Cap. 11: Bizarra
Tres meses atrás
Bellwood, Nueva York
Lord Technologies
Un tiempo antes de la aparición de la doble de Kara Zor-El/Supergirl, Maxwell Lord fue hasta su laboratorio e ingresó en el famoso cuarto 52. Allí dentro, un solo médico trabajaba con la chica en coma que Ben Tennyson/Ben 10 descubrió cuando se infiltró en el lugar.
El millonario contempló a la chica dormida y acarició su frente, y luego revisó su estado de salud. Después, extendió su mano hacia el médico y este le pasó un interruptor cilíndrico, Max lo presionó, y el líquido negro que era ácido clorhídrico comenzó a filtrarse en el cuerpo de ella mediante un suero.
A los pocos segundos, los signos vitales de la chica comenzaron a aumentar bruscamente mientras ella convulsionaba en la camilla donde estaba acostada. Y después de un corto tiempo, la chica abrió sus ojos mostrando sus globos oculares completamente negros.
M. Lord: Está viva – dijo en un susurro, con una sonrisa dibujada en su rostro.
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Hace un día
Momentos antes de que la doble de Supergirl apareciera en público, Max Lord le quitó una venda de los ojos a la chica; quien ahora parecía una doble idéntica de la kryptoniana, pero sus ojos alternaban entre un negro completo y las pupilas azules de Kara.
M. Lord: La muerte es el velo que aquellos que viven llaman vida. Duermen, y luego esta llega. Shelley, ''El moderno Prometeo'' – decía mientras comenzaba a caminar por el cuarto – En esta habitación he creado cosas que le han permitido a muchos vivir de formas que nunca imaginaron, que cambiaron el mundo. Eso ya no significa nada, y todo por ti. La más perfecta creación. Juntos no sólo cambiaremos al mundo, cambiaremos el significado de la vida – dijo dándole un beso en el dorso de la mano de ella – ¿Lo entiendes?
''Supergirl'': Sí, señor – dijo sin mostrar ninguna emoción, cambiando sus ojos a los de Kara.
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En la actualidad
Cuartel General de los Plomeros
Al día siguiente de la aparición de la doble de Kara, la original Supergirl estaba en los cuarteles Plomeros viendo un informe en la gran pantalla sobre el incidente. Ella estaba acompañada de su novio Ben, el magistrado Max Tennyson y el Revonnahgander Rook Blonko.
Max: Esto no es uno de tus mejores éxitos – dijo sarcástico pero serio.
Rook: Envié un equipo a rastrear el área. No había signos de actividad extraterrestre, podemos descartar a un alienígena que cambia de forma. Por lo menos aparentemente.
Ben: Obvio no fui yo, Rook – dijo levemente ofendido.
Rook: Nunca insinué que fueras tú, Ben – dijo levantando una ceja.
Ben: Ah... claro – dijo algo nervioso, levantando un pulgar.
Supergirl: ¿Qué podrá ser? ¿Otro clon? – preguntó confundida.
Rook: Lo más probable. La tecnología humana ha avanzado mucho, y muchos enemigos suyos han logrado fusionarla con tecnología alienígena – decía de forma analítica – En estos cuatro años, cualquiera pudo haber logrado crear un embrión a base de tu ADN y avanzarlo genéticamente hasta una forma adulta.
Ben: Power Girl es básicamente eso – dijo señalando a Rook.
Supergirl: ¿Qué hay de Maxwell Lord? – le preguntó a Ben.
Rook: Cierto, la joven que vió al infiltrarse en su laboratorio – dijo mirando al héroe – Pudo haberle hecho modificaciones genéticas, saltándose la parte del embrión.
Ben: Había intentado olvidar ese día – dijo irónico y con la mirada baja – Recuerdo que estaba en coma, y casi no tenía actividad cerebral.
Max: Si eso es cierto, lograr hacer que estuviera semiinconsciente sería como traerla de la muerte – dijo serio.
Supergirl: ¿Estás seguro? – le preguntó a su novio con cierta duda.
Ben: Oye, Max Lord tiene complejo de dios pero no es uno. No creo que pueda traer a alguien de la muerte.
El castaño miró a todos esperando que estuvieran de acuerdo con él; pero en su lugar, todos se quedaron callados y se fueron a otras partes de la base.
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Manhattan
CatCo Worldwide Media
La excepción fue Kara, quien se fue de la base para ir a su trabajo en CatCo. Cuando llegó a su escritorio, se sorprendió un poco al ver a su amigo Winn de regreso.
Kara: Winn, ¿cómo estás? – dijo dándole un corto abrazo – ¿Resolviste tu problema?
Winn: Ah, sí, sólo un viejo y retorcido asunto de mi difunto padre – dijo algo despreocupado.
Kara: Oh, lamento si toqué un tema sensible...
Winn: No, no es problema – la interrumpió calmado, y hubo unos pocos segundos de silencio – Mi padre estaba loco, y a pesar de que Power Girl lo mató a sangre fría... se siente como un peso menos en mi espalda.
Kara: Si quieres, más tarde podemos hablar para desahogarte – dijo tomándolo del hombro – Ahora, la señora Grant agendó una reunión de contenido en su oficina.
Winn: ¿Es por el camión que lanzaste a una montaña? – dijo mirando las noticias, que aún pasaban el incidente de la falsa Supergirl.
Kara: Sí, pero... esa no fui yo – dijo lo último susurrando.
Winn: ¿Quién fue? – antes de que la rubia pudiera contestar, ambos sintieron el ascensor llegar.
Kara: No puede ser, lo olvidé – dijo algo asustada corriendo hasta el mismo, del cual salió Cat – Señora Grant, lo siento, sólo deme un minuto y traeré su... su latte – ella tuvo un gesto de extrañez cuando vio un vaso de café en las manos de su jefa.
Cat: Oh, tuve un poco de tiempo esta mañana así que yo misma lo compré – decía caminando hasta su oficina, pero antes se detuvo – Oh, y casi lo olvido, también te traje uno para ti – dijo mostrándole otro vaso – Calabaza especiada, con espuma extra y un poco de canela esparcida encima.
Kara: Así es como me gusta – dijo incrédula.
Tanto Kara como Winn se miraron entre ellos con expresiones confusas en sus rostros, y la kryptoniana olió su latte para verificar que no era una trampa. Unos minutos después de esa curiosa escena, todo el equipo periodístico de CatCo estaba reunido en la oficina de Cat Grant.
Cat: De acuerdo, equipo, ¿cómo trataremos esto? – decía sentando con los pies sobre su escritorio mientras miraba las noticias de la doble de Supergirl – Denme encabezados que atraigan la vista – luego señaló a una mujer – Tú, adelante.
– ''Supergirl es peligrosa''.
Cat: Mmm, bueno, ''Supergirl enloqueció'' estaría mejor pero aún no está bien – dijo acomodándose mejor en su asiento – Otro.
– ''Supergirl, ¿súper amenaza?'' – dijo un hombre.
Cat: ¿Estás preguntándome, o estás diciéndome? – dijo poniéndose de pie.
– Ah...
Cat: Exacto, por eso no funciona, Derek – dijo algo exasperada – Otro.
Kara: Tal vez ni siquiera es Supergirl – dijo más para sí misma, pero todos los presentes la escucharon y voltearon a verla.
Cat: ¿Kira? – la mal mencionada quedó nerviosa por toda la atención que recibía – Pues eso fue... interesante – dijo acercándose un poco – Di más.
Kara: Tal vez sea una impostora... ¿pretendiendo ser Supergirl? – dijo calmando sus nervios.
Cat: Continúa – dijo intrigada.
Kara: No lo sé, ah, tal vez sea alguien que quiere desacreditarla.
