ʚɴᴜᴇᴠᴇɞ



El príncipe los guiaba a la base narniana, a su lado estaba el gran rey ambos entretenidos con su charla sobre la fortificación de la guarida a la que se dirigian cuando un suave ruido los distrajo de su conversación, Sebastian atrajo toda la atención del par de la realeza con su estruendosa y contagiosa risa.

El caballero mantenia una conversación con Reepicheep que estaba sobre su hombro, ambos con sus espadas desenfundadas hablando sobre ellas, Lewis la presumía sobre ella dando leves estocadas a la nada de la misma forma que hacia el roedor.

Peter no pudo evitar tomar la expresión de un cachorro perdido al recordar que estaban peleados, él de verdad no habia querido decirle esas cosas tan hirientes ni insinuar que sólo queria a Susan y soportaba al resto por ella, sabía que no era asi y que lo lastimó demasiado al afirmar aquello. En especial cuando Sebastian adoraba a sus hermanos pequeños, recordo con cariño las tardes que el caballero pasaba con Edmund entrenando esgrima y como solía jugar con Lucy.

¿Cómo solucionar un error tan grande?

La imagen del rostro de su amor decepcionado y dolido por su culpa no salía de su cabeza.

El como lo alejaba, como ponia un muro entre ellos, como anhelaba su tacto y bien sabia que Sebastian también pero lo alejaba, él lo alejaba.

Lo amaba tanto que dolía, porque ante el simple pensamiento de que alguien tan perfecto como Sebastian Lewis se fijara en él parecía la más cruel de las bromas, ¿como Sebastian podía amarlo? ¿De verdad no amaba a Susan? Era todo lo opuesto a él, cabello negro, labios gruesos, mujer, inteligente, madura y un montón de cosas más que su enamorado solia alabar.

Pero ahora estaba convencido, no importaba que fuera tan diferente a Susan, no cuando Sebastián habia afirmado amarlo tal cual era con todo y sus errores absurdos.

No iba a rendirse, no cuando estaba tan cerca de lograrlo.

Lograr que después de tantas idas y vueltas, sean por fin Peter y Sebastian, los amantes que por fin pudieron unirse en uno.

Al estar más cerca de la recta final, habian más obstáculos, cada uno más difícil que el anterior y este era uno, no era el único que habia notado la perfección en su caballero.

──él es increíble, ¿cierto?──sorprendentemente, no fue él quien dijo aquello, Caspian también se habia visto hipnotizado por la risa y sonrisa del amigo de los Pevensie.

──¿Sebastian?

El príncipe asintió con una sonrisa embobada plasmada en sus labios, era la primera vez que conocía a alguien como Sir. Sebastian Lewis aun que nisiquiera lo conocía para empezar, su nombre era lo único que sabia de él y le intrigaba tanto, desde la forma en que lo derroto hasta como su mirada brillaba en un dolor profundo en sus preciosas orbes roble.

¿Cuál era la cruz que el noble caballero cargaba?

¿Qué era ese salvajismo oculto que demostro brevemente cuando peleo?

Sebastian se contenía y parecía ser el único en notarlo.

Se sentía tan atraído por el caballero y el misterio que erradicaba en su esencia.

──¿ustedes son cercanos?

──si, lo somos, demasiado──el rubio tenia la mandíbula tensa, odiaba el brillo ilusionado en sus ojos, Sebastian jamás cumpliría con sus expectativas. No cuando debia cumplir las suyas.

──entonces...¿sabe si él--

Para bendición del rey narniano, habían llegado al refugió de su pueblo donde los Centauros los esperaban con aire solemne tan característico, alzaban sus espadas con orgullo uniendo sus puntas asi haciendo un sendero para la entrada de los reyes.

El caballero narniano observo como los cuatro hermanos tomaron la delantela caminando con liderazgo, nobleza y orgullo, el príncipe quedo atrás con un gesto serio, estaba pensativo y Lewis no pudo evitar acercarse al verlo de tal menera, Caspian era un buen chico y no merecía menospreciarse como obviamente lo hacía.

──¿por qué no entro a su lado?

──son reyes y yo sólo un príncipe que les arrebató todo, un telmarino──sonrió con amargura.

