Cap. 41: La muerte de Supergirl (Especial, parte 1)

Cuartel General de los Plomeros, Nueva York

Para los prisioneros que estaban en sus respectivas celdas en la base de los policías intergalácticos, sólo era otro día normal. Despertar, recibir sus comidas del día, pensar en alguna forma de escapar (a veces con éxito, a veces no), matar el tiempo con algún pasatiempo, su hora diaria del baño, y luego a dormir. Pero diferente era para la villana Livewire, alguna vez conocida como Leslie Willis.

Ella estaba mirando las noticias en un televisor que pidió como "pasatiempo". En ellas, pasaban un informe donde Kara Zor-El, alias Supergirl, salvaba a varias familias de un incendio.

Toda la atención que recibía, todos los buenos comentarios sobre ella, sólo empeoraba el estado mental de la ex locutora de radio. Tanto era así, que la propia Livewire la consideraba su némesis, su archienemiga. Y todo esto sólo la llevó a murmurar.

Livewire: Sólo mírala. Tan suave, tan poderosa, tan... hermosa. Como una gran diosa de oro hecha carne. Cualquier dios sensato exigiría una absoluta obediencia a cambio de sus favores. Pero no, nuestra Chica de Acero nos protege y nos cuida sin pedirnos nada. ¿Y la gente? Hah, prácticamente la veneran.

El resto de los villanos, todos conocidos por pertenecer a la galería personal de Ben 10, sólo la miraban extrañados, y algunos otros murmuraban sobre ella. Excepto el Dr. Animo, él entendía lo que se sentía. Sin embargo, lo que menos hacía Livewire era prestarles atención.

Livewire: Disfruta tu reinado mientras puedas, Supergirl; porque tan seguro como que la noche sigue al día... llega el momento en que hasta los dioses deben morir.

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Bellwood, Nueva York

Era un hermoso día en la ciudad que nunca duerme. Los pájaros cantaban, las flores florecían, y la gente disfrutaba de un buen desayuno afuera o estaban de camino a sus trabajos.

Sin embargo, la policía de la ciudad se dirigía a toda velocidad hasta la alcaldía, pues unos hombres armados tenían de rehenes al alcalde y su esposa.

Policía de Nueva York, operaciones técnicas. 2-0-7 en progreso.

– Secuestro con armas avanzadas. Deben ser los Caballeros Eternos, anteriormente se llevaron las reservas con esas armas – dijo el jefe de policía en su auto.

– ¿Y sientes nostalgia por los rifles de asalto? – bromeó su compañero.

Efectivamente, la banda criminal era nada más ni nada menos que los Caballeros Eternos, que estaban siendo liderados por Driscoll nuevamente. La diferencia radicaba en sus armaduras; las cuales no eran las clásicas plateadas y simples, eran doradas con máscara transparente morada. Además tenían armas mucho más experimentales que las que solían usar.

Los Caballeros salieron de la alcaldía con una explosión, y luego Driscoll disparó su arma a uno de los vehículos policiales que rodeaban la zona. Este hizo explosión, pero el Caballero no se quedó con eso y siguió abriendo fuego.

Uno de los Caballeros recibió el asentimiento de Driscoll y cargó contra la policía. Disparó rayos verdes de sus manos hacia otros vehículos mientras la policía abría fuego, sin penetrar para nada la armadura. Luego, dio un disparo hacia un auto atrás de la policía, haciéndolo explotar y separando a los uniformados.

Driscoll: Llévate al señor alcalde y a su chica antes de que tengamos problemas con el chico alienígena.

Sin embargo, en ese momento, el coche del jefe de policía llegó haciendo un derrape para derribar a uno de los Caballeros Eternos. Este se estrelló contra un auto destruido quedando inconsciente.

– ¡Aléjate del alcalde ahora! ¡No me provoques! – dijo mientras él y su compañero le apuntaban con sus pistolas.

Driscoll: Entonces no debiste dar razones.

El líder de los Caballeros Eternos disparó su arma e hizo que el auto volcara. El jefe logró salir, pero su compañero quedó atrapado dentro.

Driscoll: Asegúrate que estén muertos, sufriendo por supuesto – le dijo a uno de sus hombres – Y tú, llévate a nuestro estimado alcalde mientras yo pido un aventón.

El jefe de policía trataba de sacar a su compañero sin éxito. Vio que uno de los Caballeros se acercaba y abrió fuego con su pistola. El Caballero sacó unos látigos de sus manos, desarmó al jefe, y lo tomó del cuello levantándolo en el aire.

– Vamos, ¿no querrás matar a un policía?

– ¿Sí? ¿Y por qué no?

Repentinamente, el Caballero empezó a recibir balas en su máscara. Vio que el compañero del jefe de policía había logrado salir malherido del coche y abrió fuego contra él. El Caballero intentó atacarlo con un látigo... cuando este se partió a la mitad por un rayo rojo. Luego, alguien le tocó el hombro desde atrás.

Supergirl: Oye, ¿nunca te has preguntado cómo sería caer desde una gran distancia? – cortó el látigo con el que ahorcaba al jefe con su visión de calor – Averigüémoslo.

La Chica de Acero tomó al Caballero y lo elevó en el aire, para luego dejarlo caer sobre el coche volcado del jefe. Mientras, un borrón azul y verde pasó a gran velocidad y puso a salvo al jefe de policía y su compañero.

XLR8: Oh, parece doler. Vuelvo enseguida.

Ben 10, convertido en su forma de Kineceleran, comenzó a dar vueltas alrededor de otro de los Caballeros, creando un tornado que lo elevó en el aire. Allí, Supergirl le dio un golpe que lo estrelló en el suelo, mientras el alcalde y su esposa huían del lugar.

Driscoll: Funciona, maldición. Maldita basura – dijo intentando abrir una Caja Madre – Debió transportarme mientras lo ordené.

Supergirl: Ni te molestes, la derretí con mi visión de calor – dijo mientras descendía en el aire con el tercer Caballero atado e inconsciente.

XLR8: Al único lugar que serás transportado, Driscoll, tiene tres comidas al día y las luces se apagan a las ocho.

Driscoll: Hijo de... – disparó su arma contra Ben.

El héroe esquivó sin problemas el disparo, mientras lo desarmaba. Luego, se paró al frente de él, sólo para esquivar un golpe del Caballero. Luego, Ben se detuvo detrás de él, y Driscoll intentó atacarlo con sus látigos. Sin embargo, estos fueron atrapados por Supergirl.

Supergirl: ¿Sabes? Si hay algo que no tolero, es a un bravucón.

La kryptoniana lo hizo dar varias vueltas en el aire, para estrellarlo en lo alto de un edificio. Driscoll cayó al suelo pesadamente mientras Ben y Kara se posicionaban frente a él.

Supergirl: Hombres como tú le dan a Bellwood una mala reputación.

El Caballero intentó disparar un rayo de su mano, pero la Chica de Acero la tomó e hizo destruir el cristal por donde salía el rayo. Luego, de un solo movimiento, despojó a Driscoll de su armadura.

XLR8: Ya deberías saberlo, Driscoll. Nadie arruina nuestra ciudad y se sale con la suya.

El dúo neoyorkino ató con uno de los látigos de las armaduras a los cuatro Caballeros Eternos más Driscoll, mientras eran custodiados por la policía.

– Sé que digo esto varias veces por semana, pero gracias Ben 10 y Supergirl. No sé qué haríamos sin ustedes – les dijo el alcalde mientras se subía a una ambulancia con su esposa.

Supergirl: Suena como alguien que quiere nuestro voto, señor alcalde.

XLR8: Oye, me tengo que ir. Pero nos vemos donde siempre, ¿verdad?

Supergirl: Claro, también tengo asuntos que atender – con eso, Ben se fue.

– ¡Supergirl! ¡Oye, soy yo, tu viejo amigo! – gritó uno de los civiles que estaban cerca.

Supergirl: Brad Johnson. ¿Cómo está el chico más desafortunado? – dijo saludándolo.

Brad Johnson es un chico de condiciones humildes que entró a trabajar al Sr. Smoothies. Debido a que Kara asiste al lugar a veces con su alter-ego de superhéroe, estos se hicieron muy amigos, y ese hecho hizo que Brad se hiciera popular; además de atraer más clientes al Sr. Smoothies. Pero es obvio que Brad no sabe la identidad secreta de su amiga kryptoniana.

Brad: Oh, vamos, sabes que ahora no me va tan mal. Además, ahora logré rentar un departamento decente en el centro. ¿Qué tal una foto para adornarlo?

El chico sacó su teléfono para tomarse una selfie con Supergirl. Sin embargo, la razón por la que Kara le decía "desafortunado" se hizo presente: su teléfono se quedó sin batería.

Brad: Agh, estúpida cosa. ¿Por qué nunca funciona?

– Lo tengo cubierto – se presentó un chico con una cámara.

Brad: Stuart Brown, eres mi héroe.

Stuart Brown es el fotógrafo que trabaja para el diario La Tribuna (propiedad de CatCo Worldwide Media), y además el que consiguió la primera foto de Ben 10 y Supergirl. Él, más que amigo de Supergirl, es amigo de Kara Danvers; pero el chico también se hizo popular a partir de esa foto.

Stuart: Di "Supergirl".

Brad: ¡Supergirl! – Stuart tomó la foto.

Stuart: Me aseguraré de enviarte la foto más tarde, ¿sí?

Brad: Gracias. Supergirl, si vas más tarde al Sr. Smoothies, una ronda irá por mi cuenta – el chico se fue corriendo a su trabajo.

Supergirl: Gracias, Stuart – luego tomó su comunicador – Aquí Supergirl a la Liga de la Justicia. ¿Hay alguien...? – Flash apareció de improviso – ¿... disponible?

Flash: ¿Qué hay?

Supergirl: Tengo que ir a otro lugar, ¿me puedes ayudar con la limpieza?

Flash: Oh, ¿otra vez? Juro que deben pensar que soy una especie de equipo de limpieza – al lugar también se presentó el Linterna Verde John Stewart.

John: Bueno, ya que estás en eso, a mi departamento le vendría bien una mano – luego vio los autos destrozados por la pelea – ¿Contra qué se enfrentaron ustedes dos?

Supergirl: Los Caballeros Eternos. De alguna forma obtuvieron una Caja Madre.

John: Eso no es todo. Este pedazo de armadura también es de Apokolips – dijo analizando con su anillo un trozo tirado de las armaduras.

Flash: ¿Cómo lo sabes?

John: Mi anillo reconoce esta tecnología. Además, ¿se te ocurre otro lugar?

Supergirl: Debería ser analizado. Quizá alguien de la Liga ayude.

John: Superman conoce a un científico en laboratorios STAR que sabe bien sobre la tecnología de Apokolips. ¿Se lo dices tú o lo hago yo?

Supergirl: Mejor hazlo tú. Tengo trabajo y llego tarde.

John: Esta bien. Al menos no te distraeré con la limpieza. Nos vemos, compañero – se fue volando.

Supergirl: ¡Te debo una, Flash! – también se fue volando.

Flash: ¡Ustedes dos me deben como 13! Es por esto que formé mi propio equipo.

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CatCo Worldwide Media

Supergirl se metió por un callejón cercano a su trabajo, y luego salió del otro lado ya vestida como Kara Danvers. Esta llevaba algo de prisa y caminaba con algunos papeles en mano y un café en otro.

Luego de ingresar por el ascensor hasta el piso que le correspondía, casi choca con su amigo Winslow Schott Jr; o como normalmente lo llama Kara, Winn.

Winn: Wow, ¿tienes prisa?

Kara: Tengo una gran historia. No es por presumir, pero estás viendo a la chica con la exclusiva sobre los Caballeros Eternos.

Winn: ¿Y la consiguió Kara Danvers, o la súper chica?

Cabe aclarar que Winn descubrió la identidad secreta de la kryptoniana. Pero fue porque ella se lo dijo, ya que necesitaba su ayuda con un caso. Su habilidad para el hackeo era más que buena, y eso sirvió para pasar desapercibido. Por suerte, Winn era buen amigo guardó el secreto.

Kara: La conseguí yo, y es lo que cuenta – luego, escuchó con su súper oído la llegada de Cat Grant – Ya llegó.

Winn: Al menos ya sé cómo haces eso – dijo mientras Kara calentaba disimuladamente el café de su jefa.

Kara: Aquí está su latte, señora Grant.

Cat: ... Está caliente – dijo probándolo.

Kara: Justo como le gusta.

Cat: Un detalle que no te importó hasta el día de hoy. Reunión de contenido en mi oficina en dos minutos.

Kara: S-Sí – con eso, se fue a cumplir la orden de su jefa.

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Al rato, Kara logró reunir a todos los miembros importantes de CatCo en la oficina de Cat. Entre ellos, estaban la propia Kara y Stuart.

Cat: Todos están al tanto del último éxito de Supergirl y Ben 10, ¿sí?

