Ahora música – ignorándola, hizo aparecer un cuarteto de cuerdas a un costado de la pareja.

Kara: ¿Qué rayos...?

Mxyzptlk: Ahora flores – hizo aparecer rosas rojas alrededor de las velas – Y para el plato fuerte... – se arrodilló frente a la kryptoniana – el anillo. Kara, cariño, ya lo dije. Soy tu único amor, tu alma gemela, tu media naranja, como dicen. Me llamo Mxyzptlk y te amo, Kara Zor-El.

Tanto Ben como Kara quedaron sin palabras. De la nada, un tipo hizo aparecer un montón de cosas con estilo romántico y estaba arrodillado frente a la rubia con un anillo en su mano.

Mxyzptlk: Dime, ¿te casas conmigo?

Kara: ¿¡Qué!?

Mxyzptlk: ~Yo te puedo enseñar...~ – comenzó a cantar.

Ben: ¡Oye! – el héroe lo tomó de su traje enojado – No sé cómo llegaste hasta aquí, pero ella está conmigo – el cuarteto de cuerdas desapareció.

Mxyzptlk: El otro candidato. No te vi, señor alto, atractivo y aburrido. Eres sólo un insignificante rival romántico.

Ben comenzó a sentirse extraño por dentro. No sabía por qué ahora, pero la presencia de este tipo hizo que olvidara que tenía el dispositivo más poderoso del universo en su muñeca e intentó golpear con su puño a Mxyzptlk. Sin embargo, este lo esquivó desapareciendo, para después aparecer al lado de Kara.

Mxyzptlk: Ser invisible te queda, sácale provecho a eso – con un chasquido, hizo desaparecer al héroe.

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Cuartel General de los Plomeros

Ben Tennyson apareció de la nada en medio de los cuarteles de los policías intergalácticos. Todos los presentes, incluido su abuelo Max, se le quedaron viendo; no por su repentina aparición allí, sino porque estaba en ropa interior, algo de lo que el héroe se dio cuenta después.

Ben: Oh... genial – dijo algo avergonzado.

Max: ¿Ben? – preguntó extrañado.

Ben: ¿Qué tal, abuelo? – dijo con una sonrisa nerviosa, para después pasar a una expresión seria – Ese sujeto está muerto.

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Departamento de Kara

Kara: ¿Qué hiciste con él? ¿Qué...? – preguntó sorprendida.

Mxyzptlk: Relájate, sólo fue a visitar a sus amigos Plomeros. Pero así es como deber ser; solos tú y yo, juntos, sin McCart-Ben por ahí – dijo acercándose a ella con el anillo – ~Cosas maravi...~

Kara: ¡Oye, ya basta, basta! – dijo molesta bajando la mano con el anillo – No sé quién eres, y cómo llegaste aquí Mxy... Mx...

Mxyzptlk: Mxyzptlk, se escribe como suena – hizo aparecer en letras mayúsculas su nombre.

Kara: De acuerdo... Mxyzptlk. Sólo empieza de nuevo, y hazlo lento. ¿De dónde eres?

Mxyzptlk: Ah, me llaman el caballero interdimensional. Pero no importa de dónde vengo, dulzura, ¡es hora de atar este nudo! – hizo aparecer un vestido de novia en Kara; con maquillaje, peinado y accesorios incluidos.

Kara: ¿¡Qué es...!? – vio el vestido – ¿Estás loco? No puedes ponerme un vestido de novia.

Mxyzptlk: ¿Por qué no? Es un Vera Wang.

Kara: Esto no es... correcto – dijo rechazando el anillo.

Mxyzptlk: Entiendo, lo siento, fui muy efusivo. Sólo que estoy extasiado, de al fin estar aquí contigo.

Kara: ¿Cómo sabes quién soy yo? – el ser chasqueó los dedos y un violinista apareció tocando un lento.

Mxyzptlk: Te he visto desde otras dimensiones, desde hace una eternidad de amor. No hay nadie como tú de donde vengo, Kara. Una mujer tan fuerte e independiente, como hermosa; eres valiente y hermosa – dijo lo último acariciando su brazo izquierdo.

Kara: De acuerdo, oye, escucha, escucha – dijo nerviosa retirando su mano – Me halagas; pero no me casaré contigo, Mxyzptlk – el violinista desapareció.

Mxyzptlk: Es gracioso. Soy un ser todopoderoso, pero esa es una cosa a la que no te puedo forzar. Eso y hacer que te enamores de mí, y evitar que cometas suicidio, o que bebas un batido también; pero lo demás sí. ¿Quién lo diría?

Kara: Siento decepcionarte, pero... es que no estoy interesada.

Mxyzptlk: No tienes que estarlo, pastelito. Sé lo que estás haciendo. Te haces la difícil; lo que me resulta encantador, por cierto.

Kara: ¿Q-Qué? No, yo no... me...

Mxyzptlk: Estás nerviosa, confundida, tu corazón se acelera. Tengo ese efecto en las mujeres, pero te diré que es lo que haré: te elegí como mi pareja, y te dejaré sin aliento con pasión y fervor hasta que te enamores locamente de mí. Y no temas, Kara Zor-El, tú te vas a enamorar de mí. Cuando te sientas adorada por el todopoderoso Mxy, no habrá vuelta atrás... Chau, mi amore.

Con un chasquido, el ser desapareció del hogar de Kara, junto con todas las decoraciones y el vestido de novia. La kryptoniana quedó totalmente sorprendida y extrañada, observando alrededor de su casa para ver que todo estaba normal y haciéndose en su mente la pregunta: "¿qué acaba de pasar?"

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La Atalaya

Al día siguiente, el dúo neoyorkino fue a la base espacial de la Liga de la Justicia para buscar ayuda sobre su reciente problema. Por suerte, el primo de Kara tenía conocimiento de lo que enfrentaban esta vez.

Superman: Así que fuiste visitada por Mr. Mxyzptlk.

Supergirl: ¿Tú ya lo conoces?

Superman: Es un ser de la Quinta Dimensión, me he enfrentado un par de veces a él. Las criaturas de la Quinta Dimensión poseen el poder de manipular la realidad a su voluntad, habilidades que se asemejan virtualmente a la magia.

