-.... Yo... Hace años que no lo veo, talvez desde que tenía 5 o 6 años- contesto ella colocando sus manos en sus rodillas y apretando su pantalón con fuerza gracias a la presión que hacía con los puños.

-eso es todo, puedes retirarte pequeña-

Ella, de inmediato se levantó, caminaba con las piernas frágiles, temblando, abrió la puerta y corrió llorando hacia los brazos de su padre, en donde él, la cargo y abrazo con fuerza.

Yo seguía sin entender nada, no se porqué razón aparecí aquí, con ella, pero sé que es algo que ella nunca me contó, y no sé si esto es un sueño, que todo lo estoy imaginando, o si realmente paso, y si es así, ¿Debe ser importante no olvidar esto?.

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Todo estaba tranquilo, ella se calmo, yo solo estaba sentado pensando, hasta que sentí como alguien me jalaba de la ropa hacia arriba, de modo que me elevaba,  yo comencé a gritar, hasta que me lanzaron nuevamente a aquellos frascos de agua, agua, que por alguna razón no entendía el porque no me sumergía en ellos.

-uff estás bien- dijo aquel lobo- por suerte no fue un recuerdo extenso, bien, sigamos, sube a mi lomo- se agachó, de modo que pudiera subir en él, como un caballo.

-.... ¿Recuerdo?... Entonces lo que ví ¿No era un sueño? ¿De verdad paso?- dije alejándome un poco.

El se paró como antes y me miró -¿Que fue lo que viste?-

-tu sabes bien lo que ví ¿No?, Se supone que tú conoces este lugar, y ese recuerdo de ella, no estaba imprevisto por tu tour por todas las dimensiones extrañas ¿O si?- él se quedó callado, no dijo nada, solo me miraba, como analizando, estudiando, buscando algo para excusarse.

-no, no estaba planeado, lo que no sabes... Y si, supongo que no sabes dónde estás, y quieres respuestas, lo sé, conozco a una persona que créeme, sus respuestas son aún más complicadas de lo que crees, pero a veces, uno debe dejarlos ir, dejar que las personas, aprendan por su cuenta, porque así, aprenderán de sus errores, así, podrás decirles, te lo dije, para que nunca más lo vuelvan a hacer, ya que no quieren escuchar esa frase-

-¡No entiendo nada! ¡Solo dime qué hago aquí!-

-¿Estas dispuesto a aceptar las consecuencias?-

-¡Si!-

-no te precipites, al menos piénsalo por un segundo, piensa en lo que podría pasar-

-¿Que crees que pasaría? ¡Eh! ¿Que va a venir el coco y me va a comer? ¡¿Freddy Krueger me quemara en mis sueños?! ¡¿Me descubrirán y me vendrán a matar?!-

-.... No es por nada, ni para dar spoilers pero.... Talvez la tercera opción, está en un 60% de probabilidad, así que piensa bien-

Me quedé callado después ante eso, ¿Cómo rayos alguien se enteraría que estoy aquí? Bueno, claro que si supiera que es este lugar pues tendría más sentido lo que él perro de pie grande quiere decir.

-... Aceptaré las consecuencias-

-.... Estás aquí, porque alguien me mandó, no puedo decirte quien, pero en este lugar, vienen las personas que buscan algo, vienen las personas que necesitan respuestas, vienen las personas que no están conformes con su vida, o simplemente, vienen las personas a las cuales debo advertir, tú, ¿En qué tipo de persona te categorías?-

Pensé por un momento, dijo que alguien lo mando, así que supongo que fue en -las personas que debes advertir?- dije al final con algo de duda.

-eres inteligente niño, ten mucho, porque si ingresas en las sombras, no te gustará lo que verás, pero podrías evitarlo, si haces lo correcto cuando lo veas-

-¿Ver a quién? ¿A Reiji?-

-eso queda a tu pensamiento, ya sabes el porque estás aquí, asi que es mejor que te vayas-

-pero aún no entiendo, ¿Quién quiso que viera todo esto?-

-la única persona que siempre, a pesar de la muerte, siempre estuvo contigo... y... jamás olvides algo.... todos tenemos miedo alguna vez-

-qui..... - no pude terminar cuando aquel lobo desapareció, dejándome solo,

El agua comenzaba a hundirme, como arena movediza, quise sacar un pie, pero estaba atrapado, comencé a entrar en pánico cuando el agua me hundía más rápido.

Mi cintura, mi pecho, mi cuello, tome aire y cerré los ojos con fuerza, los cuales, abrí con lentitud para ver a mi alrededor, algo negro, estaba cubriendo aquellos frascos, inclusive el agua, los destruía, pronto ví como aquella cosa negra empezó a subir por el mío, al ver que cubrió todo, abrí la boca, soltando el aire que me quedaba, el agua comenzaba a endurecer que aquello, me ahogaba, tenía que bajar más rápido, intenté nadar, tratando de que no me alcanzara, pero las fuerzas se me terminaron, al igual mi resistencia por no respirar, y termine por desmayarme, solo viendo como la cosa negra, me rodeaba.