– Sólo detuvieron una banda criminal, no es gran cosa – dijo uno de los presentes. Cat lo miró mal.

Cat: Fue la historia principal en el sitio web del diario El Planeta, la quinta en varios días. Lo cual me irrita porque El Planeta ya tiene a su superhéroe, y ahora trata de robarme a... los míos. Es nuestro deber tomar el control de la narrativa de Supergirl y Ben 10, salvarlos de la auto-inmolación, y barrer al Planeta... Necesito una entrevista.

En ese momento, Kara casi se ahoga con su propia saliva, por lo que tuvo que disimularla con una risa falsa. Ese era otro nivel al que la kryptoniana tenía en mente, que era sólo una simple nota. Cat notó esto, y no le gustó mucho.

Cat: ¿Sí, Kara?

Kara: Lo siento, lo siento. Es que yo... yo recordé un... v-video de gatitos que vi hace rato. Es tan lindo que hagan cositas de gatitos, jajaja. Se los enviaré a ustedes... o no.

Cat: Stuart – dijo ignorando el comentario de Kara – Tal vez tú podrías tener suerte en concertar la cita. Tal vez podrías pedirles el favor la próxima vez que se vean.

Stuart: E-Es que... no funciona de ese modo, señora Grant.

Cat: Mmm... Bueno, déjenme asegurarles a todos que Lois Lane, Clark Kent y todas las ratas del Planeta trabajan día y noche para conseguir la exclusiva. Yo quiero... conseguirla primero. Quiero... una entrevista, con Supergirl y Ben 10, y lo quiero para el fin de semana.

Todos se quedaron estáticos. Faltaban dos días para el fin de semana; y si Stuart no tenía suerte, ninguno la tendría. Y nadie quería enfrentar a una Cat Grant enojada. Sin embargo, a la Reina de los Medios poco le importó esto.

Cat: Ya, ya. Ya, ya – dijo mientras los echaba de su oficina – Ah, tú no, Kara... ¿Enserio crees que no sé lo que pasa contigo?

Kara: ... ¿Lo sabe? – dijo con la sangre helada.

Cat: Te vas de la nada, vuelves sin dar explicaciones, y te pones nerviosa cada vez que te preguntan por ello. Eres un gran misterio, Kara Danvers, y no me gustan los misterios. Pero no me importa lo que sea ahora, está afectando tu trabajo. Inscríbete a un gimnasio, ve a un loquero, como sea; pero ya bájate de las nubes y vuelve al escritorio, donde perteneces.

Kara: Ah, claro – dijo suspirando, y luego salió de la oficina.

Winn: ¿Todo bien ahí adentro?

Kara: No aceptaré esa entrevista. No... no puedo hacerlo, no puedo. La señora Grant no es tonta, me reconocerá en un segundo.

Winn: Ella verá a Supergirl de frente y jamás verá a su asistente.

Kara: ¿Por qué estás tan seguro?

Winn: Porque no te ve ahora, pasa lo mismo con Superman. ¿Por qué crees que nunca lo reconocen? Ni siquiera yo sé quién es.

Kara: Para que no ponga en peligro a los que quiere, ya me lo dijo. Es la razón por la que no anda todo el tiempo volando por ahí, aunque eso sería más fácil. Pero la señora Grant va a seguir presionando por la entrevista.

Winn: Si quieres yo me encargo de Cat Grant.

Kara: No lo sé. A veces creo que me puse la S muy rápido.

Winn: Oye, Kara, mira por la ventana – dijo señalando la misma – Dime qué ves.

Kara: Bueno, veo edificios, publicidad, el bar donde no me dejaron pasar porque era "menor" de edad.

Winn: Yo veo una ciudad con personas necesitando ayuda. Necesitan una heroína.

Kara: ¿En serio lo crees? Ben 10 ya estaba antes de mi, y lo hacía bien.

Winn: Escucha, si alguien puede llenar los zapatos de Superman... eres tú.

Kara: Gracias, Winn. Eres bueno en esto.

Winn: Podrías agradecerme diciéndome quién es Ben 10.

Kara: Sí, eso no pasará, pero lograste animarme – en ese momento, recibió un mensaje de su primo – Ya me voy, surgió algo.

Winn: Yo te cubro, no te preocupes.

Kara: Gracias – luego abrió el mensaje.

Clark: Ven rápido a laboratorios STAR en Metrópolis. Es algo que puede interesarles a ambos.

Kara: Llegó en cinco minutos.

Con eso, se fue del edificio, pasó por el mismo callejón, y se fue volando hasta la ciudad protegida por el Hombre de Acero.

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Laboratorios STAR, Metrópolis

En dichos laboratorios, se encontraban Superman, John Stewart, y un científico conocido como Silas Stone. Este hombre había estado a cargo de la tecnología de Apokolips cuando Darkseid invadió la Tierra hace unos años, y los héroes lo consideraban ya un experto en el tema. También es padre de un chico llamado Victor, pero eso son detalles.

Pasados los cinco minutos, Supergirl llegó a STAR.

Supergirl: Muy bien, ya estoy aquí. ¿Qué es lo importante?

Superman: El doctor Stone ya casi termina con su análisis de lo que encontraron. Bueno, doctor, ¿cuál es el veredicto?

Silas: Concuerda con lo que he visto de tecnología de Apokolips, pero no completamente – luego tomó un comunicador – John, ¿puedes venir un momento?

Superman: ¿Necesita ayuda?

Silas: El doctor Irons es uno de los mejores ingenieros en laboratorios STAR.

Al lugar se presentó el doctor John Henry Irons, un hombre afroamericano que traía consigo parte de la tecnología que poseían los Caballeros Eternos. Curiosamente, este tenía una camiseta de Superman debajo de su bata de laboratorio.

Dr. Irons: Si se trata de este metal Silas, he estado... Wow...– se detuvo al ver a ambos kryptonianos presentes.

John: No puede ser.

Superman: ¿Nos conocemos? – dijo extendiéndole la mano.

Dr. Irons: A-Ah, en un lugar en construcción. Renuncié a LexCorp recientemente, y no quiero recordarlo.

Supergirl: Bonita camiseta. Imagino que es por mi primo.

Dr. Irons: La uso con orgullo. Pero no te ofendas, tú también eres impresionante.

John: ¿Podemos terminar con esto?

Silas: ¿Qué descubriste, John?

Dr. Irons: Definitivamente proviene de Apokolips, pero está unido a las bases tri-formuladas de la Tierra a niveles atómicos. La combinación se hace más fuerte.

Silas: Increíble.

Dr. Irons: Necesitas recursos muy sofisticados para producir una aleación como esta. Laboratorios STAR lo puede hacer, pero seguro no proviene de aquí. Quizás de Wayne-Tec, o de...

Superman: Por supuesto. Linterna, nos veremos luego. Gracias a los dos por su tiempo y experticia.

Dr. Irons: De nada, Superman.

Con eso, ambos kryptonianos se elevaron en el aire y se fueron, mientras eran admirados a la distancia por el doctor Irons. En el camino, hicieron una pequeña parada en el cielo.

Superman: Kara, imagino que ya sabes cómo son las cosas con LexCorp.

Supergirl: Sí, lo sé. También Ben, y no le hace mucha gracia.

Superman: Te encargo esto. Yo iré a hablar con Lex a prisión, tú habla con ella.

Supergirl: Claro, seguro – dijo mientras asentía varias veces.

Superman: ¿Estás bien? Te noto algo nerviosa.

Supergirl: Es que... tengo problemas con el trabajo. Hay veces que me cuesta balancear ser Kara Danvers y ser Supergirl. ¿Cómo lo haces?

Superman: No es algo fácil. Al principio cuesta adaptarte, más si te gusta ser superhéroe. Pero aprendí dos cosas que pueden serte útil. La primera es que obedezcas en todo a tu jefe para no levantar sospechas.

Supergirl: Eso ya lo sé. ¿Cuál es la otra?

Superman: Sólo sé tú misma, Kara. No tienes que parecerte a mí, tú sola puedes hacer grandes cosas, ser alguien mejor. Sólo ten más confianza.

Supergirl: Gracias, Kal. ¿Sabes? Nunca te dije lo feliz que me hizo que me encontraras.

Superman: Al contrario. Yo estoy feliz de saber que no estoy solo en este mundo.

Con eso, ambos kryptonianos compartieron un abrazo. Luego, tomaron caminos separados. Superman se dirigió a la prisión de Metrópolis, y Kara regresó a Nueva York.

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Bellwood, Nueva York

Cuando se reveló al mundo lo que Lex Luthor hizo durante su campaña presidencial, al millonario le dictaron una sentencia bastante alta, casi se consideraba cadena perpetua. LexCorp quedó en manos de la siguiente heredera de la familia, la hermana de Lex, una mujer hermosa y pelinegra: Lena Luthor.

A la vista de muchos, su apellido la hacía sucesora de los crímenes de Lex; pero la realidad, es que es la oveja negra de su familia, siendo la única Luthor en querer hacer lo correcto. Esta oportunidad de estar al mando de LexCorp le brindaba seguridad para cambiar la imagen de la empresa. Incluso ya tenía planes para cambiarla de nombre a L-Corp.

Sin embargo, su primera decisión fue alejar lo más posible a LexCorp del propio Lex Luthor, y para eso compró un edificio en Bellwood para asentar la compañía allí. Obviamente, esto no le cayó nada bien al dúo protagonista, puesto que sentían que los problemas de Lex se habían mudado a su ciudad.

Supergirl llegó a uno de los balcones del nuevo edificio de LexCorp, más precisamente al de la oficina de Lena, quien estaba revisando unos papeles. La Luthor sintió una fuerte brisa de aire y se dio cuenta de la presencia de la kryptoniana.

Lena: ¿Supergirl? Vaya, qué honor. No creía que me visitarías tan rápido.

Supergirl: Señorita Luthor, necesito hablar con usted sobre lo que pasó hoy.

Lena: Ah, claro, ya veo. Tú también desconfías de mí, al igual que todos. ¿De qué me acusas esta vez?

Supergirl: No la estoy culpando a usted.

Lena: Pues eso es lo que parece.

Supergirl: Las armas de esta mañana están basadas en tecnología extraterrestre, claramente modificada para los Caballeros Eternos aquí en la Tierra.

Lena: Vaya, eso suena terrorífico. Pero he estado muy ocupada con el traslado de la empresa como para preocuparme por bandas criminales. Además, los Caballeros Eternos tienen conexiones por todo el planeta, pudo ser cualquiera.

Supergirl: Sin embargo, ellos obtienen esta tecnología justo cuando una de las más avanzadas compañías tecnológicas llega a Bellwood. No la estoy culpando a usted, señorita Luthor, sólo espero que no esté detrás de todo esto.

Lena: A pesar de lo que tú y todos los demás piensan, yo no soy como mi hermano. Y para probar que digo la verdad, si esas armas están ligadas a LexCorp, yo seré la primera que te avise.

Supergirl: En ese caso, confiaré en usted. Yo creo en que cada persona es diferente, y veo que quiere desligarse de la imagen de Lex. Le deseo suerte.

Recordando las palabras de su primo, Supergirl se marchó del lugar dándole un voto de confianza a Lena. Sin embargo, la Luthor no quedó muy feliz con esta visita, pero aún así estaba decidida a probarle a todos que no era igual a Lex Luthor.

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Más adelante, Kara ya se encontraba de civil en el Sr. Smoothies esperando por Ben. Este llegó algo bastante agitado, y parecía muy preocupado.

Kara: Oye, Ben, ¿qué te sucede? Pareciera que viste...

Ben: Tenemos un problema, y uno grande.

Kara: ¿Qué pasó? ¿Tiene algo que ver con la Liga?

Ben: Es peor. Yo... bueno... no sé cómo decirlo...

Kara: Vamos Ben, ya sabes que puedes confiar en mí. ¿Qué tan grave...?

Ben: Mis padres quieren conocerte.

Kara: ... Espera, ¿qué?

Ben: Eso, mis padres quieren conocerte.

Kara: ¿T-Tus padres? Oh, vaya, eso es otro nivel en nuestra relación. ¿C-Crees que estamos listos? ¿Qué pasa si...? Un segundo, ¿les dijiste a tus padres que estamos saliendo?

Ben: Bueno, ellos estaban haciendo muchas preguntas, y una cosa llevó a la otra y... tuve que decirles.

Kara: ¿Pero por qué no les dijiste antes? Nos estaríamos ahorrando esta conversación.

Ben: Porque yo no estaba listo para esta conversación. Mis padres pueden ser algo... abrumadores, y no querían que me asfixiaran tanto. De por sí ya es complicado tener una doble vida a espaldas de ellos.

Kara: ¿Y-Y entonces qué haremos? Esto es demasiada presión, ya tengo suficiente con la entrevista que quiere la señora Grant, y ahora...