Ben: Creo haberme enfrentado a uno en el pasado – dijo para después comenzar a recordar.

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Flashback, hace siete años

Regresando en el tiempo a cuando Ben era un niño, este se encontraba fuera del camper de su abuelo; el cual estaba estacionado en el Parque Nacional Yellowstone. El héroe estaba revisando su reloj cuando una luz grande se apareció frente a él.

– ¡Ben Tennyson! – dijo un ser con apariencia de duende, con un traje bordo elegante y sombrero bombín del mismo color. Este estaba flotando en el aire.

Ben: ¿Quién eres tú?

– No importa quién soy, escuché que tú eres el niño que derrotó a Vilgax. Quiero saber qué tan fuerte eres.

El ser hizo aparecer una gran arma de agua en sus manos y disparó un gran chorro de agua a Ben, el cual recibió de lleno en su rostro. Cuando el héroe iba a responderle, el duendecillo volvió a disparar el arma en su rostro; y esto mismo ocurrió una tercera vez, ocasionando que el ser se riera muy fuerte.

Ben: Muy bien, creo que ahora es mi turno.

Ben activó el Omnitrix y se convirtió en Insectoide. Aprovechando que el duende ser reía, disparó una gran cantidad de baba de su boca, la cual cubrió completamente al ser y lo pegó contra un árbol.

Insectoide: ¿Ahora quién es el chistoso? – dijo acercándose.

El ser logró sacar su mano derecha de la baba y chasqueó los dedos. Inmediatamente, la baba que lo apresaba desapareció, así como la transformación del héroe.

Ben: ¿Pero qué...? – volvió a activar su reloj y se convirtió en Diamante.

Diamante: A ver cómo te escabulles de esta – dijo para después disparar una serie de cristales.

El ser ni se inmutó e hizo aparecer delante de él una gruesa tabla de madera, en la cual se incrustaron todos los cristales. Luego, cambió la tabla por dos parlantes del tamaño de una heladera, mientras cambiaba su vestimenta a la de un rockero punk con una guitarra similar a la de Slash.

– Hora del rock – dijo con una voz grave y gruesa.

El ser tocó de una sola vez la guitarra, y de los parlantes salieron unas ondas de sonido tan grandes que resquebrajaron la forma del héroe hasta hacerlo caer en el suelo. Posteriormente, su transformación terminó.

Ben: ¿Quién rayos eres tú? – preguntó en el suelo.

– ¡Yo soy Znptlyx, el maestro de las bromas!

Una vez que se presentó, el ahora llamado Znptlyx chasqueó sus dedos e hizo aparecer a Ben sobre la puerta del camper haciéndole un calzón chino. El héroe gimió de dolor mientras procesaba cómo rayos llegó hasta allí.

Znptlyx: ¡JAJAJAJAJAJA! – se rio mientras sujetaba su estómago.

Fin del flashback

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Ben: Sólo se dedican a molestar, pero son muy peligrosos – dijo luego de tener un escalofrío por su recuerdo.

Superman: El par de veces que lo enfrenté sólo se dedicaba a jugarme bromas pesadas.

Ben: El abuelo Max utilizó un arma alienígena con el que peleé aquella vez para vencerlo – dijo recordando su pelea – Los Plomeros pueden ser de ayuda. Iremos a preguntarles después.

Superman: Avísenme si necesitan algo – con eso, el Hombre de Acero se retiró.

Ben: Entonces, respecto a lo último que estábamos...

Supergirl: Hablemos de esto en privado – dijo llevándoselo hasta un lugar apartado – Entonces, t-tú y yo... algo estaba pasando entre nosotros antes de que Mxyzptlk apareciera. Y yo enserio, enserio quiero volver a eso – dijo con una risita.

Ben: Oh sí, yo también.

Supergirl: Pero antes tengo de deshacerme de él.

Ben: Y es que de todas las chicas en el universo, ese gran bobo tenía que elegirte a ti como su "pareja".

Supergirl: Descuida; porque antes de que lo sepa, estará de vuelta en su dimensión, y tú y yo podremos continuar con lo nuestro. Lo prometo.

Ambos se sonrieron mutuamente, para después pasar el rato en la cafetería de la Atalaya pensando en una forma de detener al ser interdimensional.

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Bellwood, Nueva York

Durante la tarde, unos ladrones armados con pistolas, vestidos de negro y con pasamontañas asaltaban una joyería. Mientras la alarma sonaba, los delincuentes escapaban con el botín en varios bolsos.

– ¡Rápido, muévanse!

– ¡Deprisa!

Sin embargo, la Chica de Acero ya se encontraba en la Tierra para mala fortuna de ellos. Ella llegó volando rápidamente hasta el lugar.

Supergirl: ¡Amigos! – dijo aterrizando detrás de ellos – ¿Cuál es la prisa?

Los ladrones sacaron sus pistolas y abrieron fuego contra la kryptoniana, rebotando todas las balas en su cuerpo. Tal parece que estos tipos no eran muy listos.

Supergirl: Desperdician sus balas, saben que no me hacen daño.

Mxyzptlk: ¿Pero les harán daño a ellos? – dijo apareciendo repentinamente de la nada al lado de la Chica de Acero.

Supergirl: Mxy, ¿qué...?

Mxyzptlk: Hola, bombón.

Con sus poderes, les quitó las pistolas a los maleantes y las apuntó contra ellos en el aire. Los tipos intentaron huir pero el ser interdimensional los paralizó con energía azul como si fueran látigos atrapando sus piernas.

Supergirl: ¿Qué haces?

Mxyzptlk: Vi esto en una película – con un chasquido, quitó el seguro de las pistolas.

Supergirl: No.

El ser disparó las armas. Viendo lo que iba a hacer, Kara se movió a gran velocidad e hizo rebotar todas las balas en su cuerpo, además de atrapar una última con su mano.

– Gracias, Supergirl – dijo uno de los ladrones. Sin embargo, recibió el codazo de una molesta Kara en su rostro.

Mxyzptlk: Llegó la hora del romance.

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La Atalaya

Después del incidente en Bellwood, Mr. Mxyzptlk desapareció de la nada dejando sola a una muy molesta Supergirl. Esta volvió un rato más tarde a la Atalaya, donde se reunió con Ben.