-¡Fred!¡Despierta! ¡Por favor! ¡Esto no es gracioso!- escuchaba de fondo a Freddy, abrí un poco los ojos, todo estaba borroso, oscuro, frío.

-.. F-Freddy.... Ten.. tengo miedo... Todos... Tenemos... Miedo-

-¡Fred! ¡Fred por favor!-

Abrí los ojos de golpe, estaba totalmente obscuro, estaba flotando, tenía miedo, solo escuchaba la voz de Freddy de fondo, más no lo veía.

-¡Maldita sea Fred despierta!-

Al gritar eso, ví una pequeña luz adelante, al parecer, podía respirar, más me costaba hacerlo, estire las pierna y pude tocar suelo, y sin pensarlo dos veces, comencé a correr hacia aquella luz, luz que se expandía mediante Freddy gritaba.

-por favor Freddy, sigue hablando, no pares, no pares- el aire comenzaba a irse, mi vista se hacía borrosa -no... S-Si... Si puedo... Llegar... - desacelere, me detuve, recargando mis manos en mis rodillas levemente flexionadas, el aire se me iba, era difícil respirar, al ver al suelo, ví mi reflejo, ví aquellos ojos vacíos, aquellos ojos que siempre odie desde que tengo memoria, mi verdadero yo, me mire con odio, me odio, no soy más que un maldito fenómeno.

-¿Eso crees?- dijo una voz en aquella habitación.

-¿Q-Quién...

-¿Soy?... No importa... Lo más importante aquí es ¿Quién eres tú?-

No podía ver quién era, pero debía irme ahora -... No sé..-

-para saberlo, debes aceptarte a ti mismo como eres-

-no-

-¿Y porqué con ella si lo aceptabas? ¿Que tenía ella que los demás no? ¿Qué la hacia tan especial para ti que le contabas tus más profundos secretos?-

-... Ella no está aquí-

-no es lo que te pregunte-

-... Ella... Me hacía sentir... Especial... Que... Era capaz de todo -hablaba entrecortado, me faltaba el aire- ella... Ella me devolvió la sonrisa, que... Mi padre me arrebato-

-... No creo que sea por eso-

-tú no me conoces-

-¿Y supongo que tú si?-

-.... - me veía en aquel reflejo, esos ojos peculiares que a ella le encantaban, esos ojos que ella deseaba tener.

-regalame tus ojos anda- decía abrazando mi brazo con fuerza, sin tener la intención de soltarlo.

-claro, quedatelos- dije sin interés alguno, si por mí fuera, me los arrancaría y pondría unos de cristal, pero para mí suerte, no podría ver.

-esque míralos, son hermosos, me gustaría tener ojos así para asustar a la gente, en halloween, la ropa negra combinaría perfecto con mis ojos, y más la blanca- se idealizada todo que podría hacer si tuviera ojos así, lo que me gustaba, porque hacía que todo lo que me gustaba, me gustará aún más, como ella.

-que lastima, porque son M-I-O-S y no los comparto- le saque la lengua de forma infantil a lo que ella hizo un puchero con sus labios, esos adorables pucheros que amo de ella.

-eres malo, ¡Dijiste que me los dabas!-

-cambie de opinión linda- ella se cruzó de brazos con sus mofletes inflados de enojo y me dió la espalda, yo solo reí y la abrace por atrás desde su cintura- no te enojes princesa, aunque quisiera dartelos no podría, me quedaría ciego, y ya no podría ver tu hermoso rostro- besé su mejilla y pude admirar un bello sonrojo en sus mejillas.

-eres un tonto, ¡Y basta! -me empujó- invades mi espacio personal, según en la clase de taller debes estar a 30 cm de una persona para no invadir su espacio-

-... Mejor que sean 5 -me arroje a ella para así abrazarla con fuerza y que no pudiera safarse.

-¡No! ¡Ayuda! -gritaba, aunque en su la risa le ganaba.

-solo... Solo quiero salir de aquí-

-nadie te lo impide, siempre recuerda, que la única persona que se interpone entre tú y tu camino, eres tú mismo-

Aún, sin ver a aquella persona, levanté la mirada y volví a correr hacia la salida, donde al fin llegue.

-¡Fred!... Por favor... Despierta-

Abrí con lentitud los ojos, ví a Freddy escondido en sus brazos, en mi estómago, parecía llorar, moví un poco mi mano, haciendo que Freddy, con rapidez, se levantará de mi estómago y me viera con los ojos llenos de lágrimas.

-¡Fred!- me abrazo con fuerza, me quejé un poco, no había respirado bien y debía recuperar fuerzas.

-F-Freddy... Aire-

-a si lo siento -se separo, yo aproveché para sentarme, recargando me en mis rodillas, haciendo que mi cabello colgará alrededor de mi rostro, allí en el suelo, ví a una pequeña moviendo la colita alegre, para luego ladrar y saltar hacia para lamer mi cara- fue corriendo detrás de mí, ella te encontro-

Acariciaba su cabeza, ella se acurruco en mi cuello y comenzó a dormirse -¿Qué... Me paso?- dije mirando mi alrededor, seguía en el parque, era de noche aún.