Cat: Uy, me gusta ese enfoque – dijo algo emocionada – Darle a nuestra chica el beneficio de la duda muestra que elegimos no creer lo peor de las personas. Sí, sí, puedo ver el encabezado claramente, el nombre de Supergirl con signos de interrogación – dijo volviendo a su escritorio – Como en: ''¿Supergirl?''. Me gusta – dijo con una sonrisa, pero luego cambió a una expresión seria – Bien, todo el mundo afuera – todos los presentes abandonaron la oficina excepto Kara.
Kara: Señora Grant... ¿puedo hacerle una pregunta? – dijo acercándose a su jefa, y esta se arregló un poco ante la petición.
Cat: Mi puerta siempre está abierta.
Kara: No es amable conmigo porque saldré con su hijo, ¿o sí?
Cat: Oh, ¿eso sigue en pie? – dijo fingiendo sorpresa.
La respuesta de Cat fue todo lo que necesitó Kara para entender el comportamiento de ella hacia su persona. Después de la reunión, la kryptoniana fue junto con Winn y James Olsen hasta la oficina secreta que compartían en CatCo.
Kara: Es como ''La invasión de los usurpadores de cuerpos'' – decía mientras los tres salían del ascensor – Ese ente en su oficina se ve como ella, se oye como ella, pero es amable conmigo de una forma en la que ella nunca lo sería.
J. Olsen: Entonces disfrútalo mientras dure – dijo con leve ironía.
Kara: Sí, lo intento, pero es difícil disfrutar de algo cuando hay una doble de mí volando en la ciudad haciéndome quedar mal – dijo mientras los tres ingresaban a la oficina.
Winn: Dime qué necesitas – dijo para después tomar asiento frente a una computadora.
Kara: Maxwell Lord tenía una mujer en su laboratorio, podría estar relacionada. ¿Revisarías en hospitales si hay pacientes comatosos extraviados recientemente? ¿De mi edad, estatura y peso? – preguntó lo último señalándose a sí misma.
Winn: Okay, sólo necesitaré esos datos primero – dijo algo confundido.
En ese momento, la kryptoniana se dio vuelta para ver un mensaje que le había llegado al teléfono. El mismo era de Adam diciéndole ''Ya quiero verte esta noche'', y ella se puso algo nerviosa por el recordatorio de su cita con él.
J. Olsen: ¿De quién era el mensaje? – le preguntó notando la reacción de su amiga.
Kara: De nadie, yo sólo... – intentó evadir la pregunta.
Winn: Te sonrojaste – dijo viendo sus mejillas con un ligero rosa en ellas.
Kara: Claro que no – decía riendo nerviosa – Hace calor aquí, ¿qué no tienen calor?
Winn: Mientes, lo veo por lo que haces con tu nariz – dijo notando un raro movimiento en la nariz de la rubia.
J. Olsen: ¿Fue algún chico? ¿Tal vez...?
Kara: Si quieren saber, fue un mensaje de Adam para confirmar nuestra cita de hoy – dijo intentando sonar segura.
Winn: ¿A-Adam Foster? ¿Saldrás a una cita con el hijo de Cat? – dijo algo impresionado e incrédulo, y Kara asintió.
J. Olsen: ¿Y quién invitó a quién? – preguntó confundido.
Kara: Adam me invitó, de hecho.
Winn: ¿Y qué opina Ben al respecto? – la rubia sólo apartó la mirada – Así de mal, ¿eh?
Kara: Sólo le dejaré en claro a Adam que no estoy interesada en una relación y ya – intentó sonar despreocupada.
J. Olsen: ¿Y qué pasa si él insiste?
Kara: Por favor, ya tengo suficientes problemas con Ben – dijo algo cansada.
J. Olsen: Sí, pero al menos intenta ponerte en su lugar. ¿Qué pasaría si otra chica invita a Ben a una cita? – hubo unos segundos de silencio incómodo, y él observó su reloj – Debo volver arriba. Que te diviertas – dijo tomándole el hombro a Kara.
Kara: Gracias, sí, adiós.
Kara quedó algo pensativa sobre las recientes palabras de James en su cabeza, y tenía el presentimiento de que la seguirían por el resto de los días mientras Adam estuviera en la ciudad. Volvió a mirar el mensaje del hijo mayor de Cat, y su mente divagó entre eso y Ben.
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Bellwood
Lord Technologies
Ya pasadas algunas horas del día, la doble de Supergirl estaba en el cuarto 52 viendo en una pantalla gigante imágenes de noticias de la Chica de Acero haciendo actos heroicos. A lo largo de todo su cuerpo, tenía cables conectados a ella que le daban descargas eléctricas cada tanto a medida que las imágenes transcurrían.
Maxwell Lord llegó para ver cómo seguía el proceso de ''odiar a Supergirl'', ya que la idea la había tomado de cuando trabajaba junto a CADMUS con los Ultimen. Era el mismo proceso por el que hicieron pasar al clon de Doomsday que CADMUS creó y que Superman envió a la Zona Fantasma.
M. Lord: ¿Algo bueno en televisión? – preguntó sarcástico.
''Supergirl'': Supergirl... – decía susurrando entre descargas – Supergirl...
M. Lord: Sí, ¿cómo es Supergirl?
''Supergirl'': Mala – dijo seria – Muy mala.
M. Lord: Muy mala, tanto que debe ser detenida, para siempre y reemplazarla por alguien más – dijo acercándose a ella – Mi propia Supergirl. ¿Quién me protegerá y al planeta?
''Supergirl'': Yo.
M. Lord: ¡Sí! – dijo emocionado – Lo que me lleva a la siguiente pregunta. ¿Qué le hacemos a la gente mala? – dijo señalando una imagen de la verdadera Kara.
''Supergirl'': Los... asesinamos – Max Lord sonrió con gusto ante esa respuesta.
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Manhattan
La noche había llegado, y con ella el momento de la cita entre Kara y Adam. Ambos decidieron reunirse en un bar del distrito de Manhattan, y cuando entraron pidieron un par de tragos mientras tenían una charla amistosa.
Adam: Al parecer, mamá nos reservó una mesa en el nuevo restaurante de Mario Batali.
Kara: No lo hizo. ¿Quién crees que hace todas sus reservaciones? – hubo unos segundos de silencio – Yo – dijo señalándose a sí misma riendo un poco – Bueno, ella me dijo que llamara, pero tuve el presentimiento de que no sería tu estilo; nuestro estilo – luego bebió un poco de su trago.
Adam: Eres asombrosa – dijo admirándola.
Kara: No lo soy – dijo algo apenada.
Adam: Sí lo eres.
Kara: No.
Adam: Sí – decía convencido – Nadie más me habría enviado esa carta.
Kara: Claro que sí – quiso restarle importancia.
Adam: No, a la mayoría no le interesa. Eres diferente, Kara. Tú ves a las personas... tú las entiendes, me hace desear que yo sólo... No – dijo apartando la mirada.
Kara: ¿Qué es lo que te hace desear? Dime – dijo intrigada.
Adam: Me hace desear que yo pudiera hacer eso mismo por ti – Kara apartó la mirada algo conmovida – ¿Fue demasiado?
Kara: No, en realidad... creo que eso sería lindo – ambos compartieron unas sonrisas.
– Llegó una noticia de última hora – dijeron en las noticias de la televisión del local.
– Ahora la historia que hemos seguido en vivo. Un cable se trozó en el teleférico, dejando a los pasajeros varados y en peligro. La policía y los trabajadores de rescate están en camino, pero los testigos sugieren que podrían no llegar a tiempo.
Kara: Lo siento, tengo que salir – dijo mientras recogía sus cosas.
Adam: ¿Me dejas? – preguntó confundido.
Kara: No, la estoy p-pasando genial pero es que... mi abuela se cayó y debo llevarla al hospital – dijo la primera excusa que le vino a la mente.
Adam: Iré contigo... – dijo preocupado pero fue interrumpido.
Kara: No, no, no, enserio, quédate, descuida – decía con mucha pena – En verdad lo siento.