Ben: Espera, ¿qué entrevista? – Kara se echó en la mesa en señal de frustración.

Kara: La señora Grant quiere una entrevista con Ben 10 y Supergirl.

Ben: ¿Qué? ¿Y qué le dijiste?

Kara: Nada. Quiere que alguien en la oficina se la consiga, y honestamente yo no quiero hacerla.

Ben: Entonces nos encarguemos de mis padres primero. Ya veremos qué hacer con lo otro.

Kara: ¿Cómo?

Ben: Será en mi casa. Yo te recogeré del trabajo en mi auto, ¿qué te parece?

Kara: Por mí está bien. ¿Crees que les agrade?

Ben: Bueno, a mí me agradas, así que supongo que a ellos igual. Sólo... sé tú misma.

Kara: Vaya, qué curioso. Es lo mismo que me dijo Kal hoy. Pero haré lo mejor que pueda.

Ben: Gracias, Kara. Eres una chica genial, ¿lo sabías?

Kara: No es algo que dices muy a menudo.

Ben: Bueno, si quieres puedo decirlo un poco más. Eres una gran compañera, no sé qué haría si no tuviera a alguien como tú en mis misiones.

Kara: Mejor tomemos unos smoothies. Te estás poniendo demasiado meloso.

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Lugar desconocido

Aún a pesar de que Lex Luthor ya no era parte de LexCorp, algunos proyectos y trabajos impulsados por él seguían en pie. Uno de ellos era una excavación para buscar radiación del centro del planeta. Una de estas se encontraba trabajando ahora.

– Tres kilómetros bajo la superficie de la Tierra, ni siquiera Superman podría vernos aquí – dijo la capataz de la obra.

– A Luthor le agradará eso – dijo su compañero más cercano.

– ¿A cuál de los dos? – dijo mientras pasaba un escáner por unas rocas – Agh, el calor es insoportable.

– Me refería al hombre. Olvida a él y su felicidad.

– "Inventaré una nueva fuente de energía que provenga de la radiación emitida desde el centro de la Tierra" – dijo imitando al millonario.

– Y gana miles de millones y nosotros no.

– No te sorprendas si nos pide que cavemos hasta el infierno, ya estamos a mitad de camino.

– "Inserten un carrete de iodos en el recto de Satanás, con retroalimentación a LexCorp, y sáquenle toda la energía."

– "Mantendrá la red eléctrica de Metrópolis activa hasta el fin de los tiempos."

Ambos trabajadores rieron por sus bromas. Sin embargo, un fallo en uno de los taladros gigantes llamó su atención, al tiempo que otro de los obreros la llamaba.

– ¡Doctora Murphy!

Dra. Murphy: ¿Qué pasa?

– Dígamelo usted, no soy científico.

Lo que encontraron era una extraña nave que tenía inscripciones raras, y era bastante grande. Lo que también llamaba la atención, era que tenía un símbolo similar al de Superman; sólo que en vez de una S en el medio, tenía una calavera de perfil.

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LexCorp, Nueva York

Lena Luthor se encontraba trabajando en su laptop resolviendo ecuaciones complicadas. Al igual que su hermano, también era poseedora de un gran intelecto. Estaba a punto de terminar cuando su secretaria entró a su oficina.

– Señorita Luthor... – ella le hizo una seña para que espere.

Lena: Y... listo. Eve, lleva esto a Bioquímica. Creo que encontré la cura para distrofia muscular, se podrían curar todos los casos conocidos con una simple inoculación. Que lo reformulen y lo conviertan en un tratamiento de por vida. Ahora solo, nos daría 300 mil millones de dólares en ganancia.

Eve: De acuerdo, señorita Luthor. Pero hay novedades sobre el Proyecto Núcleo.

Lena: ¿Qué pasó?

Eve: Encontraron el final.

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Más adelante, los obreros lograron sacar más escombros hasta revelar gran parte de la nave hallada. Lena preguntó de forma disimulada qué era el Proyecto Núcleo, ya que no estaba enterada de gran parte de los proyectos que tenía Lex en su compañía. De mientras, la Luthor logró establecer conexión con los obreros.

Dra. Murphy: Eso es, señorita Luthor. Una nave espacial.

Lena: ¿Antigua?

Dra. Murphy: No tanto. Son estimaciones, pero parece tener el mismo tiempo de cuando Superman llegó a la Tierra.

Lena: ¿Entonces es kryptoniana?

Dra. Murphy: Es probable.

En esos momentos, una de las máquinas rozó con un láser la nave, causando una grieta de la cual comenzó a despedir humo.

Lena: ¿Qué sucedió?

Inmediatamente, un ruido ensordecedor se hizo presente. Luego, un holograma de una mujer encapuchada se manifestó frente a los obreros.

Humanos. sean testigos de su final, pues todos sus pecados serán expiados con la destrucción de su mundo. Cuando nuestras Asesinas de Mundos despierten y cumplan su destino, la Tierra estará limpia.

Dra. Murphy: ¿Cómo se supone que lo entendamos?

En efecto, el holograma hablaba en un idioma que los obreros no entendían, ni siquiera del lado de Lena. Sin embargo, esta última logró percibir de qué trataba la grabación.

Lena: Parece una advertencia.

El holograma desapareció, para después mostrar que la nave se estaba abriendo. Del otro lado, tres mujeres en trajes negros con capa (con el mismo símbolo de la nave en su pecho) salieron con total tranquilidad. Observaron a todos los obreros presentes...

Y el caos comenzó.

La mujer del medio salió disparada, y usando su súper fuerza comenzó a aplastar a toda persona que se encontraba. También usaba su visión de calor para perforar y cortar a otros más. Unos obreros abrieron fuego con unas armas que tenían a mano, pero la mujer sólo los golpeaba con mucha fuerza, para luego levantar una de las máquinas como si nada y aplastar a los que quedaban.

La que estaba a la derecha, soltó un potente grito sónico que mató a todos lo que tenía enfrente. Luego, juntó sus manos y comenzó a inducir vibraciones y vértigo en otras personas, haciendo que estas comiencen a tomarse de la cabeza y cayeran arrodilladas.

La tercera sacó unas garras de sus uñas y atravesó a las personas con vértigo a una velocidad impresionante. Logró observar a unos pocos obreros que comenzaban a escapar, y fue hacia ellos para tocarlos. Inmediatamente, estos comenzaron a mostrar síntomas de estar enfermos, y luego cayeron muertos al suelo.

Cuando las tres mujeres terminaron, se fueron caminando por la cueva que hicieron los obreros. Del otro lado, Lena Luthor observó todo mientras mantenía una expresión aterrorizada y asqueada. Luego de lograr calmarse un poco, apagó la comunicación y se dirigió hacia la salida de su oficina, con su secretaria detrás de ella.

Lena: El rastro de destrucción que dejen esas cosas guiará a la Liga de la Justicia directo hasta aquí.

Eve: ¿Entonces qué es lo que hará?

Lena: Adelantarnos. Avisen anónimamente a la Liga sobre lo que está pasando, mientras nosotros quemamos todo lo que involucre al Proyecto Núcleo. Que todo aparente que LexCorp nunca estuvo allí.

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Lugar desconocido

Ya en la superficie de donde las Asesinas de Mundos despertaron, y luego de aniquilar a las personas que estaban allí, una de ellas puso un cristal en la tierra. Unos momentos después, una estructura comenzó a formarse de a poco; hasta que pareció una réplica algo pequeña de la Fortaleza de la Soledad.

Una vez que la fortaleza terminó de construirse, las tres mujeres entraron hasta llegar a una computadora; donde colocaron otro cristal de color rojo en un orificio de la misma. Al hacerlo, un holograma de la misma mujer encapuchada apareció frente a las tres Asesinas de Mundos.

Reign, Purity, Pestilence, mis magníficas hijas – dijo en idioma kryptoniano – Al fin, una culminación de siglos de trabajo, magia y ciencia. Yo soy su madre, Yuda-Kal, y ustedes fueron diseñadas con un propósito: ejecutar la justicia. No mostrarán piedad a aquellos que se les opongan, y la justicia acabará con el mundo de los hombres. Vayan, mis Asesinas de Mundos, y brinden oscuridad a la Tierra, para que pueda renacer.

Reign: Ya despertamos – miró a sus hermanas – Y estamos listas.

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Metro Torre, Metrópolis

La nueva embajada de la Liga de la Justicia se decidió ubicarla en la ciudad custodiada por Superman. Sólo le faltaban algunos toques, y podría ser inaugurada en los próximos días. La torre resaltaba en el lugar, pero no era de los edificios más altos de la ciudad; y la gente tenía mucha expectativa por la misma, ya que iba a estar abierta al público, como una manera de simbolizar que la Liga estaría más cerca de la gente. Aunque esto no significaba que la Atalaya desaparecería, seguía siendo un puesto de avanzada para los héroes.

De cualquier forma, los miembros fundadores acordaron una reunión en la torre para tratar algunos pocos temas importantes, además de supervisar lo poco que faltaba para que quede terminada. Batman fue el último en llegar a la sala donde estaban reunidos.

Flash: Muy bien, siguiente punto: el presupuesto operativo para el próximo año fiscal. Los gastos están por encima de los fondos que las Naciones Unidas aprobaron, chicos.

Batman: Yo me encargo. Continúa, Flash.

Mujer Maravilla: A la mercancía de la Mujer Maravilla le fue bien este año. Puedo hacerme cargo si la Fundación Wayne se queda corta.

Batman: ... ¿Estás bromeando? – preguntó incrédulo.

Linterna Verde: De acuerdo, bien, acordemos que lo tenemos cubierto. ¿Qué sigue?

Flash: Reporte de incidente en un desierto de Texas. Alguien afirmó que encontraron varios cuerpos.

Superman: Eso es cerca de Kansas, investigaré personalmente. Llamaré después de lo que encuentre.

Flash: Bueno, eso es todo. Hasta el próximo jueves; a la misma bati-hora, en el mismo bati-canal – Batman lo miró mal – Sólo era una broma – luego se cubrió con la tablet que tenía – ¿Aún me está mirando?

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Bellwood, Nueva York

Regresando con nuestros protagonistas, ellos estaban camino a la casa de Ben en su auto luego de que el héroe recogiera a la kryptoniana de su trabajo. Cabe aclarar que ambos estaban muy nerviosos, y todo el camino fue un silencio incómodo. Después de unos minutos, llegaron a su destino.

Ben: Bueno, aquí vamos.

Kara: S-Sí... Okay, listo, no hay que estar nerviosos, esto saldrá bien.

Ben: Es un terreno desconocido para mí... pero sí, hay que hacerlo.

Kara: No creo que sea para tanto, ¿verdad? Digo, ¿qué es lo que puedo descubrir, que eras flojo en la escuela? Eso ya lo sé.

Ben: M-Mejor entremos.

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Carl: ... Y cuando me di cuenta, se había subido en ese toro. Aunque pudo deshacerse de nuestro Ben, el chico era intrépido.

La charla con los padres de Ben no resultó ser tan desastrosa como pensaban ambos héroes. O bueno, al menos para Kara, quien escuchaba atentamente todas las historias que ellos contaban.

Kara: ¿De verdad? ¿El mismo Ben que colecciona figuras de acción?

Ben: Papá, vamos, EDI.

Carl: ¿Y qué es eso?

Sandra: "Es demasiada información", Carl. Seguro que Kara ha oído la mitad de esas historias.

Kara: En realidad, no – dijo fingiendo inocencia.

Ben: Es porque mis padres me enseñaron a no hablar tanto de mí mismo – Kara sólo levantó una ceja en señal de "¿en serio?".

Carl: Ese es nuestro trabajo.

Kara: Misión cumplida. Suena como si hubiese mucho que no sé. Díganme ahora si debería guardar distancia.

Sandra: Bueno, no serías la primera chica que rompe su corazón – dijo mientras servía un poco de comida.

Ben: E-D-I mamá.

Kara: Ya estamos llegando a lo bueno.

Sandra: Bueno, la que recuerdo ahora fue Julie, una chica adorable. Vivía cerca, venía a visitar de vez en cuando. No como Kevin y Gwen, ellos venían todos los días.

Carl: Me pregunto cómo estarán ambos.

Sandra: Luego estuvo esta chica de sus vacaciones. ¿Karen, o Cat?

Carl: Kai, recuerdo que así se llamaba. Según su abuelo, ella era un gran partido.

Ben: Papá... – dijo agarrando su cabeza y chocándola contra la mesa.

Sandra: Cierto, Ben. Quizás no deberíamos hablar de ella. Voy a servir el pescado.

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Más adelante, Kara estaba ayudando a Sandra a lavar los platos mientras Ben y su padre limpiaban la mesa. La mujer aprovechó para seguir conversando con la kryptoniana.

Sandra: Lo siento, creo que hablamos de más esta noche.

Kara: No hay problema, señora Tennyson, todo está bien.