Ben: ¿Dónde está Mxyzptlk?

Supergirl: No lo sé, desapareció. Creí que estaba tras de mí, pero casi aniquila a esos sujetos. Es más peligroso de lo que creí.

Ben: Lo sé. J'onn mandó a traer de los cuarteles de los Plomeros artefactos alienígenas que podrían enviar a Mxyzptlk de vuelta a su dimensión o suprima sus poderes. Yo me encargaré de él – dijo lo último con confianza.

Supergirl: Espera, ¿qué harás? – dijo algo temerosa.

Ben: Sólo terminaré con él de una buena vez y ya.

Supergirl: ¿Qué? No, sabes que no somos asesinos.

Ben: No dejaré que un diablillo te acose, Kara – dijo molesto.

Supergirl: Sé cuidarme sola, Ben. Mejor yo me encargaré.

Esa pequeña conversación dejó molesta igualmente a la kryptoniana y se fue de ahí. Ben sólo se quedó unos segundos y también se fue molesto.

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Brooklyn, departamento de Kara

En la noche, para despejar su mente, Kara invitó a su clon Karen Starr/Power Girl a su departamento. Esta última estaba vestida de forma casual y con lentes para guardar apariencias.

Kara: Puedo lidiar con Mxyzptlk, pero es Ben quien se enfurece. Tiene algo personal en su contra – dijo llegando a la puerta de su hogar.

Karen: ¿No crees que Ben esté celoso?

Kara: Ah, no; ¿de Mxyzptlk? No, porque eso sería una locura – cuando entró, vio su departamento rodeado de rosas rojas, por todas partes – Mxy es... persistente.

Karen: Sí... – dijo impresionada.

Kara: ¿Sabes qué? ¿Por qué no llevas esto a tu casa para decorarla? – dijo entregándole un jarrón lleno de rosas – Oí que ahora vives en San Francisco.

Karen: Sí, así es. Pero quería regresar un rato aquí, es la primera ciudad que defendí... en cierta forma – dijo con algo de vergüenza.

Kara: Oh, entonces hay que ir al Palazzo. El calamar relleno de boloñesa es delicioso. Tal vez esté reservado, pero la señora Grant es clienta regular – decía mientras limpiaba su mesa de flores.

Karen: ¿Y no podría ser un lugar menos ostentoso?

Kara: ¿Burger Shack quizás? – dijo mientras encendía la televisión.

Karen: Mucha comida chatarra.

Kara: Bueno, ¿entonces qué es lo que te gusta? Nueva York es grande, seguro hay algo para ti – dijo mientras servía sodas para ambas.

Karen: Bueno, me gusta whisky, y... oh, el tiramisú; es delicioso, lo pondría en cada comida.

Kara: Mmm... creo que el Manhatta sería adecuado. Iremos en un rato entonces – dijo chocando vasos con Karen.

– Noticias de última hora en Bellwood...

De repente, en la televisión mostraron un ataque de un supervillano en el barrio de Ben. Karen se sorprendió por la apariencia del villano, pero Kara abrió los ojos como platos al reconocerlo. Se trataba de un Mecamorfo Galvánico alto y robusto, parecido a un dinosaurio, con líneas rojas en vez de verdes.

Kara: Malware, ¿cómo es que regresó?

Karen: ¿Lo conoces?

Kara: Hace tiempo, ¿vienes?

Karen: Ah, lo siento, o-olvidé mi traje en casa – se excusó nerviosa.

Kara: ¿Qué? – dijo incrédula – Primera regla de un kryptoniano en la Tierra: nunca salgas sin tu traje debajo de tu ropa.

Después de eso, la kryptoniana salió volando por su ventana mientras su ropa y lentes quedaron en el marco de la misma.

Karen: Creí que eran los lentes – dijo para sí misma.

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Bellwood

Malware estaba peleando contra policías en las calles. Los uniformados disparaban sus armas contra él sin tener ningún efecto, mientras que el Mecamorfo lanzó un auto por los aires causando una gran explosión. Detrás de él, la Chica de Acero aterrizó.

Supergirl: Oye – el villano volteó hacia ella – Te creí una escultura.

Malware: Y tú no serás más que nada.

La kryptoniana disparó su visión de calor sobre Malware, el cual fue empujado hacia atrás hasta chocar contra un auto. Una explosión detrás de Kara la distrajo unos segundos, segundos que aprovechó el Mecamorfo para disparar su cañón contra ella; haciéndola chocar contra un auto.

En ese momento, Ben se apareció en el lugar con un smoothie en mano y lo tiró al suelo cuando vio que su viejo enemigo estaba peleando con su novia. El villano también notó su presencia.

Malware: Tennyson.

Ben: Tú. ¿Cómo es que regresaste?

Instantáneamente, Ben activó su reloj para transformarse en el último alienígena que había derrotado a Malware: Feedback. Sin embargo, el Omnitrix lo convirtió en su forma Appoplexian.

Rath: ¡Déjame decirte algo, Malware! ¡Tal vez Rath no pueda convertirte en estatua, pero puede convertirte en su saco de boxeo!

Mostrando sus garras, el tigre saltó alto hasta donde estaba el Mecamorfo. Pero Malware fue más rápido y le disparó su cañón en el aire, haciéndolo volar varios metros lejos y chocar contra una parada de bus.

El héroe regresó a la normalidad después de eso. Mientras se levantaba del suelo, la Chica de Acero se acercó a él para ver cómo estaba.

Supergirl: ¿Estás bien?

Ben: Yo iba a preguntarte lo mismo.

El dúo iba a atacar nuevamente a Malware; pero antes de que Kara vuele o Ben toque el Omnitrix, un sonido y una figura volando en el cielo llamó su atención, junto a la de otras personas en el lugar.

– ¡Miren, arriba en el cielo!

– ¿Es un ave?

– ¿Es un avión?

– Es...

Repentinamente, la figura golpeó a Malware y se lo llevó puesto a gran velocidad del lugar. Luego, este reapareció para revelar que se trataba de Superman; quien junto a su prima apagaron un incendio con sus alientos árticos, el cual podría haber salido peor si llegaba a un tanque de combustible de un camión.