En poco tiempo, la Chica de Acero se cambió su atuendo civil a su traje de heroína y estaba volando hacia el teleférico dañado. Allí, un helicóptero filmaba la escena mientras la kryptoniana revisaba que los pasajeros estuvieran bien.
Supergirl: ¡Tranquilos! ¡Los sacaré de ahí dentro!
Kara fue hasta la parte superior del teleférico e intentó desconectarlo del cable que lo sujetaba. Sin embargo, se interrumpió cuando vio una figura volando alrededor de ella. Cuando esta se detuvo, reveló ser su doble flotando frente a ella.
Supergirl: Eres tú – dijo mirándola fijamente – ¿De dónde vienes? – su doble no contestó – ¿Alguien te envió o te obligan a hacer esto?
''Supergirl'': Yo asesino a Supergirl – dijo sin ninguna emoción.
Rápidamente, la doble le dio un fuerte golpe al rostro, luego una patada al pecho y la estrelló contra el techo del teleférico cuando Kara intentó volar, desestabilizando un poco el vehículo. La kryptoniana se puso de pie rápidamente y le dio un golpe al rostro a su doble; pero esta respondió con una patada al rostro que volvió a enviar a Kara al techo.
Allí, la Chica de Acero se defendió de su doble con sus puños para alejarla y luego le dio una doble patada al pecho que la envió al aire. Kara también flotó y ambas quedaron a cierta distancia; sólo para que la doble cargue contra ella a gran velocidad y la haga estrellar contra el conector del teleférico, haciendo que este comience a caer al río.
La kryptoniana se apresuró y atrapó el teleférico antes de que se hunda en el agua, y luego llevó el mismo hasta la bahía para poner a los pasajeros a salvo. Todo esto fue observado atentamente por su doble, quien después huyó sin más ni menos.
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Bellwood
Cuartel General de los Plomeros
Después de su primer asalto con su doble, la Chica de Acero fue hasta la base para informar sobre lo sucedido a Ben, Rook y Max.
Supergirl: Es tan fuerte como yo, vuela como yo, y pelea como yo; y aunque habla como el monstruo Comegalletas, es igual a mí – decía mientras caminaba con los demás hasta el centro de mando.
Ben: Mira el lado bueno, al menos no es un androide o un cyborg – dijo irónico.
Supergirl: No, miré sus ojos, y había alguien viéndome – dijo algo preocupada – Tiene un alma, y de alguna forma es como la mía. Somos la misma, estoy segura.
Rook: El otro lado positivo es que si las dos son idénticas o es similar a ti, su debilidad es la misma. Usemos kryptonita – dijo mirando a su magistrado.
Max: Debemos controlarla – luego vio el rostro de aflicción de Kara – Tranquila, la dosis no la dañará.
Rook: Ningún daño grave.
Con eso, Max y Rook se fueron a otra parte de la base Plomera mientras el dúo neoyorkino también se movía hacia la zona de hangares; más precisamente al estacionamiento, porque el castaño quería buscar su moto.
Ben: Y... ¿qué tal tu cita? – preguntó ''disimulando'' su molestia.
Supergirl: Ben...
Ben: ¿Qué? Oye, aunque esto me moleste, me preocupo – dijo más tranquilo.
Supergirl: Habría podido terminarla de no ser por mi doble – dijo algo cansada.
Ben: Hah, ahora me siento mal por tener que atraparla – dijo irónico, y luego vio el rostro serio de su novia – Tampoco voy a fingir que no me alegra, ¿pero qué harás con Adam?
Supergirl: No lo sé, tengo que hablar con él mañana – dijo con leve preocupación – Y seguramente con la señora Grant también.
Ben: Bueno, te dejo tranquila para que pienses – dijo tomándola de los hombros, yendo hacia su motocicleta con una pequeña sonrisa en su rostro.
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Manhattan
CatCo Worldwide Media
Al día siguiente, Kara salió rápido de su casa hasta su trabajo preocupada por el tema de su cita fallida con Adam. Hablando de él, este llegó junto con su madre hasta el edificio de CatCo; también preocupado pero más por la actitud de la kryptoniana que otra cosa.
Adam: ¿Habré dicho algo malo? – le preguntó con algo de temor a su madre, mientras ambos salían del ascensor.
Cat: No. No, no, no. Ella es... asustadiza, sí, al igual que un caballo – dijo restándole importancia al asunto mientras iba hacia su oficina, pero luego se dio vuelta hacia su hijo – Oh, Adam... lamento que tu cena no haya funcionado, pero espero no haber sido una mala sustituta – dijo algo apenada.
Adam: No, estuvo bien – dijo calmado – Me gustó estar contigo.
Cat: A mí también – dijo conteniendo su emoción.
Kara: ¡Señora Grant! – llegó corriendo hasta donde estaban ellos, con un latte en manos – ¡Adam, estás aquí!
Adam: Es verdad – dijo irónico.
Cat: Yo igual – dijo seria.
Kara: Yo olvidé llamarte después de lo de anoche, lo siento tanto, discúlpame – le dijo apenada a Adam.
Adam: ¿Todo en orden? – preguntó extrañado.
Kara: Sí – dijo calmada, y Cat soltó un suspiro de alivio para ir hacia su oficina.
Adam: Lo entiendo, así es en esta ciudad – dijo irónico pero tranquilo – Pero me debes una cita.
Kara: C-Claro – dijo nerviosa, recordando las palabras de James en su cabeza.
''¿Qué pasa si él insiste?''
Adam: Esta noche.
Kara: De acuerdo.
Luego, ambos se despidieron con un torpe abrazo debido a un pequeño momento de confusión, y luego Kara fue hasta su escritorio. Toda la escena fue observada por Cat, quien también se dirigió hasta el escritorio de su asistente.
Cat: ¿Ustedes dos aún no se han besado? – preguntó confundida – Kira, tú eres como un personaje de una novela de Jane Austen – decía mirando las noticias – Bizarra.
Kara: No es tan raro, sólo hemos salido un par de veces – dijo algo ofendida.
Cat: No, así la llamaré – dijo bebiendo su latte mientras señalaba las noticias – Bizarra.
La kryptoniana levantó la vista hacia los televisores del edificio, que mostraban la pelea entre ella y la recién nombrada Bizarra. Incluso el título de la noticia era ''¡Llega Bizarra!''
Kara: ¿La llamará como el villano de Superman? – preguntó extrañada.
Cat: Sí el Hombre de Acero tiene uno, ¿por qué no la Chica de Acero?
Después de eso, Cat regresó a su oficina mientras Kara veía con confusión las noticias. Unos minutos más tarde, ella junto con Winn y James fueron hasta su oficina secreta porque el genio informático había obtenido algo de su investigación.
Winn: Una desconocida que coincide con tu altura, peso y color – dijo mostrando un expediente médico en una computadora – Fue llevada al Hospital General después de un accidente en auto, ha estado en coma desde entonces.
Kara: ¿Dónde está ahora?
Winn: Buena pregunta. La transfirieron a una propiedad privada: Genética Prometeo – dijo poniendo un documento de la misma – Adivina de quién es.
Kara: Max Lord – dijo suspirando.
Winn: Bingo. Hay otra cosa que es sospechosa – luego mostró más expedientes médicos – En los últimos meses, seis más como esa desconocida se han trasladado a ese lugar.
Kara: ¿A siete chicas? – preguntó extrañada e incrédula.
Winn: Tal vez le... tomó siete intentos para crear el duplicado perfecto – dijo algo estupefacto, mientras la rubia no creía lo que Lord aparentemente había hecho.
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Bellwood
Lord Technologies
Hablando del millonario, este estaba en el cuarto 52 de su laboratorio con Bizarra. Ella había obtenido una herida en el costado derecho de su mentón, y Max Lord la curaba con un pequeño láser rojo.
M. Lord: Te ordené matar a Supergirl – dijo serio mientras terminaba de curar la herida.
Bizarra: Tú dijiste ''Supergirl es mala''. Pero Supergirl ayuda a las personas. Supergirl no es mala – dijo lo último mirándolo.