Sandra: Carl y yo ya estamos muy grandes. Los secretos ya no parecen tan importantes como solían serlo.

Kara: Bueno, yo creo que... a veces sirven con un propósito.

Sandra: Eres una gran chica, Kara. Ben tiene suerte de tener a alguien tan especial.

Kara: Gracias. Para mí Ben también es alguien muy especial.

Ben: Oye, Kara, ¿no te gustaría ir al Sr. Smoothie antes de llevarte a tu casa?

Kara: Claro, me encantaría.

Sandra: Vaya, hasta ya te pegó sus gustos. Más te vale no dejarla ir, jovencito.

Ben: Mamá, por favor...

Sandra: Sólo bromeo, hijo. No se queden hasta tan tarde.

Kara: No lo haremos. Fue un gusto conocerlos, señor y señora Tennyson.

Carl: El gusto fue nuestro.

Sandra: Cuídense; y recuerda que si tienes un problema, puedes hablarnos Kara. No estás sola.

Kara: No lo olvidaré. Muchas gracias, y hasta luego.

Después de despedirse, ambos héroes se fueron de la casa de Ben hasta el Sr. Smoothie en auto.

Kara: No salió tan mal, ¿verdad?

Ben: A decir verdad, no lo fue. Te dije, sólo tenías que ser tú misma.

Kara: Tu madre es una gran conversadora. Espero poder reunirnos de nuevo.

Ben: Tranquila, eso será muy pronto.

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Lugar desconocido

Al día siguiente, Superman estaba en dirección hacia el desierto donde reportaron el incidente. Sobrevolando la zona, vio lo que creyó jamás ver: una formación rocosa ligeramente más pequeña parecida a la Fortaleza de la Soledad. El Hombre de Acero descendió cerca mientras llamaba por su comunicador.

Superman: Aquí Superman a la Liga de la Justicia. Encontré el...

Sin embargo, no pudo seguir por un grito sónico que vino desde atrás. Al voltear, vio a Purity con intenciones de atacarlo. Superman rápidamente se repuso, y desde el aire dio un aplauso que detuvo momentáneamente a la Asesina de Mundos.

Superman: ¡Superman a la Liga! ¿Me copian?

El Hombre de Acero vio que el grito sónico dañó su comunicador, por lo que dedujo que estaría solo hasta que alguien venga como apoyo. Purity voló en dirección a Superman y comenzó a darle una serie de golpes a gran velocidad. Luego, juntó sus dos manos y le dio un potente golpe que lo envió al suelo.

Superman logró reincorporarse, para ver que Purity cargaba contra él. El Hombre de Acero sopló su aliento ártico y congeló por completo a la Asesina de Mundos, pero esta se liberó de su prisión helada para darle un golpe, golpe que fue bloqueado por Superman.

Superman: ¿Quién eres tú?

Purity: Yo soy la luz hirviente. Soy el diluvio que borra los pecados. Yo soy la palabra y el grito de la justicia. Yo soy Purity.

Superman quedó sorprendido; y no por las palabras de la Asesina de Mundos, sino porque le habló en kryptoniano. Y la última vez que habló ese idioma fue cuando encontró a Kara.

Antes de que el Hombre de Acero siguiera en su sorpresa, Purity volvió a asestarle una serie de golpes directa al rostro. Luego, a quemarropa, lanzó su grito sónico que dejó inconsciente a Superman.

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Purity llevó a rastras a Superman dentro de su Fortaleza, donde Reign y Pestilence estaban planeando a detalle su ataque a la Tierra.

Purity: Hermanas, encontré algo interesante – dijo arrojando al Hombre de Acero frente a ellas.

Reign: ¿Otro humano?

Purity: No, mira el escudo en su pecho.

Las Asesinas de Mundos observaron bien el símbolo del traje de Superman, y ambas se asombraron al reconocerlo.

Reign: La Casa de El.

Pestilence: ¿Qué hace un descendiente de la Casa de El en la Tierra?

Reign: Preguntémosle a madre.

La líder de las Asesinas puso su mano en la computadora de la Fortaleza y el holograma de Yuda-Kal, su madre, apareció nuevamente.

Yuda-Kal: Mis hijas. ¿En qué les puedo ser útil?

Reign: ¿Sabes por qué hay un descendiente de la Casa de El aquí en la Tierra? – dijo mostrando al inconsciente Superman.

Yuda-Kal: Él es Kal-El, hijo de Jor-El y Lara. Sus padres lo enviaron en una nave pequeña antes de que Kryptón explotara.

Pestilence: Eso significa que hay más como nosotras.

Yuda-Kal: También tengo información de que Zor-El, hermano de Jor-El, envió a su hija para proteger a Kal-El. Su hija, Kara Zor-El, también debería estar en la Tierra.

Purity: Dos como nosotras. Es magnífico hermanas, podemos hacer que se nos unan.

Yuda-Kal: Ellos no son como ustedes. Su escudo significa "esperanza" en la cultura de Kryptón. Eso está en contra de todo lo que representan ustedes. Él, y Kara Zor-El, son sus enemigos.

Pestilence: Entonces hay que destruirlos.

Reign: Alto, hermanas. Si tenemos a los dos en un mismo lugar, podremos acabar con ellos de un solo golpe. Dejemos que aún viva, para que Kara Zor-El venga a rescatarlo.

Yuda-Kal: Tengan cuidado, hijas. Kara Zor-El puede ser un problema... porque ella es su hermana.

Reign: ¿Qué?

Yuda-Kal: Ustedes nacieron por orden del Consejo de Kryptón como las armas perfectas. Se les pidió a los científicos más destacados que fueran partícipes de ese proyecto. Zor-El fue el principal, quien logró crearlas a partir del material genético de varias especies nativas de Kryptón. Sin embargo, las primeras resultaron inestables y fallidas; por lo que hicieron un último intento con el material genético de uno de los suyos. Zor-El decidió usar parte del de su hija, y así nacieron ustedes tres.

Mientras su madre relataba toda su historia, una serie de hologramas del pasado se hacían presentes dentro de la Fortaleza, mientras que las Asesinas de Mundos miraban y escuchaban todo atentamente.

Yuda-Kal: Aún así, su poder no era lo suficientemente perfecto, así que yo utilicé magia oscura para llevarlas a su máximo esplendor. Cuando les mostré mi trabajo al Consejo y a Zor-El, ellos las desecharon sin ninguna consideración. Y cuando el fin de Kryptón estaba cerca, Zor-El decidió salvar a su hija en vez de a ustedes. Pero yo logré robar una nave lo suficientemente grande para las tres, y así salvarlas de su destrucción. Ahora, su destino puede ser cumplido: traer la justicia a la Tierra, su renacer.

Cuando su madre terminó de hablar, los hologramas alrededor desaparecieron. Las tres Asesinas de Mundos tenían una mirada que sólo podía ser descrita por una palabra: ira.

Purity: Así que, nuestro... "padre" nos rechazó.

Reign: Hermanas, hay que hacer un cambio de planes. Vamos a hacer sufrir a Kara Zor-El, antes de que la oscuridad reine en la Tierra. Y Kal-El puede ayudar en eso, hay que torturarlo para que ella pierda su esperanza. Luego, nos vengaremos. ¿Hay alguna objeción?

Pestilence: Ninguna.

Reign: Ésta bien. Comencemos.

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CatCo Worldwide Media, Nueva York

Kara: Buenos días, señora Grant.

Cat: Mmm...

Kara Danvers estaba llevando su desayuno a Cat Grant, como de costumbre. Mientras, la Reina de los Medios estaba aprobando algunas fotos y notas que iban a publicarse en su revista. Entre ellas, vio la suya, la cual decía "rechazada". Pero la que llamó su atención, fue una donde aparecía ella y su novio que tenía como título: "Supergirl y Ben 10. ¿Súper héroes o súper novatos?"

Kara: ¿Supergirl y Ben 10, súper héroes o súper novatos?

Cat: No tienes que leérmelo, yo lo escribí. Que lo copien para la publicación vespertina.

Kara: No lo entiendo. ¿Por qué sigue criticando a Ben 10 y Supergirl por tratar de salvar la ciudad? C-Cuando Superman comenzó...

Cat: Él, él, él. Él, él, él. Estoy tan harta de escuchar sobre el "Hombre" de Acero. Cualquier mujer que lo valga sabe que debemos trabajar el doble de duro que un hombre para que nos consideren la mitad de buenas. ¿Por qué crees que siempre pongo al frente a Supergirl en vez de cómo todo el mundo dice?

Kara: Pero Supergirl ha hecho grandes cosas, como salvar un avión la semana pasada.

Cat: Sí, sólo lo aventó y lo dejó en la bahía. Los ingenieros trabajaron sin parar tratando de sacarlo.

Kara: ¿Y qué hay de Ben 10? Él salva a todos desde mucho antes que ella.

Cat: ¿Sí? ¿Y por qué siempre hay un desastre cada vez que pelea?

Kara: Bueno, si... Supergirl y Ben 10 estuvieran aquí, ¿qué... les sugeriría que... que hicieran?

Cat: Que se calmaran. Están queriendo hacer demasiado, no van a durar.

Kara: Ben 10 está desde hace ocho años, y junto a Supergirl tratan de salvar el día.

Cat: ¿Arruinando a todas las personas? No, estos niñitos inexpertos aún les falta madurar. Y aún así, siguen siendo el epicentro del peligro. ¿Qué sigue? "¿Vamos a atrapar un meteoro que se dirige a la Casa Blanca? Ohh... upsi" – dijo mientras mimetizaba la situación – No, no hay curva de aprendizaje. No entras por la puerta y de repente eres la dueña de la compañía. Yo comencé como la asistente de White Perry, trabajaba como esclava hasta que un día tuve la oportunidad de escribir un artículo para la columna de chismes. En cada paso del camino tuve que pelear, trabajar duro y mejorar, tuve que superarlo. ¿Atrapar aviones y delincuentes alienígenas? Mmm... Comenzar con cosas pequeñas, ganarse el respeto. Ahora, Supergirl y Ben 10 deberían aprender algo de ti, Kara.

Kara: ¿De... de mí?

Cat: Sí. Tú quieres ser reportera, pero decidiste comenzar desde abajo. ¿Por qué crees que rechacé tu nota?

Kara: ¿Por... falta de información?

Cat: Bueno... sí, también. Pero lo principal es para enseñarte que no todo siempre va a salirte a la primera si decides apuntar muy alto. Comenzar desde abajo, con cosas pequeñas, es la mejor forma de reconocer a alguien.

Kara: Y... ¿y qué pasaría si Supergirl hiciera algo grande... muy grande para salvar la ciudad, y lo lograra?

Cat: Entonces, ese día, tal vez diga que la Chica de Acero es una verdadera heroína.

Kara salió después de la oficina y se sentó en su pequeño escritorio a pensar. Gran parte de lo que dijo su jefa caló hondo en la mente de la kryptoniana. Entonces, después de meditarlo, decidió llamar a Ben.

Kara: Hola Ben, ¿cómo va todo?

Ben: Bien dentro de todo, voy camino a la Metro Torre.

Kara: ¿La Metro Torre? ¿Pasó algo?

Ben: Sólo una posible situación. Nos dijeron que unos pocos fuéramos. No te avisé porque recordé que tienes trabajo.

Kara: Okay, pero sabes que puedes llamarme si hay problemas.

Ben: Por supuesto. Tengo que colgar, te veo al rato.

Kara: Te veo al rato.

Con eso, la llamada terminó. La kryptoniana quedó algo preocupada, sobretodo porque Ben nunca respondía un llamado de la Liga sin ella. Sin embargo, decidió tranquilizarse con un poco de trabajo. Después de todo, sólo era una situación. ¿Qué podía salir mal?

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Metro Torre, Metrópolis

Ben llegó en una Javalina hacia la torre de la Liga junto con el Capitán Átomo, Hombre Halcón, Hombre Plástico y Zatanna.

La situación no era del todo buena. La llamada de Superman había preocupado a la Liga por el hecho de su terminación abrupta. Después de eso, no tuvieron más noticias sobre el Hombre de Acero. Si alguien le había hecho algo, significaba que ese alguien no debía tomarse a la ligera. Ben no le dijo nada a su novia para no preocuparla, puesto que el héroe era el único que tenía optimismo de que todo saldría bien.

Al llegar con los otros héroes, notó que sólo estaban los héroes alienígenas y metahumanos. Ningún vigilante o héroe humano a excepción de Batman y él mismo. Una vez que estuvieron todos, la Mujer Maravilla tomó la palabra.

Mujer Maravilla: Muy bien, hablaré sin rodeos. Les pedimos a todos ustedes que vinieran porque tenemos una posible amenaza seria. Superman fue a investigar en el desierto de Texas, hizo una llamada para avisar lo que encontró; la cual se cortó, y no sabemos nada de él desde entonces.