Supergirl: ¿Superman?

El Hombre de Acero se dio vuelta flameando su capa, para revelar que se trataba de Mr. Mxyzptlk disfrazado de Superman; pero en vez de una S en su pecho, tenía una M.

Mxyzptlk: Te equivocas.

Supergirl: ¿Mxy? ¿Es enserio? – dijo señalando su traje.

Mxyzptlk: Creí que necesitarías ayuda extra, Super-bombón.

Ben: Ah, disculpa, pero yo ya estoy aquí; así que...

Mxyzptlk: ¿Tú? Qué hilarante. Tienes suerte de que pasara por aquí, Supergirl. ¿Crees que este fraude te habría ayudado a salvar la ciudad? ¿Con qué súper poderes? ¿Será el de saltar sobre Malware como una gacela?

Supergirl: Oye, eso...

Ben: ¿Te gustaría ver qué súper poderes tengo? Porque se me ocurren diez aliens que podrían hacerte pedazos ahora, ¿te interesa? – dijo a punto de presionar su Omnitrix.

Supergirl: Oye, tranquilo... – dijo deteniéndolo.

Mxyzptlk: Hablas como todo un bárbaro, no eres otra cosa más que un tonto. Porque esta diosa, requiere de un hombre que la iguale en poder e ingenio, que pueda auxiliarla cuando los villanos se aparezcan.

Supergirl: Aguarda, lo de... ¿lo de Malware fue tu idea?

Ben: ¿No ves lo que está haciendo? Está creando un caos para jugar a ser el "héroe" e impresionarte.

Mxyzptlk: ¿Eso qué tiene de malo? Un pobre diablo como tú jamás podría ofrecerle nada.

Ben: ¿Por qué mejor no dices tu nombre al revés y regresas por donde viniste?

Supergirl: Un segundo, ¿así lo envías a su dimensión?

Ben: ¡Y además tienes cara de rata! – dijo furioso ignorando a Kara.

Supergirl: ¡Suficiente, basta, basta! – gritó para terminar con la pelea – Ben, sal de aquí, vete.

Ben: ¿¡Por qué!? ¿¡Y el qué!? – dijo mientras Mxyzptlk se burlaba de él haciendo señas de que se vaya.

Supergirl: Te dije que yo me haría cargo, ahora vete – dijo muy seria.

Ben: ... Bien – dijo mientras se iba, a la vez que el ser se despedía burlonamente con su mano.

Mxyzptlk: Uh, creí que nunca se iría. Al fin, querida, estamos solos...

Supergirl: ¿Qué es lo que tengo que hacer para sacarte de este planeta?

Mxyzptlk: Ya te lo dije, necesito dos palabras: "sí, acepto" – dijo serio – O las cosas se pondrán feas en tu mundo.

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La Atalaya

Luego de ese encuentro con el falso Malware y Mxyzptlk, el dúo neoyorkino volvió a la base de la Liga de la Justicia. Pero hay que aclarar que no estaban felices, los dos.

Ben: Oye, no puedo creer que te unieras a ese ruin, nefasto y tonto presumido.

Supergirl: No me uní a él.

Ben: ¡Me enviaste lejos para pasar tiempo con ese acosador!

Supergirl: ¡Te envié lejos para que no te enviara hasta Siberia! Además, tú estabas fuera de control – dijo mientras seguía caminando.

Ben: Oh, sí, siento haber estado ocupado defendiéndote a ti – Kara se dio vuelta y se acercó a él.

Supergirl: No soy una damisela en apuros, soy Supergirl y puedo defenderme sola; y aún más importante, te dije que yo me encargaría de él – después volvió a intentar retirarse.

Ben: A veces no eres la mejor para juzgar de qué puedes encargarte. Oh sí, ya lo dije.

Supergirl: ¿En serio? – dijo volviéndose a dar vuelta.

Ben: Sí.

Supergirl: ¿Por eso no me dijiste que el secreto para sacar a Mxy de la Tierra era haciéndolo decir su nombre al revés, porque no creíste que podía? – dijo acercándose a él.

Ben: No, no te dije eso porque nunca funciona. En primera: ya es difícil decirlo hacia adelante, y en segunda: podrá ser un boca-floja, pero no es un estúpido.

Supergirl: Debiste decírmelo.

La Chica de Acero se alejó del héroe molesta. Mientras la discusión seguía, los miembros de la Liga de la Justicia que pasaban cerca los veían con rareza, puesto que les sorprendía que la pareja "perfecta" del grupo estuvieran discutiendo de esa forma.

Ben: Oye, ¿qué? – dijo yendo detrás de ella – Fuiste muy dura conmigo, Kara, ¿está bien? Y te quedaste con él cuando él trajo a... oye, ¡oye!

Supergirl: ¿¡Qué quieres!? – dijo dándose vuelta, en un susurro para evitar gritar.

Ben: Él trajo a un supervillano y lo dejó suelto en Bellwood, ¿pero lo reprimiste? No, no, no; porque "Mxy" chasquea los dedos y llena de flores tu casa, chasquea sus dedos y tiene un vestido de... de no-se-qué.

Supergirl: Oh, por Rao – dijo riendo un poco.

Ben: ¿Qué?

Supergirl: Estás celoso – dijo con una sonrisa burlona.

Ben: ¿Q-Qué? Eso es ridículo.

Supergirl: ¿Enserio?

Ben: ¿Sabes qué, Kara? Sabía que eras algo vanidosa, sólo un poco.

Supergirl: No soy vanidosa.

Ben: Pero esto es exagerado, porque yo no estoy celoso. Estoy molesto porque tienes una doble moral justo ahora.

Supergirl: Sí, tienes razón. No quiero que estés a su nivel porque espero un mal comportamiento de él, pero de ti esperaba un mejor comportamiento – dijo para volver a retirarse.

Ben: ¡Ah, no, no, no! – dijo poniéndose frente a ella – No quieras culparme de esto a mí. Porque yo soy el que está en esta situación en este momento. ¿Qué tal, Diana? – saludó a la Amazona, quien pasaba por ahí – Y debería estar enfadado.