──la maldad de sus antepasados no le define, son sus actos lo que lo hacen y sus actos fueron más que significantes. Le dio esperanza a todo un reino, eso lo hace más que digno de caminar a su lado──Caspian pudo contemplar la bella sonrisa en su rostro, sonrisa que calento su corazón al igual que sus tiernas palabras.

──gracias, Sir. Lewis

──puede decirme Sebastian, Alteza──un guiño y el príncipe volvio verlo y sonreírle embobado.

No habian tardado en seguirle el paso al resto, aun asi, Peter y Susan habian notado su corta ausencia y el por qué, el rubio fijo su espesa mirada en la cercanía que ambos tenian mientras su hermana sutilmente compartió una sonrisa con su mejor amigo.

──tal vez no sean lo que que esperaban, pero se pueden defender──le dijo Caspian a Peter una vez llego a su lado, Susan se había llevado a Sebastian al notar el ambiente tenso que había entre los tres y al que el pobre príncipe telmarino era ignorante.

──es lindo, ¿no?

──¿yo? Obviamente, te estabas tardando en darte cuenta──se burlo de ella provocando que rodara los ojos, absteniendose de mostrar su felicidad y diversión, su amigo estaba volviendo en si y eso inevitablemente la hacia feliz.

──Caspian──remarco con obviedad, expectante a la reacción de su amigo que volteo a verla con diversión.

──es lindo, ¿y qué?

──¿no es obvio? Te ve como un cachorro perdido desde que lo derribaste, le gustaste

──no lo creo, no puede gustarte alguien que no conoces, Susie

La sola idea de que alguien gustara de él y que ese alguien no fuera Peter le hacia sentir raro, triste de cierta forma pero no incómodo mas dudaba que a un príncipe como Caspian le gustaran lo hombres, o siquiera se sintiera atraído a él.

──dejame discernir en eso, existe el amor a primera vista

──nop, no existe y tu leiste demasiados libros de romance, además yo no... ──su voz se detuvo al divisar detras de la cabeza de su amiga lo que podria considerarse dibujos prehistóricos si no fuera porque los dibujos eran precisos, a color y eran de sus amigos──Susan...

──¿qué?

Sebastian señalo las ilustraciones en la pared de la caverna, ambos sorprendidos fueron donde el resto estaba y los llamaron dejandolos igualmente deslumbrados por los dibujos, pronto Caspian los guió a una sala donde el caballero pudo apreciar una mesa de piedra partida por la mitad siendo rodeada por pilares naturales y las paredes a su alrededor talladas con diversos dibujos sobresalientes de esta, el que más destacaba era el de Aslan con unos ojos gentiles y una sonrisa calida, podia sentirse su escencia en él.

──debe saber lo que hace──Lucy opino en voz alta, hacia sus hermanos antes de mirar a su hermana al reconocer el viejo lugar. Se refieria a Aslan y después de su corta charla con el rey, no pudo evitar concordar con ella.

──creo que depende de nosotros──refuto su hermano, impotente ante la ausencia del gran rey león.

Sebastian nego debido a su negación, ¿como podía ser tan necio?

Su terquedad podria costarle caro.

Los hermanos estaban enfrascados en sus memorias por lo que el caballero se acerco a su príncipe.

──dejelos, necesitan un momento. ¿Por qué no me muestra el lugar mientras tanto, su majestad?──Caspian se ruborizo por su propuesta y el leve brillo de emoción que pudo percibir en ella, asintio eufórico para tomarlo del brazo y guiarlo por las cuevas.

Peter se percato demasiado tarde que Sebastian ya no estaba a su lado.

No paso tanto tiempo hasta que todos estuvieron en el mismo lugar en el que alguna vez un rey narniano habia muerto injustamente hace un siglo, la mesa de piedra, la reunión tenia un único objetivo.

La guerra por venir.

──es sólo cuestión de tiempo. Las tropas y máquinas de guerra de Miraz ya vienen en camino──dijo Peter con un aire obstinado que comenzo a fastidiar a Lewis──significa que esos hombres no protegen el castillo

──¿y usted que propone que hagamos, majestad?──cuestiono el pequeño raton con el que habia intercambiado consejos de esgrima hace unas cortas horas.