Batman: No hay muchos seres en la Tierra que puedan hacerle gran daño a Superman, por lo que no hay que subestimar esto. Irá un equipo de reconocimiento seleccionado para alertar sobre la situación. Depende de cómo sea, alertaremos a los demás.

Mujer Maravilla: Serán liderados por J'onn y Aquaman. Los que lo acompañarán serán John Stewart, Hombre Plástico, Zatanna, Tornado Rojo, y Ben 10.

Batman: Repito que sólo será reconocimiento – dijo mirando a Ben – Si la situación es peligrosa, llamen a la Liga.

Sin decir muchas palabras, todos aceptaron y se movilizaron para transportarse. En el camino, la Amazona interceptó a Ben.

Mujer Maravilla: Ben, no vi a Kara en la reunión, ¿le avisaste como te pedimos?

Ben: En realidad no. Hace poco me dijo que tiene mucho trabajo en estos días, no quería preocuparla por esto.

Mujer Maravilla: Pero Supergirl podría ser de gran ayuda es este caso.

Ben: Oye, no te preocupes, lo resolveremos. No es necesario exagerar las cosas.

Sin decir más palabras, Ben se fue junto con el grupo asignado por la Liga. Aunque se podría decir que escapó de esa conversación, ya que tenía un presentimiento extraño y quería encargarse personalmente de ello.

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Lugar desconocido, Texas

Unos momentos más tarde, el grupo ya se encontraba en el lugar. Y al igual que Superman, se sorprendieron por la gran estructura rocosa que encontraron. Sin esperar más, el Linterna Verde se comunicó con la Liga.

Detective Marciano: Aquí el Detective Marciano a Liga de la Justicia. Encontramos una fortaleza de roca inusual en el área.

Batman: ¿Alguna señal de Superman?

Detective Marciano: Detecto sus patrones mentales dentro.

Batman: Entonces entren y revisen. Mandaré refuerzos al área.

Detective Marciano: Entendido – luego miró al grupo – Tenemos vía libre para entrar.

Ben: Bien, ya me estaba haciendo calor – dijo tapándose del sol con sus manos.

Todos los héroes entraron en la fortaleza. Allí, no vieron más que un pequeño espacio vacío donde había lo que parecía un panel de computadora bastante sofisticado. Sin embargo, su atención se centró en otra cosa apenas lo vieron: el cuerpo de Superman bastante maltratado, con algunos raspones largos, y su traje rasgado. Este estaba apenas consciente.

Detective Marciano: ¡Superman! – corrió hasta él – Superman, ¿me escuchas?

Superman: Ase... Asesinas...

Detective Marciano: ¿Qué?

Superman: Asesinas... de Mundos...

Inmediatamente, las tres susodichas aterrizaron frente a los héroes. Todas tenían una sonrisa arrogante en sus rostros, y se acercaban de forma amenazante.

Purity: Hermanas, no veo a Kara Zor-El entre ellos.

Reign: No importa, ya vendrá. Hay que encargarnos de ellos.

Ben: Hey, yo a ese idioma lo escuché antes.

Zatanna: ¿Lo entendiste?

Ben: ... No, pero estoy seguro que lo escuché. ¿Y mencionaron a Kara?

Sin esperar más, Purity soltó su grito sónico hacia los héroes; quienes comenzaron a aturdirse de gran manera.

Ben: ¡Ya dije que no me gusta estar del otro lado!

Con eso, Ben cambió de forma a Frankenstrike y soltó una fuerte descarga hacia las Asesinas de Mundos. Rápidamente, el resto comenzó a pelear contra ellas.

Zatanna comenzó a recitar varios hechizos que impactaban en Pestilence, mientras que el Hombre Plástico la enrollaba para atraparla. Ben y Tornado Rojo luchaban contra Purity con lo que tenían, mientras que la Asesina de Mundos respondía con vibraciones sónicas. Aquaman y el marciano luchaban contra Reign, mientras que John sacaba a Superman de la fortaleza para llevarlo al sol.

John: ¡Aquí John Stewart a la Liga! ¡Necesitamos apoyo de inmediato!

Batman: ¿Qué es lo que pasa?

John: ¡Superman está muy malherido, y hay tres atacantes presentes!

Batman: ¡Los refuerzos están en camino, resistan!

Con eso, John voló en el aire hacia una colina cercana para dejar al Hombre de Acero de frente al sol, mientras él vigilaba que nadie se escape.

Dentro de la fortaleza, las cosas no iban bien. Purity había hecho alarde de su velocidad y golpeó fuertemente a Ben y Tornado Rojo. El primero intentó darle otra descarga, pero la Asesina le dio un grito a quemarropa que lo dejó inconsciente, y regresándolo a la normalidad. El androide, por otro lado, perdió un brazo y se encontraba en el suelo.

Pestilence había sacado sus garras y apuñaló al Hombre Plástico, pero este sobrevivió gracias a su piel elástica. Sin embargo, eso no le impidió ser noqueado por la Asesina. Zatanna intentó encerrarla con su magia, pero ella se liberó y la noqueó de un golpe.

Aquaman y el Detective Marciano estaban muy agotados por su pelea contra Reign. Ella era la más fuerte de las tres, y sólo estaba jugando con los héroes. En realidad, las tres jugaban; ya que quedaba claro que sí querían, podían matarlos en ese instante. Sin embargo, ellas querían usarlos para descolocar a Supergirl.

Ben logró recomponerse, mientras veía cómo las Asesinas de Mundos ganaban la pelea. Entonces el héroe se convirtió en Gravattack, y con sus manos atrapó a las tres mujeres.

Gravattack: Muy bien, llegó la hora de que alguien les ponga un alto, chicas.

Reign: No puedes ganar.

Gravattack: Sí, no entiendo lo que dices, ¿puedo asumir que se están rindiendo?

Como respuesta, Purity volvió a lanzar su grito sónico, haciendo que Ben las mande a volar en el aire mientras se recuperaba del grito.

Gravattack: Supongo que eso es un no.

Sin embargo, las tres aterrizaron pesadamente delante del héroe. Ben se preparó para usar sus poderes, mientras que las Asesinas iban a cargar contra él.

Pero justo en ese momento, los refuerzos llegaron. Estos eran el Capitán Átomo, Chica Halcón, Linterna Verde, Chico Flash, el Hombre Elástico, Atom Smasher y los Ultimen.

Gravattack: Gracias, chicos. Lo tenía controlado, pero la ayuda siempre es buena.

Chica Halcón: Menos charla, y más acción.

Todos los héroes comenzaron a atacar a las Asesinas de Mundos, quienes ahora se veían en desventaja. Por otro lado, John Stewart logró llevar a Superman hacia la Atalaya por teletransporte para tratar sus heridas, una vez que los héroes llegaron.

De los héroes que estaban en la batalla, sólo Ben 10 y unos recuperados Hombre Plástico y Zatanna quedaban en pie. Los Ultimen sacaron a los heridos y agotados del lugar mientras los otros héroes luchaban contra las Asesinas.

Purity se vio en desventaja contra el Capitán Átomo, Linterna Verde y Ben, quienes se coordinaron bien para contrarrestar los ataques sónicos de la Asesina. En un momento, Ben hizo flotar a Purity hasta muy arriba, para dejarla caer al suelo; donde el Capitán Átomo la recibió con un fuerte golpe de energía. Luego, Linterna Verde la encerró con su anillo.

Chico Flash, Atom Smasher, Chica Halcón y Zatanna no le daban tregua a Pestilence. La Thanagariana impactaba una y otra vez su maza contra la Asesina, mientras que Zatanna hacía lo mismo con su magia. Atom Smasher logró darle un buen golpe con su puño, y Chico Flash la recibió con otro golpe a gran velocidad.

Reign era la que mejor resistía los ataques de los Ultimen, más los Hombres Elástico y Plástico. Wind Dragon logró atraparla en un tornado, pero ella usó su visión de calor para atacarlo. El Hombre Plástico logró quitarlo del camino a tiempo, mientras que Juice y Downpour combinaron sus habilidades para darle una fuerte descarga eléctrica potenciada por agua. Shifter, convertida en rinoceronte, y Long Shadow remataron con un fuerte golpe cada uno. Aún así, la Asesina se levantó.

Reign vio que sus hermanas estaban por ser derrotadas, y ella se estaba quedando atrás. Por lo que tuvo que recurrir a su última carta, la cual le fue enseñada por su madre mientras tenían cautivo a Superman.

Flotó en el aire y comenzó a recitar varias palabras aleatorias en kryptoniano, mientras un aura oscura la rodeaba. Pestilence logró ver lo que Reign haría.

Pestilence: Hermana, ¿estás segura?

Reign: A este paso, nuestro destino no se cumplirá. Hermanas, deben aceptarlo.

Pestilence: ... Estoy dispuesta.

Purity: Yo... también.

Reign: Lo siento, hermanas. Pero en mí caerá el peso de cumplir con el renacer de la Tierra, y nuestra venganza contra Kara Zor-El.

Gravattack: Un momento, ahora escuché bien. ¿Kara? ¿Qué tiene que ver ella con esto?

La Asesina de Mundos no contestó; en cambio, decidió terminar lo que inició. Inmediatamente, una energía comenzó a salir de Purity y Pestilence mientras gritaban en agonía. Dicha energía iba dirigida hacia Reign, quien parecía fortalecerse. Una vez que todo acabó, Purity y Pestilence cayeron al suelo.

Chica Halcón: Están... muertas – dijo tocando el cuello de Purity.

Lo que Reign había hecho era un conjuro de magia oscura kryptoniana, que permitía al usuario absorber la energía vital de seres vivos a costa de su vida. Este le fue enseñado por Yuda-Kal, quien era la experta en el tema. Una vez que Reign terminó el hechizo, salió disparada a una velocidad totalmente impresionante hacia el cielo, sin saber donde se dirigía por parte de los héroes.

Sin embargo, antes de irse completamente, Reign destruyó la Javalina en la que los héroes habían llegado, haciendo que el teletransporte sea el único medio para irse de la fortaleza.

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Más adelante, los héroes estaban viendo su situación actual. Dos de las tres Asesinas estaban muertas, y la restante escapó. Su único vehículo estaba hecho pedazos, y el teletransporte no era una opción tan viable.

Linterna Verde: ¿Entonces no podemos teletransportarnos todos?

Batman: El telepuerto de la Metro Torre está en fase de prototipo, no es apto para un teletransporte masivo. La Atalaya está en reparaciones debido al último ataque, es la misma situación. Sólo tienen que esperar a que llegue una Javalina.

Linterna Verde: De acuerdo. ¿Ya ubicaron a dónde se fue la atacante?

Batman: El radar todavía no la ubica, pero alertaremos a todos lo que podamos cuando la encontremos. ¿Qué tan poderosa es?

Linterna Verde: Era la más fuerte entre ellas, y ahora lo es más. Es muy peligrosa, Batman.

Batman: Entendido, avisen de su situación.

Linterna Verde: Lo haremos – terminó la llamada.

Ben: ¿Qué es lo que sabes? – preguntó saliendo de la nada.

Linterna Verde: Estamos varados, prácticamente. Esperamos una Javalina.

Ben: ¿Sabes? Tengo una idea. Sólo espera – dijo viendo los restos de la Javalina destruida.

Ben se dirigió hacia los mismos y activó el Omnitrix. Se convirtió en una especie de diablillo rojo con traje y gafas de aviador. Inmediatamente saltó hacia los restos.

Jury Rigg: ¡Reparar, reparar, reparar, reparar!

A un buen ritmo, la Javalina iba reparándose. Sin embargo, esta era aún bastante grande para el alienígena reparador, por lo que esto iba a tomar un tiempo. Linterna Verde volvió a llamar a Batman.

Linterna Verde: ¿Sabes qué, Bats? Mejor no envíes esa Javalina. Creo que lo tenemos cubierto.

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CatCo Worldwide Media, Nueva York

Regresando con Kara, ella había quedado nerviosa todo el tiempo de la pelea; por lo que decidió llamar a su amiga Barbara Gordon, alias Batgirl, con quien no hablaba desde hace tiempo. Entre muchos temas, la kryptoniana quiso hablar sobre lo que su jefa le había dicho.

Kara: Y entonces me dijo que debíamos comenzar por cosas pequeñas. ¿Tú conoces alguna forma de comenzar en pequeño?

Barbara: Bueno, lo que yo hago normalmente es detener a criminales dementes; pero tú puedes empezar por detener crímenes armados, ayudar ambulancias con problemas, hasta un clásico como bajar gatitos de árboles.

Kara: Eso podría funcionar, lo comentaré con Ben más tarde cuando regrese.

Barbara: Aún no puedo creer que se te declarara, no parecía ser ese tipo de chicos.

Kara: Ni yo lo creí cuando lo hizo. Tuve que pellizcarme al día siguiente para confirmar que no era un sueño.

Barbara: ¿Y ambos están bien? ¿Son felices?