Supergirl: ¿Sabes qué? Creí que podías madurar, enserio lo creí...

Ben: Ay, aquí viene. Adelante, dilo.

Supergirl: Pero sigues siendo el mismo arrogante, egoísta...

Ben: ¡Claro que sí! – gritó sarcástico.

Supergirl: ¡Y presumido que siempre has sido, sí! – se quedaron un segundo en silencio – Fue una equivocación lo nuestro.

Ben: Concuerdo.

Supergirl: Nunca debimos...

Ben: No.

Supergirl: Genial.

Ambos se quedaron callados un poco. En sus mentes, se estaban arrepintiendo de esas últimas palabras que se dijeron. Sin embargo, ambos eran muy orgullosos y estaban molestos, así que no cederían.

Ben: ¿Acabarás con él?

Supergirl: No.

Como dije, orgullosos. La kryptoniana se fue a otro lado de la Atalaya, mientras que Ben se fue por el lado opuesto un segundo después. Todos los demás que presenciaron el pleito se quedaron sin palabras.

Mujer Maravilla: Clark, ¿acabas de ver lo mismo que yo? – dijo incrédula.

Superman: Sí... creo que sí – contestó en igual estado.

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Cuartel General de los Plomeros

En los laboratorios de los Plomeros, Ben estaba tomando unos smoothies junto a Blukic y Driba mientras ellos chequeaban las armas alienígenas que el Detective Marciano había pedido.

Ben: Y me dijo que sigo siendo un presumido y arrogante – dijo para después dar un sorbo a su batido – ¿Ustedes qué creen?

Blukic: Creo que no entiendo nada de parejas.

Driba: Nada de nada – dijo mientras también daba un sorbo a su smoothie.

Ben: Sí, tal vez me exalté demasiado – dijo para después ver las armas – ¿Qué es todo esto?

Driba: Son las armas alienígenas más avanzadas para la Quinta Dimensión.

Blukic: Quita tu mano, te estoy vigilando – dijo golpeando la mano de Ben, quien la acercó sólo para ver.

Ben: Está bien, está bien – vio un dispositivo parecido a un collar con una perla azul en medio – ¿Y eso sirve?

Blukic: Es de las más probadas con la energía de la Quinta Dimensión.

Driba: Emite ondas que bloquean la conexión con ella y tipos como Mxyzptlk

Blukic: Pero debes mantenerlo presionado para que funcione – dijo mientras terminaba su smoothie.

Ben: Cool – luego tuvo una idea – Oigan, ¿ese era Rook leyendo los últimos avances de tecnología Galvan?

Blukic/Driba: ¿¡Dónde!? – dijeron para salir corriendo por la puerta.

Ben: Siempre funciona – dijo mientras tomaba el collar y salía de allí.

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La Atalaya

Horas más tarde, en la base de la Liga, Kara estaba en la cafetería con una libreta en mano leyendo una palabra sin parar para aprenderla bien.

Supergirl: Kltp... zyxm... Kltpzyxm... Kltpzyxm. Kltpzyxm, Kltpzyxm...

Superman: ¿Qué idioma es ese? – dijo llegando junto a ella.

Supergirl: Es Mxyzptlk dicho al revés. Tal vez Ben tiene razón, ¿cómo lo obligaré a que diga esto? – dio un suspiro – No debí ser tan dura con él.

Superman: ¿Todo está bien entre ustedes? Parecían dos desconocidos hace rato.

Supergirl: Desde que llegó Mxy, Ben está celoso de él. No quiere admitirlo, pero es demasiado obvio – dijo refunfuñando – Le dije que yo me encargaría de él pero no me escuchó, y además no me dijo que de esta forma devolvería a Mxyzptlk de vuelta a su dimensión.

Superman: Tal vez también tuve culpa en eso.

Supergirl: ¿Qué?

Superman: Es la única forma en la que vencí a Mxyzptlk en el pasado. No quise decirte porque...

Supergirl: Porque nunca funciona – lo interrumpió.

Superman: Por lo menos no naturalmente. Tienes que ser creativa en ese sentido – dijo dándole una idea inconscientemente.

Supergirl: Creo que tengo algo, ¿dónde están las armas que J'onn pidió a los Plomeros?

Superman: Acaban de llegar, están haciendo un inventario para ver que todo esté en orden – dijo mientras iban volando hacía la bahía de Javalinas.

Al llegar, vieron una nave de Plomeros junto a dos de ellos y tres miembros del personal de trabajo de la Atalaya. Estaban descargando cajas de varios tamaños a la vez que anotaban todo lo que tenían.

Superman: Todas estas armas podrían combatir a seres de la Quinta Dimensión, en teoría.

– Hay una vacía – dijo un empleado de la base – Al parecer, vino así desde la base.

Superman: ¿Pero por qué mandarían una caja vacía a...? – luego se dio cuenta – Oh no.

Supergirl: Ben.

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Bellwood

Ben: ¡MXYZPTLK! – gritó encolerizado en medio de un callejón – ¡Muéstrate, maldito tonto fanfarrón!

Mxyzptlk: Ay, pero qué fastidio – dijo detrás de él sobre un contenedor de basura – Se trata de ti.

Ben: Vine a retarte, Mxyzptlk.

Mxyzptlk: Un desafío humano. Nunca tuve uno de esos – se bajó del contenedor – ¿Por la mano de Kara?

Ben: Sí – dijo acercándose.

Mxyzptlk: ¿A muerte? – dijo haciendo lo mismo.

Ben: Sí.

Mxyzptlk: Acepto – dijo ya frente a él.

Ben: Genial. Pero antes...

Mxyzptlk: Tsk, tsk – lo interrumpió con su dedo – Amigo, si vamos a tomar parte en un duelo, haremos esto como caballeros.

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Con un chasquido, Mxyzptlk hizo aparecer a Ben en medio del escenario de un teatro con ropas de la época de los fundadores. Tenía una camisa blanca con pliegues en las mangas, un chaleco verde con varios botones, un corbatín blanco, y un abrigo negro sin abrochar. Tenía pantalones beige holgados con botas negras hasta las rodillas.

Ben: ¿Qué de...?