M. Lord: Te entiendo. Compartes su ADN, es natural que quieras ver lo bueno en ella – dijo acercándose a un televisor con la imagen de Kara en él – ¿Pero en quién confías, en Supergirl o en mí? ¿A quién amas, a Supergirl o a mí? – dijo señalándose a él y la pantalla – Sólo recuerda que el mundo es un lugar muy complicado, niña – dijo acomodándole un poco el cabello – A veces, las cosas que parecen buenas son en realidad muy malas.
La doble de Kara asintió con una mirada seria, dispuesta a seguir con el plan de Max. El millonario, después, fue hasta su oficina y se sorprendió levemente de ver a Ben Tennyson de brazos cruzados dentro de la misma.
Ben: Te dije que te estaría vigilando – dijo serio.
M. Lord: Recuérdame qué se supone que hice esta vez – dijo sarcástico.
Ben: Sé sobre las chicas, Max, las siete – dijo molesto mientras Lord se acercaba a él – Tenían vidas.
M. Lord: Con muerte cerebral, sin posibilidad de recuperarse – dijo yendo hacia su escritorio y sentarse.
Ben: Las usaste como conejillos de indias.
M. Lord: O les di la oportunidad de vivir. Y no es una confesión; pero si alguien, si yo hiciera las cosas que dices, sólo necesitaría una síntesis genética elemental – decía cínico – Aislar el genoma de Supergirl e inundar a la sujeto con una infusión concentrada de ADN.
Ben: ¿Y cómo conseguiste su ADN? – preguntó aún molesto.
M. Lord: Siempre dejamos rastros de nosotros a donde quiera que vamos. Una célula de la piel o un cabello, hasta saliva – decía con una sonrisa.
Ben: Eres un bastado – dijo rechinando los dientes.
M. Lord: Lenguaje – dijo irónico fingiendo sorpresa – ¿Con esa boca besas a tu madre, o a tu querida novia? – se puso nuevamente de pie y se acercó a Ben.
Ben: No juegues conmigo.
M. Lord: Nunca. Es una simple ecuación evolutiva: supervivencia del más apto – decía caminando alrededor de su oficina – Para que la humanidad sobreviva, debemos ser más aptos que ellos.
Ben: ¿Te crees un salvador de la humanidad? – dijo acercándose a él – No eres más que un criminal común, amigo.
M. Lord: No tienes pruebas de nada – decía serio – No hay elección; pero si tú intentas algo, las cosas se pondrán mal para ti y para la gente que amas.
Ben: ¿Crees que no eres el único que me amenaza de esa forma? – dijo conteniéndose – Deberías preguntarle a muchos de mis enemigos cómo les salió eso.
M. Lord: Supergirl es la amenaza, Ben. Y Bizarra es la guardiana de la humanidad. De nada – dijo irónico.
Ben decidió irse de la oficina antes de romperle los dientes a Lord y que lo arresten por violencia e invasión a la propiedad. En realidad, al castaño no le interesaba si golpeaba o no al millonario ni las cuestiones legales, pero no quería problemas con la policía y que su abuelo y su novia lo sermoneen por eso.
M. Lord: Y que gane la mejor – dijo antes de que el héroe se fuera.
Ben: Mi chica ya es la mejor – dijo dando un portazo.
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Cuartel General de los Plomeros
Después de ''visitar'' a Maxwell Lord, el castaño regresó a la base para informar lo que descubrió. Cuando llegó a la misma, todos notaban el ceño fruncido de Ben en su rostro, y él se reunió con su abuelo, Rook y Supergirl.
Ben: No admitió nada pero fue él – decía molesto – Se llevó a las siete chicas e hizo a Bizarra a partir de ti.
Max: ¿Así la llamaremos? – preguntó extrañado.
Supergirl: Marca registrada de CatCo, aunque sacada de Metrópolis – dijo desinteresada.
Max: ¿Y cómo la detenemos?
Rook: Yo propongo un grupo de agentes armados con dardos de kryptonita – decía serio – Derribaremos a Bizarra la próxima vez que se aparezca.
Supergirl: Pero ella no es la mala aquí, es la víctima. Es por Max por quien debemos ir.
Ben: No es momento de pensar con el corazón, mujer – dijo volteando a verla – Ella no es una persona, es un experimento, uno de los proyectos científicos dementes de Lord.
Supergirl: ¿Y por qué no arrestar a Max?
Max: Los Plomeros no tienen autoridad para arrestar civiles, en especial a uno de esos millonarios famosos – dijo entre suspiros – Quiero al equipo de ataque.
Luego de esa charla, Rook se marchó a preparar el equipo de Plomeros que atacarían a Bizarra mientras Max iba a supervisar otras cosas. Kara iba a regresar a su trabajo pero Ben la detuvo antes.
Ben: Kara, hay algo más que debo decirte, y es mejor en privado – ambos se detuvieron en un lugar apartado de la base – Cuando estuve con Max, te mencionó de una forma rara, como si supiera quién eres – decía preocupado – No hay forma, ¿o sí?
Supergirl: No, no, no hay forma, no – dijo luego de pensarlo – Él sólo quiere manipularte y confundirte, es todo – luego sacó su teléfono y comenzó a teclear – Idiota.
Ben: ¿Qué haces?
Supergirl: Le escribo a Adam – decía preocupada – Yo no puedo ir a una cita con él si Max y Bizarra siguen afuera, todo esto es una locura.
Ben: No sabía que habría otra cita – dijo serio.
Supergirl: Ah, lo siento, yo debí decirte pero...
Ben: Mejor no digas nada – la interrumpió con la mano – Pero si tienes que ir, mejor ve. Siendo superhéroe, no puedes esperar a que todo se resuelva, no tiene sentido. Yo me encargo de todo aquí.
La kryptoniana notó todo el tiempo el tono entristecido y afligido de Ben y eso le preocupó. El castaño, por su parte, iba a ir hacia otra parte de la base pero antes volteó a verla de nuevo.
Ben: Kara... sabes que te amo, y tal vez siempre lo haga – decía triste – Pero esto es algo que ya no soporto. Siendo sincero, me pregunto si tú aún sientes lo mismo por mí.
Con esas duras palabras, Ben se retiró del lugar, dejando a una Kara nerviosa y preocupada mientras otras palabras de James resonaban en su mente.
''Al menos intenta ponerte en su lugar''.
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Manhattan
Unas horas más tarde, luego de atender unos asuntos en su trabajo, la Chica de Acero finalmente fue a su cita con Adam. Ambos caminaban por la ciudad comiendo un poco de yogurt, pero la mente de Kara estaba todo el tiempo con Ben.
Kara: Trabajar para tu mamá tiene sus altibajos, pero es bueno para mí – dijo intentando distraer su mente – Ha sido una gran mentora, ya sea que lo sepa o no.
Adam: ¿Qué hay de tu madre? – preguntó curioso – ¿Son cercanas?
Kara: Lo fuimos. Falleció, papá también – dijo triste.
Adam: Lo lamento, ¿qué pasó?
Kara: Ah, fue un accidente, no estuve ahí – Adam notó que ella tenía la mirada baja y se arrepintió de haber tocado el tema.
Adam: Kara, lo siento tanto – dijo muy apenado.
Kara: No, no, pasó hace mucho tiempo; y fui adoptada por una maravillosa familia – mintió en parte, recordando su estadía con Ben – Fue lo mejor para mí y... todo tiene un final feliz.
Adam: Pero... – dijo notando cierta duda en la rubia.
Kara: Pues... después de eso, yo... siempre ha sido para mí sentirme normal, creo – dijo refiriéndose a su naturaleza alien – Ya sabes, saber a qué lugar pertenezco. ¿Crees que tenga sentido?
Adam: Sí; pero, Kara, te diré algo importante – luego se acercó a su oído para susurrarle – Nunca nadie se siente normal.