Kara: Pues yo diría que sí. No somos muy románticos, pero no es un problema. Oye, ¿de casualidad no sabes si Batman tenía una misión de la Liga?

Barbara: Mencionó que debía ir a la Metro Torre, que había surgido algo. Nada más.

Kara: ¿Y con tus habilidades de hackeo no puedes averiguarlo? Es que Ben dijo que también lo hablaron y no he sabido nada.

Barbara: Déjame ver qué puedo hacer.

La pelirroja comenzó a buscar posibles datos que pudieran llevarla a descubrir lo que pasaba con la Liga de la Justicia. Después de un rato, logró encontrar algo interesante.

Barbara: Logré enlazarme con el radar de la Liga, y al parecer tienen un objetivo marcado en Texas. No sé si sea algo de suma importancia, pero es lo único que tengo.

Kara: Está bien, Babs. Avísame si ocurre algo.

Barbara: Seguro, cuenta conmigo.

Kara: Tengo que colgar, nos vemos.

Con eso, la llamada finalizó. La kryptoniana siguió con su trabajo, pero Barbara no se dio cuenta de que una alerta apareció cerca de Bellwood cuando apagó su computadora.

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Precisamente, la gente huía despavorida en las cercanías de Bellwood, pues Reign había llegado y ya estaba causando destrozos por todas partes. La policía llegó rápidamente; pero la Asesina de Mundos lanzó un coche que impactó fuertemente en uno de ellos, destruyéndolo completamente.

Los que lograron llegar sacaron varias armas y dispararon contra Reign. Las balas rebotaban en ella como si fuera un muro de hierro; sin embargo, varias de estas balas perdidas llegaron hasta una gasolinera, provocando una explosión que aturdió a la Asesina de Mundos.

Los policías comenzaron a celebrar al creer que la vencieron, pero la alegría se les fue rápidamente al verla saltar por encima de las llamas. Inmediatamente, el puño de Reign impactó sobre un policía tirado en el suelo, matándolo instantáneamente. Luego, empujó un auto contra otro policía, para luego levantar dicho auto y estrellarlo encima del resto. Todos murieron.

Una adolescente que presenció toda la masacre transmitía en vivo con su celular el hecho, rogando por que alguien lo viera y viniera a ayudar.

– Santo cielo. Por favor, si alguien está viendo esto, necesitamos ayuda. Este monstruo está matando a todos.

Reign volteó a ver precisamente a la chica, y se dirigió a ella sin pensarlo. La adolescente sólo se quedó paralizada del miedo, pero detrás de ella y desde el aire Hombre Halcón llegó golpeó con su maza a la Asesina de Mundos.

El golpe elevó a Reign en el aire, y allí el Thanagariano le dio otro más que la mandó a estrellarse contra un edificio. Batman, Jessica Cruz y Flash también llegaron a la escena junto con la chica.

Jessica: Tranquila. Ya estás a salvo.

Batman: ¡Flash, civiles!

El velocista escarlata se fue corriendo a apartar a todas las personas posibles y no hubiera otro afectado, siendo la primera la adolescente. Mientras, el Hombre Halcón se acercó al lugar donde se estrelló Reign. Esta salió de los escombros y tomó del pecho al héroe, estrellándolo varias veces contra el suelo.

Reign: Miserable escoria.

La Asesina de Mundos le dio un fuerte golpe al rostro, enviándolo a volar a gran velocidad en el aire. Sin embargo, Jessica logró atraparlo con un guante de baseball creado por su anillo. Luego, lo bajó hasta una zona segura para revisar que estuviera bien.

Jessica: Hombre Halcón sigue vivo.

Batman: Linterna, abre un perímetro.

Jessica: Al diablo, no hay que ponerse a la defensiva. Soy miembro del Cuerpo de Linternas Verdes, y no me acobardaré esta vez.

La Linterna Verde voló hacia donde estaba Reign y la aplastó con un taladro de su anillo. Luego, la encerró en un apretado domo de energía; pero la Asesina de Mundos comenzó a hacer fuerza para salirse, por lo que Jessica tuvo que hacer lo mismo con su anillo.

Aún así, Reign ganó la pulseada y rompió el domo de Jessica. Luego le dio un fuerte golpe que mandó a volar a la Linterna Verde. Esta se protegió con otro domo para evitar lastimarse más.

Jessica: De acuerdo, eso no lo vi venir.

Sin embargo, Reign voló hacia donde estaba Jessica para darle otro golpe. Ella se volvió a proteger con otro domo de energía, pero bastaron unos cuantos golpes más de la Asesina de Mundos para romperlo y dejarla inconsciente.

Reign se disponía a matarla, pero Flash logró sacarla a tiempo con su velocidad. El velocista la llevó al mismo lugar donde ella dejó a Hombre Halcón, luego tomó la maza de este y volvió con Reign.

A gran velocidad, Flash comenzó a darle una gran cantidad de golpes con la maza, haciendo que Reign tuviera que cubrirse con sus brazos. Sin embargo, lo que la Asesina de Mundos esperaba era una apertura para atacar; y cuando la misma llegó, le dio un fuerte golpe al rostro del velocista que lo estrelló contra un muro.

Reign iba a rematarlo con un golpe de dos manos, pero unas explosiones detrás de su cabeza la distrajeron. Al voltear, vio al Caballero de la Noche encima de un edificio.

Batman: ¡Alerta! ¡Cayeron tres miembros y apenas llegamos! ¡Necesitamos refuerzos!

El vigilante de Ciudad Gótica comenzó a correr por los tejados esquivando una embestida de Reign. Luego, se dio media vuelta y se preparó para pelear, a pesar de que sus posibilidades eran más que bajas.

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Lugar desconocido, Texas

Regresando con Ben y sus compañeros varados, este había logrado reconstruir la Javalina pero con una mejor apariencia. Ahora estaba en funcionamiento y los que podían la abordaron, ya que no era lo suficientemente grande para todos.

Ben: Muy bien, vámonos.

Linterna Verde: Es mejor que esperes aquí, Ben.

Ben: ¿Qué? ¿Por qué?

Linterna Verde: Por si acaso algo sale mal. Tú eres, de todos nosotros, el que es más versátil con tus poderes. Puedes adaptarte a cualquier situación, y por eso eres el más apto para cuidar a los que están aquí.

Ben: Agh, está bien, me quedaré. Pero lo haré sólo porque, de cierta manera, dijiste que soy mejor que tú.

Linterna Verde: ¿Qué? Eso no es cierto.

Ben: En el fondo sabes que sí.

Linterna Verde: No me quedaré a discutir esto. Mantenme informado sobre lo que ocurra.

Con eso, algunos héroes partieron en la Javalina. Sin embargo, la sonrisa arrogante que tenía Ben hace un momento desapareció para dar lugar a un rostro de preocupación.

Ben: Sólo espero que estés bien, Kara.

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Bellwood, Nueva York

De regreso a la pelea con Reign, los refuerzos no llegaban; por lo que Batman se las estaba arreglando para retener a la Asesina de Mundos lo más que pueda en el lugar. Para eso, el Caballero de la Noche hacía alarde de su agilidad esquivando y saltando por tejados.

Batman esquivó dando una voltereta en el aire un contenedor lanzado por Reign. Luego, esquivó un auto igualmente lanzado y usó su gancho para impulsarse hacia una casa. Allí, saltó por los bordes gruesos de las ventanas para hacer que la Asesina de Mundos se estrelle contra la propiedad.

Reign lanzó después una casa rodante a Batman, quien estaba en el aire impulsado por su gancho. Allí, el Murciélago de Gótica apenas pudo esquivar el vehículo, saliendo su brazo lesionado. Luego, Reign cargó contra él.

Batman: ¡Cae, bastarda! – dijo arrojando varios explosivos mientras daba un salto hacia atrás.

Los explosivos impactaron tanto en el rostro como en el pecho de la Asesina de Mundos, pero no hicieron ni un rasguño. En cambio, sólo la enfureció más.

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CatCo Worldwide Media

Del regreso con Kara, esta estaba en su escritorio finalizando unas pequeñas tareas que Cat Grant le había pedido hacer. Sin embargo, le llamó la atención que ella y Stuart Brown se reunieron en la oficina de su jefa. Así que decidió usar su súper audición para escuchar su charla.

Stuart: Señora Grant, ¿quería verme?

Cat: Stuart, tengo curiosidad sobre el progreso con la entrevista con Supergirl y Ben 10.

Stuart: Bueno, no sé exactamente donde están, sólo sé cuando aparecen.

Cat: Quiero una entrevista con ellos antes que El Planeta, tal vez no fui lo suficientemente clara contigo.

Stuart: N-No, fue bastante clara, señora.

Cat: La S no es sólo una moda pasajera que puede cambiar; es un logo, de un equipo. Ya que eres su "famoso" amigo, no comprendo por qué no has explotado esa relación para conseguirme lo que quiero.

Stuart: Bueno, yo... tengo una política de no usar a mis amigos para cuestiones laborales.

Cat: Y yo tengo la política de no perder. ¿Cuál política crees que me importa más? Lo entiendo, eres un chico honorable. Estoy pidiéndote que hagas lo correcto para mí y esta compañía, y me consigas una entrevista con Supergirl y Ben 10. Tienes 24 horas.

Stuart: Si no... ¿Si no qué? – preguntó con claro nerviosismo.

Cat: Si no... tal vez El Planeta tenga a un nuevo foto-periodista.

Con eso, el fotógrafo se fue bastante preocupado y con miedo de la oficina de Cat. Kara pudo darse cuenta de esto por el ritmo cardíaco del chico. Ella empezó a sentirse mal por él; y estaba a punto de llamar a Ben para darle la entrevista a Stuart, cuando un noticiero en vivo en una de las pantallas del edificio dio una noticia de último momento.

– Tenemos una noticia de último minuto. Testigos reportan que una criatura se aproxima a Nueva York, más precisamente al barrio de Bellwood. Los primeros informes indican que ya derrotó a casi media Liga de la Justicia, incluso se cree que pueden ser más. Les recomendamos a todos los habitantes de Bellwood tener mucho cuidado con...

Kara decidió no escuchar más. Fue corriendo hacia el elevador, esquivando a todos los que se le atravesaban. Algunos la miraron raro; pero otros, como su jefa que se dio cuenta de este extraño reaccionar, les causó gran intriga.

La kryptoniana fue hacia el tejado del edificio de CatCo, se quitó los lentes y desabrochó su camisa para revelar su traje. Luego, saltó al vacío mientras sus ropas quedaban volando por los aires.

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El atardecer había comenzado en la ciudad. Regresando con la batalla contra Reign, algunos héroes habían llegado a auxiliar a Batman. Aún así, no hacía mucha diferencia.

Reign arrancó un brazo del traje mecánico de STRIPE y arrojó a este lejos. Por detrás, Stargirl intentó dañarla con su lanza, mientras Firestorm atacaba con varios golpes. Sin embargo, la Asesina de Mundos contrarrestó esos golpes con otros y mandó a volar al héroe nuclear, mientras estrelló a Stargirl contra un muro.

El Dr. Destino comenzó a atacar con varios hechizos a distancia, todos impactaban en Reign. Mientras tanto, Batman y Flecha Verde observaban todo desde un tejado.

Batman: ¿Puedes ver algún punto débil? – le preguntó al arquero mientras se tomaba el brazo.

Flecha Verde: Nada, en realidad. Pareciera que estuviera hecha para la agresión y la lucha. Es... como una máquina de matar.

El Dr. Destino seguía manteniéndose fuera del alcance de Reign, mientras ella sólo se enfurecía más. En un momento, vio al dúo de vigilantes y se dispuso a atacarlos; por lo que el Señor del Orden se lanzó para evitarlo. Sin embargo, la Asesina de Mundos lo adivinó, lo tomó de su capa y lo estrelló contra una gasolinera, provocando una gran explosión.

El héroe salió del fuego gracias a un hechizo de protección, pero luego cayó inconsciente. Reign iba a matarlo de un golpe, cuando una flecha y un batarang explosivos golpearon su cabeza desde atrás. La Asesina volteó a ver a ambos vigilantes, y decidió lanzarles otro vehículo.

Flecha Verde: ¡Cuidado!

El arquero esmeralda lanzó una flecha con cuerda para que Batman se deslizara sobre ella, pero él apenas pudo esquivar el vehículo lanzado; por lo que cayó pesadamente al suelo, quedando semi-inconsciente.

Reign iba a matar de una vez por todas al Caballero de la Noche, pero hubo algo que atrapó su atención totalmente: una pantalla grande en la ciudad donde se exhibía una noticia sobre Ben 10 y Supergirl. Rápidamente la Asesina de Mundos reconoció el traje de la Chica de Acero.

Reign: Kara Zor-El.

Volando a gran velocidad, la Asesina se fue hacia el pueblo. De mientras, una recuperada Jessica Cruz se acercó al lesionado Batman.