Mxyzptlk: ¿Qué le parece su atuendo, monsieur  Hamilton? – dijo desde el barandal de una tribuna.

El también tenía una camisa blanca con pliegues en las mangas, chaleco negro, corbatín negro, y abrigo rojo sin abrochar. Pantalones negros, y botas del mismo color hasta las rodillas.

Mxyzptlk: Yo prefiero el estilo de Aaron Burr. Tenía mala reputación, sí – se apareció detrás de Ben con un maletín sobre un atril – Pero seamos honestos, era el único que sabía abrirse paso con una pistola – sacó dos pistolas del maletín – ¡El inicio de las pistolas, tan revolucionario! Me encanta.

Ben: Sí, no necesito esto – dijo tirando la pistola al suelo – Tengo algo más efectivo.

Ben sacó el collar y lo apuntó contra Mxyzptlk. Este emitió una luz que envolvió por completo al ser, el cual chasqueaba los dedos sin que pasara nada.

Mxyzptlk: Oh no.

Ben: Oh sí, ¿enserio creíste que me tragaría el hecho de que me darías un arma que pudiera matarte? ¿Qué tan tonto crees que soy?

Ben activó rápidamente su Omnitrix, y se transformó en Multiojos. Luego, sacó el ojo de su pecho y disparó un rayo que envió a Mxyzptlk unos metros lejos.

Mxyzptlk: Me desconectaste de la Quinta Dimensión, Opticoid. Pero aún así se una o dos cosas, sobre una pelea alienígena.

Multiojos: Y yo sé una o dos cosas, sobre patear traseros dimensionales.

Ben disparó más rayos de sus múltiples ojos, los cuales algunos lograba esquivar el ser interdimensional. Sin embargo, uno le dio en el pecho, haciéndolo volar del escenario hasta el pasillo de en medio de las butacas.

Ben saltó encima de él y le dio un fuerte golpe al estómago, sacando mucho aire de Mxyzptlk. Luego, con un pie en su pecho, volvió a su forma normal.

Ben: ¿Enserio crees que Kara estaría con un tipo como tú?

Mxyzptlk: ¿Acaso crees que quiere estar contigo? ¿Tú qué puedes ofrecerle? Yo podría darle todo; no hay comparación entre tú y yo, y lo sabes. Soy un dios y tú un don nadie.

Ben: Tienes razón en algo, no hay comparación entre nosotros – lo tomó del cuello – Yo soy Ben Tennyson, portador del Omnitrix, salvador del universo, y miembro de la Liga de la Justicia. ¿Tú? Tú sólo eres otro loco que terminará en el Vacío – dijo molesto.

Mxyzptlk: Lo dudo... porque yo tengo esto – mostró en su mano el collar.

Ben: Oh oh.

Con sus poderes, desapareció el collar y colgó a Ben con una cuerda y cadenas sobre el escenario; impidiendo que pudiera usar su reloj, mientras Mxyzptlk lo apuntaba con su pistola.

Mxyzptlk: Tienes mis respetos, Tennyson – cargó la pistola – Espero que no te olviden.

Supergirl: ¡Alto! – dijo después de entrar por el techo y aterrizar junto a ellos.

Ben: Kara...

Mxyzptlk: Cariño, este maniático quiso aniquilarme. Será mejor para todos que me deshaga de él.

Supergirl: ¡Me casaré contigo! – dijo para impedir que mate al héroe.

Mxyzptlk: ¿Lo harás?

Ben: ¿Lo harás?

Supergirl: ... S-Sí – respondió nerviosa – Ya lo pensé, y-y tienes razón. Eres talentoso, brillante, y juntos haríamos cualquier cosa. Hazme tu esposa.

Mxyzptlk: Querida, tú y yo seremos la pareja más poderosa.

Ben: Kara, no... – el ser lo desapareció, cayendo las cuerdas y cadenas en el suelo.

Mxyzptlk: Hablaba demasiado. Hagamos esto de una vez, iré por el oficial. ¿Qué quieres, al Papa o al Rabbi Lubavitch?

Supergirl: Significaría mucho para mí, el seguir la costumbre de Kryptón y casarme en el suelo de mi pueblo.

Mxyzptlk: Suelo kryptoniano, ahora mismo.

Supergirl: ¡No, no! – dijo deteniéndolo de chasquear los dedos – Yo hablaba de la Fortaleza de la Soledad. Usaré el vestido de mi madre, te veré mañana a las 12.

Mxyzptlk: Estaré esperando... – le dio un beso en la mejilla – esposa.

El ser chasqueó los dedos y desapareció del teatro, dejando sola a Kara para pensar sobre su futura boda.

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Brooklyn, departamento de Kara

Al día siguiente, la kryptoniana se había levantado temprano debido al día que iba a tener hoy. Ya le había pedido a Superman que no visite la Fortaleza de la Soledad por el día de hoy, además de avisar a su trabajo que faltaría por "problemas familiares".

Kara: Sí, ya voy – dijo al sentir que alguien golpeaba desesperadamente su puerta.

Ben: Ay, qué bueno que aún estás aquí – dijo mientras entraba al departamento.

Kara: Ben...

Ben: Escucha, aún no es tarde, ¿sí? Tú tienes razón, tienes razón en todo, estoy celoso. Tengo un montón de alienígenas en el Omnitrix; pero por supuesto que quisiera chasquear mis dedos, y-y tan sólo darte todo lo que tú deseas. Y me mata el que pueda hacer eso por ti y yo no... no pueda. Actué como un tonto, lo sé; pero por favor, no te cases con él, ¿quieres? Te prometo que puedo ser mejor...

Kara: No se trata sólo de tus celos, Ben – lo interrumpió habiendo escuchado suficiente – Es que te sientes superior y tu ego, te dije que me encargaría de Mxy y no me escuchaste.

Ben: Te juro que ahora te escucharé. Kara, te respeto; pero por favor, sólo dame otra oportunidad.

Kara: Lo siento, no lo haré. Me casaré con Mxyzptlk – dijo firme.

Ben: ... Kara, no – dijo sintiendo que algo se derrumbaba en él.