La kryptoniana quedó algo conmovida por esas palabras, pero a su mente llegaban constantemente imágenes de Ben siendo él mismo junto a ella. No se había percatado de que Adam intentó darle un beso, cuando de repente Bizarra apareció volando a gran velocidad y se la llevó del lugar.
Adam: ¡KARA! – gritó al aire.
La doble de Supergirl llevó a Kara a un descampado a las afueras de la ciudad, donde la arrojó con violencia al suelo. Ella se levantó con algo de dificultad, sin importarle que sus gafas quedaron en el suelo luego de la caída.
Kara: Por favor, escucha, cometes un error – dijo algo cansada tratando de razonar.
Bizarra sólo seguía con su mirada inexpresiva y sin contestarle nada, y después disparó de sus ojos lo que parecía ser una visión de hielo. Kara respondió con su visión de calor y ambos ataques colisionaron entre sí, hasta que ambas lo terminaron debido a que estaban parejas.
Kara: Basta, por favor, tú no quieres hacer esto.
Su doble no respondió e intentó golpearla a gran velocidad. La Chica de Acero lo bloqueó, pero no pudo esquivar un segundo golpe que la envió en el aire. Kara logró frenar antes de salir volando, y luego cargó contra Bizarra y le dio un golpe que la hizo girar en el aire.
Entonces, la doble se elevó un poco más alto y disparó de su boca un aliento de fuego. La kryptoniana se tiró al suelo y respondió desde allí con su aliento ártico, volviendo a establecer un duelo parejo de poderes. Bizarra terminó con el mismo e intentó darle un golpe a Kara, pero ella lo esquivó dando un salto hacia atrás. La doble cargó contra ella, pero Kara la adivinó y retuvo los puños de Bizarra, teniendo un duelo de fuerza.
En ese momento, llegaron en sus vehículos los Plomeros liderados por Ben y Rook. Dichos vehículos tenían armadas unas torretas en los techos, listas para disparar la kryptonita. Tanto el castaño como el Revonnahgander se bajaron de los mismos al frenar.
Rook: Apunten hacia ella – ordenó refiriéndose a Bizarra, mientras Kara alejaba a la misma con dos golpes al rostro – ¡Fuego!
Aprovechando la oportunidad, los Plomeros dispararon la kryptonita con las torretas, y Kara se vio obligada a alejarse de Bizarra. A pesar del brutal asalto, la doble de Supergirl seguía en pie.
Rook: ¡Otra vez! – nuevamente, otro asalto de kryptonita impactó contra Bizarra.
Kara: ¡Rook, no! – dijo preocupada mientras Bizarra descendía al suelo.
Rook: ¡Cayó! – en ese momento, Ben aprovechó para ir con su novia.
Ben: ¿Te encuentras bien? – preguntó preocupado mientras sostenía a Kara.
Sin embargo, la atención de la kryptoniana estaba puesta en Bizarra, ya que la misma estaba intentando reincorporarse. Además de eso, su apariencia comenzó a cambiar de forma considerable; teniendo ahora una piel muy pálida, varias cicatrices en el rostro, sus ojos eran completamente negros, y la forma de su rostro dejó de ser igual a la de Kara.
Rook: La kryptonita la está degradando y corrompiendo – dijo mientras Bizarra se ponía de pie gruñendo.
Bizarra: ¡Te odio! – dijo furiosa mostrando una emoción por primera vez, para después salir volando; y además, con ese grito, demostró que su voz también cambió, siendo más grave que la de Kara.
Ben: La kryptonita te afectó, no puedes ir tras ella – dijo luego de que Kara mostrara signos de debilidad, a lo que esta sólo puso una expresión frustrada en su rostro.
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Bellwood
Cuartel General de los Plomeros
Luego del ataque fallido contra Bizarra, todos regresaron a la base Plomera para dar informes de lo sucedido; siendo Ben y Kara los que debían darle las noticias a Max Tennyson.
Ben: Oye, Kara, no te molestes – decía mientras ambos caminaban, viendo el semblante molesto de su novia – Rook te dijo que...
Kara: Ben, tenías razón – dijo seria – Lo sabe.
Ben: ¿De qué hablas? – preguntó extrañado.
Kara: Maxwell Lord. Bizarra no fue por mí siendo Supergirl, ella fue por mí siendo Kara – dijo señalando su atuendo de civil, incluidas sus gafas nuevamente puestas – Él sabe quién soy, también sabe donde trabajo. Nunca nadie podrá estar a salvo – dijo preocupada – Te lo advertí, te dije que era peligroso – luego, ambos llegaron con Max.
Max: ¿Y Bizarra?
Ben: ¿Sabías que a veces cuando planeas una cosa, te sale otra completamente diferente? – dijo intentando sonar irónico, pero su abuelo mantenía una expresión seria.
Max: ¿Y?
Ben: Bizarra es igual de fuerte que Kara pero sus poderes son opuestos. Le disparamos con kryptonita, pero en lugar de debilitarla...
Max: Eso la hizo más fuerte – terminó la frase, y su nieto asintió – Así que ese monstruo súper poderoso pasea en Nueva York.
Kara: Y es controlada por Maxwell Lord.
Max: Primero nos ocuparemos de neutralizar la amenaza. ¿Dices que es diametralmente opuesta a Kara? – le preguntó a Ben.
Ben: No sé lo que eso significa, pero tiene aliento de fuego y visión helada. Es como su reflejo en el espejo – luego se puso pensativo – Ahora que lo pienso, es como el original Bizarro.
Max: Haré que Blukic y Driba comiencen a revertir el compuesto químico de la kryptonita sintética. Si su estructura atómica la hace más fuerte, revertir su carga iónica tendrá el efecto opuesto – luego notó las miradas distraídas de Ben y Kara – ¿Algo más que quieran decir?
Ben: No, abuelo – intentó sonar tranquilo, y su abuelo se retiró unos segundos después.
Kara: Ningún plan funcionará hasta no detener a Maxwell Lord.
Ben: ¿Tienes alguna idea?
Kara: Sólo sé que hay demasiadas amenazas ahí afuera – dijo algo agobiada – Bizarra, Non y Astra, y esos son los que conocemos. Sin mencionar a cualquiera de tus enemigos – luego comenzó a moverse a otra parte de la base, siendo seguida por Ben – No podemos contra todos y ahora Maxwell Lord. Es hora de pararlo de una vez por todas – dijo algo molesta.
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Manhattan
CatCo Worldwide Media
Mientras Ben se encargaba de Maxwell Lord, Kara fue hasta su trabajo para aclarar el tema de su secuestro. Ella tuvo el presentimiento de que Adam y Cat estarían preocupados por su repentina desaparición; y efectivamente, así era.
Adam: Debí hacer algo. ¿Por qué se la llevó a ella y no a mí? – le dijo preocupado y molesto a su madre.
Kara: Fue sólo mala suerte – dijo apareciendo en la oficina de Cat.
Cat: ¡Kira! – dijo sorprendida – Nos tenías muy preocupados, ordené una alerta ámbar.
Kara: Señora Grant, ¿me permite un minuto a solas con Adam? – preguntó sin hacer contacto visual con ninguno de los dos.
Cat: Oh, claro. Me iré a revisar los pisos de mi edificio – dijo sarcástica mientras salía de su oficina.
Kara: Adam... – dijo de espaldas a él.
Adam: ¿Vas a romper conmigo? – la rubia volteó a verlo – Porque aún no empezamos a salir.
Kara: Odio decir esto, pero... tal vez el universo nos envía un mensaje – decía apenada – La primera cita fue interrumpida, y luego fui secuestrada...
Adam: Sé por lo que has pasado, y lo entiendo – la interrumpió calmado – Pero no todos te abandonarán, no si les permites acercarse.
Kara: Tal vez ese es el problema – intentó evadir su insistencia – De haber llegado cinco minutos después a la cafetería, no te habría conocido y no estaríamos aquí.
Adam: ¿Lo que veo como el destino crees que fue un accidente?