-no volviste a casa, eran las 11, así que entre mamá y yo salimos a buscarte, Bella fue detrás de nosotros, cuando te encontré, te ví dormido, pero de pronto dejaste de respirar, y me preocupo, ya que tú pulso estaba dejando de palpitar-

Entonces, de verdad estaba, ahogandome... ¿Cómo puede ser posible eso? Si solo era un... Sueño... ¿Verdad?.

-vamos a casa Freddy-

Me levanté tambaleante, Freddy me ayudó a caminar colocandomi brazo alrededor de su cuello, la pequeña iba caminando a mi lado, yo, en el camino, mi mente no estaba más que en todo lo que pasé en ese extraño sueño, visión, lo que sea que haya sido, fue extraño.

No tardamos en llegar a casa, en donde al entrar, mamá estaba sentada esperando, al verme, se levantó y corrió para abrazarme.

-hijo aquí estas- me apretaba con fuerza, aún seguía débil, así que no me quedo de otra más que permanecer quieto.

-lo siento madre, no quise preocuparlos, pero solo quiero ir a descansar-

-bien, pero mañana tendremos una muy larga charla, descansa -beso mi frente y la de Freddy, subimos a la habitación en donde me tumbe a la cama, sentía que podía dormir, pero mi mente seguía activa cual ardilla.

Cerré mis ojos, mi cuerpo estaba cansado, pero me costaba dormir, mi mano colgaba de la cama, fue cuando sentí una lamida tibia en mis dedos, abrí los ojos y mire, mire a aquella Chihuahua azabache moviendo su cola, la cargué y la acosté en mi estómago donde acariciaba su oreja.

-tú nunca me dejas solo pequeña... Agradezco tanto que me hayas encontrado... Seguramente estaría muerto- suspiré y me acomode en la cama para poder dormir mejor, aunque las cobijas no eran de mucha ayuda, Bella se metió entre ellas y fácilmente durmió.

-descansa Fred- escuché por parte de Freddy, quien se acostó y apagó las luces.

Paso una hora, y seguía sin poder dormir, frustrado, talle mi cara con la palma de mis manos, solo miraba el techo imaginando las mil y un maneras en las que podía volar, en las que si tuviera dinero me compraría la nintendo switch, tendría un doberman, y todo el spaghetti del mundo. Mientras más pensaba, menos sueño me daba, así que sin más remedio me levanté, abri la ventana, salí por esta para comenzar a subir hasta el techo, el tejado era de los tradicionales de pico, así que subí hasta arriba, en donde las luces, iluminaban la colonia, no se veía mucho la ciudad, pero uno que otro edificio si, suspiré, me senté recargandome en aquella chimenea de ladrillo, pensando, en esos recuerdos, esas visiones, esa voz... Pero sobre todo... Reiji... Tengo miedo de que algo le haya pasado... Pero algo en mi me dice que él se fue... Para ya nunca volver.

Son tantas veces que me digo que no
Me duermo esperando a que no hayan respuestas
Escucho a mi propia voz desde mi interior
No puedo ni respirar
He superado toda inseguridad
Me cuesta el creer que ahora no tenga fuerzas
He soportado
He visto tanto
Y sigo acá
Luchando por respirar
Y tengo miedo de pensar en lo que venga después
Tengo miedo de esperar algo que nunca veré
Y tengo miedo por lo que creo hacer
Me tiro al agua y me hundo en mi inseguridad
Y me asusta porque nunca me ha gustado perder
Y si es que pierdo tengo miedo de lo que no tendré
Y si lo tengo no sé cómo lo habré de cuidar
Y no puedo ni respirar
(¿Q-Quién...)
(¿Soy?... No importa... Lo más importante aquí es ¿Quién eres tú?)

De muchas grietas que no puedo ocultar
Si acepto cada miedo
Acepto cada flaqueza
Soy yo quién debe entender a mi propia voz
Que me pide ya respirar
Me siento débil no me puedo anclar
Lo intento pero debo no deber intentarlo
Estoy cansado de mi meta obstaculizar
Ya es hora de respirar
De abrir los ojos para ver que todo ya quedó atrás
Que eh superado mi orgullo y mi inseguridad
De aceptarlo todo de una vez
Que puedo dar un paso en falso para continuar
Y todo fluye en un lienzo lleno donde mirar
Tantos demonios que mi mente ha querido callar
Pues si me acepto no sé cómo me habré de cuidar
Y no puedo ni respirar
De mi mente debo ya salir
(F-Freddy)
Se acabó
Es el fin (Todos... Tenemos... Miedo)
Del miedo a temer
Y me asusta porque nunca me ha gustado perder
Y si es que pierdo tengo miedo de lo que no tendré
Y si lo tengo no sé cómo lo habré de cuidar
Pero al fin puedo respirar
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