Que el príncipe y el rey hablarán al unísono sólo fue un mal augurio, más cuando sus miradas chocaron y Caspian pudo notar el recelo en ella.

──nuestra unica esperanza es lograr ser los primeros en atacar──Peter se posicionó en el centro de lugar para que todos pudieran verlo.

──que locura. Nunca han penetrado ese castillo──Caspian nego de inmediato, el habia vivido allí, conocía ese lugar mejor que nadie, era su hogar después de todo.

──siempre hay una primera vez

El caballero bufo, no le estaba agradando como el rey tomaba el mando, ¿asi fue durante su reinado en Narnia? Pobre de sus hermanos si fue asi.

──tenemos el elemento sorpresa──concordo Q.A.

──tenemos ventaja en este lugar──trato de convencerlos el príncipe mas fue en vano, al ser ya se le habían subido los humos a la cabeza segun Sebastian.

──el príncipe tiene razón, no hay nadie aquí que conozca más ese castillo que él y si dice que es impenetrable, hay que cambiar nuestra estrategia de juego

Caspian sonrio interiormente, su caballero habia abogado a su favor, aquello movio algo en él que no supo describir.

Peter odio la mirada que intercambiaron príncipe y caballero, lo odiaba tanto porque se veía a si mismo con Sebastian cuando se estaban conociendo, cuando se estaban enamorando.

──aqui, bajo tierra, yo creo que lograriamos detenerlos──como siempre, Susan no dudo en apoyar a su mejor amigo siguiendo la lógica de este.

──en lo personal me siento más seguro bajo tierra──comento el tejon rompiendo un poco el duro ambiente.

──oye, aprecio todo lo que has hecho pero esto no es una fortaleza, es una tumba──el modo que el gran rey le hablo al príncipe no le gusto en absoluto al Lewis quien se puso a un lado de Caspian de forma protectora──¿entienden?──esto último se lo dijo a Sebastian sin ocultar su mirada dolida y su mueca de disgusto al ser contrariado por él y por posición que tomo con el telmarino.

──si, y los telmarinos nos mataran de hambre si sus tropas nos siguen──concordo Edmund con su hermano, ignorando nuevamente la tensión que había en el trío.

──yo traeria nueces

──si y se las darías a los telmarinos──se burlo sarcasticamente Reepicheep de la ardilla──no hables──lo regaño──no tengo que decirle lo que creo, señor

──si filtro tropas, ¿te encargarias de los guardias?──indago el gran rey al Centauro, mas él no vio a Peter sino a Caspian antes de contestar.

──o intentandolo, moriré

Juro su lealtad.

──eso es lo que me preocupa──expreso consternada la menor Pevensie.

──¿qué cosa?

──sólo estan considerando dos opciones. Caer aquí o allá

──no parece que estes escuchando, Lu

──no, tu no estas escuchando. ¿Ya olvidaste quien fue el que vencio a la Bruja Blanca, Peter?

──creo que ya esperamos a Aslan lo suficiente

Y asi el gran rey se fue del lugar, con sus labios apretados, su corazón herido, su furia en sus venas y su miedo a cuestas.

Caspian se acerco tímidamente a Sebastian que ya lo esperaba con una pequeña sonrisa pintando sus labios.

──gracias por apoyarme

──no tiene que agradecer, alteza, mi deber es protegerlo y reguardarlo de todo y todos──un leve rubor aparecio en las mejillas del príncipe, parecia que se habia vuelto una costumbre avergonzarse por cada palabra o acción que el caballero le dirigiera a él.

──pensé que eras sólo el caballero de los reyes de antaño──fruncio el ceño confundido, Seb rio de ternura ante ello.

──lo era pero decidí que no sólo los protegeria a ellos. Cuidare de su espalda si me lo permite, majestad

La intensidad con la que Sebastian lo miraba provoco que Caspian soltara un suspiro inconcientemente.

──sólo si me permites tu también pelear a tu lado

──yo estaria encantado

Sus ojos no se aportaban de los otros, no podían, se sentian los únicos en la habitación cuando en realidad un par de ojos los observaban con distintas emociones, ambas demasiadas opuestas como para toparse.

Finalmente la terquedad le costo demasiado caro porque Sebastian ya no estaba de su lado.

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