Kara: Aprendí algo en estas semanas. No creo que tenga espacio en mi vida para algún chico – dijo segura pero aún con pena – No sé si te haga sentir mejor.
Adam: No en realidad – dijo algo serio – Creí que no iba a funcionar por mis problemas o miedos, y que yo me alejaría.
Kara: Lo lamento – dijo triste.
Adam: Sé que así es.
Kara: Me iré – intentó hacerlo pero él se lo impidió.
Adam: No, yo me iré. Tú, por favor, quédate aquí – él comenzó a retirarse del lugar pero antes volteó a verla una última vez – Adiós, Kara.
Kara: Adiós, Adam – con esa despedida, el hijo mayor de Cat Grant finalmente se fue de CatCo.
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Bellwood
Lord Technologies
Por otra parte, Bizarra había huido hacia los laboratorios de Max Lord. Este se mostraba visiblemente molesto por el cambio de apariencia de su creación.
M. Lord: Supergirl te hizo un monstruo – dijo frente a un espejo, y luego volteó a verla – Si fuera tú, estaría furiosa por eso. Querría quitarle a todas las personas que ama – dijo rechinando los dientes.
Bizarra sólo se quedó sentada en su lugar, sin responder o mostrar alguna emoción. Pero en su mente, ya tenía pensado cómo obedecer el consejo de Lord.
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El millonario, por su parte, fue hasta su oficina y distraerse con algo de trabajo. Le funcionó por varios minutos, hasta que Rook irrumpió en la oficina acompañado de dos Plomeros.
M. Lord: Plomero Rook Blonko, o como quieras que te llame hoy – dijo sin importancia mientras sostenía una tablet – Ya me estoy cansando de tus visitas inesperadas.
Rook: Tiene suerte, porque esta es la última – luego, con la mirada, le ordenó a los Plomeros que esposaran a Max.
M. Lord: ¿Qué demonios sucede? – preguntó conteniendo su enojo.
Rook: Maxwell Lord, está bajo arresto – dijo serio.
M. Lord: ¿Con qué cargos? ¿No me leerás mis derechos? – preguntó con un toque de ironía.
Rook: Estoy actuando en nombre de una organización fuera de las leyes humanas, así que usted no tiene derechos – dijo acercándose a él – Al menos que revele donde está Bizarra.
M. Lord: No, gracias. Pero tengo información que podría interesarte – decía sarcástico – La dulce, amable e ingenua Kara Danvers; si me llevas, le diré a todo el mundo... que es Supergirl – dijo lo último susurrándole al oído – ¿Qué te parece eso?
Rook: Me parece que tendré que llevarlo a donde no puedan escucharlo – dijo con leve molestia.
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Cuartel General de los Plomeros
Regresando a la base, Ben estaba en el laboratorio acompañando a Blukic y Driba mientras el par de Galvanos trabajaba con la kryptonita. El castaño, luego de haber enviado a Rook a encargarse de Maxwell Lord, bebía un smoothie con una mirada melancólica.
Blukic: Driba, pásame el compresor iónico – dijo sin mirar a su amigo, ya que estaba trabajando en un microscopio con la kryptonita.
Driba: Ah, se supone que tú lo tienes, Blukic – dijo extrañado volteando a verlo, mientras trabajaba en su parte con un láser.
Blukic: No, yo no lo tengo, por eso estoy pidiéndotelo – dijo volteando a verlo.
Driba: Pues yo tampoco lo tengo – dijo levantando ambas manos.
Ben: ¿Es este? – dijo tomando un disco mecánico.
Blukic: Ese es, sí – Ben se lo lanzó despacio y él lo atrapó.
Driba: Oye, ¿todo bien? – preguntó viendo el semblante triste del héroe.
Ben: Ah, no lo creo – dijo mirando su smoothie.
Blukic: ¿Cuál es tu problema ahora? – preguntó mientras seguía trabajando.
Ben: Kara, creo... creo que ya no siente lo mismo que yo – dijo suspirando – Si fuera así, no estaría pidiendo citas con otros chicos a cada minuto, ¿no creen? – dijo volteando a verlos.
Blukic: ¿Pero por qué haría eso? – preguntó extrañado.
Ben: Quiere mantener su fachada de Kara Danvers, pero yo soy una figura pública – dijo desganado – Básicamente, no puedo salir con Kara Danvers y Supergirl al mismo tiempo.
Blukic: ¿Y con quién estás saliendo?
Ben: Con Supergirl – luego le dio un sorbo a su smoothie.
Driba: ¿Y por qué no cambias de pareja con Kara? – preguntó para luego esquivar una pequeña chispa que se desprendió de su trabajo.
Ben: Ah... explícate – dijo confundido.
Driba: Simple – luego se puso unos lentes para parecer más listo de lo que era mientras levantaba el dedo índice – Si Ben Tennyson sale con Kara Danvers, no tendrá problemas con otros chicos. Y con Supergirl puede mantener una relación de amistad profesional.
Blukic: Después de todo, a Supergirl no la invitan mucho – dijo mientras usaba el compresor.
Ben: Porque ella está conmigo. Pero... su idea no es tan mala – dijo pensativo – Chicos, creo que me dieron la solución a mi problema – luego salió corriendo del laboratorio mientras tiraba el vaso de smoothie a un basurero – ¡Gracias! – gritó a la distancia.
El castaño fue hasta el estacionamiento de la base y se subió a su Moto-Ten, y condujo hasta una pizzería llamada ''Joe's Pizza''. Tenía ganas de contarle a Kara sobre la idea que le dieron los Galvanos sin discusiones, y creía que una buena pizza caliente ayudaría con eso.
Mientras esperaba afuera a que su pedido estuviera listo, Ben escuchó un ruido pesado detrás suyo, como si alguien hubiera aterrizado con fuerza. El héroe, creyendo que se trataba de su novia, volteó a verla despreocupado.
Ben: Oye, Kara, yo quería... – luego notó rápidamente que se trataba de Bizarra – Ay, no.
La doble de Supergirl dio un fuerte grito de furia y luego embistió a Ben volando, para llevarlo a otra parte de la ciudad. Justo cuando su pizza estaba lista, cargada por un repartidor castaño.
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Unos momentos más tarde, Rook había llegado a la base con Maxwell Lord esposado y escoltado por los dos Plomeros que lo acompañaron. El millonario tenía la cara tapada con una bolsa de tela; y al llegar a la base, el Revonnahgander se la quitó.
M. Lord: Así que estos son los cuarteles Plomeros – dijo llamando la atención de todos, mientras observaba el lugar – Son más interesantes de lo que esperaba.
Rook: A la celda 19 – dijo serio.
M. Lord: Mi número de la suerte – dijo sarcástico mientras los dos Plomeros lo llevaban.
Max: ¿Qué demonios hiciste, Rook? – preguntó levemente alterado.
Rook: No había elección, magistrado – dijo acercándose a él – Nos tenía vigilados, y sabe el secreto de Supergirl.
Max: No me interesa si tiene los códigos para una bomba nuclear, no se trata de un alienígena anónimo – decía muy molesto – Él es Maxwell Lord, director de una corporación multimillonaria, las revistas lo nombraron ''Persona del Año''. Todos van a estar buscándolo.
Rook: No lo encontrarán aquí – dijo seguro.
Max: Comprometiste la seguridad de toda la operación, tú junto con Ben y Kara – dijo con algo de decepción.
Rook: Y él comprometió la seguridad de su familia, magistrado. Aunque no lo crea, Ben Tennyson y Kara Zor-El están dispuestos a muchas cosas para defender a su familia. Yo lo entiendo muy bien, y es por eso que es un honor formar parte de la suya también – luego de esa declaración, se fue para vigilar que Lord fuera puesto en su celda.
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Lugar desconocido
A la mañana siguiente, en una bodega de carga a las afueras de la ciudad, un Ben inconsciente despertaba de golpe luego de ser atacado por Bizarra. Inmediatamente, se dio cuenta de que estaba amarrado a un montacargas con cinta adhesiva, habiendo mayor cantidad en la muñeca con el Omnitrix.