Jessica: Esto no luce bien. ¿Podremos con esa cosa?

Antes de que el Caballero de la Noche contestara, una herida pero furiosa Mujer Maravilla salió de unos escombros. Se notaba que estaba enojada, pues respiraba pesadamente y su ceño estaba más que fruncido. Su escudo y espada colgaban de su espalda.

Mujer Maravilla: ¿Dónde está esa aberración?

Batman: Sur. Se dirige a Bellwood.

La reina de las Amazonas no preguntó más y se fue volando detrás de la Asesina de Mundos. Luego, Batman reacomodó su brazo.

Jessica: ¿Crees... crees que pueda vencerla?

Batman: No – fue su simple respuesta.

Jessica: ¿Entonces cómo? ¿Quién podría derrotarla?

Batman: Todos los miembros fuertes de la Liga fueron a la misión del desierto, y casi todos terminaron malheridos... Sólo hay uno que no se presentó y no tiene lesiones graves, uno que sí tendría posibilidades de vencerla.

La Linterna Verde no tenía que preguntar sobre quién estaba haciendo referencia Batman. La chica miró al cielo; y como si le hablara a una divinidad, rogó porque fuera escuchada.

Jessica: Te necesitamos, Kara.

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Reign había aterrizado cerca de la pantalla grande que había visto desde lejos. Buscaba con la mirada a Kara, pero en cambio la Amazona, quien llegó dando un gran salto, se interpuso en su vista.

Mujer Maravilla: ¡Ven a luchar, monstruo!

Reign: Estoy harta de todos ustedes.

Las dos mujeres poderosas cargaron entre sí y chocaron sus puños. Luego, la Amazona esquivó dos golpes de Reign, para conectar dos al rostro de esta y mandarla varios metros lejos. Diana iba a seguir atacando, pero la Asesina la alejó con una fuerte patada.

Ambas volvieron a cargar entre sí, ganando la pulseada la Mujer Maravilla. Ella tenía en el aire a Reign mientras la golpeaba una y otra vez con su escudo; sin embargo, la Asesina le dio dos golpes al rostro y la estrelló de frente contra un muro.

La Amazona se dio vuelta y sacó su lazo, pero Reign la volvió a estrellar contra el muro. Allí, la Asesina comenzó a dar varios golpes; pero se sorprendió al ver que la Mujer Maravilla no estaba. Ella salió desde otro lado y logró atrapar a Reign con su lazo.

Mujer Maravilla: ¡Te ordeno que te rindas!

La Amazona hizo dar varias vueltas con su lazo a Reign para terminar estrellándola contra un camión. Luego, atrajo su lazo mientras se ponía en guardia. La Asesina de Mundos salió sin problemas luego.

Mujer Maravilla: Puedes que seas capaz de resistir el Lazo de la Verdad, ¡pero por Hera vas a caer!

La Amazona sacó su espada y cargó contra Reign. Esta lanzó tres autos rápidamente, pero Diana esquivó los dos primeros y partió a la mitad el tercero. Tomó la mitad delantera de este y la hizo pedazos contra la Asesina. Sin embargo, esta logró darle un fuerte golpe que la mandó a volar lejos.

La Mujer Maravilla cargó nuevamente con su espada para terminar con la Asesina de Mundos... pero esta increíblemente atrapó el arma en sus manos, haciendo que la Amazona quede boquiabierta.

Reign: Eres débil.

Reign le dio un fuerte golpe al rostro, lo que la hizo estrellarse lejos. Luego, la Asesina dio un salto para caer encima de la Amazona y darle una rápida y mortal sesión de golpes. Al finalizar, la Mujer Maravilla estaba semi-inconsciente y muy malherida.

Reign vio la espada de Diana a un costado y la tomó para terminar de una vez con ella. Y cuando el arma estaba a centímetros de hacer contacto con la piel de la Amazona... una fuerte ráfaga de visión de calor la estrelló contra un edificio.

Finalmente, Supergirl había hecho acto de presencia en la pelea. Ella descendía lentamente hasta acercarse a la Mujer Maravilla.

Supergirl: Diana, lamento no haber llegado antes.

Mujer Maravilla: No es... tu culpa...

La kryptoniana llevó a la Amazona hasta un callejón donde la sentó para que pudiera recuperarse y estar segura. Se disponía a volver con Reign, pero Diana la tomó del brazo antes.

Mujer Maravilla: Espera... Acaba con ella, Kara... No te contengas, o asesinará a todos – luego, cayó inconsciente.

Luego de eso, Supergirl se dirigió hasta donde estrelló a Reign. Del fuego que se creó, la Asesina salió caminando como si nada.

Reign: Al fin te encuentro, Kara Zor-El.

Supergirl se sorprendió por esto. Ella estaba hablando en kryptoniano, y sólo su primo y ella hablaban ese idioma en la Tierra.

Supergirl: ¿Quién eres?

Reign: Soy de la época antes de los fundadores. Fui creada para aniquilar la escoria y comenzar el despertar. Yo soy Reign.

Supergirl: ¿Cómo llegaste?

Reign: Sobreviví a la muerte de Kryptón. Fui enviada antes de la destrucción junto con mis hermanas.

Supergirl: ¿Hermanas? Si es cierto, ¿entonces dónde estaban?

Reign: Dormidas. Ellas dieron su vida por nuestra causa, pero ahora soy libre para repartir la justicia.

Supergirl: ¿Aterrorizando a los demás? ¿Asesinando personas?

Reign: Este mundo se ha hundido en el pecado y el caos. Demasiados han eludido su condena.

Supergirl: No dejaré que lastimes a nadie más. Ríndete ahora o te obligaré a rendirte.

Reign: Tu arrogancia es enorme, al igual que la de tus antepasados creyendo en sus falsos dioses, mientras su desgastado planeta se sofocaba en la vergüenza y deshonraba su memoria. Tu padre fue uno de ellos, fue mi creador; pero decidió abandonarme a mí y a mis hermanas por esa misma arrogancia. Ahora, impondré mi justicia contigo.

La Chica de Acero se sorprendió por la mención de su padre. Reign usó esto a su favor y cargó contra ella para darle un buen golpe. Supergirl fue rápida de reflejos y retuvo los brazos de Reign, comenzando un intenso forcejeo. La Asesina de Mundos usó su visión de calor y estrelló a la kryptoniana contra un muro.

El golpe fue tan fuerte que hizo sangrar a Kara en la cabeza. Aún así, ella cargó volando contra Reign, la cual hizo lo mismo. La pulseada la terminó ganando la Chica de Acero, quien la hizo estrellarse contra un edificio.

El choque fue tan grande que hizo reventar algunas ventanas, además de provocar un pequeño temblor que desestabilizó un poco el helicóptero de CatCo, el cual estaba allí para transmitir la pelea por órdenes de Cat Grant, siendo Stuart Brown el camarógrafo.

– Esta criatura no ha podido ser identificada por el gobierno, y se dice que ha dejado a miembros de la Liga de la Justicia heridos de muerte.

Las noticias estaban siendo vistas por todos los televisores y pantallas grandes de Nueva York, uno de ellos era el que tenía Brad Johnson en el Sr. Smoothie. Este vio que los clientes que había allí estaban muy preocupados.

Brad: Oigan, si no tienen a dónde ir, pueden quedarse aquí mientras Supergirl se hace cargo de esa chiflada. Voy a apoyarlos... igual que mi súper amiga siempre nos ha apoyado – dijo mirando la foto que tomó Stuart el otro día.

– La pregunta es: ¿podrá acaso Supergirl superar el desafío y evitar que esta criatura se convierta en un nuevo Doomsday? La situación ha traído a la memoria de todos aquella increíble batalla en donde Superman perdió la vida. El Hombre de Acero regresó, ¿podrá Supergirl superar esa hazaña y salir ilesa?

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Las noticias no sólo se transmitían en Nueva York, sino en varias partes del mundo. Obviamente, la situación no pasó desapercibida para Ben, quien se encontraba a bordo de la Javalina luego de que esta volviera de la Metro Torre. Ahora, el héroe estaba más que inquieto.

Ben: ¿Esta cosa no puede ir más rápido? Estoy seguro que la reconstruí para que vaya más rápido.

Hombre Plástico: Si estás tan impaciente, ¿por qué no vuelas por tu cuenta?

Ben: Porque me dijeron que debía cuidar de que lleguen a salvo.

Hombre Plástico: Oye, varios de nosotros estamos algo recuperados, no necesitamos de una niñera. Si quieres irte...

Cuando volteó, vio que Ben ya no estaba. También alcanzó a ver que la compuerta trasera de la Javalina se estaba cerrando, indicando que Ben sólo esperaba que le dijeran que no era necesario que se quedara.

Hombre Plástico: ... Vete.

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La pelea de Supergirl contra Reign había llegado hasta el puente de Brooklyn. Allí, ambas mujeres, ya estando un poco malheridas, se estrellaron contra el pavimento en medio de una multitud saliendo asustadas de sus autos. La kryptoniana vio a una mujer atrapada en el suyo, el cual estada dado vuelta y no conseguía desabrochar su cinturón. Supergirl abrió el techo para sacarla, pero tuvo que detener otro auto lanzado por Reign.

Kara logró evitar que ambos autos se destruyeran entre sí, pero Reign la tomó de su capa y comenzó a azotarla varias veces contra el suelo. Luego, le dio dos golpes al rostro; pero Supergirl respondió con su visión de calor, enviándola varios metros lejos.

La Chica de Acero quiso darle varios golpes; pero Reign logró hacerla chocar contra otro vehículo, para luego hacerla estrellar contra el tráiler de un camión. La Asesina tomó dicho tráiler y lo estampó contra el suelo, pero Kara salió de él usando su visión de calor. Luego, le dio varios golpes a la Asesina con una viga de metal; pero Reign la tomó del cuello y se la llevó corriendo por el puente para estrellarla contra uno de los soportes.

Allí, la Asesina de Mundos comenzó a darle varios golpes fuertes que agrietaban todo el soporte del puente, y haciendo que varias de las cuerdas colgantes se caigan. Reign mandó a volar a Kara contra la calle, luego cargó contra ella. La Chica de Acero tomó una de estas cuerdas, y a una gran velocidad ató a la Asesina de Mundos en el puente.

Reign comenzó a hacer fuerza para soltarse, haciendo que parte del puente comience a temblar y romperse. Una niña, que se le había caído su muñeca de Supergirl, corrió para recogerla a expensas de su madre, quien le decía que la deje allí.

Supergirl se dio cuenta de esto y vio como la niña iba a ser aplastada por varios escombros salidos del puente. Sin embargo, a gran velocidad, la Chica de Acero salvó a la niña. Esta volteó para ver a la kryptoniana sonreír mientras sostenía un escombro detrás suyo.

Supergirl: Vuelve con tu mamá, linda. Todo va a estar bien – dijo mientras le entregaba su muñeca.

La niña tomó feliz la muñeca y se dirigió donde su mamá. Pero se detuvo un instante, y se giró para darle un abrazo a su heroína, el cual Kara correspondió. Luego de ese emotivo momento, Supergirl voló hacia donde estaba Reign.

Ella le lanzó un bote mientras estaba en el aire, pero la kryptoniana lo atrapó y se lo devolvió. El bote hizo impacto en Reign, quien quedó algo aturdida. Supergirl aprovechó esto y tomó de la capa a la Asesina, haciendo que atraviesen el puente y caigan en el agua.

Allí, se dieron varios golpes que ocasionaban pequeñas olas en el río. Luego, Supergirl salió disparada con Reign detrás suyo. La Asesina la tomó en el aire y la hizo estrellarse en Times Square.

En el famoso cruce de avenidas, Reign le asestó un par de golpes contra el suelo. Luego, la tomó de la capa y la lanzó por los aires. La Chica de Acero chocó contra la hélice del helicóptero de CatCo, el cual no se perdía nada de la pelea.

El vehículo comenzó a caer dando vueltas en el aire, pero Supergirl logró reponerse a tiempo y lo hizo aterrizar en la azotea de un edificio. Stuart salió del mismo para ver a la kryptoniana muy debilitada pero lista para volver a pelear.

Stuart: Tienes que llamar a la caballería.

Supergirl: En este momento, yo soy la caballería.

Stuart: No puedes volver con esa cosa, es suicidio.

Supergirl: También lo era el helicóptero... Tengo que volver al trabajo.

Reign dio un gran salto hacia el edificio lista para atacar. La kryptoniana fue más rápida y con su visión de calor cortó la cola del helicóptero, para usarlo como bate y lanzar a la Asesina de Mundos lejos de allí.

Supergirl voló detrás de ella y disparó su visión de calor para enviarla más arriba, luego le dio un golpe en la espalda con el mismo objetivo, subiendo tan alto en el aire que se pusieron por encima de las nubes. Allí, Kara intentó darle un golpe para enviarla en picada al suelo; pero Reign se adelantó y la desestabilizó con un golpe al rostro, luego la tomó de la capa y la hizo dar varias vueltas, para después darle cabezazos mientras caían.