Kara: Escucha, no estoy enamorada de él; pero es la única forma de evitar que mate a otras personas o que te asesine. ¿Y sabes qué? Tiene un excelente punto. Tiene un poder infinito que podría usar para ayudarme a luchar por la justicia... Seríamos un gran equipo.

Ben: ... Creí que nosotros lo éramos. Me dijiste que no querías perder esto.

Kara: ... Somos muy diferentes, Ben – dijo evitando mirarlo. Luego fue hasta su puerta y la abrió, indicándole a Ben que se vaya – Disculpa.

Ben se fue sin decir nada. En su mente, parecía que su mundo se vino debajo de un solo golpe. Hasta hace tres días, estaba feliz por haber salvado al planeta de otra invasión alienígena; y ahora, estaba perdiendo a la chica por la cual realmente se había enamorado.

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Fortaleza de la Soledad

Llegado el mediodía, Mr. Mxyzptlk había llegado en una ola de energía hasta la fortaleza kryptoniana. Este estaba vestido con un esmoquin elegante que consistía en un saco negro, camisa blanca, pantalones y zapatos negros, además de un moño negro. Traía en sus manos una botella de champagne para celebrar después de la boda.

Mxyzptlk: Kara, cielo, ¿dónde estás? – no recibió respuesta – Es hora. Kara, dijiste a las 12 y llegué puntual – siguió sin recibir respuesta – ¿¡Kara!?

– ¡Ya te escuché!

Mxyzptlk volteó feliz al sentir llegar detrás suyo a la Chica de Acero; pero su sonrisa se desvaneció al ver que ella estaba con su traje de heroína, y también bebiendo un smoothie.

Mxyzptlk: ¿Dónde está el vestido, y... las flores, los bocadillos...? – dijo extrañado para ser interrumpido por Kara, quien dio largo suspiro al terminar su smoothie.

Supergirl: Te diré algo, Mxy... No me casaré contigo.

Mxyzptlk: ¿De qué hablas?

Supergirl: Te traje a la Fortaleza en caso de que te pusieras violento porque no quería que dañaras a nadie al darte la noticia. Lo nuestro no funcionará, jamás.

Mxyzptlk: Pero tú dijiste... ¿No me amas?

Supergirl: Amar no es darle órdenes a alguien, o forzar a alguien a casarse. Amar es poner las necesidades del otro sobre las tuyas.

Mxyzptlk: ¿Entonces me trajiste hasta aquí sólo para rechazarme? – chasqueó sus dedos y la estatua gigante de Jor-El detrás suyo cobró vida – Tendrás que explicarle tu catastrófica falta de juicio a tu familia. ¿Qué pasa, tío Jor-El? ¿Podrías hablar con Kara hasta que entre en razón y sea mi esposa? ¿¡Lo harás!?

El ser volvió a chasquear sus dedos, y la estatua atacó a la Chica de Acero intentando aplastarla con su mano. Ella lo esquivó elevándose en el aire, donde el falso Jor-El intentó golpearla, mientras Supergirl esquivaba volando a su alrededor.

Mxyzptlk: Te ofrecí el mundo, Kara Zor-El. Todo lo que quisieras y tú lo rechazaste. ¡Te pude hacer una diosa como yo!

La estatua logró conectar un golpe a la kryptoniana, y esta se estrelló en el suelo. Sin embargo, ella se levantó un segundo después sin problemas.

Supergirl: No quiero ser una diosa, Mxy. Sólo quiero que te vayas de la Tierra – dijo para volver a elevarse hasta la estatua.

Mxyzptlk: ¡No me dirás qué hacer hasta que te cases conmigo!

Supergirl: Lo siento, tío Jor-El – dijo para después atravesar la estatua de un solo golpe, partiéndola a la mitad.

Mxyzptlk: ¿Crees que es lo mejor que tengo? – dijo mientras Kara aterrizaba frente a él – Con un chasquido, destrozaría toda la Tierra. Y a donde quieras que vayas, kryptoniana, te asecharé por el universo hasta que admitas que me amas.

Supergirl: Ya estoy harta de esto, Mxyzptlk; y estoy harta de ti. ¿Quieres enloquecer? Adelante.

La Chica de Acero se fue hasta la computadora principal de la fortaleza y activó un código de tres dígitos. El tablero de la misma se encendió de color verde, un sonido grave se escuchó, y luego la IA de la misma habló.

– Sellando la Fortaleza de la Soledad.

Mxyzptlk: ¿Qué haces, Kara? – preguntó preocupado.

Supergirl: Configuré la caldera atómica para que se autodestruya.

Mxyzptlk: ¿La caldera atómica?

Supergirl: La Fortaleza contiene uno de los hornos de fusión más poderosos de la Tierra, lo sobrecargaré con la energía de los cristales – dijo mientras el tablero de la computadora cambiaba de color a rojo.

Mxyzptlk: De acuerdo, bueno... ay, Kara, no te apresures. ¿T-Tal vez podríamos sólo...?

– Fusión de la caldera atómica incrementada al 200%.

Supergirl: Cuando la caldera se sobrecaliente, explotará con la fuerza de una bomba de 400 megatones. La Fortaleza está sellada y contendrá la explosión, pero cualquiera dentro de ella va a...

Mxyzptlk: Suena mal.

Supergirl: No puedes evitar que me sacrifique, está en las reglas.

Mxyzptlk: De acuerdo... A-Ah, sólo hay espacio para un demente en esta relación. Tal vez deberíamos cancelar lo que hiciste, y... ¿qué tal discutirlo con una taza de té? – dijo bastante nervioso.

Supergirl: Estar contigo sería vivir todos los días en conflicto con mi corazón, Mxyzptlk. Preferiría morir aquí que vivir contigo.

– Inicia conteo de la detonación de la caldera atómica.

Mxyzptlk: Te diré algo – dijo intentando sonar seguro – Yo creo que mientes. No creo que quieras destruir todo esto.

– La caldera atómica detonará en un minuto – un temblor se sintió en el lugar.

Mxyzptlk: ¡De acuerdo! ¡Por favor, haré lo que sea! No te suicides.

Supergirl: Lo siento. Ah, no te diré el código de cancelación – dijo sin importancia.

Mxyzptlk: ... Hay un código.