Ben: ¿Cinta adhesiva? – decía forcejeando con la misma – Esto ya es humillante, debería pedirle al Sr. Milagro algunos consejos de escapismo.
Luego, el héroe notó que la doble de su novia estaba a una considerable distancia y de espaldas a él, y parecía estar esperando la llegada de Kara. Ben puso más fuerza para liberarse pero Bizarra se dio cuenta rápido.
Bizarra: ¡No te muevas! – dijo volteando a verlo, revelando que en su traje la clásica S estaba invertida.
Ben: Tranquila, no lo haré – decía levemente nervioso – No lo haré, no me moveré – Bizarra se tranquilizó un poco – ¿Por qué me trajiste aquí?
Bizarra: Supergirl te ama – hubo unos segundos de silencio.
Ben: ¿Cómo lo sabes?
Bizarra: Ambas somos... iguales – luego volvió a darle la espalda.
Ben: ¿Y por qué te mantienes lejos de mí? – preguntó extrañado – ¿No quieres que te vea?
Bizarra: No.
Ben: ¿Por qué?
Bizarra: Soy fea – dijo mientras seguía mirando hacia arriba, esperando a Kara.
Ben: Rayos, no puedo discutir eso – decía susurrando – Tengo que hacer lo que hace Kara, debo hablar más con ella – luego se aclaró la garganta, pensando bien sus palabras – Escucha, ah... todos nos sentimos así a veces, sentimos que nadie nos ama y nadie lo hará – ella volteó a verlo – Tal vez no te veas como Supergirl ahora, pero una parte de ti aún es como ella. Yo puedo sentirlo – Bizarra poco a poco se acercaba, mientras él caía en sus propias palabras – La gente no la ama por como se ve por fuera... yo la amo... por lo que ella es. Valiente, amable, y siempre intenta hacer el bien a todos. Tú puedes ser como ella, y no ser un monstruo.
La doble de Supergirl volvió a darle la espalda, y fue cuando Ben intentó volver a zafarse de sus ataduras. Finalmente, logró liberar su mano derecha; y con la misma arrancó la cinta que envolvía la izquierda, y fue cuando Bizarra lo notó.
Bizarra: ¡Mentiroso! – gritó molesta.
Ben: ¡No, no, no! – decía deteniéndola con una mano – Tranquila, no voy a atacarte.
Bizarra: Mentira – dijo acercándose peligrosamente.
Ben: No miento – dijo también acercándose pero sin hostilidad – No te atacaré.
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Cuartel General de los Plomeros
Mientras tanto, en la base, Rook preparaba su Proto-Arma para modificarla con la kryptonita alterada que hicieron Blukic y Driba. Max Tennyson llegó con un maletín pequeño con algunas municiones del mineral, el cual ahora era de color azul.
Max: El compuesto está listo, el opuesto molecular exacto de la kryptonita verde – le entregó el maletín a Rook – ¿Dónde está Ben?
Supergirl: Desde anoche que no lo veo – dijo preocupada.
Max: Eso es extraño – dijo confundido.
Rook: Tampoco ha habido noticias de Bizarra desde anoche – decía mientras trabajaba en su arma – No quiero ser pesimista, pero podría estar relacionado.
Supergirl: ¿Y cómo los encontramos? – preguntó más angustiada.
Rook: El satélite ubicó el teléfono de Ben, en una bodega dentro del distrito – dijo mientras terminaba de preparar su arma – Usted la pone en posición y yo disparo.
Supergirl: ¿Esto funcionará? – preguntó refiriéndose a la kryptonita azul.
Rook: Lo averiguaremos – dijo seguro.
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Lugar desconocido
Ben: ¿Lo ves? – decía acercándose a Bizarra con cuidado – No te miento.
Regresando con el héroe, este estaba frente a frente con la doble de Kara. Ella estaba algo inquieta, ya que no sabía si confiar en Ben o no; sin embargo, algo le decía que él era sincero en sus palabras. Cuando el castaño estuvo lo suficientemente cerca, tocó la mejilla izquierda de Bizarra; quien se alteró levemente pero no se alejó del toque.
Ben: Tranquila, no voy a hacerte daño – dijo calmando a la doble.
Bizarra: No mientes – luego puso su mano izquierda sobre la de Ben que aún seguía en su mejilla.
En ese momento, la Chica de Acero llegó primero a la bodega mientras Rook se movía en su Proto-Camión un poco más retrasado. Kara ingresó por un hueco en el techo, y vio de primera mano la escena de Ben y Bizarra. Ella abrió de más sus ojos, y de nueva cuenta las palabras de James resonaron en su cabeza.
''¿Qué pasaría si otra chica invita a Ben a una cita?''
Supergirl: ¡No le hagas daño! – gritó muy molesta, y Bizarra volteó a verla.
Bizarra: Yo asesino a Supergirl – dijo seria.
Ben: ¡No! – dijo intentando detenerlas.
Antes de que pudiera hacerlo, Supergirl lanzó su aliento ártico y Bizarra respondió con su aliento de fuego, haciendo que Ben tome distancia de las dos. Ambas comenzaron a acercarse entre sí mientras continuaban con sus ataques.
Cuando estuvieron lo suficientemente cerca, terminaron sus ataques y rápidamente Kara golpeó a su doble con una patada al pecho que la hizo retroceder en el aire. Aún así, Bizarra se recompuso rápido y cargó contra la kryptoniana, quien esquivó y bloqueó varios golpes y contraatacó con una fuerte patada que la sacó de la bodega.
Ben: No le hagas mucho daño – dijo preocupado acercándose a Kara.
Supergirl: ¿Ahora estás de su lado? – dijo intentando ''disimular'' sus celos.
Antes de que el castaño pudiera responder, Bizarra entró nuevamente en la bodega y sorprendió a la Chica de Acero con un fuerte golpe que la hizo estrellar contra varios barriles de plástico. Después de eso, ellas comenzaron una pelea mano a mano muy pareja; donde golpeaban, esquivaban y bloqueaban por igual.
Al final de eso, Kara tomó distancia flotando en el aire, y luego comenzó un forcejeo con Bizarra en el aire. La doble logró sujetar del cuello y asfixiar a la kryptoniana mientras las dos giraban en el aire. En ese momento, llegó Rook con su Proto-Arma lista y tomó una posición de francotirador.
Rook: Supergirl, no tengo un tiro limpio – avisó por las comunicaciones debido a que no podía apuntar bien por los giros que daban ambas.
Supergirl: ¡Sólo hazlo! – dijo algo ahogada.
Rook: No sé lo que esto te hará si te doy a ti – dijo con leve preocupación.
Supergirl: ¡Hazlo ya!
Mientras las chicas seguían girando, Rook tuvo el tiro que esperaba cuando la espalda de Bizarra estuvo expuesta. El Revonnahgander disparó una bala de kryptonita azul que impactó de lleno en la doble, haciendo que su cuerpo tenga brillos azules y caiga al suelo debilitada.
Ben y Kara intercambiaron miradas, y luego el castaño se acercó a una inconsciente Bizarra para ver si estaba bien. Cuando vio que no tenía una herida visible, Ben volvió a hacer contacto visual con su novia, y ambos asintieron en señal de que la situación terminó.
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Cuartel General de los Plomeros
Después de la pelea, el dúo neoyorkino llevó a Bizarra hasta los cuarteles para que la sala médica pudiera atenderla. La doble de Supergirl pasó la mayor parte del día inconsciente, hasta que despertó cuando la noche comenzaba a llegar. Max mandó a llamar a Ben y Kara cuando esto ocurrió, y la pareja llegó a los pocos minutos.
Max: Ha preguntado por ti – le dijo a Kara.
Bizarra: Supergirl... – dijo débil acostada en una camilla.