Desde lejos, parecía que un meteoro se acercaba al planeta. Reign seguía dándole golpes a Supergirl al rostro. Kara intentó usar su visión de calor, pero la Asesina la tomó del rostro impidiendo esto. Ambas cayeron fuertemente al suelo, creando un cráter y destruyendo las ventanas de los edificios cercanos. En el lugar de impacto, Stuart y su compañero se acercaron para transmitir mejor.

– En este punto, es imposible decir quién saldrá victoriosa...

Antes de que el relator pudiera seguir hablando, Reign salió del humo dispuesta a atacar a ambos. Sin embargo, un rayo rojo salió de la nada en dirección a la Asesina de Mundos, estrellándola contra un camión. Al voltear, vieron al horno andante conocido como NRG cayendo pesadamente al suelo.

NRG: Oye, chica gótica: si te metes con Supergirl, te metes conmigo.

Ben volvió a disparar un rayo rojo pero esta vez más potente, enviando a Reign más lejos hasta dejarla semi-inconsciente. El héroe se acercó hasta la Asesina de Mundos.

NRG: Si crees que vas a asustarnos por derrotar a la Liga de la Justicia, estás en un error. Eso pasa una vez por semana.

Sin embargo, Reign disparó su visión de calor sobre Ben, enviándolo unos metros lejos. Luego, la Asesina cargó contra él a gran velocidad, lo tomó de una pierna y lo azotó contra el suelo varias veces. Esto hizo que el héroe volviera a su forma normal.

Reign tomó a Ben de su chaqueta y lo lanzó fuertemente hacia un muro. Sin embargo, no se estrelló debido a que Supergirl logró salvarlo al atraparlo.

Supergirl: Incluso en este estado... aún tengo que salvarte...

Ben: Creí que eso estaba haciendo yo.

La Chica de Acero intentó volver a la pelea, pero Ben la tomó del hombro antes. Estaba tan debilitada que incluso esto logró frenarla un poco.

Ben: Espera, mira cómo estás. No durarás más tiempo.

Supergirl: Tengo que hacerlo.

Ben: No tienes que hacerlo sola. Estamos juntos en esto, ¿recuerdas?

Supergirl: ¿Y qué esperas?... Transfórmate y derrotemos a ese demonio.

Ben y Supergirl compartieron una sonrisa. Luego, la kryptoniana cargó a gran velocidad contra Reign mientras el héroe se convertía en Cuatrobrazos. Kara logró enviarla más lejos, haciendo que la Asesina diera vueltas en el pavimento.

Tanto Supergirl como Reign se notaban bastante cansadas y malheridas, pero aún así sacaron fuerzas para volver a cargar entre ellas y darse un golpe mutuo en el rostro. Dicho golpe creó una fuerte onda de choque que desestabilizó a Ben, haciendo que rebote en el pavimento y vuelva a su forma normal.

Mientras, Supergirl le dio otro par de golpes de Reign. Sin embargo, esta logró tomar los puños de Kara antes de que le diera otro. Luego, en medio del forcejeo, los ojos de la Asesina comenzaron a brillar rojos.

Reign: Te asesinaré.

Sin esperar más, ella disparó su visión de calor a quemarropa contra Supergirl. El disparo dio en su vientre, perforándolo del todo y enviándola lejos contra unos escombros.

Ben, quien no veía bien debido al humo, se acercó hasta el lugar. Entonces, vio el cuerpo de su novia; la cual aún respiraba. Sin embargo, Reign salió un momento después, y su atención se centró en el héroe.

Ben: Ahora sí ya me enojé. ¡Es hora de Gravattack!

El héroe activó su Omnitrix cuando encontró su forma Galilean. Sin embargo, en medio de su enojo, presionó tan fuerte que el reloj lo convirtió en su forma Appoplexian.

Rath: ¿¡Qué!? ¡Déjame decirte algo, nuevo Omnitrix! ¡Rath no es para nada útil ahora!

Antes de que pudiera cambiar de nuevo, Reign le dio a gran velocidad un fuerte golpe al estómago de Ben, sacándole el aire y terminando su transformación. Luego, la Asesina de Mundos lo tomó del rostro y volvió a cargar su visión de calor.

Reign: Muere.

Supergirl, quien veía todo desde atrás, abrió los ojos como platos. Entonces, usando cada gramo de fuerza que le quedaba, voló a toda velocidad hacia la Asesina de Mundos lanzando un gran grito de guerra.

Todo pareció ir en cámara lenta. Reign se dio vuelta para ver cómo el puño de la Chica de Acero impactaba en su rostro, haciendo que este se gire hasta romper su cuello.

El golpe causó una gran onda de choque, haciendo un gran muro de humo en el lugar. Cuando algo de él se disipó, se vio el cuerpo muerto de Reign a los pies de Supergirl. Luego, esta también cayó al suelo. Ben corrió rápido hasta ella y la sujetó de los hombros.

Ben: ¡NO! ¡No, no, no, no, no, no! ¡Quédate conmigo, Kara! ¡No te vayas, quédate conmigo!

Supergirl: ¿Esa cosa... ya... ya está...?

Ben: Sí... Lo hiciste, Kara... Nos salvaste a todos – el héroe comenzó a derramar algunas lágrimas, sabiendo que lo que venía era inevitable.

Supergirl: Bien... eso... es lo único que importa – luego tomó la mejilla de Ben – Qué afortunada fui... al poder conocerte a ti... Fue el... mejor año de mi vida...

Totalmente exhausta y a causa de sus letales heridas, la Chica de Acero cerró sus ojos feliz y con algunas lágrimas. Stuart, quien estaba grabando toda la escena y también derramando lágrimas, transmitió la noticia a todo Nueva York y el mundo; mientras la capa de Kara hondeaba sobre un palo, repitiéndose la misma imagen de hace un tiempo.

Kara Zor-El, alias Supergirl, había muerto.

Los héroes que anteriormente habían peleado contra Reign también llegaron al lugar, sólo para ver que ya era tarde. Algunos como Batman, Hombre Halcón, o Flecha Verde sólo bajaron sus cabezas; mientras que otros como la Mujer Maravilla o Jessica Cruz derramaban lágrimas.

En otras partes de Nueva York, Brad miraba entre lágrimas la escena mientras abrazaba la foto que se había tomado con la heroína. Winn también derramó algunas mientras estaba en CatCo, mientras que Cat Grant sólo se mantenía inexpresiva. La niña que salvó Kara en el puente de Brooklyn también lloraba mientras abrazaba su muñeca. Lena Luthor miraba triste la escena desde su oficina en LexCorp, sintiéndose culpable de la muerte de Supergirl; ya que la empresa que ahora dirige había despertado al monstruo que terminó con su vida.

En otras partes del mundo, como Ciudad Gótica, Jason Todd abrazaba por los hombros a una inconsolable Barbara Gordon; mientras que el actual Robin se veía triste pero intentaba disimularlo. En Ciudad Central, algunos miembros del Equipo Flash como Vibe y Iris también soltaron una que otra lágrima.

Fuera del mundo, más precisamente en la Atalaya, la noticia había llegado a un recuperado Superman; quien también derramó lágrimas al ver que su prima había sufrido su mismo destino. Sin embargo, como ya se dijo, él había vivido esto; por lo que tenía una idea para que Kara pudiera regresar. Aún así, eso no era impedimento para que el Hombre de Acero no sintiera culpa de no haber estado allí para su única familia biológica.

Sin embargo, lo que el mundo no estaba notando, era otra noticia que impactaría más tarde. La identidad secreta de Ben Tennyson había sido revelada, puesto que transmitieron toda la pelea, incluidas las transformaciones del héroe. Por ahora, los únicos que se dieron cuenta de esto eran Carl y Sandra Tennyson; quienes, además de estar conmocionados por la muerte de Kara, se preguntaban cómo es que Ben se había convertido en extraños seres.

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Al día siguiente, varios ciudadanos de Nueva York estaban reunidos en Central Park, donde se estaba realizando el funeral de Supergirl. Entre los presentes se encontraban Cat Grant, Brad Johnson, Stuart Brown, Winn Schott, Barbara Gordon, Jason Todd, Iris West-Allen, Lois Lane, Max Tennyson, los padres de Ben, etc. Todos vestidos de negro.

En el frente, varios miembros de la Liga en sus trajes estaban sentados frente a un escenario, donde en el centro estaba el ataúd de Kara. A un costado de este, estaban los miembros fundadores de la Liga de la Justicia. Y frente a un micrófono, estaba el propio Ben Tennyson; ya sin importarle haberse revelado ante el mundo.

Ben: Supergirl, en el poco tiempo que estuvo en Bellwood, se convirtió en un ejemplo que nos inspiró a superarnos a nosotros mismos. Ella fue una heroína para Nueva York, una gran amiga para todos; y para mí... una gran compañera. A pesar de que tenía varios súper poderes, ella nos enseñó el poder más grande de todos: la amistad, y la lealtad.

Luego, entre unas pocas lágrimas, Ben dejó lugar al primo de su novia. Superman tomó el micrófono para decir sus propias palabras.

Superman: Mi prima se llamaba Kara Zor-El, y ella apenas logró escapar de la explosión de nuestro planeta; a diferencia de mí, que llegué sin problemas. Por varios años desde que me enteré de mi origen, me sentí solo. Conocí a varias personas en el camino... pero cuando me encontré con ella, sentí que un gran vacío se llenaba por completo. Desde Metrópolis, siempre he seguido las heroicas hazañas que ella lograba en esta ciudad; y puedo decir sin ninguna culpa... que no podría estar más orgulloso de que sea de mi familia.

Luego de eso, los otros miembros fundadores llevaron el ataúd hasta un altar que se construyó en su honor, sobre el cual estaba planeado poner una estatua. Una vez dentro, el Hombre de Acero miró a todos los presentes.

Superman: ¡Por Supergirl, siempre en nuestros corazones!

Todos se levantaron de sus asientos en señal de respeto. Luego, Jessica Cruz se elevó en el aire y, con algunas lágrimas, prendió con su anillo una llama frente al altar de su amiga.

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Un día después del funeral de Supergirl, el día se presentaba lluvioso, como si el cielo supiera que Nueva York estaba de luto.

Stuart había terminado de tomar en cámara un crimen detenido por la policía cerca de CatCo. Cabe aclarar que él no tenía ánimos, como si hubiera hecho todo por compromiso.

Ben estaba sentado en el sillón de su casa, con sus padres frente a él cruzados de brazos. Ya no le importaba nada, ni siquiera enfrentar a sus padres por la seria discusión que tendrían.

Brad se encontraba en los muelles de la ciudad con la fotografía que ahora atesoraba mientras rezaba arrodillado y con los ojos cerrados.

Brad: Dios te salve, María. Llena eres de gracia, el Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres. Y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, madre de Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Luego de eso, se paró y se permitió derramar algunas lágrimas más, mientras miraba al cielo como si verdaderamente estuviera conversando con Dios.

Brad: ¿Por qué dejas morir a Supergirl, y dejas que un fracasado e ignorante como yo siga viviendo? No está bien, Dios... No está bien.

Por otra parte, Winn se encontraba trabajando en un equipo electrónico de CatCo. Cuando terminó, se fue hasta su escritorio, el cual estaba frente al de Kara Danvers; la cual no había sido vista desde la muerte de Supergirl.

Cat: Nadie ha tocado nada – dijo apareciendo detrás suyo.

Winn: Lo sé. Sólo quería darle... un vistazo.

Cat: Todavía hay personas perdidas por causa de la batalla, los encuentran todos los días. Kara regresará, estoy segura de ello.

Winn: Gracias, jefa.

Por otra parte, Lena Luthor sólo estaba organizando otros papeles en LexCorp. Sin embargo, su secretaria entró a su oficina casi corriendo.

Lena: Eve, ya te dije que tienes que anunciarte antes de entrar.

Eve: Lo siento, señorita Luthor. Es que usted me dijo que le informara sobre esto lo antes posible.

Lena: ... ¿Lo encontraron? – dijo con los ojos abiertos como platos.

Eva: No sólo eso, lo trajeron aquí.

Lena y Eve bajaron hasta un subnivel del nuevo edificio de la compañía. Allí, había experimentos con tecnología y otras cosas que trajeron de Metrópolis. Lena iba a desechar la gran mayoría; pero luego de la muerte de Supergirl, decidió conservar algunos.

– Señorita Luthor – dijo un científico que estaba allí.

Lena: ¿Dónde está?

– Por aquí. Acaban de traerlo.

El científico llevó a Lena y Eve hasta una mesa, donde una gran y larga bolsa de plástico negra se exhibía. Luego, el científico reveló su contenido a ambas féminas.

El cuerpo de Supergirl.

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