Esperanzado, el ser fue hasta la computadora para tratar de adivinar el código de cancelación. Sin embargo, todo en ella estaba en kryptoniano.

Mxyzptlk: No puedo leer esto – dijo para hacer aparecer y hojear un diccionario kryptoniano.

– La caldera atómica detonará en 30 segundos.

Mxyzptlk: ¡No hay tiempo para aprender este tonto idioma! – hizo desaparecer el diccionario y se arrodilló frente a Kara – Por favor, te lo estoy implorando, no hagas esto. ¿Quieres la paz mundial? La tendrás, puedo hacer que pase. Sólo no te suicides, el mundo necesita a Supergirl.

– La caldera atómica detonará en 15 segundos.

Mxyzptlk: ¡Por favor, dime el código! – dijo alterado. La Chica de Acero decidió ceder ante sus súplicas y fue junto con él hasta la computadora.

Supergirl: Presiona este – señaló un botón.

Mxyzptlk: Sí – dijo luego de presionarlo.

– La caldera atómica detonará en 5 segundos.

Supergirl: Y este... y este... y, ah... este...

– 4... 3...

Supergirl: Este... este... este...

– 2...

Supergirl: Y... este – cuando presionó el último botón, el tablero cambió de color a azul.

– Detonación de la caldera atómica cancelada.

Mxyzptlk: Sí.

El ser estaba emocionado de haber salvado a su amor, pero luego su emoción se fue al ver el código traducido del kryptoniano en forma de holograma y en mayúsculas: KLTPZYXM.

Mxyzptlk: No... Me hiciste escribir mi nombre al revés.

Supergirl: Sí. En mi trabajo, aprendí que a veces escribir algo es más sincero.

Mxyzptlk: Me engañaste, Supergirl – dijo molesto.

Supergirl: No. No, yo seguí las reglas. Dijiste tu nombre al revés, volverás a la Quinta Dimensión y sin hacer preguntas.

Mxyzptlk: Eso es todo, eres una tramposa. Ahora voy... – intentó chasquear sus dedos, pero su mano comenzó a desaparecer – No, ya comenzó. Yo sólo quería... quería que alguien me amara – dijo lo último resignado.

Supergirl: No puedes forzar el amor, Mxyzptlk. Debes dejar que llegue a ti... Y para mí ya llegó.

Después de eso, Mr. Mxyzptlk desapareció totalmente, regresando a la Quinta Dimensión. Kara volteó para ver que todo regresó a como estaba; como la estatua de su tío Jor-El, la cual estaba intacta y en su lugar.

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Brooklyn, departamento de Kara

Durante el resto del día, la kryptoniana se limitó a trabajar en CatCo y detener algún que otro crimen menor. También había evitado a Ben, hasta en la noche cuando lo invitó a venir a su hogar. Este tocó la puerta al llegar.

Kara: Hola.

Ben: Hola... ¿puedo...? – dijo haciendo seña para entrar, Kara asintió – Gracias. Yo solamente quería... quería decirte que eres increíble. Sí, lo eres, tú pudiste engañar sin ayuda al embustero más ingenioso del universo; y lo hiciste a tu manera, sin tener que pelear. No debí dudar de ti, porque eres... ya sabes, eres tú.

Kara: Gracias.

Ben: También quería decirte que, ah, lo lamento; por actuar como un idiota. Luego de pensarlo bien, ya entendí que... que tú eres mi kryptonita.

Kara: ¿Yo? – preguntó feliz.

Ben: Bueno, no me refiero a mis sentimientos por ti. Nunca me había sentido así por nadie, yo no me imaginé que yo pudiera sentir todo esto, no conocía estas emociones; y esto me hace sentir... que enloquezco, es eso.

Kara: Sí, sí, yo lo entiendo.

Ben: Como sea, me alegra que estés bien; y me alegra que en verdad no te casaras con él – dijo con una ligera risa.

Kara: A mi igual.

Ben: De cualquier forma, yo... ya no te molestaré – dijo para intentar irse.

Kara: Espera, no te vayas aún – dijo deteniéndolo – Por favor.

Ben: Yo entiendo que te molestaras porque no te escuché, y juro que intenté en verdad escucharte con atención esta vez. Y escuché que tú... no crees que debamos seguir juntos, y-y yo respeto eso...

Kara: No, porque Mxy no fue al único que engañé... No hablé enserio, lo dije para que me dejaras ir, y protegerte – hubo un pequeño silencio – Además, él podía escucharnos – dijo separándose.

Ben: ... Espera – dijo dándose vuelta, pensando en todo lo que pasó – ¿Entonces no fue enserio nada de lo que me dijiste?

Kara: Bueno, la primera parte sobre tu enorme y molesto ego; esa parte fue enserio.

Ben: Entiendo, ya entiendo.

Kara: Pero la segunda parte, sobre que no somos compatibles... no fue enserio.

Ben: Wow, y yo te creí todo. Eres buena, muy buena.

Kara: Lo sé – dijo con una pequeña risita.

Ben: Ahora, ya te deshiciste de "Mxy"... – dijo acercándose a ella.

Kara: Eso hice.

Ben: Significa que ahora nada... se interpondrá.

Kara: Nop, nada se interpondrá.

Ben: Ni seres interdimensionales... – dijo abrazándola por la cintura.

Kara: Ni ranas alienígenas – dijo abrazándolo del cuello.

Ambos no soportaron las ganas y se dieron un apasionado beso, tanto que cayeron sobre el sofá de Kara sin separarse. Aún así, después de unos segundos, Ben rompió el beso.

Ben: ¿Sabes? – dijo algo jadeante – Antes de que todo esto pasara, quería preguntarte qué te parecía la idea de mudarme aquí, contigo.

Kara: ... ¿Lo dices en serio? – preguntó esperanzada.

Ben: Bueno, puede que ahora no piense correctamente; pero a mí me gustaría... y mucho.

Kara: ¿Entonces qué esperas? Ven aquí, mi héroe.

Ben: Aquí voy, Chica de Acero.

La pareja volvió a besarse sobre el sofá, ahora con más ganas que antes. De fondo, sobre una mesita, se pudieron observar dos rosas rojas que quedaron allí.