Supergirl: Ya vine, hola – dijo poniéndose a su lado.
Bizarra: De verdad l-lo siento – dijo con tristeza genuina.
Supergirl: Lo sé. Yo también lo siento – dijo apenada mientras su doble soltaba una lágrima de su ojo derecho.
Max: Hay que sedarla.
Ben: Quedará como la primera vez que la vi – dijo algo preocupado.
Supergirl: No sentirá nada de dolor, ¿o sí? – dijo en igual estado.
Max: No sentirá nada – dijo calmado.
Supergirl: Ayúdala, por favor.
Max: Lo haremos – luego Kara tomó la mano derecha de su doble.
Supergirl: Voy a sostener tu mano hasta que te duermas, ¿sí?
Bizarra: Miedo... – dijo asustada.
Supergirl: Lo sé. También estuve dormida mucho tiempo, y tuve miedo – luego miró a Ben, quien sostenía la mano izquierda de su doble mientras Max colocaba un suero con sedante – Pero al despertar, no estaba sola; y tú tampoco lo estarás.
Bizarra: Te lo a-agradezco... Kara.
La kryptoniana no respondió, sólo se dedicó a sostenerle la mano y no dejar de mirarla. En cuestión de segundos, Bizarra finalmente quedó dormida por el sedante.
Supergirl: No se merece lo que le pasó – dijo con impotencia.
Max: No, eso es cierto – dijo con leve molestia, y se retiró de la sala médica.
Supergirl: Maxwell Lord la hizo igual a mí. Y lo era.
La Chica de Acero también se fue de la sala, aún con el sentimiento de impotencia y pena por no haber podido ayudar a Bizarra con lo que le pasó. El único que quedó allí fue Ben, quien volvió a mirar a la doble de su novia dormida mientras aún sostenía su mano; y por instinto, apartó unos mechones de cabello de su rostro y luego lo acarició levemente. Bizarra, aún dormida, tuvo una pequeña reacción a esto, y el castaño apretó el agarre de su mano.
Kara, por otro lado, fue hasta la celda donde tenían encerrado a Maxwell Lord. Su molestia y fastidio por el asunto con Bizarra se calmó cuando vio al millonario encerrado, el cual se mostraba tranquilo pese a su situación de prisionero.
M. Lord: Creo que mi chica no pudo vencerte – dijo irónico mientras Kara caminaba alrededor de la celda.
Supergirl: Ya veremos si te parece gracioso cuando te quedes años en esa celda – dijo molesta, y Lord se puso de pie.
M. Lord: No piensas igual que tu primo cuando ese trata de verdad y justicia al estilo de este país – dijo apoyándose en el cristal – Pero encerrar personas en contra de su voluntad me parece más del estilo de este país – dijo irónico.
Supergirl: Tú no lastimarás a nadie, nunca jamás – dijo intentando contenerse.
M. Lord: Nadie como... ¿Sandra Tennyson? – Kara lo miró con sorpresa – Es una bonita familia la de tu querido novio, todo un sueño.
La kryptoniana ya estaba hasta el límite, encendiendo sus ojos rojos mientras Max Lord levantaba sus manos. Sin embargo, antes de que pase algo, Ben llegó al lugar y miró la escena.
Ben: No vale la pena – Kara volteó a verlo mientras apagaba sus ojos.
M. Lord: Ben Tennyson, mi héroe – dijo irónico mientras Kara se retiraba con fastidio del lugar, siendo seguida por Ben – Adiós, chicos. Los veo luego – luego se acomodó mejor en su celda, disfrutando de la cama que tenía.
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Manhattan
CatCo Worldwide Media
Antes de que el día termine, Kara fue hasta su trabajo para resolver el único problema que le quedaba: Adam Foster y su madre y jefa Cat Grant. Cuando llegó a su trabajo, sólo vio a la magnate en su oficina; por lo que se acercó a hablar con ella.
Kara: ¿Señora Grant? – ella le respondió con un sonido ahogado – Ah, no sé si ya habló con Adam.
Cat: Lo hice, y se irá – dijo sin mirarla mientras seleccionaba portadas para la revista de mañana – Él volverá a Ciudad Opal.
Kara: ¿Tan pronto? – fingió sorpresa mientras su jefa se dirigía a su escritorio.
Cat: Bueno, dice que ahora que nos reencontramos, sí, me visitará, claro; pero no hay nada urgente que lo mantenga en Nueva York. ¿Sabes, Kira? Siempre creí que tú y yo éramos diferentes, pero ahora me doy cuenta de que somos más parecidas de lo que creí.
Kara: ¿En qué forma? – preguntó confundida.
Cat: Perdí a Adam hace años porque prioricé otras cosas antes que a él; primero a mí, y eso te ayuda a construir un imperio, pero no te ayuda a tener una vida. Por eso, debes poner a los otros primero. Creí que lo entendías pero me equivoqué – dijo disimulando decepción, pero Kara lo notó.
Kara: Señora Grant, yo quisiera explicar por qué...
Cat: ¿Rompiste el corazón de mi hijo? No – la interrumpió – Lo que haya pasado entre tú y Adam, Kira, es tu asunto personal.
Kara: Pero quiero que sepa que fue porque no fue...
Cat: Yo no quiero saber – dijo algo molesta por la insistencia de la rubia – De hecho, a partir de este momento, nuestra relación deberá ser sólo profesional. Jefa, empleada – decía seria – Así todo será claro, nadie se confundirá ni podrá salir herido.
Kara: Claro – dijo triste – Si así lo desea.
La kryptoniana fue hasta su escritorio suspirando un poco, ahora tendría que lidiar con una Cat Grant resentida por haber rechazado a su hijo. Viendo que su tiempo en el trabajo terminaría pronto, decidió llamar por teléfono a su novio.
Kara: Hola, espero que haya tiempo – dijo rápido luego de que Ben atendiera – ¿Quieres pasar por unos smoothies? No hemos hablado de lo que pasó cuando te secuestró Bizarra.
Ben: No fue nada interesante, sólo dije lo que sentía hasta que llegaste – dijo intentando sonar despreocupado.
Kara: Bien, no hablaremos de trabajo – dijo con leve emoción – Sólo comeremos hamburguesas.
Ben: Me encantaría pero debo acompañar a Rook a Pueblo Bajo, dice que su hermana vendrá de visita por un día – la emoción de Kara se disipó al instante.
Kara: Ah, bueno – intentó sonar tranquila – Que se diviertan.
Ben: Eso espero.
Kara: Salúdame a Shar de mi parte – dijo algo triste – Adiós.
Ben: Oye, Kara... – dijo antes de que corte – Ten linda noche – dijo algo melancólico.
La rubia, entendiendo que el castaño aún debía seguir dolido por el tema de Adam, no insistió más y cortó la llamada. Al final, tendría que pasar gran parte de la noche sola.
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Brooklyn
Departamento de Ben y Kara
La Chica de Acero, al terminar su trabajo, decidió patrullar un poco volando por la ciudad para distraerse. Pero incluso en eso el día estuvo en su contra, ya que Bellwood estaba relativamente calmada. Al notar luego de varios minutos que ningún peligro aparecería, fue hasta su casa.
Kara entró volando por una ventana a su departamento, donde lo primero que hizo fue sacar una soda de naranja de la nevera. Sin embargo, antes que le diera un sorbo a su bebida, escuchó un ruido extraño cerca del sofá.
La kryptoniana se acercó a la mesa que estaba frente al mueble, donde encontró lo que parecía ser un capullo abierto con un poco de musgo a su alrededor. Kara lo tocó, y había una viscosidad que aún estaba fresca, indicando que lo que sea que salió de allí fue reciente.
Supergirl: ¿Qué es esto? – se preguntó confundida y asqueada.
En ese momento, la rubia recordó que había sufrido un evento parecido anteriormente; y ella volteó rápidamente hacia el techo, sólo para que una criatura pequeña y con varios tentáculos se abalance sobre ella.
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